Notas: Vengo eufórica porque mis directores escénicos (teatro) me han dicho que les está gustando mucho mi trabajo TWT!! Como sea... Quiero agradecer a Marth MT (¿Qué te hace pensar que se trata de Snape y no de Sirius? O.oU), Sayuri (yo también me lo imaginé así ;¬;), Gilraen (Definitivamente, ¿Qué tienen con Snape Oo?), Diabolik, AgathaNecroPrincess (¡¡¡NOOOOOOOO!!! ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡LO QUE SEA MENOS LOS JUGOS LALA ;O;!!!!!!!!!! Te daré más slash, ¡PERO ALÉJATE DE MY PRECIOUS! T-T!! -se va por ahí andando a cuatro patas y abrazando una caja de cartón-), Stargirl (En realidad lo de los reviews lo dije por decirlo n—nu quiero decir, yo publicaré fanfics incluso cuando tenga un solo review si es que éste me satisface... /el de Center of Universe se murió cuando se murieron mi PC, los 17 capítulos que llevaba escritos y mi inspiración o.oU../), Sakuratsukamori (XD OH, my poor Sirius! Es un poco obvio el muchacho, pero ya veremos por qué lo hace o.oU), Farina Celogore (¡¡No, Padfoot!! -lo abraza- No llores TWT!! Si a veces me tardo es porque ya no me conecto casi nunca y a veces se me olvida actualizar n.nu pero este fanfic ya está 90 terminado de todos modos, así que no te preocupes que juro por mis peluches de James que lo publicaré completo ;w;!), o0Ana-San0o, todo aquél que se me haya pasado y quienes leen pero no dejan reviews. Los dejo con el capítulo o.o!

WUNDERDING

4- Dark Archer. Let me look your face.

Dejando escapar un débil gemido, con sus labios todavía cerrados por la mano enguantada de alguien que le abrazaba por la espalda, James cerró fuertemente sus ojos.

Las piernas le temblaban, su corazón palpitaba cada vez con mayor vehemencia, no podía ver nada que no fuese Wormtail, implorando porque despertase y gritara para llamar la atención de Sirius, de Filch o de cualquiera que pudiese ayudarle.

¡Vamos, que ni siquiera tenía su varita para defenderse!

Se estremeció completamente al sentir cómo la mano de su captor se escurría por su cintura, hacia su pecho, y le arrastraba suavemente fuera del alcance de la luz del Lumos y las posibles miradas de un dormido Pettigrew.

La oscuridad de la biblioteca se cerró ante sus ojos y su espalda golpeó uno de los estantes. Un par de libros cayeron pesadamente al piso, con un sonido seco, y James los siguió con la mirada, asustado.

Entonces él volvió a tirar de su brazo, obligándolo a golpear nuevamente su cuerpo contra el de él, esta vez frente a frente.

Permanecieron un segundo así, con la frente de Prongs apoyada contra su pecho y respirando entrecortadamente. Hasta que la mano envuelta en un guante negro sujetó con suavidad el mentón del animago, quien jadeó levemente.

Su rostro y su mirada subieron, lentamente, hasta que pudo ver claramente a esta persona.

Alguien que tenía piel pálida, iluminada por la mortecina luz de la luna que se colaba por una ventana a pocos metros de ellos. El cabello negro y lacio cayendo en mechones sobre su frente, y los ojos... cubiertos por una especie de antifaz negro que cubría la mitad de su rostro, dejando paso a un par de ojos blancos (N/A: Más o menos como el Robin de los Teen Titans TwT).

Llevaba túnica negra, cerrada y sin ningún escudo, y a la espalda un estuche lleno de flechas, el arco apoyado en el piso entre una de sus manos.

James trató de retroceder, pero las manos del otro se aferraron de golpe a su cintura, atrapándolo.

"¿Qu-quién..?"

"Quien te ha estado enviando estas cartas." respondió el extraño, extendiendo los pergaminos que James creía guardados en el fondo de su baúl. Una delgada sonrisa se dibujó en sus labios, mientras empujaba a Prongs nuevamente hacia el librero. "Quien piensa que eres la persona más atractiva sobre la Tierra..." sus dedos se arrastraron por la espalda de James, haciéndolo jadear ligeramente, hasta tocar su nuca. "Quien deseaba poder tocarte de esta forma desde hacía tanto tiempo..."

Se inclinó ligeramente, moviendo sus dedos de la nuca hasta la barbilla de James y tiró de su rostro hacia el suyo, hasta que sus respiraciones chocaron.

"Supe que deseabas verme.." susurró, con su aliento golpeando los labios repentinamente resecos de Prongs. Entonces rió y su risa fue la más sensual que había escuchado James en su vida. "Y como estaba convencido de que no me encontrarías aquí, decidí ser yo quien te buscara..."

Dejando escapar un gemido al sentir cómo la rodilla del otro se enterraba suavemente entre sus piernas, James volvió su rostro hacia un costado. Le ardían las mejillas y sentía un escozor en los labios. Pero el otro chico simplemente dejó escapar una nueva carcajada ahogada entre sus dientes, antes de inclinarse hacia él y, sorpresivamente, depositar un beso apacible sobre el cuello de Prongs, quien abrió sus ojos desmesuradamente, se agolpó contra el librero y tensó toda su espalda.

Los ojos entrecerrados del extraño se levantaron hacia él, desprendiendo su boca de la piel del marauder, y con una sonrisa en sus labios se acercó a su oído.

"No tengas miedo, no voy a lastimarte, James."

Éste cerró sus ojos y trató de tranquilizar su respiración agitada.

Ni siquiera sabía cómo era posible que no se hubiese soltado ya de su agarre para darle una paliza. ¡Nadie podía jugarle bromas pesadas a James Potter y quedarse como si nada! Y ese estúpido con máscara tampoco.

Aunque fuera la máscara más seductora que había visto nunca..

"Será mejor que te vayas a dormir." escuchó decir al muchacho, y giró ligeramente su rostro hacia él. "Te veré esta noche." y luego, sin previo aviso, sus labios se encontraron con los suyos, bruscamente y por un segundo, lo suficiente como para que el ardiente sabor inundara toda su boca y se extendiera por su cuerpo, calentando sus entrañas.

El cuerpo delgado se desprendió del suyo, y sin volverse, se echó a correr por el pasillo, hasta que la oscuridad se lo tragó.

James se quedó ahí un segundo más, recargado contra los libros, con el rostro ruborizado, los ojos bien abiertos y el corazón agitándose violentamente.

Ni siquiera estaba seguro de lo que acababa de suceder...

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Caminaba, lentamente, con los dedos todavía sobre sus labios, hasta que la luz opaca del Lumos apareció frente a sus ojos, por encima de la cabeza de un dormido Peter.

Tragó saliva. Sirius no se veía por ninguna parte.

Se acercó a pasos cortos hasta el pequeño chico y posó su mano sobre el hombro regordete, haciéndole saltar entre sueños.

"Hey, Pete.." susurró, logrando que los ronquidos cesaran y dos ojos acuosos se abrieran, lentamente, para él.

"¿James?" gimió Wormtail, adormecido.

"S-sí.. vámonos a dormir..."

"¿Encontraste lo que buscabas?"

James le dedicó una mirada indefinida hasta que asintió, ligeramente, y levantó la cabeza.

"Podría decirse..." sus ojos castaños se posaron sobre el cordel levantado de la Sección Prohibida. Arqueó una ceja, confundido, y dio un paso al frente. "¿Quién está..?"

Entonces apareció el rostro enfurruñado de Sirius Black, que trataba de desprender un extraño libro cuyas mandíbulas se habían cerrado alrededor de su brazo.

"¿¿Sirius??"

"¡¡Prongs!!" chilló Padfoot, mirándolo con ojos brillantes. Se encarreró hacia él y tendió su brazo al frente, tratando de no mirar. "¡Quí-quítamelo, por favor!"

"¿Qué demonios es lo que..?"

"¡Q-quería leerlo, y el muy maldito se me prendió del brazo!"

"¿¿Qué estabas haciendo ahí adentro??"

"¡¿Qué no me estás escuchando?! ¡¡QUÍTAMELO!!"

James levantó sus cejas y los cristales de sus gafas reflejaron la luz de la varita.

"¿Eso quiere decir que estuviste todo este rato aquí?"

Los ojos grises de Black le enfocaron, dolorosa y enfurecidamente.

"¡¡Si!! ¡¿Ahora me lo quitarás?!"

"Heh..." y sujetando su varita mágica, James colocó la punta sobre el lomo del libro, el cual gimió placenteramente antes de soltar la mordida del brazo de Sirius.

Padfoot gimió también, aliviado y frotándose con fuerza la herida.

"Tendré que ir de nuevo a la enfermería.." gimoteó, observando las marcas en su brazo.

James no respondió. Se dio la media vuelta y comenzó a caminar hacia la salida.

"Vámonos ya.."

Los otros dos intercambiaron una mirada antes de seguirlo, a pasos largos.

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"...para que su poción no quede espesa, agreguen dos gotas de sangre de dragón y 50 gramos de piel de serpiente molida." la voz del profesor de Pociones se levantó por encima de las cabezas de los Gryffindor y los Slytherin, empinadas ligeramente hacia sus calderos cubiertos de vapor y una especie de mezcla chocolateada. "Ahora, deberán revolverla por 15 minutos exactos antes de agregar las semillas de girasol."

Remus Lupin sacudió el pequeño salero lleno de piel de serpiente por encima de una pequeña báscula, mientras murmuraba cosas ininteligibles.

A su lado, Peter Pettigrew luchaba contra el humo verdoso que comenzaba a levantarse. Más allá, Sirius Black dejaba caer el par de gotas de sangre de dragón, y a un costado suyo, en la esquina de la mesa, James Potter permanecía observando el interior de su caldero, con los anteojos empañados por el vapor y la mirada perdida dentro de la poción.

Había agregado recién la piel de serpiente, sin pesarla, y ahora el líquido comenzaba a tomar una textura grisáceo-azulada.

Sirius le dio un codazo y James parpadeó, repetidas veces, antes de mirarlo de forma ausente.

"¿Te sobra piel de serpiente? Necesito alguna por aquí..." sonrió, señalando a Peter, quien acababa de romper los tres saleros restantes. Lupin ni siquiera había querido levantar la mirada.

"Heh.." Prongs estiró el brazo hacia él, antes de devolver la mirada al frente.

Tomando el recipiente, Sirius le miró, confundido.

"¿Sucede algo, James?"

No hubo respuesta.

"¡¿James?!"

"¿¿Qué??"

"¡Eso quiero que me digas! No has hecho nada bien en toda la mañana..." señaló con su cabeza el caldero maloliente y arrugó la nariz. "...ni siquiera has estado escuchando mucho... ¿Qué pasa contigo?"

Los ojos marrones de James parpadearon, mientras regresaban la mirada hasta su mejor amigo.

"Yo..." en realidad no se había percatado de eso.

Es sólo que sus pensamientos se habían quedado atrapados durante todas aquellas horas dentro de la biblioteca, con esa persona que le había golpeado contra un librero antes de besarle.

Se llevó los dedos a los labios e inclinó la mirada.

"Ese fue mi primer beso.." alcanzó a respirar, con los ojos bien abiertos, ante la mirada de estupefacción de Black.

"¡¿Qué cosa?!"

"¿¿Eh??"

"¿¿Cuál beso?? ¡¿De qué estás hablando?!"

El rostro de Prongs se ruborizó violentamente al darse cuenta de que había estado pensando en voz alta. Pero es que por un segundo todo se había desvanecido... sacudió fuertemente la cabeza y sujetó a Padfoot por un brazo.

"No, no es nada.."

"¡¿Cómo de que no?! ¡¡Alguien te besó, ¿Y NO ME LO HABÍAS DICHO?!! ¡¿Qué me estás ocultando?!"

James lo miró durante un instante, aterrado, ruborizado y con el corazón latiendo apresuradamente. Lanzó una mirada a Lupin, que los miraba también, sorprendido, y a Peter, que se cubría la cabeza con las manos.

"¡¡JAMES!!"

El resto de las miradas giraron hacia ellos, cuando Sirius se puso de pie. Alguien golpeó suavemente su hombro pero él lo ignoró.

"¡¿Quién demonios fue?!"

"S-Sirius..."

"¡Contéstame!"

"S-Sirius.."

"¡¡¡Nada de Sirius, RESPONDE!!!" sus ojos grises temblando levemente dentro de sus cuencas. Nuevamente alguien golpeó su hombro.

"Señor Black..."

"¡¿Qué?!" y al volverse, el tono de su rostro se decoloró. "P-profesor..."

El hombre frente a él frunció fuertemente el cejo.

"20 puntos de Gryffindor por estar haciendo escándalo durante las horas de clase... Y será mejor que vaya a ver al señor Filch el sábado por la mañana."

Sirius volvió a sentarse, levemente ruborizado.

"Si, profesor.."

Y olvidándose de él, el hombre caminó nuevamente hacia el frente de la clase.

"Ahora me parece que es momento de agregar las semillas."

En su sitio Sirius lanzó una mirada lastimada a James, quien se limitó a encogerse de hombros, antes de regresar a su poción.

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Cuando la clase de Pociones (la última de la mañana) se terminó, Sirius fue el primero en incorporarse. Dijo algo a Lupin y, tras lanzar una mirada a James, salió del aula junto a un grupo pequeño de Slytherin que le miraron de reojo y luego echó a correr por el pasillo, quien sabe adónde.

James permaneció observándolo por un momento, antes de inclinar la cabeza y coger sus cosas.

"¿Qué sucedió ahí adentro?" pidió la voz de Remus Lupin, caminando junto a él hacia el comedor. Peter los seguía lo más rápido que podía. "¿Qué pasó con Black?"

"No lo sé." respondió Prongs, levantando la mirada hacia el frente, por donde Nick Casi Decapitado acababa de pasar, conversando con el Barón Sanguinario.

Moony arqueó una ceja.

"¿Y de qué beso hablaba?"

Las mejillas de James volvieron a enrojecer, débilmente.

"N-No sé..."

"¿James?"

"¿Sí?"

"Creo que estaba celoso..."

El sonido de Peter tropezando y cayendo al piso con una revoltura de tela y libros les hizo volver el rostro.

"N-no sé de qué hablas..."

"¡Vamos!" sonrió Remus, ayudando a Wormtail a incorporarse. "Todo mundo ahí se dio cuenta de eso."

"¡¿Qué?!" el rostro de Prongs no hubiese podido enrojecer más. Miró a Lupin por un instante antes de volver a enterrar la mirada en el piso de mármol. "No, fueron imaginaciones suyas..."

"James.."

"¿¿Qué??"

La sonrisa de Remus siguió ahí, débil, antes de que se encogiese de hombros y regresara la vista al frente.

"Hoy tengo una junta a las 8. Creo que llegaré un poco tarde a dormir."

"Está bien." asintió Potter, con voz baja.

continua...