N/A: bueno señores, señoritas, acá les dejo el sexto capitulo y en bastante poco tiempo para esta epoca de examenes! Y angelita (hermanita mia) la próxima deja el review firmado con tu nombre y no con el mío jaja

P.D.: perdon por los errores de signos, pero no hubo manera de arreglarlo. Igual por suerte se entiende.

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Ginny ¿hoy es nuestro primer entrenamiento, no?- le preguntó Collin acercándose.

Sí, es hoy Collin, no te tardes en llegar porque Harry te mata.- le advirtió ella.

¿Podrían ya dejar de hablar de quidditch? Juro que en la última hora no hubo otro tema.- dijo Nicole estresada.

Habían estado toda la clase de Herbología tratando con la misma planta carnívora; tratando de calmarla para poder extraerle parte de una de sus diez raíces, que crecía en forma ondulada (para el contrario de las otras), y servía para ciertas reacciones alérgicas por comidas.

La primera le había mordido el dedo a Nicole antes de que pudiera inyectarle el calmante. Por lo que la había hecho sangrar bastante. La segunda había tratado de empujar a Ginny, pero al no tener esa fuerza, le raspó el cachete izquierdo. Así que al llegar a la tercera, tuvieron un nuevo plan…

¡Luqui!...- lo llamó un rato más tarde Nicole.

¿Pasa algo?- preguntó desde donde estaba trabajando con su amigo, Pablo.

¿Podrían ayudarnos un segundo?...- preguntó Ginny cariñosamente, peligrosamente cariñosa…

Sí, esperen un poco.- dijo Lucas.

¿No podés hacerlo sola Weasley¿O es que tus guantes de segunda mano te lo impiden?- preguntó Carla, otra compañera de Gryffindor, sonriendo.

Mis guantes no son de segunda mano Carla, y puedo hacerlo sola, pero a diferencia de vos tengo un amigo que me va a ayudar de cualquier manera.- le contestó.- Ah, y esa bincha de flores que tenés puesta, es horrible.- agregó.

Nicole estalló en carcajadas y Carla indignada se dio vuelta a susurrarle algo a sus dos amigas; también de Gryffindor; que Ginny asumió, no debía de ser justamente un cumplido.

Carla y sus amigas. Victoria y Ginette, le habían hecho la vida imposible a ella desde el minuto que posó su primer pie en Hogwarts. Y Ginny ya no se pensaba dejar estar más. Los primero dos años de colegio ellas tres la habían pisado en todo. Pero en su tercer año, cuando se hizo amiga de Nicole y Lucas, él le enseñó a defenderse, y ella a no escuchar lo que esas tres le decía, porque ella valía mucho más que eso seguro.

¿Qué pasó?- les preguntó Lucas llegando conPablo atrás.

Nada, Carla otra vez- le contestó Ginny con una sonrisa triunfante en la cara.

Es tan idiota.-

Nunca va a cambiar.- agregó Pablo.

Pabloera el mejor amigo de Lucas. También en Gryffindor. Se llevaba muy bien con las chicas y pasaban bastante tiempo juntos como para saber todo lo que le pasaba al otro y todos los cuentos sobre Carla también.

Bueno ¿en qué las ayudamos?-

Quiero que vos te pares acá Pablito, y vos Luqui acá.- les dijo Nicole acomodándolos.

¿Y qué vamos a hacer?- preguntó Pablo mirando alrededor con ganas de encontrar alguna clave.

Me van a perdonar por esto.- le dijo de antemano Ginny.- ¡Petrificalus!- gritó su más poderoso petrificador, dejando a los chicos como estatuas al no poder reaccionar antes.

Servirán de señuelos.- les contó Nicole.- Para evitar que sus delicadas amigas…-

Quiere decir, nosotras.- agregó Ginny.

Se lastimen.- terminó Nicole sin poder evitar una sonrisa.

No se preocupen.- agregó Ginny,- yo los cubro.- y colocándose atrás de ellos les asigno un escudo protector.- Ahí está. Espero que sirva.-

Lo que daría por ver sus caras.- dijo Nicole divertida. Ginny rió.- Bueno¿a la cuenta de tres Gin?-

Bueno… uno… dos… ¡tres!-

Nicole se acercó lentamente a la planta, que ya roncaba en su séptimo sueño. Cuidadosamente le aplicó la inyección y se apartó rápido. La planta, como las veces anteriores, chilló y empezó a morder para todos lados con sus dos cabezas.

Pero como pensado, a los primeros que vio fue a los dos chicos, y sin dudarlo se abalanzó sobre ellos.

"Nicole tiene razón, lo que daría por ver sus caras de terror justo ahora" pensó divertida Ginny, mientras veía como con éxito funcionaban sus escudos, manteniendo a la horrible criatura a una considerable distancia.

Un minuto después más o menos, la planta se empezó a calmar, mientras el remedio hacía notar su acción.

Ginny cortó la raíz necesaria. Ya para eso toda la clase los miraba entre risas y reproches de las chicas más miedosas. Luego liberó a los dos petrificados.

Gracias por contribuir.- les dijo Nicole.

Preparence, porque esto es guerra.- dijo Lucas sacando la varita, pero Nicole fue más rápida que él y lo volvió a petrificar.

Ginny se volvió contra Pablo, que ante esto retrocedió, pero al darse cuenta, se enderezó a su máxima altura.

"Ouch", pensó Ginny observándolo. Claramente influía miedo, al sacarle una cabeza de alto. "¡Y yo que pensaba que era alta!" rió para sus adentros, auto- tranquilizándose.

Ni lo intentes porque terminás como tu amigo.- le advirtió apuntando con su mano libre a Lucas, todavía vigilado por Nicole.

¿Ah si?-

Ginny lo miró extrañada. "Este se trae algo entre manos".

¿Qué estás pensando White? Porque lo que sea no te va a servir.- lo llamó por su apellido. Él sonrió. Una sonrisa que a pesar de el de por si ser lindo, a Ginny no le gustó nada.

Nicole se acercó a su amiga, para respaldarla. La varita en alto.

¡Qué está pasando acá!- tronó una voz por detrás de las chicas, haciendo saltar a Ginny y resoplar a su amiga. Lucas ya estaba petrificado, y Pablo se quedó de hielo al verla.

Profesora, yo le puedo explicar lo que pasó.- se ofreció Carla.

Usted se queda callada Srta.- le dijo Sprout en una voz que no permitía réplicas.

Quiero saber que pasa acá ¡YA!-

¿Está pasando algo? Yo no sé nada.- dijo Nicole poniendo cara de obvio. Nadie sabía el por qué, pero siempre había odiado a Sprout, o "esa vieja petisa cornuda", como la llamaba frecuentemente.

No me trate de tonta Srta. ... - le susurró de tal manera que, sin importar su altura, a cualquiera le hubiera puesto los pelos de punta.- Ahora, ustedes cuatro, a mi escritorio, YA.-

Ginny desencantó a Lucas, quien no pudo soportar reírse ante los susurros incesables de Nicole.

"- ¡Esa vieja bruja¡Quién se cree que es! Además sí la voy a tratar de tonta, porque no es que yo solo lo crea así, sino que ES así.-" Y así siguió nombrando los incontables defectos mientras caminaban por los desiertos pasillos en hora de clase, hasta llegar al escritorio de "esa vieja bruja".

¿Tendremos que esperar acá?- le preguntó Ginny a Lucas.

Supongo...- se encongió él de hombros. Habían antes sido llamados a los escritorios de McGonagall, el ex escritorio del supuesto Ojoloco Moody, al de Snape (como de costumbre), y hasta al de Dumbledor. Pero nunca al de Sprout.

Luquitas abrió la puerta y los dejó entrar, pasando él último.

Era una habitación cuadrada, con muchas cosas amontonadas, que variaban dependiendo de dónde se encontraban. Esparcidas por todo el piso de la habitación habían distintos floreros, con las más exóticas flores que Ginny jamás había visto. Sobre el escritorio, pilas sobre pilas de papeles. Y sobre un pequeño perchero capas de todos los colores, para todos los días y para cada estación del año.

Pablo se aproximó al escritorio sepultado de papeles y para el sobresalto de los cuatro amigos, cuatro sillas aparecieron del fino aire, colmado de inciensos de distintos olores que complementaban las exóticas flores.

Estuvieron no más de diez minutos ahí sentados hasta que llegó Sprout.

Veo que ya se acomodaron.- dijo, y acercándose ella también apareció otra silla, aunque un poco más alta que la de los chicos, y se sentó enfrentándolos tras la gran montaña blanca.

Los chicos la miraron, expectantes. Ella también lo hizo. Y por un rato nadie habló.

Creo que por ser la primera vez no recibirán castigo, pero les advierto, llega a pasar algo así otra vez en mi clase o fuera de mis clases también, y no tendré tanta piedad.-

¿Eso es todo¿Nos podemos ir?- preguntó Pablito contento.

De hecho, no.- los cuatro se adentraron en sus sillas, de las que ya se habían levantado, sus caras nerviosas.- Hicieron un muy buen trabajo allá abajo. Y esas raíces con Popi las estamos necesitando para hacer diversos remedios y pociones. Así que como manera de perdonarlos, el lunes a la tarde, los quiero acá para terminar con el resto de las plantas.-

Era increible. Eso sí que era intolerable.

¿Sí o sí?- preguntó Nicole con ganas de matarla.

Sí. Pero si lo hacen, le daré a Gryffindor 50 puntos.-

Los chicos lo pensaron un rato.

Bueno, es un buen trato.- dijo Lucas al final.

Entonces el lunes a las 6 acá en mi despacho otra vez.- les dijo, y con un movimiento de su varita, la puerta de la habitación se abrió, invitándolos a salir.

Sin dudarlo los cuatro amigos salieron de ella, y hablando divertidos de lo que acababa de pasar, y de la manera en que Sprout había callado a Carla, entre los múltiples insultos que todavía le quedaban por lanzar a Nicole, caminaron hacia la sala común de Gryffindor.

Pasaron el retrato y se sentaron enfrente del fuego en un sillón. De repente Lucas saltó asustado.

¡Ginny teníamos entrenamiento hoy!-

Y siete minutos después, los dos quinceañeros, desprolijamente y con los cachetes coloraditos de tanto correr llegaron ante un señudo Harry.

¡Perdón!- murmuró Ginny tomando grandes bocanadas de aire.- Es que Sprout nos dejó esperándola en su despacho.-

Harry no cambió la expresión.

Enserio amigo, perdón.- intervino Lucas.

Harry lo miró retenidamente y luego rió.

Se deberían mirar ante un espejo.- les dijo divertido.- ¡Sus caras de susto al verme! Esto de ser capitán esta gustándome cada vez más.-

Ginny rodó los ojos, aunque sonriendo.

Bueno Lucas andá a calentar con el resto del equipo, Ginny ¿me das un minuto?- le pidió.

Ella asintió.

Lucas por su lado montó en su escoba para unirse con el equipo, pero sin antes poder resistir guiñiarle el ojo a su mejor amiga a las espaldas de Harry antes.

Arreglamos que la E.D. se junte mañana a la tarde, a las cinco.- le contó mientras caminaban un poco viendo volar al resto del equipo.

Excelente¿no?- le preguntó contenta.

Sí... - contestó distraído mirándola.

"¡Uy dios!" pensó exasperada. "¿A este qué le pasa ahora que se queda mirándome?..." Era la tercera vez que le pasaba y la verdad la estaba empezando a incomodar.

¿Pasa algo Harry?-

Eh... No, no, nada... es solo que me preguntaba si... - luchó por sacar las palabras, pero solo desaparecían de su boca antes de poder pronunciarlas.

¡Harry!- le gritó Collin paranoico acercándose.- ¡Harry, una bludger le pegó a Ron y no para de sangrar!-

Mirándola una vez más antes de salir corriendo a ayudar a su amigo, la dejó todavía más confundida. Pero no había tiempo para pensar. Y salió ella atrás de él, corriendo también a ayudar a su hermano.

No estuvo tan mal para ser tu primer entrenamiento como capitán.- rió Ginny mientras salían de la enfermería una hora después de haber llevado a Ron, que se había tenído que quedar por la noche.

No Harry, podría haber sido peor.- estuvo de acuerdo Lucas. El resto del equipo se había ido antes. Solo ellos tres se quedaron antes de que Popi los echara.

Sí es verdad.- dijo él entre desanimado y satisfecho.

La próxima vez va a ser mejor, vas a ver.- lo animó Ginny. Él, sin darse cuenta le dedicó una de sus mejores sonrisas, haciéndola sonrojarse. Y esto a Lucas no se le pasó.

Solo espero que no me pase lo mismo con la E.D. mañana.- agregó.

Lucas se había unido a la E.D. ese año, como también lo había hecho Nicole, de mal talante porque Ginny no les había contado antes, sin estar muy segura de si hubieran querido o no. Sus papás eran totalmente dedicados al ministerio, y no estaba muy segura de sí iban a aprobar esto.

Lógicamente los dos chicos se enojaron con ella al principio, asegurando que siempre iban a haberla apoyado. Pero después con el tiempo entendieron el por qué lo hizo, pero le pidieron que nunca más vuelva a hacer algo así.

No creo.- dijo Lucas.- Tal vez un ojo más o un ojo menos, pero nada muy serio.- dijo irónicamente, por lo que los otros dos se riéron.

Y así, hablando animadamente llegaron a la sala común.

Harry se fue con Hermione que lo llamaba para preguntarle como estaba Ron. Y Ginny se quedó sola con su amiguito.

Entonces¿me contás qué está pasando entre vos y Harry, Gin?- le preguntó sentándose frente a ella.

Ginny rió.

Con mucha suerte algún día va a pasar algo.- le dijo triste.

Pero ¿entonces te gusta otra vez?-

Sí, me parece que sí.- suspiró ella.- Esto no es nada bueno Luqui...- y con esto le empezó a contar todo lo que sentía.- Que me empiece a gustar denuevo quiere decir que voy a sufrir denuevo ver como él anda coqueteando con esa idiota de Cho Chang, y eso me hace mal. Aparte, el día que Harry Potter se fije en mí, con todas las chicas que ya hoy siguen su club de fans sin que él lo sepa, más que soy la "hermanita más chica de su mejor amigo", y peor, me debe de ver como una chica delicada que hay que cuidar por si le pasa algo.-

No digas eso Gin, porque sabes que primero: él sabe que sos MUY capás y que sos una bruja muy poderosa. Segundo: no sé si vos tampoco te das cuenta, pero por poco que vos también tenes un club de fans. Y cualquier chico daría cualquier cosa por estar con vos. Harry no sabe lo que se pierde si te deja pasar de nuevo. Y además, no estaría tan seguro de que no se fija en vos Gin, no estaría tan seguro... – volvió a repetir.

Ginny lo miró con la misma cara de tristeza que el no pudo resistir, y la abrazó, acariciándole el pelo como hacía cada vez que ella se sentía mal por algo.

Eso era una de las cosas que a Ginny le encantaban de ese chico, su manera de ser, su instinto sobre protector, y lo cariñoso que podía llegar a ser sin ni siquiera proponérselo. Siempre, sin excepción, estaba ahí con ella cuando lo necesitaba. Era de verdad, una de esas personas únicas, y amigos inolvidables.

Yo sé lo que te digo Gin, vas a ver que está vez Harry no va a ser tan tonto.- le susurró.

Gracias Luqui... – dijo ella sintiéndose mejor.

¿Ahora, por qué no jugamos a algo para distraernos un poco del tema?- le ofreció- ¿Ajedrez?-

Y con esto los dos se hundieron en un complicado juego de ajedrez. En el que Ginny defendió su apellido, ganando como siempre.