Hubo alguien que no podía dormir, espero un momento mientras ellas se dormían, cayeron profundamente dormidas, se levanto, y con el silencio que caracteriza a los felinos, se dirigió hacia la sala común, quería pensar y estar en un cuarto con otras chicas oyéndolas dormir, no es buen sitio para pensar, bajo los escalones con la agilidad, ya se encontraba en la sala común cuando vio que no era la única a la que se le había ocurrido la idea de ver el fuego.

Era un chico, ella pensó en regresar, no estaba acostumbrada a estar con extraños, quiso voltearse e ir al dormitorio sino podía contemplar el fuego, tal ves miraría las estrellas, ya se había volteado pero la manta que tenia agarrada para acurrucarse se había enganchado con la mesita a lado de las escaleras y había dejado caer una bola de cristal , que se encontraba escondida en la manta, la bola rodó y para la mala suerte de ella rodó hasta donde estaba el muchacho absorto en sus pensamientos, el chico volteo a ver la bola y miro hacia las escaleras.

- Hola, que haces levantada tan tarde- pregunto Harry,

-Lo mismo que tu -le contesto

- ¿Asar malvaviscos? jajaja era una broma- añadió al ver la cara que ponía la chica

- ¿Te quieres sentar?- le pregunto tímidamente Harry; la chica como respuesta camino hacia el y se sentó junto a el enfrente de la chimenea a contemplar el fuego, recargando su espalda en un sofá que alguien había corrido demasiado cerca de la chimenea

,-¿Desde cuando vienes aquí?-le pregunto Isthar a Harry

-Desde siempre, me gusta el fuego - dijo Harry

-¿Aun de niño?-volvió a preguntar Isthar, se sentía en confianza con Harry

-Cuando era niño mi cuarto era una alacena, entonces a escondidas salía a verlo en la noche, y cuando me encerraban, siempre tenia una vela que encendía, y ¿tu desde cuando haces esto?- Isthar se quedo pensativa un momento, como pensando hasta donde decir,

-También desde niña, en la noche cuando todos dormían, -contestó Isthar

- ¿De donde vienes?- pregunto Harry, Isthar se quedo callada un momento

-No te puedo revelar eso, lo siento

- No importa entiendo que hay sus secretos- Isthar le sonrió a Harry dejando lucir su maravillosa sonrisa.

Harry se dio cuenta de que tenia todavía la bola de Isthar en las manos, se la devolvió, Isthar empezó a contemplar la bola de cristal, Harry tenia curiosidad por saber que es lo que había en la esfera, pero sabia que había que respetar la privacidad, (n/a: hasta q aprende!)y se contuvo, Isthar la acento en el suelo, y le dijo a Harry

-Acércate- Harry se acerco a observar, y para su sorpresa vio que era una muestra muy parecida a la esfera que el tenia de Hogwarts, también se paseaba por el interior y mostraba a la gente (tipo mapa del merodeador), pero era otra imagen la que mostraba era como la de un castillo pero mucho mas bonito que el de Hogwarts, estaba rodeada de plantas en las profundidades de un bosque(algo demasiado demasiado parecido a Rivendel) había una gran explanada en medio con gente caminando por allá, había mujeres y hombres vestidos como Lesthat y había mujeres vestidas como Calisto y ella, solo había algunos que traían arcos pero eran los que estaban en la muralla haciendo guardia, a Harry le gusto mucho el lugar

- ¿Aquí es donde vivías?-

-Si-le contesto Isthar

-Es muy bonito- le dijo Harry,

- ¿Extrañas tu hogar?- le pregunto Harry

- Si extraño mi hogar y a mi gente, el lugar es bonito pero mi gente lo es más- Harry se quedo pensando, tenia razón, hubo un silencio que fue roto por Isthar

-¿Que es eso?- dio dirigiéndose a un bulto que estaba del otro lado de Harry; Harry intento agarrarlo primero, tenia buenos reflejos, pero estaba en otro mundo en ese momento e Isthar también tenia buenos reflejos así que ella agarro el bultito llevándose una gran sorpresa

- ¿Harry esto es tuyo?- dijo enseñándole el bultito, al ver como Harry se sonrojaba supuso que era de el

- Es adorable- dijo agarrando el osito, Harry se volvió a sonrojar

- Por favor no le digas a nadie, ese osito me lo dio Sirius en tercero me dijo que era lo único que habían recuperado de mis cosas y me dijo que ese me lo dieron mis padres- dijo, al momento se sonrojo adquiriendo el color del cabello de los Weasley en la cara, había hablado demasiado,Isthar se debió dar cuenta del sonrojo de Harry (n/a: quien no?) así que decidió mostrarle algo

- Yo también tengo un osito,- y se lo enseño a Harry, estaba escondido en su manta

- Me lo dieron mis abuelos- dijo y Harry vio que su mirada se perdía en la esfera, le extendió el osito

-También te pido que guardes el secreto, por que nadie sabe que existe, mis abuelos me lo dieron antes de ir a defender nuestro pueblo- su voz se quebró

-¿Defenderlos de quien?- pregunto Harry, aunque ya tenia idea

- De Lord Voldemort- Harry se sorprendió, había dicho el nombre, solo había seis personas que decían el nombre: Dumbledore, Remus, Sirius, Hermione después de haber insistido y el mismo,

-Ellos murieron, pero murieron como héroes- dijo al final, con una nota de orgullo en su voz

-Oh, lo siento- dijo Harry

- ¿Cuando paso eso?- tenia una idea por que ella estaba aquí

- En las vacaciones- le respondió Isthar, que seguía contemplando el fuego

- Por eso estas aquí?-

-Estoy aquí por que el profesor Dumbledore lo solicito,- Isthar al ver que Harry iba a preguntar le dijo

- No te puedo decir el porque, por el momento,- Harry se volvió a quedar callado

Pasaron unos momentos en silencio, cada uno absorto en sus cosas, que no se dieron cuenta de la sombra que se movia por las escaleras, ni del brillo de su sonrisa. Las campanas del pequeño reloj que estaba en la repisa de la chimenea les avisaba que ya era muy noche

- Buenas noches Harry- le dijo Isthar agarrando sus cosas

- Buenas noches Isthar- le respondió Harry mientras se paraba con su osito

- Por favor no le digas a nadie lo que hablamos- dijeron al mismo tiempo, provocando sonrisas de complicidad.