Parte VI: "Fue una performance amarga"

"Sí padre, me casaré como tu quieres" Benimaru podía oír claramente la voz de Kyo a través de la puerta, que seguía siendo bastante nasal. Supuso que aún estaría llorando. Se apegó entonces un poco más a la madera, mientras que la voz gruesa y tajante de Kusanagi padre se dejaba oír.

"Por cierto que deberás comprometerte de nuevo, hijo. Después de un prudente período de duelo" Los livianos pasos del padre, resonaron por la habitación en un breve paseo "Sí, de eso no hay ninguna duda, además tu futura esposa ya esta previamente escogida, pero…ambos sabemos que debes hacer mucho más que eso, para reparar el daño que has hecho ¿No es verdad, Kyo-kun?" No hubo respuesta.

Nikaido crispó los dedos sobre la pulida superficie de la puerta y apretó los párpados fuertemente, como para contener el mal presentimiento que se le venía encima. Era cierto, había esperado que Kusanagi-sama le exigiera a Kyo un nuevo compromiso…pero ¿a qué se refería con mucho más? Había gato encerrado en todo esto, estaba seguro de ello, algo le decía que así era.

"Hijo mío, soy tu padre y como tal, te conozco como nadie. Ya no es bueno seguir negando tu problema, Kyo. Yagami es tu problema, mi querido hijo, sí, como lo oyes, Yagami"

"Pero yo…yo lo iba a eliminar, yo…" Por fin se oía algún signo de lucha en Kyo. Benimaru apoyó la frente en la madera y meneó la cabeza.

"¡Oh, Kyo! Realmente no sabes fingir" Pensó "Ya te atrapó"

"¡Oh por favor! Kyo-chan ¿Acaso me crees un estúpido?"

"No padre, yo nunca…"

"¿Crees que no sé que la causa de tu arrepentimiento antes del matrimonio, fue por causa de Yagami?" El apellido de Iori sonó áspero y desagradable de la forma en que lo dijo el hombre. Era como si lo hubiese escupido al aire "Te he vigilado, Kyo, y nada se ha escapado a mi vista. Es por eso que ahora tu mismo vas a terminar con todo esto que causa tantos problemas a nuestro clan. Porque me hiciste llegar muy lejos para presionarte a olvidar tu loca obsesión por ese…¡ese mal nacido! Créeme Kyo, obligarla a morir no fue nada fácil. No, nada fácil en verdad. De hecho, forcejeó demasiado cuando le cortaron las muñecas"

"¡¿Qué! ¡¿Tu qué, padre!" Ahora la voz de Kyo sonaba temblorosa, como si se estuviera conteniendo de explotar.

"Y de nada sirvió. Porque resulta que tu, ni siquiera te enteraste como yo esperaba, te habías marchado con tu enemigo. ¡Con tu enemigo, Kyo! ¡Por todos los cielos!"

"¡Tu la mataste, padre!"

"Sí, sí, lo hice. Eso no tiene ninguna importancia ahora, Kyo. Lo importante es, que me defraudaste, hijo. Dejé que el Yagami pasara aquel día, pensé que estando confundido por tu conversación con Yuki, lo rechazarías. Pero no. Entonces…entonces tuve que matar a esa chica, ¡para presionarte! Tampoco resultó como yo esperaba. No recibiste la llamada del joven Nikaido"

"Pero…Beni…¿Qué tiene que ver el en todo esto?"

Benimaru no pudo evitar morderse el labio. Ahora comprendía porqué todo se había dado tan fácil. Lo de la entrada de Iori, lo de su salida con Kyo del apartamento, todo. Incluso lo de su llamada. La muerte de Yuki le había remordido en la conciencia, haciéndolo telefonear a Kyo para que regresara. Había sido el último recurso de Kusanagi padre, un desesperado y monstruoso recurso.

"Una pieza involuntaria de mi pequeña treta, hijo"

"No lo puedo creer, no…no quiero hacerlo. Siempre pensé que no podría escapar de ti, pero esto…es una pesadilla"

"Quería que tu mismo terminarás con todo, de forma amable Kyo. Que te alejaras de Yagami por tu propia voluntad. Quería verte rechazándolo, pero ¿sabes lo que vi? ¡Lo besaste Kyo! ¡Mi hijo, un Kusanagi! Tuve que intervenir otra vez, no había otra manera"

"¡¿Lo mataste! ¡¿Lo mataste padre!" La voz de Kyo, se quebró de pronto, convirtiéndose en un murmullo. Benimaru quiso no seguir oyendo. No podía soportar que Kyo sufriera como lo estaba haciendo ahora, ni tampoco podía soportar el saberse cómplice de tanta tortura.

"¡Contéstame!" El grito fue claro, triste también.

"No, no aún" Benimaru dejó de respirar por un momento "Tu lo harás"

"¡No, no voy a hacerlo! ¡No puedes…"

"Sólo te digo, que tendrás hasta mañana para decidir si lo haces tu o lo hago yo. Yagami morirá de todas formas, Kyo"

Benimaru se separó de la puerta despacio, aún incrédulo de tanta crueldad. ¡Era su hijo por todos los demonios! Pero al parecer la guerra entre clanes era mucho más importante.

"Esto es demasiado…yo tengo que impedirlo" Fue su último pensamiento antes de desaparecer por el pasillo. Debía averiguar dónde tenían a Yagami y hacer algo, planear algo.