Capitulo Veintinueve.

MALOS ENTENDIDOS

Pronto el cálido sol del verano se abrió paso entre la brisa primaveral. Harry había notado que sus amigos estaban algo molestos con el, por lo que decidió, días después de atravesar el Portal Dimensional, contarles todo lo que le había pasado, incluyendo sus nuevos sentimientos hacia Luna. Y como siempre se involucraron en todas las emociones que brotaban del corazón de Harry.
Los entrenamientos de quidditch se habían intensificado nuevamente, ya que, luego de que Slytherin le ganara a Ravenclaws y este le ganara a Hufflepoffs, Gryffindors se había medido con Ravenclaws, logrando Harry como siempre atrapar la snitch en menos de 15 minutos de partido. Quedando de esa manera Gryffindors en primer lugar y teniendo que jugar la final contra Slytherin. Por todo esto, le quedaba poquísimo tiempo libre a Harry, ya que sus profesores se habían empeñado en que los alumnos del sexto curso debían comenzar a repasar todo lo aprendido y practicar intensamente para los EXTASIS del séptimo curso, por lo que las montañas de tareas se acumulaban día a día. Harry trataba de repartir su tiempo, para poder jugar quidditch, ver a Luna y estar con sus amigos. Por su puesto Hermione lo había ayudado a organizarse, le había ideado un horario, ella era experta en esas cosas.
Una tarde los tres amigos se reunieron a estudiar bajo la sombra del árbol donde siempre solían hacerlo.
Harry estudiaba encantamientos, mientras Hermione repasaba Aritmancia por tercera vez y Ron había comenzado un informe de Pociones cuando se dio cuenta que le falta el libro de consulta. Comenzó a buscar entre sus cosas y las cosas de sus amigos.

-No han visto mi libro de posiciones, juraría que lo traje conmigo...dijo mientras revisaba por cuarta vez su mochila.

-No...contesto Harry uniéndose a la búsqueda del libro.

-No te preocupes Ron. Ten, usa el mío...dijo Hermione entregándole un libro algo grueso de tapas oscuras y letras blancas.

-Gracias amor...dijo Ron tomando el libro.

Harry siguió leyendo sus apuntes de Encantamientos, y levantaba la cabeza cerrando sus ojos, tratando de memorizar lo que leía. Luego de un minuto o quizás dos, escucho un leve sonido, como un gruñido, abrió sus ojos y vio a Ron, cuyas orejas estaban muy rojas. Lo observo mejor y se dio cuenta que tenia entre sus manos dos hojas de pergamino, escritas por ambos lados, con una caligrafía que Harry no conocía, parecía una carta. Miro hacia Hermione para ver si ella se había percatado de la actitud de Ron, pero estaba absorta en su lectura.
Dirigió otra vez su mirada a Ron y con asombro vio que ya su cara había adquirido un intenso color violáceo, como el que solía tener la cara de su tío Vernon cuando le gritaba. Las manos de Ron comenzaron a temblar a medida que avanzaba en la lectura. Luego de terminar de leerla, bajo la carta y clavo sus ojos en Hermione y con una voz ronca y casi inaudible dijo:

-Hermione, me puedes explicar que significa esto?...pregunto Ron sin poder creer lo que había leído.

Hermione levanto su mirada hacia Ron y su rostro palideció al ver la carta que él tenia en sus manos.
Harry comprendió que el asunto era delicado y conociendo el carácter de sus dos amigos se podía poner peligrosa. Inconscientemente se alejo unos centímetros de ellos.

-Ehh... uhm...puedo... explicarte Ron, no...no es... lo...que... que tu crees...dijo Hermione demasiado nerviosa para hablar. No se acordaba que había guardado la carta en ese libro. Se mordió en labio inferior. Como le explicaba a Ron que esa carta no significaba nada. Debió romperla luego de leerla como Ginny le había aconsejado, y no haberla guardado.

-Entonces, estoy esperando tu explicación. Qué hace una carta de Víctor Krum entre tus cosas?...dijo Ron con voz aun más ronca.

Harry no pudo dejar de asombrarse al escuchar quien era el autor de la carta. El pensaba que después de que Ron y Hermione se habían hecho novios, ella había dejado de escribirse con Krum.

-Por qué Víktor Krum te invita a acompañarlo a un torneo de quidditch en Escandinavia, Por qué te dice que extraña tu dulce compañía?...Por qué pregunta que si pueden encontrarse en Hogsmeade a finales de Junio?...Por qué te pide que le escribas con más frecuencia?...Por qué te pregunta si te gusto el brazalete que te dio en Navidad?...Pregunto Ron mientras iba leyendo alternativamente la carta. Alzo sus ojos y los clavo en Hermione.

-Ron esa carta me la envió hace tiempo, no tiene importancia para mi...dijo Hermione atropellando las palabras, tratando de restarle importancia al asunto.

-Crees que soy idiota...grito Ron haciendo que Hermione se estremeciera.. Esta fechada el 14 de febrero de este año...y por cierto te desea un feliz día de San Valentín y te expresa cuanto te ama...que romántico ¿no?.

Ron se paro. Apretó la carta entre sus manos. Como Hermione seguía escribiéndose con ese Krum, si ella era su novia.

-Ron...por Dios...puedo explicarte...dijo Hermione mientras sus ojos se humedecían y algunas lagrimas rodaban por sus mejillas.

Harry no sabia si debía intervenir. Sin embargo si estaba seguro de que no permitiría que Ron le hiciera daño a Hermione, por lo que se paro colocándose al lado de Ron.

-Como pudiste Hermione...como pudiste...dijo Ron respirando con dificultad...por qué te sigues escribiendo con el?...acaso no le has dicho?...claro no le has dicho lo nuestro!...las ultimas palabras las dijo Ron con mucha amargura en su voz.

Harry quería que Hermione hablara, que se defendiera, pero ella solo lloraba en silencio.

-Déjala que se explique, no la atormentes...dijo Harry tomando del brazo a Ron. Pero este se soltó violentamente.

-Pero claro como vas a decirle... Como vas a decirle al más famoso jugador de quidditch del momento, una tontería como esa...para que ¿verdad?...grito Ron aún más fuerte.

-Ya esta Ron, se acabo. No voy a permitir que le grites. Tranquilízate. Con esa actitud no vas a conseguir nada...dijo Harry furioso encarando a Ron.

Ron miro a Harry. Quizás el tenia razón, pero el saber que Hermione seguía carteándose con ese Víktor Krum lo volvía loco.

El sentía que no podía competir contra la fama y el dinero de Krum.
Hermione levanto sus ojos y miro a Ron.

-No le he escrito Ron te lo juro...bueno tal vez una vez, es que no he encontrado la forma de decirle lo nuestro, sin hacerle daño...dijo Hermione entre sollozos.

Harry se dio cuenta que con esas palabras Hermione se había hundido más.

-Somos novios desde hace ocho meses y me vas hacer creer que en todo ese tiempo no has podido decirle a ese Krum lo nuestro...pero claro pobrecito la noticia lo mataría... y a mi... al pobretón e idiota de Ron que lo parta un rayo...claro como yo no puedo llevarte a Escandinavia, ni puedo regalarte brazaletes...unas lagrimas comenzaron a brotar de sus ojos, sentía una puntada en su pecho...espero que te aproveche...dijo Ron arrojándole la carta a Hermione, que estaba hecha una masa arrugada. Los celos habían cegado su razón. Aparto a Harry empujándolo, y se marcho a grandes pasos.

Harry no sabia que hacer. Conocía a Ron. Por experiencia propia sabia que Ron era muy vulnerable y no soportaba sentirse menospreciado. No estaba seguro si el amor que sentía por Hermione seria suficiente para superar su orgullo herido.
Se coloco al lado de Hermione que seguía llorando, con la cara entre las manos. La abrazo. No sabia que decirle para consolarla. Pero verla así le causaba una gran impotencia. El siempre se había preguntado que se sentiría tener una hermana. Y en ese momento, teniendo a Hermione entre sus brazos, tan indefensa, descubrio ese sentimiento.
Varios minutos pasaron en silencio. Solo roto por los sollozos de Hermione. Harry agradecia que nadie hubiera presenciado lo ocurrido.

-Hermione, tranquila. Ron van a entenderte, cuando se calme, podrás hablar con el y todo se arreglara...dijo Harry tratando de consolarla, pero dudando de sus palabras.

-No Harry, tu sabes que eso no va a pasar. Ron jamás me perdonara...dijo Hermione tristemente.

De repente Hermione se paro y comenzó a correr. A Harry esa reacción lo tomo desprevenido y aunque corrió detrás de ella, no logro alcanzarla.
Se regreso al lugar donde habían estado, recogió todos los libros y se fue a la sala común de Gryffindors. Esperaba encontrar allí a Ron, pero no estaba y nadie lo había visto.
Se dirigió con paso seguro a la biblioteca, al entrar en ella, recorrió el lugar con la mirada, y descubrió a Ginny en una esquina sentada junto a Malfoy. Sin dudarlo se acerco a ella.

-Hola Ginny, necesito hablar contigo.

Ginny levanto la mirada. Le extraño la actitud de Harry. Parecía muy nervioso.

-Que pasa Harry?...dijo Ginny levantándose de su asiento.

-Es sobre Hermione...dijo Harry mirando de reojo a Malfoy. No quería hablar delante de él.

Ginny entendió. Miro a Malfoy y le dijo:

-Draco espérame aquí un segundo.

Y ante la cara de disgusto de Malfoy, ella le dio un beso en la frente, antes de seguir a Harry.

Salieron fuera de la biblioteca. Harry le contó rápidamente a Ginny todo lo ocurrido cerca del lago, mientras miraba hacia los lados para asegurarse de que no fueran escuchados.

-Y no se ha donde se fue. Por eso vine a buscarte. Necesito que me ayudes...dijo Harry muy preocupado

-Tranquilo Harry, yo me imagino donde debe estar Hermione. Tu trata de encontrar a Ron. Yo sabia que esa carta traería problemas...dijo Ginny rascándose nerviosamente la cabeza.

-Por qué Hermione siguió escribiéndose con Krum?...pregunto Harry algo molesto.

-No Harry, ella solo le escribió una vez, cuando le devolvió un regalo que el le hizo, pero el se lo volvió a mandar, así que yo le aconseje que no le escribiera más, tal vez así se daría cuenta que ella no quería nada con el...dijo Ginny tratando de explicarle a Harry toda la verdad del asunto con Krum.

-Pero por qué no se lo dijo de frente, por qué no fue sincera con el?...pregunto Harry aun más molesto ante la torpeza de Hermione.

-Que se yo, tal vez no quería hacerle daño...dijo Ginny impaciente ante las acusaciones de Harry...pero de algo si estoy segura y que no te quepa la menor duda, ella ama a mi hermano.

-Eso lo se, pero al que hay que convencer de que eso es así es, a Ron...dijo Harry

Ginny regreso a la biblioteca, para poder explicarle a Malfoy que tendría que dejar de estudiar con el.

-Y que le hizo tu hermanito a la Granger?...dijo Malfoy arrastrado sus palabras, sonriendo con picardía.

-Por favor Draco, trata de ser prudente con este asunto y no te burles de ellos en mi presencia...dijo Ginny metiendo bruscamente sus cosas en la mochila, molesta ante la actitud de Malfoy.

-Esta bien, esta bien, discúlpame. Y no te preocupes, sabes que no me gustan los chismes de pasillo...dijo Malfoy besándola en la mejilla.

Ginny subió hasta el baño de chicas del segundo piso y satisfecha de si misma, se acerco a Hermione que estaba acurrucada en un rincón, sollozando.