NOTA A MIS LECTORES:

Me preguntaba si les gusta el lemmon porque si es así me gustaría añadir uno de alguna de las parejas que se han formado en este teatro al final de la historia, porfa haganmelo saber. Saludos.

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CAPÍTULO 8: UNA CORTESANA EN APRIETOS

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Los santos llevaban ya cuatro horas entre juego y cerveza cuando de pronto en la sala se escucharon una serie de alaridos, hubo un par de explosiones de cosmo, algunas sillas volaron por los aires y varios santos se levantaron de sus lugares y se apiñaron unos sobre otros; todo ese incomprensible caos se debió a una sola cosa

– ¡está haciendo trampa! – gritó Shura a todo lo que daban sus pulmones señalando a Dokho, a su lado estaban Ikki y Kanon haciendo un trío terrible

– ¡él Patriarca también hace trampa! – gritó desde el otro extremo de la sala Seiya y el caos volvió a estallar, obviamente nadie, que no fuera Dokho, se atrevería a desafiar a Shion, lo cual no impidió que lo abuchearan y hubiera protestas generales. Con el antiguo maestro la situación era más critica, los que habían jugado cartas contra él esa noche, es decir prácticamente todos, demandaban que les devolviera su dinero bajo amenaza de lincharlo; el pobre Shiryu aunque hubiera preferido estar en otro lugar tuvo que meterse como buen alumno a defender el honor de su maestro. Ninguno de los anfitriones logró controlar el zafarrancho que se estaba formando y cuando un cínico Deathmask gritó

– ¡ondas infernales! – sólo para ver que efecto producía nada parecía poder evitar la subsecuente pelea... excepto

– ¡basta ya! – tronó la voz del Patriarca. Shion se abrió paso majestuosamente – Dokho abandonará el juego pero no devolverá ningún dinero – claro, él hubiera tenido que regresar su dinero a quienes había timado esa noche también – ustedes tienen la culpa si cayeron bajo sus trampas – todos abrieron la boca casi hasta el piso¡qué forma de administrar justicia! – levanten lo que derribaron, no tolerare peleas en el hogar de nuestros anfitriones – remató pero el inconformismo continuaba, de pronto Misty levantó un brazo y como quién no quiere la cosa dijo

– Argol también hizo trampa – la turba volvió a enardecerse y antes de que el Patriarca pudiera hacer algo los caballeros de Plata junto con Ikki que también había jugado en esa mesa levantaron en vilo a Argol, pusieron en pie las sillas derribadas sin soltar a su victima y salieron a linchar al único tramposo que no era intocable esa noche. Al interior de la casa llegaban los sonidos de la trifulca pero nadie movió ni un dedo y todos volvieron a sus asuntos; tanto Libra y el Antiguo Aries se alejaron de las apuestas; Shiryu y Seiya tuvieron que ocupar sus lugares

– dejaste que te atraparan – murmuró Shion tomando una cerveza

– disculpa pero yo no puedo teletransportar cartas – se justificó Dokho, se quedaron en su lugar durante unos cinco minutos y luego se decidieron, tendrían que buscar otra forma de entretenerse esa noche, Mu ya se había ido, sería de mal gusto ir por Kanon con Aiolia todavía presente a pesar del desaire que todos habían visto, Camus estaba fuera de la lista de posibilidades así que Afrodita y Shun eran su única salida

– voy por Shun – anunció Dokho pues para apoderarse de Piscis habría que separarlo de Deathmask primero

– no – lo interrumpió Shion – tu ya dormiste con él hace poco, me toca a mí – Libra abrió los ojos desmesuradamente ¡al Patriarca le gustaba Andrómeda, sintió que le estrujaban el pecho pero su fachada de cínico desvergonzado se mantenía en su sitio

– ¿por qué no dejamos que él decida? – propuso y le hizo señas a Shun. Éste se encontraba bromeando con Hyoga y Aldebarán, los dejo y se dirigió hacia ellos sin cuidarse de nada, después de todo su hermano seguía afuera re educando a Argol de Perseo

– saludos¿en qué puedo servirles? – dijo, ambos caballeros sonrieron con una idéntica y maligna sonrisa; Dokho explicó rápidamente su situación, querían un amante, para ser precisos a él pero eso de los tríos no era algo que les gustara mucho a ninguno de los dos

– queremos que elijas a uno de nosotros – remató el antiguo maestro; Shun se tomó su tiempo, vio a ambos, lo pensó bien, besó a Dokho y luego a Shion brevemente

– lo elijo a él – decidió señalando al Patriarca y a su viejo amigo no le quedó de otra más que marcharse con cara de pocos amigos y dejarlos solos.

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Hyoga fue testigo mudo de todo eso, no le importó que Aldebarán se diera cuenta de sus sentimientos, casi se le salen las lagrimas cuando Andrómeda besó a sus dos pretendientes

– ¿te sientes mal? – le preguntó Aldebarán

– ¿por qué Shun¿por qué? – murmuró en tono de derrota, a Tauro no le costó nada deducir lo que pasaba entre esos dos, la vida amorosa en el santuario era su punto fuerte y se especializaba en dar consejos, con unas palmaditas en la espalda instó al más melodramático de los de Bronce a hablar; pronto Hyoga estaba apoyado en el hombro de Aldebarán contándole su triste historia de amor – ¿entiendes mi situación? – dijo Hyoga para finalizar su confesión, empinando una botella de cerveza

– pero se puede arreglar, todo se puede arreglar – el Cisne negó y apuró otra cerveza – habla con él, si no te molesta que sea un Santo "complaciente" y lo amas desde hace tanto...

– no, él no me ama a mí, sólo soy su amigo – Aldebarán sabía mucho de la vida de todos y los de Bronce no eran la excepción, estaba al tanto de la forma en que Shun había salvado la vida de Hyoga durante la batalla de las doce casas, en su opinión eso definitivamente significaba algo y así se lo dijo al Cisne – no, sé que lo hizo por su corazón noble, no por algo más – Tauro puso los ojos en blanco ante tanta necedad, le quitó de las manos la botella de cerveza a Hyoga

– deja eso, mira tienes dos opciones, o le haces saber lo que sientes y luchas por él ó permites que las cosas sigan así, él no tiene poderes psíquicos, nunca va a adivinar que lo quieres – mientras hablaban Shion y Shun se pusieron en pie y se alejaron tomados de la mano escaleras arriba; Hyoga suspiró y Aldebarán ya veía venir una serie de frases de autocompasión cuando la puerta se abrió y la bola que había estado fuera linchando a Argol volvió a entrar.

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No sólo Aldebarán y Hyoga habían notado la graciosa huída de Andrómeda, Shiryu y Seiya que habían sido reemplazados en el juego por Kanon y Shura también se dieron cuenta

– se está arriesgando demasiado – dijo Seiya por lo bajo – ahí viene Ikki¿qué le decimos?– Shiryu, el más sensato de los santos pensaba mil excusas a todo lo que su cerebro podía; el Fénix llegó junto a ellos sonriendo como siempre que podía descargar su furia contra alguien

– salud – les dijo a sus amigos tomando una cerveza de las pocas que quedaban – ¿qué les pasa por qué no brindan conmigo? – tanto Pegaso como el Dragón se apresuraron a tomar una cerveza cada uno, tratando de aparentar que todo estaba bien; empezaban a relajarse tras comentar que sin Shion, Dokho y Argol el juego pintaba bien cuando Ikki hizo la temida pregunta

– ¿dónde está Shun?

– salió a tomar aire – inventó Seiya para salir del paso (no, las excusas brillantes no son su fuerte)

– yo estaba en la puerta con los de plata y no lo vi salir

– está tomando aire en una ventana – quiso corregir Shiryu

– ¿cuál de todas?

– el baño

– la cocina – dijeron a la vez, Ikki alzó la ceja, tras pensarlo unos instantes que para sus dos amigos fueron una eternidad comprendió lo que ocurría, finalmente la sospechosa conducta de su hermano y sus misteriosas desapariciones tenían sentido para él fue como si la última pieza del rompecabezas cayera en su sitio aclarando todo; su hermano estaba con alguien y sólo había un sitio de la casa dónde se podría tener privacidad.

Sin previo aviso Ikki salió corriendo rumbo a las escaleras; Seiya y Shiryu salieron tras él, Hyoga se les unió y siguieron al Fénix tratando de evitar la inminente desgracia, sin embargo no pudieron impedir que Ikki alcanzará primero que ellos la puerta de la habitación de su hermano y la abriera.

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Shun estaba ocupado besando el bien formado torso del Patriarca, abstraído en su tarea no midió el tiempo transcurrido, últimamente había subestimado a su hermano, estaba al tanto de ello pero con Shaka cerca Ikki bajaba toda guardia, el problema radicaba en que Shaka se había marchado con Mu y Shun había olvidado eso.

Había elegido a Shion porqué Dokho era un tanto brusco cuando estaban juntos y cuando era tierno a veces le parecía que la mente de Libra divagaba como pretendiendo que estaba con alguien más, en una ocasión Shun se atrevió a preguntarle porque le gustaba estar con él, "porqué me encanta tu cabellera verde" fue la significativa respuesta, así que, sin que el mismísimo Dokho lo supiera había caído en la lista de hombres prohibidos de Andrómeda junto con Saga, Milo y Shaka. Shion le zafó el pantalón a su amante de esa noche trayéndolo de vuelta a la realidad, lo atrajo hacía si para besarlo y en ese momento fue que la puerta de la habitación se abrió y ambos escucharon un grito

– ¡qué demonios está pasando aquí? – lo siguiente que Shun supo fue que su hermano se abalanzó sobre ellos y los separó, Shion que aún estaba vestido se puso fuera del alcance de Ikki así que a este sólo le quedó sacudir con fuerza a su hermano el cual parecía estar en shock mientras le gritaba toda cuanta frase hiriente se le ocurrió – ¡cómo pudiste¡en nuestra propia casa¿acaso no tienes vergüenza? – a sus compañeros de bronce les costó mucho hacer que el Fénix soltara a Shun, los tres cayeron sobre su amigo y lograron someterlo, mientras Andrómeda se quedaba en su sitio sin hacer ademanes siquiera por cubrir su cuerpo semidesnudo.

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En la planta baja de la casa se escucharon los gritos de Ikki como en sonido estereo, no había que ser un genio para adivinar que estaba pasando en la parte de arriba y pronto todos se encontraron apretujados en el pasillo para ver que ocurría; Dokho se abrió paso hasta el frente y tomando de un brazo a Shion lo sacó de la habitación, había una gran confusión de gritos y comentarios

– suéltenme – les pedía el Fénix a Pegaso, Dragón y Cisne que continuaban aplastándolo contra el suelo

– huye Shun – le gritaba Afrodita desde afuera de la recámara pero el aludido seguía petrificado en su sitio

– déjenme ir, tengo que hablar con mi hermano – Ikki trataba de sonar tranquilo y finalmente logró convencer a sus compañeros de soltarlo, en cuanto se puso en pie tomó el brazo de Seiya que estaba más cerca – ahora lárguense este es un asunto privado – todos a su alrededor, tanto dentro como fuera de la habitación se negaron en bloque – cuarta ley de Shion – dijo de pronto Ikki – ahora ¡fuera! – después de echar a los curiosos y a sus amigos cerró la puerta con llave y se volvió a encarar a su hermanito.

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Afuera el tumulto se dispersaba, la reunión fue dada por terminada y cada quién se fue a su propia casa dejando a los anfitriones recogiendo el desastre y rezando para que Shun saliera con vida de esa; tras recoger los envases de cerveza vacíos Hyoga se dirigió a la parte de arriba

– espera – lo interceptó Shiryu – no creo que puedas hacer nada, además ya escuchaste a Ikki – el Cisne se zafó del agarre de su amigo y continuó su camino

– no voy a intervenir sólo estaré cerca por si las dudas – Dragón lo dejo aunque eso significaba más trabajo para él y Seiya.

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– Exijo una explicación – dijo Ikki – ¿hay algo entre el Patriarca y tú?

– no – respondió lacónicamente Shun; su hermano lo miró severamente, de pronto recordó la fiesta de togas

– ¿es por Saga?– Shun negó de nuevo, ya no podía fingir más pero ¿cómo le iba a explicar a Ikki que se acostaba con medio santuario?

– entre Saga y yo no hay nada – la memoria de Ikki trabajaba a todo lo que daba y una serie de recuerdos, insignificantes aparentemente, afloraron, estaba por interrogar a su hermano acerca de Deathmask, cuando recordó a Shun en actitud misteriosa con Dokho, y con Aiolia y con Shura

– eres una cortesana – musitó, la revelación no había llegado como Shun temía, con gritos y unos cuantos puños fantasma, en vez de ello su hermano lo había dicho con voz queda y se había derrumbado en una esquina de la cama

– yo... – Andrómeda buscaba algo que decir

– ¿por qué lo haces¿por qué te acuestas con ellos? – la voz del Fénix sonaba decepcionada

– lo lamento – Shun rompió a llorar, no quería que su hermano lo despreciara y no tenía ninguna excusa, él era así porqué si, porque seducir era un reto para él, porque lo buscaban por ser hermoso y porque era un modo de no estar solo, sin embargo nada de eso sonaba válido para la delicada situación

– te has corrompido, por todo el Santuario seguro se sabe que eres un cualquiera, que duermes con quién se pare enfrente y te hable bonito – como su hermano no se defendía el temperamento de Ikki comenzó a manifestarse de nuevo – ¡di algo, o tú último pedazo de dignidad se fue en brazos de Shion

– déjame por favor – sollozó Andrómeda – tú no entiendes, por eso no te dije nada, déjame solo – Ikki hizo ademán de abalanzarse nuevamente contra su pequeño hermano pero en vez de ello estalló

– eres una basura¿crees que así te ganarás el cariño de alguien¿qué alguien podrá amarte? – gritó

– yo puedo – dijo una voz ajena a esa tormenta, ambos hermanos giraron la cabeza hacia la puerta con tal brusquedad que casi se rompen el cuello, en el dintel estaba Hyoga, quien mostrando un valor insospechado había decidido intervenir finalmente – yo amo a Shun tal como es – el Cisne se encogió y apretó la mandíbula listo para recibir un golpe pero tanto su amado como su bestial hermano estaban muy asombrados por la declaración de Hyoga como para moverse, tomó eso como un indicativo de que podía continuar, pasó entre Ikki y Shun y tomó los hombros de Andrómeda – no puedo comprender porque hace lo que hace pero puedo pasarlo por alto por su noble corazón – miró directo a los ojos del Fénix para rematar diciendo – tú que dices quererlo tanto y que eres su única familia no deberías juzgarlo – los ojos de Ikki llamearon, y los dos chicos ante él se encogieron a la vez, salió de la habitación dando un portazo, lo escucharon rezongar en la planta baja y luego otro portazo desde la puerta principal. Así que quedaron ellos dos a solas y de pronto Hyoga sintió que preferiría seguir encarando a Ikki que a Shun, el cual se volvió hacia él enternecido

– Hyoga, gracias – Andrómeda aún no podía creer que Hyoga, su querido Hyoga estuviera enamorado de él y hubiera declarado su amor, pesé a las indirectas que le lanzaba el Siberiano siempre se escabullía, lo ignoraba, evitaba quedarse a solas con él y se hacía el occiso cuando algún otro Santo se acercaba a cortejarlo, por todo eso Shun había creído que el Cisne no tenía ninguna intención en su persona o peor aún, que no le gustaban los hombres, por supuesto que disponía de múltiples trucos sucios para averiguar eso, como los que había empleado con Saga pero usarlos con quien realmente le importaba, nunca

– bueno, me voy a ayudar a Shiryu y Seiya – dijo el Siberiano tras un silencio incomodo

– espera – dijo Shun, que iba a aclarar las cosas de una buena vez así tuviera que matar a Hyoga en el proceso – eso que dijiste hace un momento

– ¿lo de que Ikki no debería juzgarte?

– no, lo otro

– ¿lo de tu noble corazón?

– Hyoga, basta, me refiero a lo primero que dijiste – el Cisne tragó saliva con dificultad, las palabras de Aldebarán le vinieron a la mente – ¿eso es cierto? – inquirió Andrómeda en tono anhelante

– ¿te refieres a lo de que yo te amo, es verdad

– no me refiero a eso tampoco – Hyoga arqueó las cejas – sino a lo de que tú puedes amarme a pesar de todo – el Cisne asintió y Shun se lanzó a sus brazos, no dijeron más ya se habían dicho lo que más importaba.

Seiya y Shiryu los vieron bajar juntos unos minutos después, tomados de la mano y sonrientes; Hyoga les anunció orgulloso que ya eran pareja y para probarlo besó a Shun, los cuatro destaparon las últimas cervezas sobrevivientes para brindar por la felicidad del nuevo noviazgo, sólo faltaba que Ikki (escalofrío) lo aceptara.

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Continuará

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#17: en serio si es extraño, supongo que es por los gemelos de la saga de los androides de DBZ, espero que este capi también te haya gustado; de las demás parejas pues ya verás ya verás, y pues aún no he tomado una decisión acerca de Shaka. Ciau.

Ayane: Saga no lo hizo adrede aunque si se toma muy a pecho las cosas, como vez esta actualización llego rápido : D espero te guste.

Annid: aqui tienes la conclusión que me pediste, espero te guste como quedaron esos dos, no me había olvidado de ellos sólo que cada quien su tiempo, jejeje.

Aquarius No Kari: hola Mary no te preocupes no me confundí con tu nick, y pues el fic está fluyendo por sí solo aunque admito que este capítulo me costó mucho redactarlo. Tienes razón con lo de la escencia de la risa, la cosa se está poniendo muy seria y cursi y eso no me gusta del todo pero ya veré que se me ocurre para meter más comedia (claro que Saga no se presta para los chistes asi que tendré que echar mano de otros).

Vibeke: claro que Kanito es perfecto, jejeje, y bueno en el siguiente capi se arreglan las cosas entre ellos espero te gusta como quedarán. Humm, Saga y Shaka peleando por Mu, apuesto a que Shion no lo permitiría (porque destruirían el santuario en el proceso) pero veré que se puede hacer al respecto.

Amy no gemini: yo tampoco sé como seguirá este mogollón pero de que lo continuaré lo continuaré.

luna-wood: tienes razón a Mu no puedo ayudarlo ni yo (y eso si que es grave), gracias por tu review, me hizo sonreir mucho, especialmente lo de Shaka, jejeje.

Shadir: nadie podría con Dohko y Shion en cuestión de trampas, sin duda alguna, y pues la sutileza no es el punto fuerte de Kanito que por poco sale de la greña con Camus. Nos vemos en el siguiente capi.