SI, aquí está la segunda parte de rayos X, los Rr, los vamos a contestar cuando empecemos el nuevo capitulo que ya está en camino.
Tuvimos un GRAVE problema, el chapy anterior no estuvo online NUNCA, así que capaz sería mejor, que el que quiera seguirlo nos mande sus direcciones para que nosotras les mandemos el link cuando actualicemos. Fue realmente triste no tener el comentario de, por ejemplo Jaen Snape, esperamos no volver a tener este problema again.
Besos para todos, gracias por leer. Agus y Moony.
Rayos X – Segunda parte.
Ya se hacia de noche en Godricville cuando Harry Potter todavía no había parado de
buscar a la chica nueva. Draco era su amigo y necesitaba ayudarlo. En eso pensaba
cuando sintió una suave mano sobre su hombro. No tenia idea quien podía ser, aunque
se sentía calido y reconfortante.
-¿Cho, se atrevió a preguntar.
-¡Si, mi amor! Contestó la voz detrás suyo.
Harry no lo podía creer, ¿mi amor?
Comenzaron a caminar, y el joven Potter se olvido por completo de Tonks, de Draco y
de todo el mundo.
Cho hablaba como nunca con Harry, y este estaba maravillado. Después de un rato de
caminar y charlar pararon y se sentaron en un escalón bastante pronunciado de una casa.
Estaban a escasos centímetros, el morocho no cabía en sí de felicidad, este cambio tan
repentino de Cho, la forma en que lo miraba…
Chang lo tomo por el cuello con sus pequeñas manos, Harry sintió que se le caía el alma
al piso, pero dudo. Ahí en Godricville todo era un chusmerio y si los veían besándose
iba a tener problemas, y aparte no quería que todos se enterasen.
La muchacha sintió el cambio abrupto de Harry,
-¿Qué pasa? Preguntó mirándolo dulcemente con sus rasgados ojos.
-No quiero que nos vean…
Cho se acercó al oído de Harry y sensualmente le susurró:
-¿Y si vamos a tu granero?…
Los Potter, junto a su hermosa casa, tenían una enorme construcción donde guardaban
los elementos de trabajo y las máquinas, donde también, sin embargo, esa era la excusa
para que Harry tuviera su lugar propio. El cuarto del joven dentro de la casa era bastante
pequeño y en el granero Harry tenía todas sus cosas, un enorme telescopio que le había
dado su padre, banderines de Los Leones, el equipo de la escuela, fotos de sus amigos y
esas cosas de adolescentes.
Acababan de subir al segundo piso donde el joven guardaba sus cosas, cuando Harry
trataba de librarse de una Cho más que pasional que le agarraba sus revueltos cabellos
para besarlo con más fuerza.
-Cho, cho…me parece que después te vas a arrepentir, ¿eh, preguntaba el muchacho
cuando podía respirar un poco.
-¿Te parece, contestó ella, y separándose de él lo empujo con todas sus fuerzas
escaleras abajo.
Harry abrió sus enormes ojos esmeraldas con sorpresa, a pesar de no sentir
absolutamente nada de dolor bajar para atrás tan de golpe le daban ganas de vomitar y
se sentía terriblemente mareado. En el descanso de la escalera donde había aterrizado
cerró los ojos tratando de que la cabeza le dejara de girar, pero un segundo antes vió
como el lacio pelo morocho de su chica se transformaba en el violeta parado de
Nymphadora Tonks.
-Maldita…murmuró mientras oía como llegaban sus padres a auxiliarlo.
Draco seguía tratando de convencer a los policías tranquilamente, de que por supuesto,
el no tenia nada que ver con el robo. Mientras Harry era ayudado por sus padres, una
Tonks nuevamente transformada en Cho, hablaba animadamente con el novio de ella.
-Cedric, tengo un poco de frío...¿me prestarías la campera?
-por supuesto amor, no hay ningún problema, pero…¿Qué pasa con la chica tímida que
no quería demostrar sus sentimientos delante de todos los compañeros de la escuela?
-Cambió…¿no te gusta?
-Me encanta…Y Cedric se agacho hasta llegar a su altura y la beso apasionadamente.
Después se saco la campera roja y amarilla de Los Leones y se la puso sobre lo
hombros. Cho, o Tonks en realidad, sonrió. Su plan estaba desarrollándose según lo
planeado. Ni Harry Potter se podría interponer en su camino.
Pero lo que la joven Nymphadora no sabia, era que Harry ya estaba lo mas bien después
de la caída, y ahora, completamente convencido de que ella era una trasformista, o una
cambiadora, o algo así, que podía tener la apariencia de los demás, que su "don" tenía
que ver indefectiblemente con las piedras de meteorito verdes que tenia dentro del
cuerpo y que estaba obsesionada con Cho Chang. Cuantas cosas, el morocho suspiro.
No podía contarle a la policía que había visto la kriptonita dentro de su cuerpo con solo
pronunciar la palabra lumos. Era ridículo, así que tenia que encargarse el mismo. Antes
que salir a buscarla llamo a la policía como un informante anónimo y contó lo del
dinero dentro del casillero. Luego hablo con Draco, seguía en su casa, con "prisión
domiciliaria", le contó de su llamada a la policía por lo que pronto lo dejarían tranquilo.
El joven Malfoy agradeció, aunque se estaba divirtiendo bastante humillando a los
oficiales.
Cho Chang estaba en el cementerio junto a la tumba de sus padres. Le gustaba estar ahí,
y aunque parecía una locura, hablaba con ellos, se sentía tranquila y en paz. Les contaba
sobre los temores, sobre como era vivir con su tía y lo que estaba empezando a sentir
por el "vecino de al lado"…En eso estaba cuando sintió una mano en su hombro, grande
fue su sorpresa al darse vuelta y encontrarse con su novio.
-Cedric, dijo malhumorada. -¿Qué haces acá?
-Hable con tu tía y me dijo que estabas aquí. ¿Hay algún problema?. Sonrió tratando de
tranquilizar a la chica.
-No, pero hay lugares a los que me gusta venir sola.
Miro alrededor, se estaba poniendo oscuro y empezaba a hacer frío.
-Vamos mejor. Dijo dándose cuenta de que ya con Cedric ahí se perdía toda la magia y
aparte ya casi era la hora de la cena.
Empezó a caminar hacia la salida, y escucho la voz de su novio que le decía:
-Tu vida es demasiado perfecta Chang, así que ahora va a ser MIA.
Cuando de un fuerte golpe en la cabeza, se desmayo y quedo inconsciente.
En eso, Harry Potter, usando su escoba de supervelocidad entraba al cementerio. Miro
alrededor y no vio a Cho por ningún lado.
-¡Cho! ¿Estas ahí? –Gritó ya bastante desesperado, sabía que Tonks era capaz de
cualquier cosa y tenía super-fuerza.
Susurró Lumos y empezó a recorrer el cementerio con su vista de rayos x, cuando un
fuerte golpe en la espalda lo derribó.
Se levantó y vió a Cedric, por un momento de idiotez pensó que era el verdadero
Diggory, pero después de que un segundo golpe y volver al suelo, se dio cuenta de que
solo era Nymphadora, utilizando su don.
Empezaron una pequeña pelea, en la que varias lapidas terminaron totalmente
destruidas, y las cosas volaban de aquí para allá.
Finalmente Harry, que se estaba sacando un poco la bronca pegándole al supuesto
Cedric, decidió que ya era tiempo de ayudar a Cho, y en la siguiente piña que quiso
darle Tonks le sujetó la manó y la "revoleó" por los aires.
La chica quedó inconciente al chocar contra un robusto árbol, y rápidamente el fornido
cuerpo de Diggory empequeñeció hasta tomar una figura femenina.
Harry la miró algo culpable, pero luego volvió a su búsqueda de la morocha.
Reconoció cuerpo dentro de una bóveda tratando desesperadamente de escapar, corrió
hacia ella y de una certera piña rompió la pared y la sacó de allí.
La policía trasladaba a una todavía dormida Nymphadora directo al Hospital
Psiquiátrico de Godricville.
Y en la tranquilidad de su casa, Harry veía, gracias a sus rayos x, como en su casa, Cho
se recuperaba de su shock, ayudada por el verdadero y desabrigado Cedric.
-Mamá, llamó algo confundido.
-¿Qué pasa Cielo? –Preguntó tiernamente Lily
-¿Qué harías si pudieras verlo todo?
-Aprendería a cerrar los ojos.
