Capitulo Cinco
EL NUEVO CAPITÁN DE QUIDDITCH
Nuevamente se encontraba andando por el camino, las flores y fuentes que lo franqueaban cada vez eran más nítidas. Al final del recorrido, como otras veces, divisaba a la figura femenina que lo esperaba. Camino hasta ella. Una larga cabellera rojiza enmarcaba un rostro joven, pero a la distancia que se encontraba, no era distinguidle. Apuro el paso, un canto de ave resonaba en sus oídos. Ahora si reconocía ese canto. El canto de un Fénix. Ya casi llegaba a su meta, cuando una nieve fina comenzó a caer y de la nada surgió una figura negra delante de la chica. La negra figura comenzó a caminar hacia el. El canto fue sustituido por un riza estridente. Harry se estremeció, sintió un frió que recorría su cuerpo. La figura saco una varita, pero el ya tenia la suya lista para el combate. Un dolor intenso e su cicatriz le hizo perder el equilibrio y cayo al suelo. Escucho un grito.
Despertó.
Estaba sudoroso con el corazón latiéndole rápidamente
y la cicatriz doliéndole. Miro a su alrededor, sus compañeros
aún dormían placidamente. Harry se levanto y fue hacia
la pequeña mesa que había entre su cama y la de Ron.
Tomo agua y contemplo los jardines y vio que de la cabaña de
Hagrid salía humo por la chimenea.
Que significaba ese
sueño, que se repetía y cada día, como los que
había tenido el año pasado, aparecía más
información. Pero en este estaba Voldemort y su madre. Porque
estaba seguro que esa figura femenina era su Madre, quien lo esperaba
al final de ese camino era Lily Potter.
Ron contenía la
respiración. Escucho cuando Harry volvía a dormirse.
Tenia la impresión de que su amigo nuevamente tenia
pesadillas. Lo había escuchado moverse intranquilo entre las
sabanas. Seria que otra vez tenia sueños como los del año
pasado. Tendría que preguntarle, pero no sabia de que manera
hacerlo, aunque había mejorado un poco su carácter, la
muerte de Sirius lo había vuelto muy retraído. Bueno
quizás Hermione sabría como abordarlo, ella tenia tacto
para esas cosas. Suspiro. Si realmente Hermione sabia como hacer las
cosas. No entendía porque había tardado tanto en
demostrarle sus sentimientos. Quizás seria por temor a ser
rechazado, a que ella no sintiera lo mismo... a que ella prefiriera a
Harry.
A la mañana siguientes recibieron sus nuevos horarios, mientras desayunaban en el gran comedor. La profesora McGonagall le dijo a Harry:
-Potter necesito hablar contigo en mi despacho, cuando termines de comer.
Los Griffindors miraron a Harry, quien se extraño, ya que apenas comenzaba el nuevo curso y aún no se había metido en ningún lío, al menos que el recordara.
-Que será lo que quiere la Profesora McGonagall contigo?...dijo Hermione extrañada y con tono preocupado.
-Tranquilo Harry, no puede ser nada malo...dijo Neville quien destapaba un paquete que acaba de dejar en sus manos una lechuza marrón.
Ron miraba el techo del
gran comedor que mostraba un hermoso cielo azul con pequeñas
nueves. El no opino nada, ya que el sospechaba la razón de esa
citación.
Harry miro su nuevo horario. Vería Defensa
Contra las Artes Oscuras tres veces a la semana, junto a Pociones y
Transformaciones. Encantamientos y Astronomía seria dos veces
al día. Herbólogia una sola vez. Lamentaba que no
volvería a tener Criaturas mágicas para ver a Hagrid
mas seguido, se alegraba por no tener que ver más adivinación
e Historia de la Magia. Aunque sentía un peso en el estomago
saber que seguiría asistiendo a Posiciones su materia menos
apreciada, sin embargo se había propuesto que su enemistad con
Snape, el profesor que impartía esa materia, no entorpecería
su deseo de ser auror
Su primera materia ese día era
Transformaciones, por lo que quince minutos antes de la hora de
inicio se dirigió al despacho de la profesora McGonagall. Toco
la puerta levemente.
-Adelante...dijo la profesora McGonagall
Harry entro
-Pasa Potter, siéntate, por favor.
Harry trato de captar algo en el rostro de la profesora que le indicara el motivo de esa reunión, pero su rostro era inexpresivo, aun que sus ojos brillaban de forma inusual.
-Esta reunión es rápida, para poder ir a clases. He discutido con el Profesor Dumbledore la necesidad de un nuevo capitán para el equipo de quidditch. Y hemos concluido que el más indicado eres tu Potter. Por lo que has sido designado Capitán del equipo de Griffindor. Reúnete con el equipo, escoge los nuevos cazadores y prepárense bien, la copa debe ser nuestra de nuevo este año...miro con cariño la copa que relucía sobre una vitrina...bien Potter nos vemos en clase.
Harry no salía de su asombro, el era el nuevo
Capitán del equipo. No se sentía muy seguro de ser tan
bueno como lo fue Wood, pero su experiencia el año pasado con
el ED, lo hizo adquirir un poco de confianza en si mismo.
Entro en
el salón dispuesto a contarle cuanto antes a sus amigos la
nueva noticia. Pero la sorpresa que se llevo fue mayúscula
cuando se dio cuenta que en el salón había estudiantes
no solo de Griffindors sino también de Hufflepof y
Ravenclaud.
Se sentó al lado de Ron quien le había
guardado el puesto. Se acerco con disimulo, abrió la boca para
comunicarle la noticia, pero Ron se adelanto
-Eres el nuevo capitán del equipo, ¿no es así?...dijo Ron con una sonrisa
Y en ese instante entro la profesora McGonagall. Harry se quedo sorprendido, pero por la expresión en el rostro de su amigo la noticia parecía agradarle.
Mientras en el aula de Encantamientos, el profesor Flich les hablaba a los nuevos alumnos de quinto curso la importancia de los TIMOS. Ginny tomaba nota de algunos tips. Pero se recordaba de la cara de Malfoy. Le había sonreído, a ella, el que no se cansaba, cuando podía de insultar a su familia. Decidió no prestarle atención. Se acordó entonces de la citación de Harry en la oficina de McGonagall, seguro era para nombrarlo capitán del equipo de quidditch, como había manifestado Ron en el gran comedor luego de que Harry saliera. Si se hacia realidad, seria un magnifico capitán, en las reuniones de la ED había sido un maravilloso profesor. Entonces el profesor Flich le hizo una pregunta que la obligo a volver a la realidad..
A los alumnos
del sexto curso los profesores les habían explicado que los
próximos dos años eran la preparación para sus
futuras carreras. Por lo que Harry compartía algunas materias
con otros alumnos de otras casa. Ron y Hermione estaban con el en
algunas clases, pero en otras estaba con Neville.
Lupin y Moddy
eran la sensación en el colegio, Harry, Ron y Hermione intuyan
que estaban allí, para reforzar a los otros miembros de la
orden, cuidar a Harry y proteger a Hodwarts de cualquier asalto de
Voldemor. Y seguro Moddy sustituiría a Lupin cuando hubiera
luna llena. Por supuesto ya estaba preparado para que la peor clase
fuera la de Pociones, no solo porque ahí estaba también
Malfoy con su pandilla, sino porque Snape le dedicaba miradas de
intenso odio. Sin embargo se equivoco, Snape se dedico a explicarles
la importancia de aprobar su materia para aspirar a estudios
avanzados, pero ignoro a Harry por completo. Y Malfoy por su parte
también. Harry se sintió feliz por ello, realizo su
poción de veritaserium y por primera vez tenia el color y el
aspecto que ya Snape había descrito. Coloco su muestra sobre
la mesa. Y para su sorpresa, no se rompió accidentalmente.
Snape la tomo y la guardo junto a todas las otras. Sospecho que esta
nueva actitud tenia que ver con la presencia de Lupin y Moddy o
quizás la intervención de Dumbledore. Pero lo que más
le extraño fue que ni Malfoy, ni sus amigotes lo molestaran,
se comportaban retraídos, se imagino que seria porque sus
padres eran ya declarados mortifagos, sin embargo esa actitud le
parecía sospechosa.
En la primera clase de Defensa contra las artes oscuras, Harry se sorprendió de encontrar a todos los miembros del ED que cursaban sexto curso. Lupin los felicito por su valentía y por lo mucho que habían aprendido.
Los días pasaron velozmente. Las asignaciones se acumulaban. Habían comenzado los entrenamientos de quiddicht. Los Griffindor habían recibido con agrado la noticia de que Harry era el nuevo capitán. Había seleccionado a Ginny y a los hermanos Creevey como cazadores, Ron continuo siendo Guardián, aunque el quería dimitir, Harry no acepto su renuncia, y dos alumnos de segundo fueron escogidos como golpeadores. Había mucho entusiasmo, los entrenamientos fueron mejorando poco a poco.
