AnaCathy, gracias como siempre, y este tambien lo cortamos, pero es que si no se hacia muy largo, pero mañana o pasado la parte que sigue. Gracias por estar!

Capitulo 9: Chantaje (parte II)

Tienes el poder que necesito…

Harry enseguida se puso serio:

Nunca te ayudaria.

Pero Fudge no estaba dispuesto a dejarse prepotear:

Tienes un secreto que no quieres que se sepa –le susurro con voz amenazante.

Alcanzandole una tarjeta añadio:

Buscame y hablamos.

Harry no se podia sentir peor, tenia un vacio en el cuerpo y un nudo en la garganta. ¿Por

qué siempre a él?

Me vio papá, pense que nadie me estaba viendo, pero me equivoque. –En los ojos

verdes de Harry se leia la tristeza y la impotencia que tenia.

Lily y James cruzaron una mirada sin saber muy bien que decir, finalmente el Potter

mayor fue el que hablo:

Iremos a la policia.

Su hijo nego con la cabeza:

Èl es la policia papá.

Lily miro al joven comprensiva, su enojo ya se habia disipado y ahora estaba

terriblemente preocupada, miro a su esposo en busca de apoyo, Harry lo necesitaba.

Tranquilo hijo, no hiciste nada malo, hablare con él y vere que es lo quiere. –Su voz no

era tan dulce como la de Lily, pero por lo menos era algo.

Una luz de esperanza cruzo los verdes ojos del adolescente y un asomo de sonrisa

surgio en su cara.

En ese momento oyeron el auto de Draco parar en la entrada de los Potter, antes de tener

mas problema con su papá, Harry salio corriendo para ir a su encuentro.

Por fin se le puede acusar al perfecto Potter de algo…-saludo el joven Malfoy con

sorna.

Harry no estaba para bromas, pero igual sonrio.

Me extraña de alguien como vos Harry, ¿Qué hiciste para que Cornelius "corrupto"

Fudge te persiga?

Nada Draco, no hice nada. Y aparte, ¿vos de donde lo conoces?

El rubio sonrio con picardia esta vez:

Papeles, expedientes, algunas cosas en las que necesite su ayuda en el pasado…Pero tu

no eres como yo, pequeño Harry, ¿Qué hiciste?

Nada Draco, no hice nada…

James Potter y Cornelius Fudge discutian acaloradamente en Las 3 Escobas, y a pesar

de que James hubiera preferido no hablar de ese tema en el mismo lugar donde Cho

Chang pasaba sirviendo café por las mesas no habia tenido opcion.

¿Qué quiere con mi hijo? –le pregunto al policia tratando de terminar la discusión lo

mas rapido posible.

Quiero simplemente la ayuda de su hijo. –contesto Fudge con tranquilidad, dominaba

la situación y lo sabia.

No dejare que explote a mi hijo –continuo James haciendo un esfuerzo para mantenerse

sereno. Sus anteojos se deslizaban por su nariz del enojo que tenia. –¡Le dare lo que sea,

pero alejese de mi familia! –esto ultimo ya lo dijo medio gritando.

Tranquilo señor Potter, usted no es de los que se enojan…Necesito a su hijo, nada mas.

No, maldita sea, no entiende…-comenzo James levantando la voz nuevamente.

Estare en contacto –contesto Fudge parandose y corriendo la silla a un costado.

Acercandose al oido del hombre añadio:

Si no, le contare al mundo lo que es…

¡No me presione! –grito esta vez Jim enojandose de verdad y empujando a Fudge

contra una estantería.

Todos los clientes del bar se quedaron de piedra (Oo) James era siempre tranquilo y

amable.

Cho los miro desde la barra, si no los paraba ahora el papá de Harry terminaria en la

carcel. Corrio hacia ellos:

Sr. Potter, sr. Potter, tranquilizece.

James se calmo un poco ante las palabras de la joven y solto al policia que hasta ahora

lo tenia agarrado.

Antes de irse Cornelius murmuro:

Su vida normal se acabo…

A los dias, en la Secundaria Godricville, precisamente en El Profeta las cosas no iban

mucho mejor, Harry tranquilizaba a una Hermione que seguia triste mientras borraba

sus archivos de la computadora.

En eso, entro Cho mas que contenta:

Mione, ¡tengo la solucion!

La castaña se giro esperanzada.

Podes seguir con el Profeta, pero soy la nueva editora. –anuncio la morocha sonriente.

Repite la ultima parte por favor –le contesto Hermione mirandola con odio.

Yo soy la nueva encargada, pero podes seguir con tus notas –Cho no entendia el enojo

de su compañera.

Las lagrimas de Mione ya salian a borbotones de sus ojos cafes:

¿Seria tuyo? –"¡no lo puedo creer, igual que Harry! Me roba todo…" –Trabajaria para

ti.

Harry miraba la escena, sintio que debia intervenir:

Mion, no es tan mala idea.

Cho asintio mirandolo.

Pero para Herm fue peor:

¡Claro Harry, era obvio que ibas a estar de su lado! –grito entre sollozos, y mirando a

Cho antes de salir del lugar le dijo:

Pense que eras mi amiga.

En la Mansión Malfoy, Draco habia descubierta a su reciente conquista metiendose en

sus archivos en su computadora personal. El joven sonrio mirando con arrogancia a la

muchacha.

¿Piensas que si sacas dinero de mi empresa tu papi te dara el respeto que te mereces?

Pansy lo miro con sorpresa al escuchar su voz detrás.

Lamento desilusionarte muñeca, -prosiguio el rubio sabiendo bien de lo que hablaba:

Nunca lo hara.

La noche sin nubes oscurecia la ciudad de Hogsmeade mientras un auto conducido por

Cornelius Fudge avanzaba furiosamente; justo en la entrada de un alto edificio estaciono

de golpe.

Harry Potter, que iba en el lado del acompañante estuvo a punto de romperse la cabeza

contra el vidrio (n/as: como en la peli III ¬¬).

Miro al conductor y espero la orden.

¿Qué tengo que hacer? –pregunto tratando de contener la rabia que sentia contra ese

tipo.

Tienes que subir al piso 8, ahí encontraras una caja pequeña, te vas a dar cuenta cual es,

tiene un duende en la tapa, con mi nombre escrito en computadora. Traela, ahí dentro

hay un expediente que no quiero que nadie vea. –Sonrio con superioridad.

Harry se mordio la lengua para no contestar y salio volando con su escoba.

Enseguida llego hasta el octavo piso. Efectivamente, entre una gran caja que decia:

S.P.T. a A.P.W.B.D. y algo mas que Harry no pudo ver ya que habia otra caja pequeña

encima, estaba la de Cornelius Fudge.

Sin mas Harry la tomo y despues de unos minutos la arrojo por la ventana directo al

parabrisas de Fudge.

Bajo corriendo – volando nuevamente hasta la ventanilla del hombre mientras oia como

la policia se acercaba.

Los llamaste. –murmuro Cornelius con una cara de odio imposible de ocultar.

Harry, por el contrario sonrio de la manera mas inocente y sobradora que pudo y salio

corriendo nuevamente montado en su escoba, sin antes escuchar la voz de Fudge que le

murmuro un tipico:

Te arrepentiras.

El sol brillaba sobre la granja de los Potter unos dias despues del incidente de la caja.

Harry estaba feliz, habia pasado la tarde ayudando a Cho a buscar entrevistas para el

Profeta y no habia novedades en cuanto al caso Fudge.

No mas problemas –sonrio a su padre que le alcanzaba una tostada.

Harry no terminaba de morderla cuando la policia hizo entrada en la granja.

Los Potter se miraron sorprendidos, ¿Qué era eso?

Hola Kingsley –saludo James mirando al uniformado con sorpresa.

Hola James, lamento mucho esto, pero tenemos que registrar la casa. –informo el

aludido con voz apenada.

La pareja cruzo una mirada tranquila, aunque molesta.

No hay problema Kingsley, no tenemos nada que ocultar –dijo Lily haciendose a un

lado para que la policia entrara.

A los pocos minutos llamaron a los Potter al granero que tenian junto a su casa.

Con cara preocupada el señor Shacklebolt señalo un cuerpo muerto que escondian entre

la paja.

James no lo podia creer:

¿Qué es esto? Kingsley, tu me conoces! Yo nunca haria algo asi…

Lo se Jim, pero tambien encontramos un arma en tu camioneta, lo siento

profundamente, pero debemos llevarte…

Llevarme, ¿a donde? ¿No sera a Azkaban?

Azkaban era el nombre la carcel de Godricville.

El policia asintio tristemente:

Estas arrestado.

Lily ya derramaba lagrimas de sus especiales ojos. Harry no daba credito a lo que veia:

Es todo una trampa, papá…¡no se lo lleven!.

Tranquilo Harry, necesito que te quedes aquí, llama al padre de Ron, que lo vere en

Azkaban.

James esbozo una tenue sonrisa de tranquilidad a su hijo y salio acompañado de los

guardias y de Lily.

El joven Potter los vio irse en el patrullero sin poder creerlo, todo era su culpa. De sus

hermosos ojos verdes caian gotas de bronca.

Sin poder contenerse comenzo a romper lo que tenia a su paso, maderas, palos, lo que

fuera, y nuevamente, despues de expresar su poder sintio unos aplausos.

Mi trabajo es montar escenarios –susurro Fudge en el oido del molesto Harry.

El joven lo agarro del cuello y lo levanto un par de centímetros del suelo con suma

facilidad.

Matame ahora Harry…

Los ojos del muchacho brillaron de rabia, pero lo dejo en el suelo, Cornelius continuo:

Ahora los dos queremos algo…Estaremos en contacto.

Se fue con total tranquilidad dejando al joven Potter masticando bronca.

PRONTO, PRONTO LA ULTIMA PARTE…BESOS, AGUS Y MOONY