PIRATAS DEL CARIBE:
LA MALDICION DEL ROSARIO BLANCO
By Aya K

Capitulo I

RECUERDOS

Aunque la historia se lleva a cabo en el año 1637 debemos retroceder diez años para entender los acontecimientos del presente. Retrocedamos hasta el año 1627. ++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++

Un gran navío surca las aguas del océano a través de una espesa bruma q impide ver a lo lejos, mientras en cubierta resuena una canción de piratas. Una niña de no más de ocho años vestida con un vestido verde con bordados también en verde, de unos hermosos rizos dorados y unos ojos negro azabache cantaba esa canción a la vez q miraba el horizonte por proa. Su nombre era Anna Kyôyama y venia desde Inglaterra con su padre HoroHoro. De repente una fuerte y áspera mana sujeto su frágil y delicado brazo tirando de ella para volverla hacia el rostro del capitán de la nave el capitán Manta Oyamada.

-"Niña, deberías dejar de cantar canciones de piratas no es propio de una dama tan distinguida como vos y menos durante esta maléfica niebla que dios sabe que"- le reprocho enfadado-"ya dije q no era un buen augurio llevar una mujer a bordo aunque sea pequeña."

-"¿Insinúa que debería haber dejado abandonada a mi hija en Inglaterra?"- pregunto desafiante el padre de la criatura, un distinguido caballero ingles-"Conteste capitán."

-"No era esa mi intención señor HoroHoro pero no es muy prudente cantar esas canciones con esta niebla. Podrían oírla y dar nuestra posiciona esos piratas los que no dudarían en atacarnos y hundir nuestro barco."- respondió rápidamente y muy nervioso el capitán.

Cuando el capitán se fue dando una excusa, Anna pregunto soñadora y esperanzadoramente a su padre:

-"¿No seria interesante encontrarnos con un pirata padre?"

-"No digas insensateces Anna, verdaderamente empiezas a preocuparme tu pasión por los piratas hija."- le reprocho mientras la conducía al centro de cubierta.

-"¿Por qué padre?¿Qué ocurriría si nos topásemos con unos piratas?"- pregunto insistentemente la niña.

-"Que les atacaríamos hasta hundir su barco en las profundidades del océano y si sobreviviese alguno, lo atraparíamos y se uniría en el infierno con el resto de sus malditos compañeros, señorita Kyôyama,"- contesto el almirante del navío, que en ese momento estaba repasando la ruta con el resto de sus oficiales al mando-"¿Alguna otra pregunta?"

-"No señor"-respondió asustada la niña y ahogando un grito al comprender lo q había querido decir y gracias al gesto q le hizo el capitán Oyamada al pasarse su dedo por el cuello.

Al cabo de un rato la niña se asomo a un lado de la cubierta ha observar el agua cuando empezaron a pasar cosas muy raras flotando a la deriva. Vio varios toneles, tela de velas, tablas flotando pero se asusto cuando vio el cuerpo de un hombre flotando, sin embargo no grito en su lugar dirigió la mirada al horizonte y de entre la niebla apareció un niño flotando encima de unos maderos a punto de ahogarse e inconsciente.

-"¡¡¡Niño a la deriva!!!"- grito con todas sus fuerzas.

Varios hombres se agolparon a su lado en la barandilla para ver y entre ellos estaba el almirante.

-"Recogedlo inmediatamente, subirlo a cubierta"- ordeno a sus hombres.

Los hombres obedecieron inmediatamente al almirante y subieron al niño a bordo. Ya ha bordo Anna se dedico a examinar detenidamente al joven q acababa de salvar. Al verlo de cerca no pudo dejar de pensar que era guapo. Su cabello castaño oscuro le caía rebelde por la cara, su ropa empapada algunas partes rasgadas. Anna seguía observándolo cuando el niño recupero la consciencia y se incorporo bruscamente sobresaltando a Anna que quedo a escasos centímetros de sus ojos q eran de un marrón muy profundo. Tan profundos que Anna casi se ahoga en ellos.

-"¿Quien eres tu?, ¿Dónde estoy?, ¿Y el barco?"- pregunto desorientado mientras miraba a todos lados.

-"Tranquilo, estas a salvo en un barco con rumbo a la isla de concha. Me llamo Anna Kyôyama y viajo con mi padre en este barco. Acabamos de rescatarte del agua que estabas a punto de ahogarte y no se de que barco me hablas"-contesto Anna para intentar calmarlo aunque la proximidad del rostro de aquel niño la ponía nerviosa- "¿Y tu quien eres? Y ¿De donde vienes?"

-"Mi nombre es Yoh Asakura y vengo de Inglaterra ha buscar a mi padre."- respondió el niño, dedicándole una dulce sonrisa antes de volver a caer inconsciente a causa del cansancio y la falta de vitaminas.

Anna volvió a observarlo detenidamente y reparo en su cuello. Llevaba al cuello una cadena con una pluma roja a modo de colgante. Anna lo cogió y lo examino cuidadosamente hasta q se fijo que en un trozo de oro que detenía a la pluma para no escaparse había grabado algo, el símbolo de una bandera pirata: la calavera con las dos espadas cruzadas debajo de ella. Anna se asusto aquel joven tan guapo y encantador era un pirata. Iba a esconder el colgante cuando algo la sobresalto.

-"Señorita Kyôyama, ¿ha dicho algo nuestro joven naufrago?"- pregunto el almirante. -"Nada salvo q se llama Yoh Asakura y q viene de Inglaterra."- contesto mientras escondía el colgante detrás de ella- "y que además preguntaba por un barco."

-"Bien, capitán que lo lleve abajo a los camarotes y lo atienda un medico."- ordeno el almirante.

Mientras unos hombres se lo llevaban a un camarote Anna observo otra vez el colgante a la vez que se dirigía a proa. Se lo guardo entre su ropa y se puso a observar a través de la niebla a ver si veía algún barco o tierra. De pronto entre la niebla vieron altas llamas rojas que salían de los restos de un barco prácticamente hundido en el mar. El barco donde viajaba Yoh es lo que paso por la cabeza de la niña de ojos azabache. Entonces Anna vio algo que la dejo helada y hizo que abriese sus hermosos ojos azabaches de asombro. Allá en el horizonte se podía observar como un barco se alejaba rápidamente del barco hundido y como en su mástil ondeaba una bandera negra con un calavera blanca y dos espadas debajo de ella. Justo cuando su mirada se posaba en la bandera para observarla detenidamente.....

++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++ .....Despertó sobresaltada en su cama.

-"Que sueño mas extraño."- susurro en voz baja mientras recordaba su sueño- "Soñé con el día en que conocí a Yoh y con.."

Se levanto rápidamente de su cama, la cual estaba iluminada tenuemente por unos rayos de sol que entraban por los huecos de las cortinas, y se dirigió a su escritorio de madera. Abrió uno de los cajones y vació todo su contenido encima de la mesa del escritorio, cuando no quedaba nada en el interior de el cogió el fondo y lo levanto lentamente. Puso la tapa en la mesa y observo como entre el polvo estaba guardado aquel colgante de su sueño. Lo cogió dejando una marca de donde había estado en el fondo y lo observo. Allí estaba aquel grabado, el mismo de la bandera, el que habría condenado a su amigo Yoh a la horca por tenerlo, aquel que era símbolo de piratas. Se lo coloco alrededor del cuello al tiempo que se dirigía al espejo que tenia en su habitación. Diez años habían pasado desde aquel día, el día en que había conocido a su mejor amigo desde entonces. ¿Amigo? ¿Era realmente su amigo? No. Era algo mas, era la persona por la que estaba dispuesta a dar su vida, la única que de verdad le importaba aparte de su padre. Al principio había guardado el colgante por curiosidad pero con el tiempo entendió que era la forma de mantener a salvo al hombre que le había robado el corazón, Yoh Asakura. Mientras pensaba estas cosas, el reflejo de una atractiva joven de dieciocho años la miraba. Cabello rubio como el oro que brillaba aun en la penumbra de aquella habitación, ojos negros azabaches, tan hermosos como la más oscura noche y que habían levantado tantas pasiones entre los jóvenes del lugar, una hermosa y escultural figura se observaba bajo la tela del camisón que la cubría. Y en su cuello bajo aquel hermoso pelo rubio el símbolo de los piratas reposaba, el símbolo que le podía arrebatar a todo lo que quería si no lo hubiese escondido años atrás. Ahora le pertenecía a ella y no pensaba enseñarlo jamás a nadie y todo para mantener al hombre al que amaba fuera de peligro. Porque una cosa estaba clara amaba a Yoh Asakura y daría su vida por él.

Y podría ser que más temprano de lo que suponía.....

CONTINUARA

NOTAS DE LA AUTORA: bueno mas q nada decir q lo mas probable es q nadie lo lea pero si alguien llega hasta aquí y le pareció buena la historia, le gusto, no le gusto, quiere q deje de escribir tanta idiotez y me dedique a otras cosas; les ruego por favor q me dejen un review para decirme lo q piensan.

Gracias.

AYA K