Capitulo Nueve
UN MOMENTO ESPECIAL
Quieres bailar?...pregunto Harry tímidamente mientras su mirada estaba clavada en el piso.
Ginny se sorprendió ante tal invitación, le tomo la mano que Harry le ofrecía. Su corazón latía muy rápido, al caminar hasta la pista de baile, mientras Harry le apretaba la mano sintió un pequeño mareo. Algunas personas los miraban. Las luces bajaron su intensidad. Harry rodeo con su brazo a Ginny por la cintura, ella coloco su mano libre sobre el hombro de el y comenzaron a bailar. Mantenían cierta distancia. Ambos evitaban mirarse. Pero no podían dejar de sentir. Sentir con todos sus sentidos: oler el perfume del otro, tocar la piel del otro, oír la respiración del otro, mirar los ojos del otro y desear con toda el alma probar los labios del otro. Harry la atrajo hacia el y Ginny se dejo llevar. Por un momento un extraño impulso acerco ambos rostros que casi sus labios se rozan, pero un flash de luz llego hasta ellos y los hizo volver a la realidad. Los flash de luz se multiplicaron. Harry y Ginny se separaron lentamente. Miraron a su alrededor y varios fotógrafos aun mantenían sus cámaras cerca de ellos. La música ceso. Se escuchaban aplausos. Pero ni Harry ni Ginny podían separarse y salir de allí. Una nueva melodía comenzó a tocar y para alivio de Harry los fotógrafos se habían ido hacia los esposos Weasly.
-Quieres seguir?... pregunto Harry con un hilo de voz.
-Solo si tu quieres...dijo Ginny mientras Harry la atraía nuevamente hacia el.
Cerro los ojos y recostó su cabeza sobre el pecho de Harry. Por un momento, solo por un pequeño y maravilloso momento, estuvieron sus labios muy cerca, tan cerca de consumar ese beso con el que Ginny tanto había soñado.
Harry la sentía temblar. No lograba comprender lo que
había estado a punto de hacer. Sin embargo agradeció
que no hubiese pasado. Sus sentimientos hacia Ginny aún no
estaban claros. Algunas veces cuando veía a Cho por los
pasillo de Hogwarts, sentía una nostalgia de aquello que pudo
ser pero no fue. No se sentía preparado para otra relación.
Además estaba el hecho de que Ginny tenia novio. Dean era su
compañero y era una buena persona. Lo menos que el quería
era hacerle daño a alguien y menos a Ginny. Acaricio su larga
cabellera roja. Era tan linda, tan alegre, tan mujer.
Harry
suspiro, "realmente es muy fácil enamorarse de ti, si tan
solo...No, no, no puedo. Hay una profecía que ya marco mi
destino. Y mi destino no es el amor", pensó Harry con
amargura.
Ginny sentía y escuchaba como el corazón
de Harry latía rápidamente, "será que Harry
siente lo mismo que yo", pensó Ginny mientras sus miradas se
encontraron. Ginny le sonrió. Harry le correspondió. En
ese momento nuevamente la música ceso y todos
aplaudieron.
Harry y Ginny se separaron lentamente.
Lupin
se acerco a ellos, Tonks lo acompañaba, llevaba el cabello
largo.
-Todo ha estaba fabuloso. Ginny felicitaciones, tienes un padre maravilloso... dijo Tonks mientras abrazaba a Ginny muy efusivamente.
Lupin y Harry se miraron, Lupin le hizo una
inclinación de cabeza para indicarle que lo siguiera. Tonks se
llevo a Ginny con ella.
En una esquina del salón estaba Ojo
Loco Moody esperándolos.
-Harry queremos hablar contigo...dijo Lupin en voz baja.
-Usted dirá profesor...dijo Harry algo extrañado por la actitud de Lupin y Moody.
-No quiero que te alarmes con lo que te voy a decir, pero queremos que estés muy atento...dijo Lupin mirando de reojo a Moody.
-Si, debes estar en constante alerta...dijo Moody con voz gruñona.
Harry seguía sin comprender.
-Creemos que hay un espía en Hogwarts, bueno deben haber varios, pero al menos tenemos sospechas fundadas sobre uno...dijo Lupin mirando a Harry. Lucia preocupado. Harry comprendió.
-Draco Malfoy...dijo Harry en un susurro. Miro a sus profesores y ambos hicieron un gesto afirmativo con la cabeza.
-Son solo sospechas, pero debes tener cuidado con el. No trates de enfrentarlo tu solo, si necesitas ayuda pídela...dijo Moody.
-Vigilamos los pasos de Malfoy sin que se vea sospechoso, pero tu debes velar por tus amigos...
Lupin no termino la frase, los gemelos se habían acercado a ellos.
-Harry ven, van a tomarnos fotos. A ti te encanta eso ¿no?...dijo George guiñándole un ojo.
-A mi, bien sabes que no es cierto...dijo Harry enfadado
-Hombre, no te enfades es solo una broma...dijo Fred riéndose junto a su gemelo.
-Harry, cariño, ven, la foto familiar, ven... dijo la Sra. Weasly haciéndole señas a Harry para que se acercara.
-Ve Harry, luego hablamos...dijo Lupin quien empujo un poco a Harry en dirección a donde estaban los Weasly.
Harry camino hacia donde estaban varios fotógrafos,
la familia Weasly en pleno posaba para las fotografías de
rigor. Había mucha algarabía. Pero de repente los dos
hermanos mayores de Ron guardaron silencio y miraban hacia la puerta
principal del salón. Harry y Ron se dieron cuenta y voltearon
a ver. En la puerta estaba Percy.
Percy mantenía su postura
arrogante, aunque su mirada era triste.
-Y ese que hace aquí?...preguntaron George y Fred al unísono de forma brusca.
-Tranquilos, no olviden que aún es nuestro hermano...dijo Bill de forma pausada.
-Percy hijo mío...dijo la Sra. Weasley en un hilo de voz.
Harry se dio cuenta que el sr Weasley tenia un pálido tono en su cara, pero sus orejas estaban rojas. Dumbledore se abrió paso entre las personas que aún se encontraban en el salón y se dirigió a Percy. Bill y Charly lo siguieron.
-Percy pasa...dijo Dumbledore con tono alegre.
Percy parecía de piedra. Bajo la mirada y dio un paso atrás. El sr Weasley también se acerco a el. Percy levanto la mirada y miro a su padre.
-Padre...yo...no se...es difícil para mi, se que no he hecho bien...pero yo...
El Sr Weasley no dejo que Percy
terminara. Lo abrazo. La Sra. Weasley también lo hizo.
Percy
fue recibido en un abrazo familiar, pero los gemelos y Ron solo le
dieron un apretón de manos.
-Yo sabia que volverías...dijo Ginny mientras lo abrazaba con lagrimas en los ojos.
Harry lo miraba, recordaba la actitud asumida por Percy hacia un año. Recordó la carta que había enviado a Ron diciéndole que el, Harry, era un loco peligroso y un mentiroso. Sin embargo al verlo allí de vuelta con su familia, su rencor se disipo. Dumbledore había hablado de unión y que mejor ejemplo que el que la familia Weasley estaba dando.
Ya de vuelta a la madriguera, la emoción
persistía en el ambiente. Nadie parecía tener sueño.
Los gemelos junto con Charly acomodaron una gran mesa en el patio que
por arte de magia estaba iluminado con grandes farolas y adornado con
hermosas flores. Los habían acompañado Lupin, Tonks,
Moody, Mundungus, y otros miembros de la orden. Dumbledore se había
disculpado diciendo que debía volver a Hogwarts, pero cuando
Harry vio a la Profesora McGonagall salir de la chimenea, supuso que
Dumbledore se había ido para que ella pudiera venir y
felicitar al sr Weasley.
Harry no quería ser aguafiestas,
así que se ausento cuando todos volvían a brindar.
Subió rápidamente hasta la habitación de Ron.
Había sido ya suficiente celebración para el. Se cambio
de ropa, se coloco el pijama y se acostó. Escuchaba a lo lejos
el ruido de la fiesta. El recuerdo de Sirius volvía a su
mente. Seria verdad lo que le había dicho Phineas. Y cuando
seria que Sirius se comunicaría con el. Luego se acordó
de las palabras de Lupin sobre Malfoy. Seguro que estaba planeando
algo. Cuando regresara a Hogwarts vigilaría mejor a Malfoy.
Pronto lo venció el sueño.
