Hola!

Esto es sin fines de lucro.

Ojalá les guste….


TRAMPA DE AMOR

Capítulo 5

Por Ayame

– ¡Ranma¿Qué es lo que pretendes con esa actitud de tan mala educación, no dejaste si quiera me agradecieran.

-¿Agradecieran? – Dijo, lanzándole una mirada desafiante – ¿Cómo, moliéndote a golpes? –mientras continuaba saltando de edificio en edificio tratando de perder a sus prometidas.

Después de casi una hora de esconderse por todos los medios posibles de ellas lograron perderlas, así pudieron descansar y tomar un respiro, el cual sirvió para que Ranma pudiera reclamarle a su prometida por molestarlas a las demás chicas de tal manera que las incitará a golpearla.

-Tú... las insultaste, diciéndoles que su manera de vestir estaba fuera de moda.

- Por cuarta vez, yo no las insulte. Sólo les di unos pequeños consejos de moda –sacudiendo la mano, simulando poca importancia.

-¡Ah no! Tú las insultaste – dijo acusadoramente -Ya entiendo, por esa razón no sólo te iban apalear sino te iban a matar.

-¡Que no las insulte!

-¡Que si!

-¡Que no!

-Que... ¿Qué es ese olor? –Ranma veía a Akane con cara de interrogación –Raaanma, necesitas un baño con urgencia, hueles a sudor ¡que asco! Aléjate de mí.

- Pero ¿Qué tonterías dices, desde cuando desarrollaste más el sentido del olfato? –acercándose más sin importarle que se alejara cada vez que el daba un paso hacia ella.

El joven de la trenza medito un poco la situación, se detuvo y comenzó a reír para luego gritar como desesperado –Escúcheme viejo tonto, aparezca se que esta en algún lado escondido y regrésela como era antes, rompa el hechizo –señalando a la chica Fashion.

Akane, se espanto un poco y trato de huir de Ranma, quien inmediatamente la tomo de la muñeca.

- ¡Ah no! esta vez no te dejaré ir, quien sabe en que problemas te puedas meter, con esa tonta y loca actitud.

-¿Tonta y loca actitud, dices? Pues si yo tengo una tonta y loca actitud, tú estas completamente loco y enfermo, mira que hablarle a una persona que ni siquiera esta aquí, por si no te has dado cuenta somos los únicos en este lugar tan alejado, pero sabes que, me estoy alterando mucho y eso puede dañar mi salud, así que, te pido de favor que me sueltes.

-No, olvídalo –dijo acercándose a su rostro

-No solo es el olor de tu sudor también tu aliento, es muy malo.

Instintivamente Ranma soltó la muñeca de Akane para cubrirse la boca.

- ¿Qué no te cepillas los dientes 5 ó 6 veces al día? –la cara de Ranma era totalmente de vergüenza – ¡Ayy! Esta bien, no tienes que poner esa cara, con que cepilles tus dientes 3 veces al día creo que es más que suficiente, creo que exagere un poco.

Esas últimas palabras fueron suficientes para que dejara la vergüenza de lado y comenzara a gritar de nuevo –Estas completamente loca.

-No me digas loca, si alguien te escucha pueden comenzar a murmurar de mi y crear un chismee que dañe completamente mi reputación y lo peor pude ser irreparable.

-jajaja ¿No dices que no hay nadie aquí¿Qué más da si te digo loca? loca.

Akane se molesto de tal forma que le dio una cachetada a Ranma pidiéndole que se callara, el pensó que tal vez ella había vuelto a ser la chica marimacho que conocía, sin embargo todo se vino abajo cuando escucho decirle...

-Ranma,lo... lo siento mucho, yo... yo no quería golpearte.

-Estoy bien no te preocupes ¿Piensas que puedes lastimarme¿Acaso estás preocupada?

- ¿Eh? Y quien se preocupara por ti, lo digo porque con lo que acabo de hacer, mi imagen quedaría por suelos.

El joven de la trenza, pensó que esta Akane tenia no solo la facultad de de vestirse bien sino de desesperarlo a lo máximo, mucho mas que sus otras personalidades.

-Ya me aburrí de tantas discusiones tontas y aburridas, me voy a casa.

Rápidamente le tomo por los hombros para evitar que se marcha –Ya te dije que tú no te vas, al menos no ahora.

Se miraban retadoramente mientras Alan, el supuesto anciano seguía escondido no muy lejos de ahí riéndose a más no poder de la precaria situación del arte marcialista.

–Vamos, dime algo- decía Ranma.

-¿Qué quiere que te diga¿Qué sigues oliendo a sudor?

-¡Akane! Eres una... ¿Por qué no puedes ser un poco más cariñosa y dejar esa superioridad?

Alan un poco decepcionado dijo –Este muchachito no entiende. En fin, tus deseos son órdenes, espero que te diviertas – y una nube de polvo rodea a su prometida. Provocándole cosquilleos en la nariz haciendo que Akane estornudara en la cara de Ranma.

-Salud –diciendo irónicamente.

-Gracias jejejejeje lo siento ¿Estas bien?

-Si, lo estoy –un poco molesto respondió.

Akane observo detenidamente la zona y dijo – Este lugar si que es solitario, no hay más personas que nosotros – sonriendo picaramente.

-¡Ja! eso ya lo hemos discutido ¿No lo crees? Pero si te sigue preocupando lo que la gente diga de ti. Descuida, le diré a Nabiki para que mañana lo publique en la escuela.

-No te atreverías.

-¿Apuestas?

-Pero el estornudarte en la cara es algo bobo.

La miro desfilándola, cuando se percato que ya no le miraba a los ojos, como hace un momento – ¿Qué miras?

Sin dar tiempo a otra cosa, se arrojo a los brazos de Ranma para tratar de besarlo.

-¿Qué te pasa estas loca? –tratando de salir del abrazo de Akane,

-Yo se que se escucha bastante trillado pero ¡Sii, estoy loca por ti! –diciéndolo con gran entusiasmo y animo.

-O...oye, A...kane¿No crees que ya es un poco tarde para que estemos fuera de casa?

-Si, tienes razón, pero siempre hay tiempo para un beso –aferrándose más a su prometido.

Sin previo aviso, Ranma tomo a su prometida por la cintura y preparándola para saltar del edificio donde estaban con el pretexto que había escuchado que alguien se acercaba, pudiendo evitar aquel beso que por indecisión y miedo no quiso aceptar. Ya que había comprendido que esto era otro cambio de personalidad, sólo que esta vez el comportamiento de ella era muy similar a Shampoo y eso le aterraba y lo peor del caso era más tentador en ella... en su Akane.

-¿No te parece que esta muy linda la tarde? – sin separarse de el ni un milímetro del brazo de Ranma.

-Es...te este… a mi me parece igual que todas – el nerviosismo se apoderaba a cada momento de él.

Ya en el Dojo, Ranma con mucho trabajo logro que Akane lo dejara ir a tomar un baño, trataba de relajarse sin lograrlo esta nueva faceta de su prometida lo ponía más nervioso que ninguna otra.

El solo pensar en aquellos abrazos se alteraba a cada minuto conteniéndose a salir corriendo y darle aquel beso que le había negado, se imaginaba todo tipo de cosas absurdas para olivarse un poco de ella, sin éxito alguno porque sin entenderlo siempre terminaba el rostro de Akane en su mente.

-Imposible, simplemente no puedo relajarme.

De repente se escucho como alguien entro sigilosamente al baño.

-¿Quien esta ahí¿Acaso eres tú de nuevo Shampoo? Que si es así es el mejor que te vayas, no estoy de humor para tus bromas.

En ese momento la puerta del baño comenzó a correr dejando ver una silueta femenina envuelta solamente con una ligera toalla, Ranma al verla de pies a cabeza sintió que las palabras se negaban salir de su boca

-¿Ak...Aka...ne q...que...cre...ees que ha...ces?

Akane lo vio dándole una traviesa pero tierna sonrisa de esas que lo enloquecía

-¿Qué crees que hago tontito? - acercándose cada vez mas hacia el –Darme una ducha – mirándolo de una manera muy sensual, incitándolo no solo a eso, sino algo más...

-¿du...duchar...ducharte, di...dices¿por qué no esperaste a que terminará? –retomado el controlar la situación.

-¿Cómo dices! Si me hubiese esperado hasta que terminarás¿Dime como te ayudaría a relajarte? –frotando su nariz contra la de él, provocándole más que un sonrojo.

-Espera un momento, eso quiere decir que me estabas... espiando –dijo un molesto Ranma, levantándose de la cubierta de agua.

-mmm¿Cómo negarlo? Con ese excelente cuerpo que tienes. Es una invitación abierta... a lo prohibido.

Ranma se sintió más que profanada su intimidad, ocultándose de nuevo bajo el agua.

-¡Tu, definitivamente eres una pervertida, eres... eres peor que Hapossai.

-En verdad lo crees, porque yo opino que solo soy una chica enamorada –arrojándose sin importarle nada a los brazos de Ranma, quien esquivo el abrazo, tal vez se comportaba como Shampoo pero definitivamente no tenía la misma agilidad que ella.

-Ranma, por favor no quieres que...

Cuando sintió que el muchacho de la trenza la abrazaba para cubrirle boca, porque por segunda ocasión se escuchaban como alguien entraba al cuarto de baño sin previo aviso hasta que -¿Hijo¿Ya terminaste? Te traje una toalla limpia.

-¿Mamá? No, por favor, no vayas a entrar.

-Hijo, pero soy tu madre –con el tono más natural del mumdo.

Mientras se podían escuchar el sonido de los forcejeos que Akane producía al tratar de librarse de su prometido – ¿Qué son esos sonidos¿Acaso estas acompañado? – Sacando su katana.

-Por favor, suéltame, prometo portarme bien –logro decir Akane, poniendo el ambiente más tenso cada vez.

-¡Ranma! Voy a entrar, se que alguien esta contigo le he podido escuchar.

-No, en serio no hay nadie, de verdad, además no puede verme desnudo.

-¡Ahh Claro que si! Yo te traje al mundo, así que no me importa que estés desnudo –diciendo esto empezó abrir la puerta donde se encontraba su hijo.

Con un movimiento rápido desenrollo a su prometida diciéndole -Maten la respiración –No tuvo más remedio que hundirla en la tina de baño, para no ser descubierta.

Cuando entro pudo observar que solo era Ranma quien estaba en sentado en el borde de la tina con la toalla de Akane enredada en la cintura – Lo ves mamá no era necesario entrar, no hay nadie. Además ya tengo una toalla.

Nodoka algo dudosa inspecciono el cuarto, sin imaginarse que la chica estaba sumergida en la tina, por fin se decidió a salir.

-Esta bien, creo que te dejare terminar tu baño.

-Si mamá jejeje te lo agradecería mucho.

A Ranma casi le da un ataque el pensar que tenía a su prometida sumergida en el agua, con la posibilidad de ahogarse, si embargo ella dejo ver sus ojos lo que indicaba estar perfectamente bien, pero sin aviso alguno, Nodoka entro de nuevo al cuarto de baño, entonces Ranma a gran rapidez sumergió la cabeza de Akane nuevamente en la tina sin antes prevenirla.

-Por cierto hijo, olvide darte la toalla.

-Mamá, ya te dije que tengo una toalla – dijo con un tono cansado.

-Sí, ya lo se. Pero esa parece realmente húmeda. No puedes culparme por querer consentirte un poco.

Con una sonrisa nerviosa Ranma le pidió a su mamá salir de inmediato, y sin perder tiempo, mirando para otro lado dejando a su alcance la toalla seca – ya puedes salir, mi mamá ya se fue – pero no hubo respuesta, el comenzó a temblar entrando al tina y envolviéndola en la toalla saco a una inconsciente Akane de la tina.

-¡Oh no, Akane despierta, despierta – sin ninguna reacción y tampoco teniendo otra opción la saco completamente en brazos para darle respiración de boca a boca.

La mayor sorpresa para Ranma fue: cuando la traviesa chica al momento de sentir los labios de su prometido en los suyos lo tomo por la espalda para darle un beso dejándolo sin respiración, lo abrazo por el cuello atrayéndolo hacia ella y trasformando el contacto de labios en un calido y tierno beso.

Cuando Ranma logro liberarse, se sentó a su lado intentando aclarar su mente y no dejarse llevar por su deseo.

Akane lo vio con una hermosa y coqueta sonrisa diciendo - Muchas Gracias, por tan maravilloso baño –dando un largo suspiro - Fueee... una sensación bastante relajante - decía mientras se acercaba hacia el para hablarle al oído - Que duermas bien

Dejándolo sentado aún en el mismo lugar, sin palabras ó movimientos coherentes – Yo...Yo...Tu... Akane...n...no esta...

Continuará...


Sin más por el momento, les mando un saludo. Gracias por leerlo.