Bueno primero k nada les damos las gracias por los reviews k nos mandaron animándonos, no tienen ni idea d lo k nos sirvió, como ya les habíamos dicho tenemos muchisisisisimos capítulos ya escritos… si no los subimos es por falta d tiempo: la graduación, los exámenes finales, proyectos…. Y mil cosas más
Bno GRACIAS d nvo, y sin mas el cap 2…
"pensamientos"
normal-
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Chapter II: "Guardar lo que siento…"
Le escocían los ojos, le ardían las mejillas, le oprimía el pecho y le dolía el corazón… los recuerdos daban vueltas en su cabeza y las palabras seguían frescas en su mente.
¿Duele cierto?
Sí, si duele, y mucho-
No, no duele
Mentirosa-
¿Enserio lo crees?
Fui una tonta al creerlo-
Sí, lo creo
Que me amabas-
¿Segura?
No sin ti-
Si no lo es demuéstralo
El inicio del fin-
Por el amor de una rosa…
La promesa rota-
Te amo
Maldito hipócrita-
Yo también te amo
Pobre ilusa-
¿Ves lo fácil que es engañarte?
Cruda realidad-
No…
Fuera vendas…-
El portazo
El adiós-
Se limpió las lágrimas con el dorso de la mano mientras se mordía el labio.
Me quedaré aquí, encerrada, no puedo verlo, no aún…- pensaba.
Rodó sobre si misma hasta quedar de frente a la ventana, los doseles estaban abiertos, por lo que podía ver los pálidos rayos que comenzaban a aclarar en el cielo.
Pero si me quedo aquí, él gana… sabrá que me encuentro aquí, sin levantarme, ojerosa, sin fuerzas, como una vieja amargada que se deja morir, entregada a lo que tenga que venir… ¡NO! ¿Y dónde queda mi dignidad, mi orgullo? ¿En la basura acaso? Se daría cuenta de que en verdad me lastimó lo que dijo, No… no pienso flaquear ante él, ni ante nadie.
Se sentó al borde de la cama y tomó el despertador, apagándolo; tenía tiempo suficiente para bañarse y salir a dar un paseo para despejarse.
Entró al baño y entones se vio a si misma reflejada en el espejo. Parecía haber envejecido 10 años: los efectos del dolor y la decepción. Sus ojos se veían nublados, apagados, opacados por las grandes ojeras que había debajo, su cabello ya no caía hacia sus hombros, parecía haberse revelado y encogido sobre si mismo, creando nudos y marañas. Su cuerpo aun temblaba, presa de las convulsiones del llanto que no había cesado en toda la noche.
Se dirigió a la tina, harta de su imagen, de verse así, tan demacrada y decaída y todo por un estúpido hombre…al que a pesar de todo seguía queriendo.
Abrió la llave del agua y se sumergió, el agua estaba fría, no había esperado a que se calentara, pero el frío del exterior no se comparaba con el frío que sentía en su interior.
Como deseaba quedarse ahí, en el agua, sin preocupaciones, sin recuerdos; solamente quería relajarse y olvidarse de todo. Pero, nada dura para siempre…
¿Herm?- se escuchó la voz de Lavender desde afuera acompañada de pequeños golpes en la puerta -¿estas ahí?-
Suspiró con un dejo de molestia abriendo los ojos, y levantándose tomó una toalla y se envolvió en ella.
Si Lav, ya voy-
Salió de la tina descalza, y abrió la puerta, encontrándose con Lavender, que parecía estar todavía durmiendo, pero aún así logró notar la cara sombría que traía Hermione.
¿Estás bien?- preguntó
Pasa- dijo Hermione haciéndose a un lado para dejarla pasar e ignorando su pregunta – ya acabé-
Lavender sólo le dirigió una mirada de reproche antes de cerrar la puerta con indignación.
Rodó los ojos, que mas daba, se cambió silenciosamente y se dirigió al tocador. De nuevo al espejo.
Sonrió un poco, al menos ya había aparecido algo de color en sus mejillas.
Se sentó frente al espejo y miró las botellas, brochas, y cajas frente a ella. Comenzó a maquillarse como lo había hecho el día anterior, y el día anterior al anterior…
Después de todo, es un día normal-pensó suspirando.
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Si alguien hubiera tenido el valor de dirigirse a Draco Malfoy esa mañana, aparte de sobrevivir para contarla, no sería llamado ni valiente ni admirable, sino tonto.
Todo buen slytherin tenía bien claras las consecuencias de desatar la furia de su compañero, aun cuando una sola persona había sufrido las consecuencias de esta furioso, todos le temían. Esa persona era Blaise Zabini; había sido capaz de recuperar el habla y el valor de estar a menos de dos metros de Malfoy después de 5 meses.
Era obvio que el joven Slytherin estaba más que furioso, sus nudillos estaban más pálidos de lo normal, indicando que no dudaría en descargar un golpe a cualquiera que se le pusiera enfrente; Su cara mostraba indiferencia, su cuerpo tensión.
Y lo peor de todo: nadie sabía porque. Nadie sabía la razón de su furia, pero estaban seguros de que no querrían saber.
Tres de la mañana- murmuró un joven de ojos grises suspirando.
Volvió ola vista de nuevo al techo, tan interesante…
Tres y media…- soltó. Le seguían doliendo los nudillos, aun estaban pálidos.
Tal vez si no los aprieto tanto- pensó.
Pero no había forma de descargar su furia, victima: la pared.
Cuatro de la mañana…
¿La vería al día siguiente? ¿Asistiría a clases o se encerraría en su cuarto? No… era muy orgullosa – sonrió- Seguro que la vería por la mañana, con la cabeza en alto…
Cuatro cuarenta…
Pero aun así la lastimé…su cara… leí tantos sentimientos, y todos por la misma causa; dolor, decepción, tristeza, coraje, pena, lamento, desgracia…
Cinco y media…
Desgraciadamente se parece mucho a mí, sabe esconder muy bien sus sentimientos; aunque su corazón se esté cayendo en pedazos, ella actuará normal, como si no le importara, pero… eso hará que se haga más daño a si misma… y todo –suspiró- por mi culpa.
Cinco cincuenta…
¿Pero ese es el propósito no? Que me odie y me olvide…
Seis de la mañana…
Hora de actuar. Hora de ponerme la máscara de nuevo. ¿Hora de lastimarla?
Se levantó y se dirigió directamente al baño, e inmediatamente se metió a la regadera.
El agua fría lo despertó completamente; trayendo imágenes y recuerdos de golpe.
¿Duele cierto?
¿No era obvio?-
No, no duele
El orgullo…-
¿Enserio lo crees?
No me hagas flaquear-
Si, lo creo
No te rendiste-
¿Segura?
Y al hacerte más fuerte, y al tener tú esperanza…-
Si no lo es demuéstralo
Me hiciste débil a mí-
Por el amor de una rosa…
Falte a mi promesa-
Te amo
Sólo quería hacértelo saber…
Yo también te amo
… antes de lastimarte-
¿Ves lo fácil que es engañarte?
Lo siento-
No...
El verte sufrir…
El portazo
… fue demasiado para mí-
Puso sus manos sobre la pared, con las manos en el mosaico frío, el agua cayendo sobre su cabeza, y en ese momento en lo único que pensaba era en su cara: radiante de felicidad con tan solo un TE AMO, para después irradiar temor, decepción, dolor; le había roto el corazón. Había hecho que ese hermoso rostro radiante se apagara. Eso NUNCA se lo perdonaría a si mismo.
La furia renació en él, apretó los puños y golpeó la pared.
y para colmo Vanessa ya sabe que desde hoy puede comenzar a divulgarlo, "la prometida de Draco Malfoy"… debí haber esperado unos días más, debí al menos comentarle algo…- pensaba.
¡Maldición!- murmuró golpeando ligeramente el mosaico-
Auch- levantó su mano –genial- masculló al notar que la herida sangraba de nuevo. Pero esa sangre no era ni la décima parte de la sangre que había derramado el corazón de Hermione. Dios, ¿Por qué la amaba tanto? El sabía que el momento estaba cerca, si tan solo hubiera aprovechado cada minuto a su lado… de cualquier manera, esos momentos serían guardados en lo más profundo de su alma y de su corazón. Fueron los momentos más felices de su vida, por primera vez, había sido él. Aunque en esos momentos necesitaba sacar de su mente esos momentos, por mas importantes que hubieran sido.
Salió de la regadera envuelto en una toalla, y se encontró con Blaise en la habitación.
¿Qué hay Draco?- preguntó alegre.
Por toda respuesta recibió una mirada fría y seca, Draco tomó su ropa y desapareció ras la puerta del baño.
Blaise solo suspiro quejumbrosamente – Será un largo día- predijo mientras bajaba a alertar a los demás del humor de su compañero.
Draco simplemente ignoró a Blaise pasando de largo.
Cuando estuvo completamente vestido y listo sonrió de lado frente al espejo. Había recuperado su aspecto habitual: sonrisa burlona, ojos fríos, nariz y frente en alto.
Bajó al Gran Comedor seguido de algunos Slytherins que, ya advertidos por Blaise no le dirigían la palabra.
Se sentaron en la mesa dejando que Draco tomará su lugar de siempre.
Entonces por la puerta entró una joven. Draco levantó la cabeza y clavó sus ojos en ella, la cual no quitaba la vista del frente.
Siempre con la cabeza en alto- murmuró Draco entre dientes.
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Respira- se decía una joven castaña fuera del Gran Comedor –Sólo tienes que entrar con la cabeza en alto como si fuera cualquier otro día…- se repetía tratando de convencerse -… pero no lo es- dijo. -¿Y donde se supone que me voy a sentar? ¿Enfrente de él como siempre?- se preguntó. –No, si lo hago tal vez no sea capaz de contenerme, por más fuerte que sea, tal vez alguien interprete mis miradas. Tal vez alguien escuche como los latidos de mi corazón se aceleran al pensar en él, tal vez alguien vea los recuerdos que pasan por mi cabeza y note como mi sonrojo cubre mis mejillas… no.
Respiró hondamente, acomodó su cabello y caminó.
Con la cara en alto sin voltear a ver a nadie, caminó directo a su mesa.
Buenos días Herm- dijo Ron-
Te apartamos tu lugar de siempre- dijo Harry
Gracias- contestó con una sonrisa fingida la castaña.
No tenía alternativa, tendría que sentarse frente a él como todos los días.
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Vaya, vaya, en su lugar de siempre- pensó el rubio.
Por Merlín, el tan solo hecho de verla hacía que su corazón latiera rápidamente. Pero se lo había propuesto: tenía que olvidarla.
La miraba fijamente, trataba de captar su mirada, pero ella le rehuía. –Por Merlín Draco, ¿Qué esperabas, que te mirara con cara de niña enamorada como todos los días?- pensó.
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Él la miraba fijamente, ella rehuía su mirada. No podía aguantarlo. Miraba fijamente su comida, era tan interesante…
¡Hola chicos! ¿Ya se enteraron?- la chillona voz de Parvati la sacó de su ensimismato.
¿De que?- preguntó "interesada" Hermione con una fingida sonrisa.
¡Oh, Herm! Tú nunca te enteras de nada – terció Lavender. Bajo la atenta mirada de los chicos.
¡Ya hablen!-dijo impacientemente Dean, quien se encontraba frente a Parvati.
Pues….-comenzó Lavender-… Draco Malfoy está comprometido con Vanessa Mason- soltó.
Se le tensó el rostro y apretó la quijada. La palabra prometida sonaba en su cabeza.
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Bno chicas aki terminamos con este capitulo, esperamos les haya gustado. REVIEWS:D
Atte: Rocio Lovegood y Sho Felton(Flor y Ale)