Al salir al pasillo, Raven se encontró con Robin.

hola, raven, qué suerte que te encuentro- dijo el líder titán.- te estaba buscando. Vamos a hacerle una fiesta sorpresa de bienvenida a Terra.

fiesta…sorpresa?- dijo ella, sorprendida por haberse olvidado de que lo habían estado planeando mientras chico bestia y Terra habían salido, la noche anterior.

claro, la fiesta que planeamos… bueno, haciendo cuento corto, necesitamos que la saques de la torre mientras preparamos todo. No se te olvidó, verdad?

Cinco minutos más tarde, Raven estaba frente a la puerta de Terra. Aun no sabía qué decirle para hacerla salir de la torre, cuando recordó la nota… excusa perfecta, no?- pensó mientras tocaba la puerta.

Terra: pase! Quien es? –dijo su voz desde adentro.

Raven: hola, soy yo. Quería hablarte sobre tu nota…

Terra: espero que no te haya molestado. – dijo mirando al suelo- pero era la única manera que se me ocurrió de poder decirte lo que sentía.

Raven: bien, pero me gustaría que habláramos. Que tal si lo hacemos en la heladería?- sonrió la chica gótica, recordando lo mucho que le gustaban los helados a su compañera- yo invito.

Diez minutos más tarde, estaban las dos sentadas en una mesa de la heladería; Terra tenía enfrente una enorme copa multisabor de helado, y Raven había pedido un helado pequeño de dos sabores (menta-chips y vainilla).

Raven: respecto a tu nota… Por supuesto que acepto tus disculpas. La verdad… no sabía que todo esto estaba siendo tan difícil para ti.-dijo con el mayor tacto posible.

Terra: bien… es que antes de ustedes, sólo en una ocasión había estado a punto de tener una familia… pensé que si lograba aprender a controlar mis poderes, iba a integrarme bien en el grupo… mientras que si veían los enormes desastres que podía llegar a causar, no me iban a querer cerca. Qué ciega fui- dijo con una triste sonrisa en su cara- pero no quería que pasara lo de hace unos años…

Raven: y…que fue eso que pasó? –dijo sorprendida.

Terra: una familia, en un pequeño pueblo, me quiso adoptar cuando me encontró durmiendo a la puerta de su casa. Yo tenía como seis o siete años; como te imaginarás el control de mis poderes estaba peor todavía. Cuando supe que ellos estaban dispuestos a ser una familia para mí, me emocioné tanto que sin desearlo causé un terremoto. Dos personas murieron, se destruyeron muchas de las casas del pueblo y ahí estaba yo, parada en la mitad de la única construcción en pie. Creyeron que yo estaba poseída, y me persiguieron tirándome piedras y lo que encontraran a su paso, acusándome de cosas que a mi edad no entendía. Aún tengo una cicatriz de aquella vez...

Raven: vaya… yo… no lo sabía. Siento haber preguntado.

Terra: no te preocupes, no pasa nada… no es tu culpa, de todas maneras.

Raven: no te parece que ya es hora de volver a la torre?-dijo mirando el reloj de la heladería.

Terra: para qué volver tan luego? Además, tú ni terminaste tu helado…-dijo apresuradamente antes de ser prácticamente arrastrada por Raven camino a la torre. Terra sabía que Raven estaba impaciente por llegar, pero no sabía por qué.

Cuando llegaron al living de la torre, no había luces encendidas. Raven murmuró algo así como que iba a ver qué rayos pasaba con la electricidad. Terra se sentó en el sofá. Había algo extraño en el ambiente, como si la estuvieran observando…

¡¡¡¡SORPRESA!- el tremendo grito de sus compañeros hizo que saltara del sillón y que quedara semi-incrustada en el techo, temblando del susto.

Terra: qué está pasando aquí? Por qué estoy en el techo? –dijo nerviosa al ver que lo único que la mantenía a salvo de las garras de la gravedad eran sus propias manos.

Al ver eso, el chico bestia rápidamente se convirtió en un terodáctilo para ayudar a bajarla.

Minutos después, Terra ya estaba un poco más calmada. O al menos lo suficiente para observar que el ambiente estaba decorado para una fiesta.

Terra: oigan, alguna razón en especial para hacer una fiesta?

Cyborg: oh, nada en especial…solo que volvió al grupo una vieja compañera a la que hemos extrañado mucho, y que le queremos hacer una bienvenida…-dijo haciendo sonrojar a Terra.

Robin: oigan, nos vamos a quedar hablando o vamos a comenzar la fiesta? –dijo sonriendo.- hm… comencemos con las películas! el último en llegar al sillón tiene que traer todos los dulces!

Y salieron todos corriendo.

Este chap estuvo corto y me demoré, lo siento, pero ahora me quitaron el permiso para meterme al computador de lunes a jueves, así que mis fics van a ir más lento en general.