Capitulo 4
N/A: como prometido, acá está el cuarto. La verdad les debo mil disculpas, pero eso no soluciona nada, así que mejor los dejo directamente con el capítulo.
Solo una cosa antes: muchísimas gracias a todos los que me escribieron reviews! Me hizo tan feliz ver todos los que me habían llegado cuando prendí esta computadora finalmente! Les debo una.
Gracias nuevamente, y espero que este capítulo recompense el tiempo que me tarde. Nunca más va a pasar (eso espero yo también).
Hmtc.
Buenos... - pero se cortó al tener que reprimir un bostezo con la mano.
Mm... me parece que alguien tiene sueño ¿a ti no Gin?- rió Harry al ver entrar a Hermione.
Y no es la única.- apuntó este cuando vio a Ron que perezosamente seguía a su soñolienta amiga. Los ojos se le cerraban y vagamente se mantenía parado.
¿Por qué será que los dos están cansados?- empezó Ginny.
¿Alguien estuvo haciendo de las suyas anoche?- agregó Harry divertido.
¡Que habrá sido!- exclamó Ginny riendo por lo bajo.
¡Uy ni quieren saber!- les siguió el juego Hermione.- ¡No podíamos sacarnos las manos de encima! ¡Y él estuvo brillante! Hasta sintió que hacía tanto calor que decidió darme una mano con eso, y se ofreció a sacarme la remera, pero yo ahí dije... -
¡Esta bien! Basta.- le gritó Harry para evitar que siga.- Fue suficiente por hoy. Ustedes ganan. Aunque sé que hay algo y no lo nieguen.-
Ron y Hermione sonrieron, era imposible discutir con él. Ginny solo rió.
¡Pf!- de pronto escupió Ron. Todos lo miraron extrañados. Este mantenía la mano alzada y la boca enormemente abierta.
¿Qué pasa amigo? No actuabas así desde que Fleur estaba cerca.- se rió, pero solo.
Las dos chicas estaban igual de perplejas que Ron.
Harry, mirá.- le dijo Hermione apuntando a la mesa de profesores.
Y no era para menos.
Chicos, ¿vieron? ¡Lupin está devuelta!- un alumno de Gryffindor un año más chico comentó.
Y no estaba solo. Tonks a su lado sonreía y saludaba a los cuatro amigos desde la mesa. Ginny como siempre más rápida salió a su encuentro.
¡Ginny!- la recibió con un abrazo Tonks.- ¡Hermione!- y la abrazó a ella también.- ¡Harry, Ron! ¡Cómo están todos?-
Lupin abrazó a los dos chicos.
¡Bien! ¿Pero qué hacen ustedes dos por acá?- les preguntó Ron. Lupin rió, sacando unas cuantas sonrisas. Lupin era un hombre de justas palabras y medidas sonrisas. Pero cuando reía, emanaba una alegría fuera de sí.
Acá señores les presento al terror hecho persona: su nueva profesora de DCAO. Y me presento yo también, su peor pesadilla, su profesor de Pociones.- anunció él feliz.
Todos celebraron con ganas.
Pero ¡esperen! Eso significa que... -
¡Que no tenemos más pociones con Snape!- celebró Ginny.- No lo vemos más.-
Verlo, lo van a ver. Pero no en Pociones.- les contó Tonks.- Él está ayudando a Dumbledor con algunos asuntos, y renunció a su cargo ya que la Orden lo está manteniendo realmente ocupado.-
¡Bueno, pero eso no importa! Lo vemos muchísimo menos de cualquier manera.- suspiró Ron con una cara que expresaba tanto o más que si le hubieran avisado que tenía un año completamente fuera de tareas.
¿Por qué no llegaron ayer?- preguntó Hermione curiosa.- ¿La Orden?-
Sí, un trabajo de ella. Últimamente no tenemos mucho tiempo. Venir a Hogwarts fue una muy buena idea. Después de todo podremos descansar.-
Todos rieron.
¡Ay no! Miren la hora.- exclamó Hermione.
Tengo cuidado de Criaturas mágicas.- se acordó Ginny, y salió corriendo.- ¡los veo más tarde!-
¡Y nosotros adivinación!- gritó Harry agarrando por la manga a su amigo pelirrojo.
Y salieron corriendo a la punta más alta y alejada del Comedor.
Bien... – se auto- premió Ron entre bocanadas de aire.- Llegamos.-
Sí, y puntuales.- alcanzó a agregar Harry igualmente cansado.
De verdad Harry tenemos que hacer un cambio en esto.-
Sí, estoy cansado de tener que correr cada vez que tenemos Adivinación.-
Tenemos que elegir, va a ser difícil, pero hay que hacerlo.- dijo adoptando un fingido aire melancólico.- Uno: dejar nuestra hora de descanso y diversión, "Adivinación", que a pesar de los muchos disgustos sobre tu muerte, es lo mejor que hay para dormir una buena hora. O dos: proponernos llegar más temprano, total a fin de cuentas el tiempo que nos tardamos despertándonos más temprano, lo dormimos acá.-
Los dos amigos se miraron sonriendo con complicidad mientras subían las escaleras hacia la clase.
¡Llegar más temprano!-
Y sentándose Harry agregó...
Ahora que ya decidimos apostemos.-
¿Qué?-
¿Cómo predicará mi muerte este año? Yo digo que con la bola de cristal. Y cuantas veces lo hará... Mm... El año pasado fueron ciento cuarenta y seis veces, este para mí van a ser ciento treinta y cinco. ¿Qué decís?-
No sé maestro, pero... – Y tragando fuerte apuntó a las espaldas de Harry.- Pero te escuchó.-
La Profesora Treawley lo habìa escuchado, y habìa escuchado todo.
Sr. Potter como puedo ver se encuentra transitando otra vez por las confusas olas de nubes de Neptuno.-
Harry resopló con fuerza, y Ron tuvo que taparse la boca para contener la risa.
Parvati y Lanvender cuchichiaban rápidamente. Y Neville, Seamos, y Dean, pretendían tener mucho interés en el último comentario, pues sus caras aparentaban esto.
¿Y?- Harry preguntó.
Y estás preocupado, cansado y triste.-
Perdón, pero se equivoca. Hace mucho que no estaba tan feliz, dormí muy bien anoche, y mis preocupaciones estoy tratando de dejarlas de lado por lo menos por un tiempo.- él sonrió mientras ella giraba a hablar con Dean, profundamente ofendida.
Ginny.- Harry la saludó mientras ella se sentaba frente a él con un par de compañeras.
Hola Harry, ¿cómo estuvo la mañana?- le sonrió contenta.
Bien, un poco aburrida, pero bien. Aunque no me va a durar mucho porque ahora después de comer tengo Pociones y…-
Harry es con Lupin.- le recordó ella.
¡Cierto! Me olvidé.- la sonrisa a él le llegaba de oreja a oreja.- De cualquier manera, el jueves son las pruebas para el equipo y necesito que estés ahí para que elijamos a dos cazadores y dos bateadores. Tiene que estar todo el equipo. Eso sería: vos, Ron y yo.- contó con los dedos de una mano, muy preocupado.
Tranquilo Harry, vamos a encontrar a las personas perfectas. Vas a ver.- lo trató de reanimar.
Eso espero…-
Cambiando de tema. ¿Qué va a pasar con DA?-
Quiero arreglar una reunión. ¿Qué te parece?-
Perfecto, habría que fijar un día después. ¿Seguirá cada uno teniendo su galeon…?-
Esa noche después de ver como Calvin le daba un buen partido de ajedrez a Ron ("ese chico muestra todos los pasos para un futuro campeón de ajedrez, casi le gana a Ron" pensó Ginny), Harry decidió irse a dormir. Pero algo lo retuvo.
Ahí en su baúl abierto un paquete de Gringgots sobresaltaba sobre sus pertenencias.
Harry se acercó lentamente, lo agarró, y metiéndose en la cama lo observó por largo rato.
"Es ahora o nunca Harry. No tenes por qué tener miedo.
¿Aparte es lo que vos querías no?
Pero el miedo es algo difícil de controlar.
Sí, difícil pero no imposible."
Así que auto- contradiciéndose finalmente agarró el paquete y rompió el envoltorio.
De él cayó un pequeño librito, grueso, pero de largo no tenía más de veinte centímetros. Era de peluche negro con una gran letra "L" en blanco. Harry no esperó más, y abrió el libro. La intriga lo estaba matando.
La primera hoja escrita en rojo, mostraba una letra totalmente cursiva y perfecta.
"Querido diario:
Soy Lily, tengo once años y este es mi primer día en Hogwarts. Hoy nos sortearon, y a mí me tocó Gryffindor. Me pregunto por qué… Pero el sombrero debe tener sus razones.
Hoy en el tren conocí a una chica muy simpática, su nombre era Brenda.
Por suerte ella también quedó en Gryffindor, y está ahora durmiendo en la cama de al lado. Es morocha, y tiene unos ojos claros muy lindos, que a mamá le van a encantar.
Pero no somos las únicas acá. También está CATIE. Ella es rubia con algo de mi pelirrojo también (pobre). A ella se la veía media triste, pero igual me cayó bien. Me parece que extrañaba a su familia, yo también la extraño.
Espero hacerme amigas para llevarlas a casa y que conozcan a Petunia. Yo sé que ella está enojada conmigo, pero la quiero mucho igual, y se nos va a pasar. Como dice mamá, es solo una pelea de hermanas más. ¡Eso espero! A mamá y a papá los extraño mucho, espero que me escriban pronto. Yo les voy a escribir.
Lily Evans."
Harry lo releyó, y luego se quedó pensando.
Sonaba tan inocente, tan tierna su mamá.
"Me pregunto la diferencia que habrá entre estos primeros años, y luego cuando conoce a papá y Voldemort empieza a levantarse…"
Amagó a voltear la página para leer el próximo día, pero antes de empezarlo decidió leer un solo día por noche, lo guardó en su baúl, y con una amplia sonrisa se fue a dormir.
N/A: bueno amigos mios, acá está el cuarto capítulo y mi promesa del diario ya empezó jaja…
No me voy a tardar para el quinto, porque ya los hice esperar un muchísimo…
Los quiero mucho, gracias por leer todo esto ya!
Hmtc.
