Nota: Sé que casi no sale Sessho pero estoy planeando el reencuentro, creo que ya viene en el próximo capítulo

El enfrentamiento con Kagura

El día terminó y como todavía no tenían un sitio fijo para Lin, Sango le dio hospedaje de nuevo en su casa. Esta nocheLin tampoco pudo conciliar el sueño, sólo a ratos ya que su mente divagaba con su amo. A la mañana siguiente se levantó y justo como el día anterior las mismas dos figuras masculinas interrumpieron y repitiendo su acción, Kuhaku llevó a Lin hasta el mismo lugar para tomar el desayuno. El tiempo pasó un poco más rápido que el día anterior, había que admitirlo, aquel joven es capaz de hacer sentir bien a alguien.

Cuando terminaron con las moras y vieron que la mañana era suya salieron a reconoces los alrededores, caminaron por largo rato hablando de cualquier cosa e incluso por un momento Lin fue capaz de mostrar una sincera sonrisa al olvidar lo que aquejaba su mente, pero fue sólo eso, un momento porque al insatnte todos los recuerdos y las crueles palabras dichas por Sesshomaru regresaron a su mente.

Cuando se vieron cansados decidieron quedarse un rato a orillas de un río algo caudaloso, el lugar era bastante bello, la hierba un poco alta, algunas flores silvestres y la sombra de un gran árbol. El viento soplaba ligeramente moviendo el cabello de Lin de un lado a otro, lo que ponía un poco nervioso a Kohaku que no podía evitar pensar en lo linda que se veía de esa forma.

Ese lugar es hermoso ¿vienes muy seguido por aquí?

S...sí, cada vez que puedo, este es un lugar especial en el que las cosas malas se van y puedes pensar en todo lo que amas.

Tu quieres mucho a tu hermana ¿Verdad?

Sí, ella es todo lo que tengo... bueno... también te tengo a ti... -las mejillas del muchacho se tornaron rojas de inmediato.

Claro, somos amigos -ella sonrió.

de repente una furte ráfaga de aire azotó entre sí las ramas del gran árbol produciendo así un estrepitoso ruido que, acompañado del sonido de las aves abandonando el lugar, logró asustar a la joven.

Es sólo viento -dijo más que nada para sí misma cuando se peraató de la realidad.

Sí, pero... no parece viento común -dijo pensativo el joven- Ven, vámonos, será mejor que regresemos a la aldea. -se puso de pie y ayudó a Lin para que hiciera lo mismo, luego pasó un brazo su espalda para darle amyor soporte ya que la fuerza del viento era demasiada y tenía que cayera.

Así caminaron un rato, el exterminador sabía que algo no adaba bien pero como sólo era un inocente paseo no llevaba ningún arma con él y ese sería un combate demasiado peligroso riesgoso. En un instante el viento cesó por completo y una aparente calma cubrió el lugar.

¿Ya paso? -preguntó temerosa y sin salir de la protección que su amigo le brindaba.

Parece pro... no estoy seguro ¿Te encuentras bien?

Sí... muchas gracias por protegerme.

Antes de que Kohaku pudiese articular cualquier respuesta aquel incontenible viento se sintió de nuevo, pero esta vez parecía que sólo los rodeaba a ellos, los árboles no se movían ni los animales parecían sentirlo, sólo ellos dos.

De...debemos... seguir adelante...

Sí -una leve respuesta en un suspiro fue tolo que pudo articular al sentir nuevamente el terror que aquellas corrientes le producían. "Mi amo siempre me protege, cuando estoy con él nunca tengo miedo" -pensó.

Continuaron caminando hasta que ya estaban muy cerca de la aldea y sentían que las cosas podían mejorar, entonces, el viento se volvió un remolino que los arrojó al suelo, el exterminador recibió un golpe considerable en su brazo derecho, con el que protegía a Lin, pero la joven salió ilesa de aquel ataque.

Vaya vaya, ya veo que Sesshomaru te dejó con este humano insignificante, jajajaja, pero que estúpido fue, no se da cuenta de que puedo hacer lo que se me venga en gana -las últimas palabras fueron más para sí misma que para los humanos que yacían tendidos en el suelo.

¿Qué es lo que quieres Kagura? -gritó el juven miestras Lin escondía la cabeza en su pecho para sentirse protegida ya que los recuerdos que tenía de aquella mujer no eran muy agradables.

Jajaja ahora sí tienes actitud, veo que la edad te ha sentado bien y ahora hasta robas las humanas a otros jajajaja.-alzó amenazante su abanico- Pero ahora no importa mucho, los dos van a morir, eso le enseñará su lección.

Kohaku se vio inposibilitado para atacar a la youkai así que decidió intentar proteger a Lin con su cuerpo.

¡Detente! malvada mujer, no te atrevas a atacar a Lin o te las verás conmigo -esa era la conocida voz de un pequeño youkai verde que, al contrario de su costumbre, había hecho una oportuna aparición.

¿Y tú qué demonios haces aquí? ¿Quién te llamó? -ahora se mostraba más exasperada. El exterminador al sentir al sirviente de Sesshomaru pensó que ahora tenía buenas posibilidades de salvar a la joven quién permanecía inmóvi con el rostro aún enterrado en su pecho.

Ya te lo dije, no le vas a hacer nada a Lin, así que más te vale irte antes de que tengas que pelear con el gran Jaken.

Al reconocer esta familiar voz la joven reaccionó un poco, alzó la mirada hasta el punto en el que calculaba podría ver al joukai y así fue, lo encontró con la mirada y de inmediato se alejó de Kohaku para correr a su encuentro.

¡Señor Jaken! Ha venido a rescatarnos, usted ha venido a rescatarnos y el Señor Sesshomaru tambien ¿Verdad? ¿Verdad Señor Jaken? Él también ha venido a rescatar a Lin.

Pero qué ingenua eres, niña ¿No lo sabes? Ahora Sesshomaru viaja solo, ya se cansó de llevar a tantos estorbos consigo.

No... -un leve suspiro fue todo lo que se escuchó de sus labios mientras caía de rodillas rendida ente las palabras de Kagura.

El señor Sesshomaru no está pero yo te daré tu merecido, ¡Vamos, ven y enfréntame! -la retó el youkai. Mientras Kohaku buscaba alguna forma de enfrentarla o huir de aquella todavía peligrosa situación.

Pero qué tonte eres ¿Cómo puedes retarme? ¿Qué no sabes que con tu inútil fuerza jamás podrás hacerme nada?

"Pero... claro, si los exterminara ahora mismo seguramente Sesshomaru podría oler la sangre y regresaría para resusitarlos, no, no vale la pena... es mejor esperar" -luego de razonar ésto sólo se montó en su pluma para murmurar algo mientras se alejaba.- Pero ni crean que las cosas se van a quedar así...

Una vez que la youkai se había perdido en el horizonte los que se encontraban en el suelo pudieron bajar la guardia.

Muchas gracias -dijo Kohaku dirigiéndose a Jaken mientras sujetaba su brazo derecho para detener un poco la sangre que brotaba.

no lo hice por ti, lo hice por ella... se encuentra bastante mal... y todo es por... ya me voy, no tengo nada que hacer entre humanos inferiores -dio media vuelta y antes de que diese el primer paso para alejarse sintió como la suave mano de Lin se aferraba a uno de sus tobillos.

¿Es cierto? ¿Es cierto lo que esa mujer dijo? ¿El señor Sesshomaru tampoco lo quiere a usted? Dígame... ¿Usted también hizo algo malo como Lin?

No Lin, ni tú ni yo hicimos nada malo, no sé por que el amo tomó esa decisión pero no es tu culpa... pero de cualquier manera es mejor que te acostumbres porque dudo mucho que las cosas vuelvan a se como antes. -dicho ésto la humana dejó libre al youkai y éste se marcho en silencio.

Lin... será mejor que regresemos a la aldea, ahí estaremos a sallvo.

Sí...-al voltear a ver a Kohaku se percató de la herida de su brazo y de que ésta fue causada en su intento de protegerla.-Esa herida... fue por mi culpa ¿Verdad?

Claro que no, no digas eso, fue por culpa de Kagura, ella nos atacó.

La joven se acercó y quitó la mano que oprimía la herida para poder examinarla de cerca, luego de hacerlo se agachó un poco para rasgar la parte de abajo de su kimono, luego tomó el pedazo de tela y lo usó como vendaje para la herida de su amigo.

Con esto te vas a sentir mejor mientras llegamos a la aldea.- luego sonrió, con lo que Kóhaku no pudo evitar sonrjarse enormemente y así partieron su camino de regreso, preciados momentos en los que el muchacho buscaba una explicación creíble para su hermana ya que no quería preocuparla, más ahora que Inuyasha y Aome no se encontraban cerca.

Muy lejos de ahí Sesshomaru se encontraba recostado en un pequeño claro del bosque, no porque estuviese cansado, sino porque no había un lugar al cual dirigirse. De repente junto con una leve ráfaga de viento pudo percibir un leve olor a sangre.

Esta sangre es de... aquel humano... Lin -instintivamente se puso de pie mirando a la dirección de donde provenía el viento- Maldición... ¡Maldición! -dijo bastante exasperado- Pero... no.. no puedo volver, además quizás no sea nada esa no es una herida que ponga en riesgo la vida de nadie. -luego empezó a caminar pues ya no le era posible permanecer calmado. "No puedo volver porque si lo hago... quizás ya no pueda alejarme de nuevo"

Anduvo un rato hasta que una conocida figura femenina apareció impidiéndole el paso.

Creí que te había dejado muy claro que no te aparecieras más por aquí.

Pero qué descortés eres, yo simplemente vine a avisarte de un pequeño percanse que tuvo el nuevo custodio de tu humana jajajaja. Aunque debo decir que fue muy valiente ya que de no ser por él quién sabe si la humana estaría viva.

Con éso Kagura provocó aún más la furia de Sesshomaru, quién con un ráido movimiento la tomó por el cuello soltando un poco de veneno.

Maldita seas... si te atreves a lastimar a Lin... te juro que lo que sucedió con Naraku será poco comparado con lo que va a suceder contigo.-luego la dejó caer y se marchó pero ésta vez con dirección a la aldea.- "Será mejor que permanezca cerca"

La youkai no fue capaz de emitir palabra alguna debido a la esfixia y al veneno, sólo cayó al suelo y empezó a respirar agitadamente.

"Imbécil... pero ésto no se va a quedar así, no importa qué tenga qué hacer la vida de esa humana va a ser mía y no vas a resucitarla"

Así llegaron a la aldea y como Sango y los demás parecían no estar en casa, decidieron ir con la anciana Kaede para que curara la herida del joven.

Vaya, pero esa es una herida muy grande ¿Cómo te la hiciste? -preguntó la anciana mientras retiraba el improvisado vendaje de Lin.

Fue... un mountro nos atacó en el bosque, pero no es nada grave. -Lin lo miró un poco desconcertada por su respuesta pero prefirió no decir nada.

Deben tener cuidado.- ambos jóvenes asintieron.

Cuando Kaede terminó de curar la herida Lin y Kohaku fueron hasta la casa de él y se sentaron en el umbral de la puerta a mirar el ocaso.

Kohaku...¿Tiene algo de malo que se enteren de lo que pasó hoy?

No... lo que sucede es que no tiene caso preocupar a los demás.

No quieres que sepan que fue ella que me quería a mi ¿Verdad?

No es eso, es lo que te dije.

Es que es mi culpa que Kagura ande por aquí. -instintivamente en un intento por convencerla de que estava equivocada el joven tomó su mano sutilmente.

Soy tu amigo... y... te voy a proteger... nada es tu culpa. -al terminar de hablar se dio cuenta de que sujetaba una de las manos de Lin e inmediatamente la soltó al tiempo en que se ruborizaba notoriamente, aunque la chica pareció no notarlo.

Muchas gracias eres muy bueno conmigo, no sé qué haría sin ti ahora que estoy sola, bueno no, Lin no está sola porque tú estás aquí conmigo.

Kohaku se sintió muy nervioso de alguna manera esa amiga suya tenía ese efecto en él, hacía que sintiera cosas por las que nunca antes había pasado y que eran agradables, extrañas pero agradables. Pensaba en una explicación posible para todo aquello mientras estaban en silencio contemplando el panorama, creyo que era por su amistad pero él tenía otras amigas y nada era como con Lin, también se le ocurrió la posibilidad de que fuese por la necesidad de protegerla pero igual llegó a la comclusión de que no era eso. "Tal vez... tal vez es algo más tal vez me..¿Me gusta Lin? -esta simple idea hizo que se sonrojara- Quizás sí... pero... y ella ´Qué siente por el hermano de Inuyasha?... no, no creo... porque ha sido como un padre para ella...¿Y si se lo pregunto?... No, mejor después, creo que primero necesito hablar con alguien, ojalá que Miroku llegue pronto" (N/A: a buen santo se encomienda)

Cuando el cielo estaba bastante oscuro y el frío empezaba a sentirse se escucharon algunas voces a lo lejos.

Ya vienen -dijo Kohaku aliviado pensando que pronto podría hablar con su cuñado sobre Lin.

Sí, vamos a encontrarlos -le respondió la chica levantándose con su habitual sonrisa. él asintió y así los dos caminaron hasta encontrar a una pareja joven cada uno con un niño pequeño dormido en brazos y a tresn niñas caminando alrededor suyo, todos parecían bastante cansados.

Hola ¿Kohaku qupe te pasó en el brazo? -preguntó Sango a notar inmediatamente los vendajes.

Nada... sólo una herida, no es nada. Vengan niñas -les dijo tomando a dos de ellas de las manos- Vamos a su casa. -Lin tomó a la más pequeña y la llevó en brazos.

Entraron todos a la casa de la pareja, los niños a dormir y lo hombres se despidieron para ir donde Kohaku y dejar a las damas descansar. Cuando Miroku y Kohaku se preparaban para dormir el más joven decidió empezar la conversación que tanto esperaba y también temía.

Mi... Miroku...¿Podemos hablar?

Claro mi joven amigo ¿De qué quieres hablar?

De...de...este... de Lin...-ante la inesperada petición del muchacho y presintiendo el rumbo que la plática tendría, un lividinoso brillo se asomó traicinero en los ojos del pervertido monje. (N/A: no piensen mal, él nada con Lin, es sólo que esa mirada lividinosa la tiene siempre que se abla de mujeres)

CoNTiNuaRá...

Muchas gracias a tod quienes se han tomado la molestie de leer ésto y muchísimas gracias a quienes se toman el tiempo de dejar un review, significa mucho para mi.

sesshi23: muchísimas gracias por tus reviews, me encantan! Espero que este capi no esté tan corto :p y pues aunque como ya lo dije no tiene mucho de Sessho ya se aproxima el reencuentro cin Lin. Ojalá que te guste.

inumoonhp05: Hello pues gracias por tu review! De verdad que me gusta leerlos. Que conste que hace buen rato que te dije que iba a subir este capítulo (y por cierto quedaste de llamarme si ni lo haces te metes en un GRAN lío). Y pues tengo pensado terminar el fic antes de irme... espero.

Byes!