"Mi libro abierto"

Capitulo 2 "Entregarlos?..."

-Hola? quien es?- sabía la respuesta a mi pregunta

-Sabes quien soy...- una voz masculina, muy seductora hablaba, y para ella era muy familiar

-Tu, porque llamas a esta hora? –preguntó la chica extrañada

-No podía hacerlo antes – explicó en voz casi inaudible

-Y que quieres? – menciono desafiantemente

-Necesitamos hablar...por favor...

-Yo no tengo nada que hablar contigo, todo esta aclarado...- menciono la chica testarudamente

-Aun quedan cosas que no están claras, y lo sabes muy bien!

-Como cuales eh? – Misty preguntó con máxima seriedad

-Como... como nuestros sentimientos, mis sentimientos que aun no cambian Mist –

-Eso ya no es importante para mi... – dijo claramente mintiendo

-Oh Misty, por favor, sabes que eso es mentira! Déjame hablarte! ...

-Te escucho – dijo fríamente la voz femenina

-Pero no así, quiero... quiero verte... – dijo el chico claramente avergonzado de su comentario

-Que, estas loco! – dijo la pelirroja asombrada –

-Nos podemos juntar? Por favor... –propuso tímidamente

-...

-Hola! - preguntó preocupado...

-...

-Misty!

El chico no escuchaba palabra alguna y la pregunta aun seguía sin respuesta, haciendo que su nerviosismo y sus ansias crecieran en un cien por ciento, pero estas aumentaron al escuchar la dulce voz de la chica, dándole una respuesta inesperada...

-Lo siento, no creo que eso sea posible – dijo ella finalmente

-Pero...– se resignó a decir el joven, con sus ánimos decaídos

-Ya es muy tarde, por favor...no llames mas – mencionó la pelirroja antes de colgar el teléfono fuertemente

El silencio reinó en el aire...

Luego de colgar, no hizo nada mas que llorar... pero no como siempre, silenciosa y escondidamente, si no que esta vez lloró como una bebe, como una pequeña y solitaria niña que se encontraba perdida, rogando por el abrazo de su madre ausente, y por desgracia, los recuerdos que producieron la despedida definitiva, vuelven a causar molestias de vez en cuando, solo basta una similitud con el para caer en ese estado tan deprimente.

-Es por eso que será mejor dejar todo lo que tenga que ver contigo atrás...

Todo...

La chica se sentó en su cama, recostándose lentamente mientras se frotaba el vientre, típico acto de una mujer embarazada que esperaba con ansias el fruto que crecía dentro de si, pero ella era especial, sin duda ella se sentía diferente a las demás mujeres embarazadas, ella no esperaba un bebe como es lo normal, si no que esperaba mellizos del hombre que amaba, del hombre que la había dejado, del hombre que la había engañado con su "amiga" y del que quería dejar cualquier recuerdo relacionado con el en un baúl y cerrarlo con mil candados.

-Porque es tan difícil? Y lo peor de todo, es que ustedes complican aun mas las cosas –pensaba la chica mirando su apenas abultado abdomen – Tal vez será mejor... renunciar...

Al día siguiente, me levante de la cama muy temprano. No quería estar en la habitación donde había ocurrido ese intercambio de palabras tan molesto para mi la noche anterior.

Ahora solo quería desahogarme, pero ... de que manera podía hacerlo?

-Algo se me ocurrirá – mencionó.

La chica se vistió y realizó su rutina de la mañana normalmente, sin dejar de lado ninguna de las actividades que realizaba a diario y que había dejado de hacer hace una semana.

Cuando ya estaba lista para ir a clases como cualquier día Lunes, miró hacia un costado buscando sus desaparecidas llaves y notó un pequeño sobre que había recibido unos días atrás y del cual se había olvidado completamente.

-La carta que trajo ese cartero obsceno... – pensó la chica tomando el pequeño y alargado sobre entre sus finas manos, buscando el remitente, el cual no estaba escrito, así que comenzó a romper la orilla de este para sacar la hoja de papel que contenía, la desdobló y comenzó a leerla.

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Querida Misty:

Hace mucho que no he sabido de ti, porque no me has contestado los mails que te he mandado?

Creí que la causa de mis mensajes sin respuestas podría ser que tu correo electrónico estuviera caducado, así que decidí mandarte una carta para informarte e invitarte.

Bueno Misty, te cuento-... En unos días mas estaré visitando Cerulean City, ya que pronto se realizara el festival en Viridian City y me encantaría que me acompañaras al parque de diversiones que estará en esa ciudad por un mes.

Que dices?

Espero que estés muy bien y sabes que puedes llamarme cuando quieras querida Misty.

Adiós y cuídate

Ruddy

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Doble la hoja de papel con cuidado y la metí en su sobre...

-Ruddy vendrá a...a verme... – dijo acariciando su delgado estomago con nostalgia en su semblante – Bueno después me ocupo de eso, ahora veamos... – menciona mirando su reloj- todavía es temprano para ir al instituto, pero me harté de estar aquí encerrada – decía mientras miraba todo su departamento, pero se detuvo súbitamente al ver una carpeta junto a un cuadernillo tirado en el sofá.

- Que es esto? – se pregunto así misma recogiendo los antes mencionados objetos visualizados

-Los apuntes de Mely! – dijo sorprendida – No puede ser! En media hora empieza mi semana de exámenes y no estudie nada! – gritó la chica asustada

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-Oh que haré, que haré, que haré...- repetía una y mil veces mientras caminaba por las calles, mirando con curiosidad las hojas de papel que llevaba en sus manos, y tratando de encontrar solución a su problema, pero antes de encontrarla, se detuvo en seco levantado su hermoso perfil quedando con la fachada del instituto en su mirada. Comenzó a caminar nuevamente hasta que logró divisar a la persona que buscaba

-Melody! – gritó haciéndole señas con su mano libre y acercándose hacia ella

-Hola Mist – saludó alegremente Mely, pero su rostro se tornó preocupado al ver el semblante de su amiga – Estas bien?

-Si, lo estoy, solo que... – cortó su frase al ver que pasaban personas a su alrededor – no se como llevar esto del embarazo, lo que me dirán los profesores y los demás alumnos...

-No pueden decirte nada malo - dijo seriamente – despreocúpate, no pasara nada –menciono Melody guiñándole un ojo –

El sonido de la campana que daba inicio a las clases del día comenzó a sonar y los jóvenes que caminaban por los pasillos ingresaban a los salones.

-Nos vemos luego Mely, si sobrevivo a los exámenes! – dijo Misty despidiéndose con simpatía.

-Sobrevivirás! Te lo aseguro – dijo entre risas mientras se alejaba.

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- Oh Dios... eso fue horrible! – mencionaba Misty saliendo de un salón, encontrándose con su amiga Mely en el pasillo, la cual tenia el mismo semblante de preocupación y cansancio que ella.

- Hola Mist – dijo Mely desanimada – como te fue en el examen? – preguntó con curiosidad

- Ni hablar, de seguro reprobé – respondió deprimida –

-Que te parece si nos olvidamos de este mal rato y vamos a casa a conversar? – propuso Melody risueña

- Okey, suena bien!

Las dos chicas comenzaron a caminar por la calle paralela, la cual llevaba a un amplio parque, mientras la joven pelirroja buscaba en su walkman alguna canción que le agradara, pero al llegar al centro de aquel lugar, su atención se desvió completamente al sentir la mano de su amiga rozarle el brazo.

-Mira ese chico! – dijo Melody sorprendida – nunca antes lo había visto por aquí...

-Cual? –preguntó Misty tranquilamente

-Ese chico! –

Giré mi vista hacia un costado y ...ahí estaba...

Mi vista comenzó a nublarse y mi cuerpo se volvió liviano. Todo comenzó a dar vueltas y mis manos comenzaron a sudar. Solo sentí el sonido del viento desvanecerse en mis oídos...

No recuerdo nada más...

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-Misty! Misty! – escuche a Melody gritar desesperada

-Estas bien? –

-Mist! Responde por favor – escuche sollozar a mi amiga

-Uhm? – soltó un leve quejido al notar que se encontraba tirada en el suelo – que sucedió? no recuerdo nada...

-Te desmayaste... – dijo una voz grave desde el otro costado de la chica aturdida

Misty giró lentamente su cabeza con mucho esfuerzo, mientras el chico que se encontraba de rodillas a su lado la miraba con su semblante enternecido.

-Estas bien?– dijo el hombre de cabello castaño – me tenias preocupado

-Ruddy? – Ruddy? – preguntó Misty

-Veo que aun me recuerdas bien... – mencionó con voz seductora

-Ustedes se conocen? – preguntó Melody mientras ayudaba a su amiga a levantarse del suelo, con un gesto de interés en la respuesta

-Si – limitó a decir Misty

-Ehh...Ya te sientes mejor? Crees que puedes caminar sola? – Preguntó Ruddy nerviosamente después de unos segundos de silencio.

-Claro que si – dijo ella tratando de mantener el equilibrio

-No deberías hacer muchos esfuerzos – mencionó preocupada su amiga – y menos en el estado en el que te encuentras... – dijo Mely sonriendo, mientras Misty abría sus ojos de par en par, reprimiéndola con la mirada por aquel enunciado.

-Acaso estas enferma? – Preguntó Ruddy con notable inquietud

-No – respondió apresuradamente la chica pelirroja observándolo a los ojos, mientras su amiga la cual la sostenía, miraba con atención los sucesos que ocurrían a causa de sus comentarios apresurados

-De verdad estas bien?

-Claro que si! Porque he de estar mal? – preguntó bromista

-Pues, la gente sana no se desmaya en la calle – contestó riendo Ruddy, haciendo que la chica pelirroja mostrara una leve sonrisa en sus labios.

-Es mejor que te sientes – dijo preocupado –

-Gracias pero no hay de que preocuparse – dijo fingiendo una sonrisa – debe ser el cansancio, nada mas que eso

-Pero... – trató de continuar el chico pero lo detuvo un murmullo femenino

-Ya se está haciendo tarde... – musitó la chica en el oído de su amiga pelirroja, una hora después de su encuentro con aquel chico muy apuesto según el gusto de Melody

-Si, tienes razón - le contestó susurrando – Bueno, ya debemos irnos – mencionó Misty levantándose de la pequeña banquita de parque en la cual los tres jóvenes se encontraban sentados

-Las llevo al gimnasio? Ando con el auto y me queda de camino – propuso tomando la mano de la líder

-Gracias – mencionaron ambas – eso estaría muy bien – finalizo Mist

De camino al Gimnasio, el silencio se apoderó del interior del pequeño auto convertible y el trayecto se tornó frustrante.

Al llegar, el chico se bajó del automovil seguido por las chicas, las cuales hablaban entre ellas cosas inaudibles para el joven lider del gimnasio Trovita.

-Muchas gracias por traernos Ruddy – mencionó Mist dándose la vuelta para quedar de frente a el

-Gracias, no tenia ánimos de caminar con este frío – dijo riendo Melody un poco avergonzada

-No hay de que – dijo sonriendo – Bueno, ya debo irme y...por favor, cuídala – le solicitó a Melody guiñándole el ojo seductoramente.

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Ambas chicas caminaron hacia el interior del Gimnasio, entrando en la primera habitación, la cual era la sala de estar.

-Fue un día agotador! – mencionó Melody echándose al sofá – Estoy tan hambrienta!... quieres algo Mist?

-No gracias – contestó con un gesto de asco en su semblante – Creo que no me entra nada de comida - señaló

-Ay Mist – suspiró – No puedes seguir así amiga, no has comido en todo el día y estas muy débil, debes cuidarte! Recuérdalo...

-Lo se... – mencionó preocupada

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Ruddy se encontraba en el interior de su automóvil, esperando que aquella luz roja del semáforo cambiara de color para poder seguir su trayecto, cuando notó un pequeño bulto debajo del asiento del copiloto, el cual era de color rojizo.

-La mochila de Misty – pensó el, levantando la vista para poder observar el semáforo, el cual cambió de color dejando que el chico tomara la calle de regreso hacia el Gimnasio Celeste.

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- Y que piensas hacer Mist? – preguntaba preocupada Melody – has pensado en el futuro de los bebes?

-Claro que si! Es en lo primero que pensé – dijo un poco perturbada – Pero... No se que hacer... – aludió mirando hacia el suelo, con su chasquilla tapándole el rostro – creo que lo mejor será dejarlos ir... a ambos –levantó la mirada

-Pero Mist –tratando de calmar la situación – no es la mejor forma...

-No creo que haya otra forma – dijo desanimada – esto no va para ningún lado y es muy agotador encargarse de esto sola, no quería hacerlo pero... cuando nazcan... – se detuvo un momento analizando mentalmente las palabras que pronunciaría a continuación – cuando nazcan... los daré en adopción – finalizó con su vista baja.

Al no escuchar reproche alguno de parte de su amiga, Misty levantó su semblante y al notar la mirada de Melody fija en la puerta de la habitación se volvió rápidamente hacia atrás notando al chico de cabellos castaños mirando sus ojos fijamente con su mochila roja en la mano.


NA:

Holap! Lo shento por demorarme tanto T.T Lo siento Sumi! pero la inspiracion se habia ido de viaje y no queria regresar u.u... Bueno, este cap, me costó mucho escribirlo...muchop! no lograba hacerme un tiempo para pasarlo x.x Pero ya está ( No me mates Sumi x.x ) Ojala les guste este cap y buenop... esperen el que sigue xD

Bye!

Mistyk Chan