AVENTURAS Y DESVENTURAS EN LA PERLA NEGRA
Esta historia esta totalmente inventada, los personajes Orión, Nezha y Caedes son © de sus autores, si quieres usarlos ponte en contacto con nosotros. El resto de los personajes son © de su distribuidora, no hagáis mal uso de ellos... cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.
Si queréis saber más, apuntaros a la lista de SLAYERSLOVE en Yahoo... ¡disfrutad de la paranoia!
Orión dejo a los ahora
muy acaramelados (o eso le pareció a ella) Caedes y Orlando en la cubierta, se
incorporó y miró con cara de espanto hacia el timón, sus pupilas se
convirtieron en un ínfimo punto negro mientras veía una autentica bola de paja
del desierto cruzar la superficie del barco.
Cuando Sparrow salió de los camarotes, Orión bajó a tal velocidad que
levantó viento, no podía creerlo, no les quedaba tripulación. Cuando subió de
nuevo a la cubierta, se acerco al otro capitán decididamente y le metió una
mano en la chaqueta (eyyy, no penséis mal) para sacar
el catalejo que tenía, todo esto sin dejar de mirarle como si no le viera, y
quitándole con la otra mano, una florecilla que se le
había quedado en el pelo.
Tras esto, se dispuso a mirar en todas direcciones, hasta que al fin,
encontró un par de botes, que parecían pateras de lo llenos que iban de gente
(siento el humor negro).
- Allí están -dijo con júbilo la maga
- Cobardes -dijo entre dientes el otro capitán
- Yo creo que no están tan lejos como para que no les alcancemos -dijo
Legolas, Caedes ya se encontraba más... mejor
- Pero... papá, ya deberían saber lo grillado que estás... yo me he dado
cuenta y no llevo aquí más que unos días...
- Ags, no le llames así, ¡¡no me cabe en la
cabeza!! -Exclamó Orión con las manos en la cabeza –que por cierto... ¿eso
quiere decir que tú eres un demonio?, Jack, ¡antes eras humano!
Jack miro a Orión y se llevo un dedo a la cabeza queriendo decir "se ha vuelto majara"
- ¿Yo? ¿¿demonio?? ¡qué va, qué va! sólo que... tuve un pequeño lío con su madre... le robé algunas cosillas... la Perla Negra... tuve que salir corriendo de allí, ya que quiso matarme (posiblemente cuando se enteró de que estaba preñada) y... bueno...
- Creo que ya tengo suficiente por hoy... -Replicó la hechicera que estaba visiblemente afectada por lo ocurrido- me voy un rato a... a mi camarote...
Dicho esto se fue dando tumbos. Caedes la miró preocupada y se fue tras ella, para ver si podía hacer algo. Mientras Jack y Orlando se quedaron en cubierta a solas; los dos en silencio...
- Bueno... -el elfo comenzó para romper el hielo- y... el timón... ¿quién lo lleva?
- Le he puesto el automático, es lo más práctico para cuando se quiere coger una borrachera, así evitas muchos malos ratos...
- Ajá...
De nuevo se hizo el silencio, el elfo parecía bastante incómodo por algo y Jack empezó a mirarlo con cara de mala ostia... parecía que su recién descubierta paternidad le había hecho ver las cosas desde otra perspectiva.
- Parece que te estás empezando a llevar mejor con la niña... ¿no?
- Sí... -el elfo se sonrojó- creo que me gust...
*ZAAAAAAAAASSSSSSSSSS~~~~~~~~~ ¡CLING!*
- Pero... Jack, amigo... ¿por qué me has tirado ese cuchillo? ¡¡¡casi me da!!!
Jack no atendía a razones, empezó a perseguirlo por todo el barco, lanzándole todo lo que pillaba a su paso mientras le gritaba que no se le ocurriera acercarse a su "pequeña".
Mientras, en el camarote, Orión se desahogaba de sus penurias con Caedes.
- ¡Mírame! sin tripulación y teniendo que aguantar las majaronerías de esos críos -dijo refiriéndose a Jack y el elfo- ¡me van a dar jaqueca con tanto escándalo que están montando!
- Tómate esta pastilla y verás como se te pasa... por cierto, ¡a ti te gusta mi pa...! digoooo... Jack, ¿verdad?
Orión se puso colorada como un tomate...
Mientras tanto, en algún lugar del mar...
- ¡¡Grmfntjgblx!! ¡¡¡Por Kinneas Fog!!! ¡¡Maldita Caedes!! ¡¡Mira que dejarme aquí tirada!! ¡¡Estoy rodeada de AGUA y de PECES!! ¡¡¡¡¡¡¡y NO me gusta ninguno de los dos!!!!!!!
Refunfuñando, Nezha uso el levitation y subió arriba y arriba, baaaamba bamba... digo... se elevó mucho... y observó con asombro unos botes con tripulación que huía de un barco bastante grande. Con un gran signo de interrogación y otro de admiración flotándole sobre la cabeza, murmuró...
- Jujuju... venga, ¡a divertirse!
Y comenzó a conjurar un demonio inferior para que atacara los botes.
De vuelta a la Perla Negra...
- Erm... ¿a qué te refieres?... ¿Jack?, ¿Jack Sparrow? ¿YO?, estem.... ¿por qué lo preguntas? -Orión en aquel momento hubiera deseado no tener sangre, para que ésta no pudiera habérsele agolpado de esa manera en las mejillas.
- Jisjisjis, no, por nada...
Y en la cubierta... (cuantas acciones paralelas, mecacho...)
- Jode, Jack, decídete, ¡¡¡que al principio querías que me gustara!!!
- ¡¡¡Pero al principio no era mi hija!!!
- Sí que lo era, ¡otra cosa es que tu seas un abandonahogares!
La respuesta que siguió a esa afirmación fue un amasijo de letras sin sentido entre lo que se pudo entender algo como: "muere". Dado el esperanzador comentario, Legolas no pudo hacer otra cosa que descender a los camarotes y tirarse en plancha detrás de Caedes y Orión, que ahora miraban perplejas. Acto seguido Jack asomo por la puerta y Legolas se aferro a las piernas de Caedes
- ¿Ves lo que te decía, Caedes?, ¡parecen críos!, ¿queréis dejar de hacer el imbécil?- Dicho esto, les sacó de la habitación a empujones diciéndoles que arreglaran sus disputas de una manera adulta y que no estropearan su amistad por una nimiedad etc, etc...
- Por cierto, Caedes, una pregunta que me viene así... entonces tú no eres un mazoku... solo eres medio-mazoku... ¿no? ¿¿y eso como se come??
Caedes buscaba las palabras para explicarle la situación a la capitana, no era fácil admitir sus limitaciones como medio demonio... y los motivos por los que su madre la echó de casa y la mandó a vivir con su abuela cuando era muy pequeña...
- Pues bien... yo es que... -Orión miraba a la cada vez más avergonzada Caedes. En su cara había una expresión que no le había visto en ninguno de los días que llevaba en el barco...- yo... no tengo poderes.
Terminó de decir el demonio en un susurro. Orión abrió los ojos como platos y tras un largo silencio no pudo aguantar más y estalló en una sonora carcajada.
- JAJAJAJJAJAJA ¡imposible! ¿¿¿la hija de Xellas Metallium... nieta de L-Sama... no es capaz ni de hacer levitation???
- No tiene gracia... -Replicaba una Caedes bastante ofuscada y avergonzada- es por eso que mi madre no me aprecia demasiado... y por lo que me largó con la abuela para que me criase ella...
- Bueno, seguro que fue por tu bien. -Respondía Orión que ya no se reía tanto tratando de suavizar el asunto- por cierto, ¿quién es la Nezha que nombrabas antes?
- Es... mi mejor amiga *sonrisa*
Mientras
Caedes pronunciaba estas últimas palabras, se vió en
la lejanía (¡aunque no excesivamente lejana!) una gran explosión.
Algunos de los barcos en los que huían sus marineros estaban siendo destruidos
por algo con pintas de mazoku inferior.
Orión gruñó, agarró con fuerza el catalejo y observó lo que estaba ocurriendo.
El mazoku se ensañaba con las pequeñas y frágiles barquitas, mientras los
marineros desesperados trataban de huir.
- ¡¡Vamos, atajo de estúpidos!! ¡¡¡¡Demostradme que tenéis sangre en vez de horchata y vamos allí!!!! ¡¡¡Preparad los cañones!!!
Mientras esto sucedía, Nezha fijó su atención en las velas negras y la bandera pirata del barco del que huía la tripulación.
- ¡Ju!
Con todos distraídos, pasó al plano astral y reapareció en la cubierta del barco... Pero nadie se fijó en ella... Y trepó hacia el puesto de vigía, para ver las cosas desde lo alto.
- Vaya... ¡este barco corre que se las pela...!
- Este... capitana -Legolas parecía no querer decirle
algo a la
co-capitana- Es que... ¡la tripulación
esta en esos botes!, y no
podemos estar manejando las velas, el timón y preparar los cañones a la
vez...
- ¿Y tú vienes aquí a contármelo como si no lo
supiera?, un barco se
puede manejar entre cuatro personas ¡y os lo voy a demostrar! -Bramó la
hechicera mientras se dirigía a prender una antorcha y bajar por las escaleras
hacia los cañones.
- ¡Por Ilúvatar!, Jack le está pegando la locura
-Dijo el elfo a
Caedes, la cual, después de mostrar su total acuerdo con Legolas, miró
de nuevo hacia los botes... un demonio menor... ¿quién podría haber
sido? y el caso es que le sonaba esa forma de actuar...
De pronto, Jack la sacó de su ensimismamiento corroborando las últimas
palabras que la mazoku tuviera con el elfo
- ¡Ahí, eso es lo que busco en mi tripulación! Orión tiene razón, ¡a sus
puestos!
Después de que el capitán se encaramara al timón, se escuchó el sonido
de un cañón
- ¡¡¡¡A mi tripulación sólo la puedo matar por desertores yo!!!! -La bala
había dado cerca de uno de los botes y éste ahora zozobraba
precariamente- Un momento... yo soy maga y tal -dijo Orión. Parecía que el
momento de locura fue transitorio al fin y al cabo...
Nezha
escuchaba sonriendo las peleas y los malos humos que se gastaban por allí
abajo. De pronto, oyó una voz conocida:
- ¡¡Una princesa no debe ensuciarse las manos con la pólvora!! Legolas cariiiiiiiño, ¿por qué no lo haces tú?
- ¡¿Caedes?! -Dijo Nezha, abriendo mucho los ojos.
Dudó unos instantes, pero finalmente le lanzó un conjuro a su subordinado y lo
hizo desaparecer. Todo quedó en calma.
Bajó de la torre de un salto y agarró a Caedes por el cuello, asustándola:
- ¿Por qué, maldita sea, por qué me dejaste tirada? -le dijo con cara de loca.
Orión se preparó para atacar a la "recién" llegada, a la que
confundió con el mazoku menor que estaba atacando momentos antes.
- Ne...ne..
nez... yo... yo...
Caedes
apenas podía hablar del miedo que atenazaba su garganta... Entonces, Nezha la
soltó y empezó a reírse de forma descontrolada.
- Jajajajajaja, ¡tendrías que haber visto tu cara! ¡¡Jaaajajajajajaaaa!! Te he asustado, ¡¡juas!!
- Caedes, ¿conoces a esta chica? -Preguntó Orión.
-
Si, es Nezha, la mazoku de la que os hablé antes, mi mejor amiga.
- ¿Oh si? Pero aún así, ella se subió al barco y a mí
me dejó tirada en el agua. Esto merece una venganza.
-
¿No te has vengado ya bastante tratando de cargarte a nuestros encantadores
desertores? -Preguntó el capitanísimo Jack Sparrow.
- Eso... No sabía que erais vosotros. Os merecéis algo más fuerte... jejejeje...
Nezha carraspeó y se aplicó un conjuro amplificador de voz. Entonces, comenzó a
cantar...
- ROBIN HOOD Y LITTLE JOHN IBAN POR EL BOSQUE, QUE ALEGRÍA HERMANOS ¡OH! ¡¡¡QUE
DÍA TAN FELIIIIZ!!! ROBIN HOOD Y LITTLE JOHN IBAN POR EL BOOOSQUEEE, QUE
ALEGRÍA HERMANOS ¡¡¡¡¡¡OOHH!!!!!!... ¡¡¡¡¡¡¡QUE DÍA TAN FELIIIIIIIZ!!!!!!!
Poco después Jack, Orión y Orlando estaban tirados por los suelos echando espuma por la boca. Caedes, que ya conocía las artimañas de su amiga, tenía preparado unos tapones para no tener que escucharla, así que se limitó a acercarse a su amiga y ponerse a hacerle los coros. Cuando (por fin!) se quedaron roncas Caedes le explicó lo sucedido...
- Ya sé que no es excusa, Nez... ¡¡¡¡pero tú también huiste cuando la roca empezó a gruñir!!!!
- Pero es que la roca daba miedo...
- ¿En paz...?
La mazoku pareció dudar unos instantes, pero finalmente le guiñó y le dio unas palmaditas en el pelo.
- Bueno, peke, ¿te las has podido apañar sin mí?
- Pues... tengo una mascota nueva -dijo risueña la "mazoku a medias" señalando al elfo que aún se estaba recuperando- he conocido a una hechicera muy simpática -Orión tenía la cara verde y estaba en shock- y... ¡¡¡Nez!!! ¡he encontrado a mi padre!
La mazoku abrió los ojos de par en par, por eliminación sólo quedaba Jack Sparrow...
- Si es que no se te puede dejar sola... por cierto, creo que TENEMOS que hablar sobre el asunto de la mascota...
Orión, ya repuesta, llamó a Jack y al elfo.
- Tenemos que hablar sobre ese mazoku... Nezha... creo que es más de lo que parece...
Jack no dijo nada, la cara del mazoku le era muy familiar. El elfo también parecía preocupado...
- ¡Desde que está aquí ese mazoku, Caedes no me hace caso!
- Tú, elfo, ¡que sólo lleva un par de horas! -Respondió Orión.
- ¡Pues por eso mismo! lleva dos horas sin querer hacerme nada
- Oye gilipollas, ¿a qué te refieres? ¡no pienso tolerar oírte decir ignominias sobre mi hija!
Mientras el elfo y el capitán volvían a ponerse a discutir, Orión siguió a las dos mazoku que habían ido a la bodega. Tenía que enterarse a toda costa de quién era... así que formuló un conjuro y acto seguido apareció una sombra...
- ¿Me llamabais, señora?
- Quiero que reúnas toda la información que exista sobre ese mazoku, sobre Nezha.
Después de dar las ordenes a
la sombra, ésta hizo una reverencia y se alejó entre las..
ídem. Orión la vio alejarse, pero después se dio la
vuelta para encontrarse al elfo y al co-capitán de la
perla negra tirándose del pelo.
- Ejem... ¿porque no me hacéis caso por una vez en
vuestra vida? Es tu hija, o al menos eso decís.. aunque yo aun pienso que todo esto es un malentendido o una
treta - Le dijo a Jack Sparrow mirándole de reojo.
Después se giro hasta encarar a Legolas - Y en cuanto a ti... bueno, aún no sé
lo que sois el uno del otro, pero el caso es que deberían interesarte sus
compañías...
- Según parece, te las arreglas muy bien tu sola para averiguarlo -
Interrumpió Jack
- Sólo tomo medidas preventivas, yo soy túnica roja, busco el equilibrio... y
mi propia seguridad, claro.
- Oye, que es MI hija
- No es de tu hija de quien hablo...
-
Caedes... Tu nueva mascota... Hum.
Nezha miró a izquierda y a derecha, se removió en el asiento. Algo hacía que se
sintiera intranquila.
- Ooooohh, ¿no es moníííísimo?
- Sí, sí, pero no me refería a eso... Parece... elfo... o algo parecido... ¿Es
seguro que estés con él? Ya sabes a qué me refiero...
- Hum... No te preocupes, sé cuidarme –respondió
mientras le guiñaba.
- Está bien...
La sombra se escurrió bajo la mesa para poder escuchar mejor y tener una buena
vista de las botas claveteadas de Nezha. Ésta, a su vez, se removió en la silla
y sintió algo de frío en los pies, que tenía apoyados en la silla. De golpe,
los bajó al suelo y clavó a la sombra en él.
- ¡¡¡IIHHH!!!
- ¡Nezha! ¿Por qué gritas?
- Yo no he gritado, ¡pensaba que habías sido tú!
- Entonces... entonces... ¡¡¡¿habrá sido un
fantasma?!!!
- Mujer... estamos en la perla negra... tampoco debería extrañarte tanto... Hum... ¡Interesante! Venga Caedes, vamos fuera, no me he presentado formalmente... y me hace ilusión *malefic grin*
Salieron del
camarote y se dirigieron a cubierta. Nezha pasó al plano astral y apareció en
la torre de vigía.
- Bueno, pues... Papi, elfo y Orión... ésta es mi amiga...
Mientras Caedes decía esto, Nezha saltó y emprendió un triple salto mortal con
tirabuzón, y cayó dándole la espalda a los presentes.
- Ejem...
Se giró haciendo volar la capa corta que llevaba, y (por fin) quedó de frente,
aunque estaba un poco liada en la capa, que era corta pero ahora la envolvía de
pies a cabeza...
- Ejem elevado al cuadrado... Yo soy... Nezha... Una
dulce y encantadora sacerdotisa del templo de los dragones...
- Nezha, no cuela, saben que yo soy medio demonio.
- ¡Leches! ¡¡Podrías haberlo dicho antes y me ahorro paridas!! –replicó dando un suspiro- Entonces, me presento normal...
soy Nezha, demonio, discípula del General y Sacerdote de Zellas
Metallium, Jefa de las Bestias... Y ya que estamos en
un barco pirata, me pondré un atuendo más acorde con la situación.
Consiguió desembarazarse de la capa mostrando que bajo ella ya no había el
atuendo de guerrera de antes, sino algo parecido a un traje de pirata... y
sacó un sombrero enorme de debajo de su brazo.
- Nezha, ¿desde cuando haces tantos trucos? ¿Has estado estudiando prestidigitación?
¡Como mola! ¡Saca una paloma del sombrero, anda!
- Caedes, eso no se inventará hasta dentro de algunos años así que ten
paciencia... Capitán Jack Sparrow... ¿me reconoce ahora?
Sparrow la miró de arriba abajo y se acercó caminando de esa forma suya
tan... Tan.
- ¡Hooombre señorita Smiiiith!
¡¡¡Tenía ganas de volveeeer a verla!!!
- Jujuju...
Mientras, Caedes miraba al elfo con cara de "no, si yo tampoco sabía nada",
y Orión buscaba la manera de despegar a la Sombra del suelo...
- ¿Ein? -Fue la ocurrente
respuesta de la maga a la aparición de la
mazoku- Un momento -dijo cuando consiguió recuperar la compostura.- ¿Os
conocéis?
- Por supuesto -Jack Sparrow volvió a girarse hacia donde se encontraba la
demonio- No has cambiado nada, ¡estás idéntica!
- Como que es un demonio, imbécil -Susurró Orión.
- Estas celoooosaaaa -Le canturreo Caedes al oído
- Mentira, es más, me voy abajo... No, un momento, a ver tú... Nezha,
el sacerdote de las bestias se llama Zeros Metallium, ¿qué pasa, le has cogido el relevo?
La respuesta de Nezha fue interrumpida por un quejido proveniente de
abajo, Orión se disculpó y bajó rápidamente por las escaleras.
- Mardita sombra, la próxima vez traeré un
fantasma, que por lo menos no se quedan pegados al suelo.
- *lloriqueo de perro*
- No me llores, ser inmundo, has hecho tu trabajo muy mal
- *Más lloriqueo de perro*
A lo cual se sumó el sonido de botas bajando la escalera y la voz de
Jack Sparrow canturreando algo:
- ¡Hay que celebrar este reencuentro!
- Mierda -Dijo Orión, y acto seguido metió debajo de la cama la sombra
y salió de la estancia. De frente se encontró a toda la comitiva, y
como la mejor defensa es siempre un buen ataque, la reacción de la
hechicera no se hizo esperar.
- Bien, Nezha, ¿podrías contestar a la pregunta?, te he dejado hasta un
rato para pensarlo.
Nezha le respondió con una sonrisa, se acomodó en una silla y se dispuso a resolver las dudas de la hechicera...
- Está bien claro... como todos sabréis, el Metallium Imperiae cayó en decadencia desde la desaparición de Xellas... aunque Ucchan hizo lo que pudo todo se descontroló. Los demonios están descontrolados, la influencia del MI es mínima, ¿o no has notado que ya no se siente su presencia?
- Sí, es cierto, pero eso no explica por qué tú ocupas ahora el puesto de tu Maestro -respondió Orión.
- Sí, bueno, eso es porque mi Maestro, viendo la situación, decidió ir a buscar a Xellass para que arreglara las cosas. Y me pidió que le sustituyera en su ausencia.
Dicho esto sacó un documento en el que se verificaba lo que había contado.
- Sí que tienen que ir mal las cosas para que Xellos haya tomado la decisión de cederle su puesto a alguien... como tú. -Nezha se echó a reír ante la atónita Orión- pero si lo estás sustituyendo, ¿qué haces aquí? ¿no deberías estar atendiendo asuntos más importantes?
- Bueno... oye, Caedes, ¿por qué no subes a cubierta y me traes una cosa que me he dejado por ahí encima...?
- ¡¡¡Enseguida vo~~~~yyy!!!
Caedes, risueña, salió del camarote donde estaban todos a buscar lo que le había pedido. Jack y Orión se dirigieron una mirada de incomprensibilidad.
- Mmm... ¿es cosa mía o se ha ido sin saber lo que tiene que buscar? -preguntó Orión con una gota en la frente-
- Sí, bueno, tú déjala, así tardará más rato en bajar... -respondió Nezha- En fin, estoy aquí porque la misión que tenía ahora mi amo era la de cuidar de Caedes... y como sabía que soy amiga suya, pues me lo pidió a mí.
- ¿Cuidarla? ¿cuidarla de qué? ¿por qué? -preguntó Jack interesado- ya no es una niña, ¿no? en fin, he hecho cálculos y debe tener unos... ehhh... 18 o 19 años.
La mazoku no dijo nada, de repente los ojos le cambiaron de color. Se levantó corriendo de la silla y subió a cubierta como una exhalación. Acto seguido la siguieron los demás, cuando llegaron a cubierta lo que vieron los dejó sorprendidos...
- ¡Uwaaaaawwwwww!
Fue la profunda afirmación del capitán Sparrow al ver los grandes nubarrones de
tormenta que se acercaban...
- Vale, organicémonos, si hay tormenta y estando como estamos sin tripulación
en este barco tan grande, nos puede pasar cualquier cosa... -dijo Orión, aunque
nadie le estaba prestando atención...
- ¡¡Muy bien atajo de estúpidos!! ¡¡Arriad las velas!! ¡¡cuidado
con los juanetes!!
- Papi, ¿tú también tienes juanetes? ¡y yo que pensaba
que sólo te salían por llevar mucho tiempo zapatos de tacón!
- Caedes, que se refiere a una cosa que hay en el barco que...
- Venga, ¡¡vale ya leches!!! o os ponéis a currar o
algo, ¡¡pero estar ahí de charla sin hacer nada no!!
Orión parecía histérica... Nerviosa... Aterrorizada...
- ¡¡Quiero más frases!!
Gritó Legolas, pero en medio del estruendo de los primeros truenos, nadie le
oyó y sus palabras se perdieron por siempre en el olvido...
Entonces, la tormenta comenzó a descargar. Nezha se acercó un segundo al timón,
en el que se encontraban Jack Sparrow y Orión, y le susurró algo a Sparrow, que
sonrió pícaramente. Luego, volvió al lado de Caedes...
- ¿Que le has dicho a mi papi?
- Oh... jujuju... ya te lo
diré... luego.
Caedes se ató al elfo con la cadena a la muñeca, para que no pudiese alejarse
demasiado, y de paso se abrazó a él... Orión se agarró al timón... Sparrow se
puso a cantar algo sobre ron y piratas... y Nezha no hizo absolutamente nada.
Entonces, tres olas gigantes
se levantaron en contra de la perla Negra. La primera arrastró fuera del barco
a Caedes junto con el elfo. La segunda, mandó a Orión a freír espárragos (no
literalmente). La tercera, hizo que Sparrow se despegara del timón y Nezha se
agarrara al mástil.
Horas después, la tormenta había pasado. Nezha mostró una sonrisa maléfica en
su cara y dijo:
- Bueno amigo... por fin solos...
- ¡Ehh, un momento! Tenemos que buscar a mi querida
tripulación, no podemos irnos sin ellos! ¡¡Menos sin
mi hija!!
- Jujuju... ¿Ya no te riges por el código pirata?
"Si se quedan atrás, hay que dejarlos atrás", ¿no era así?
- Ehhh...
- Mira que abandonarme en una isla ¬¬U
- Eras joven e inexperta, ¡¡y aún estabas estudiando con tu maestro!! Además,
llevar mujeres en un barco trae mala suerte.
- Ahora llevabas dos -Nezha se cruzó de brazos y lo miró con mala leche.
- Venga venga, un traguito de ron y lo olvidamos todo
¿¿valee?? *se bebe media botella*
- ... *se bebe la otra media*
- yeheeeeee, ¡vamos a cantaaaaar
canciones de pirataaaaaaasss!
- *sigh* anda dame un abrazo *sob*
*sniff*
Cuando se les pasó la resaca (no creas, no mucho más de diez minutos) y
terminaron de aclarar el pasado (dos segundos), fueron en busca de las pobres
Caedes y Orión. Ah, y del elfo...
Notas:
Ucchan: ¿Qué no? JAJAJAJJAJAJAJA, no nos conoces tú bien... JAJAJAJJAJAJAJJA, prepárate que ya vamos por el 4º capítulo... JAJAJAJAJJAJAJJAJA
