Respuesta al Reto impuesto por Itsaso Adhara

El día de tu boda

Autora Analí Snape

Pareja Severus/James

Rating PG-13

Advertencias Este fic es SLASH (relación Hombre/Hombre) si no te gusta mejor no sigas leyendo, porque aunque no tiene lemmon, puede ocasionarte diversos trastornos mentales.

Dedicado a todo el Clan Riddle, especialmente a mi hermanita Suisei Lady Dragon... lo ves, sigo con esto de los retos... y a Regan, que como ella misma lo dice, es la primera en dejarme sus comentarios...

Reto James y Severus han mantenido una relación durante mucho tiempo, pero todo cambia cuando el primero descubre que su romance no le conviene...

Disclaimer Todos los personajes, tanto seres humanos como criaturas mágicas, le pertenecen a la gran imaginación de J. K. Rowling, amiga mía, quien sólo me los ha prestado para poder cumplir con este Reto. Nombres, logos y no sé qué más, son propiedad de Warner Bros.

'Tranquilo, Severus...'

'¿CÓMO QUIERES QUE ME TRANQUILIZE, DESPUÉS DE QUE ME DAS ESTA NOTICA?'

'Por favor, entiende... a mí me duele más que a ti, pero... es lo mejor para ambos'

'¡Tu familia me odia, Severus! – gritó tratando de excusarse de sus actos

'Eso no te justifica, James' – dijo con voz susurrante – 'yo la enfrenté por ti... y ahora tú me das la espalda...'

Giró sobre sus talones y sin decir nada más, el ex-slytherin salió de la habitación, dejando a un James totalmente cabizbajo.

'¿Qué te pasa, amor?' – preguntó su prometida, segundos después de que ésta ingresara al cuarto – 'Acabo de ver salir a Severus de forma muy extraña... ¿se pelearon?'

"¿Qué si nos peleamos, no que va... estamos de maravilla" pensó irónicamente el joven

'No, Lily'

'¿Entonces?'

"Lo que pasa es que le acabo de informar nuestro próximo matrimonio, cosa que destruye por completo nuestra relación amorosa, pues la verdad no deseo serte infiel, pero me siento destrozado por dentro y no encuentro la forma de hacerle ver que es por nuestro bien" recitó su monólogo interno

'No pasa nada, cariño...'

'¿Seguro?'

'Si '– dijo tras meditarlo cinco segundos

'Bueno' – contestó aún dudosa – 'en ese caso, acompáñame por favor a elegir los arreglos florales para la boda... ¡No puedo elegir nada sin ti! '– dijo entusiasmada

'Vamos...'

Caminando rápido, más rápido que de costumbre, sus pasos lo dirigían a su mansión. Iba pensando en los últimos meses... ¡No podía creer que James lo abandonase por aquella maldita 'Sangre Sucia'!

Recordaba su primer encuentro... todavía estudiantes en Hogwarts... aún sentía sobre sí el exquisito olor a piel sudorosa corriendo sobre su cuerpo... tenía la agradable sensación en sus labios de poseer aquella boca tan delicada de su 'ex-amante'... Eran los mejores recuerdos de su vida... de su mísera y desagradable existencia...

'¡Hola, Snivellus!'

Una desagradable voz lo sacó de sus cavilaciones

'¡Piérdete, Black!'

'Vaya, vaya... parece que nuestro grasiento amigo tuvo un día difícil...'

'¡Cállate!'

'¿Qué te pasa, Snivellus¿Acaso te dejó tu novia?'

Un puño impactó en la perfecta y delicada nariz de Sirius Black, quien sólo cayó sobre el pavimento retorciéndose de dolor. Severus, enfurecido por el recuerdo, siguió con su andar importándole muy poco los gritos que le mandaba el Gryffindor.

Como autómata llegó a la puerta de su 'humilde' hogar. Abrió la puerta, acostumbrado al tétrico silencio de la estancia se adentró al vestíbulo. Caminó hacia su despacho privado encerrándose en él, buscando la tranquilidad necesaria para pensar.

No estaba seguro. No sabía qué le dolía más: su corazón ó el orgullo. Se había entregado en cuerpo y alma a una persona, que de la noche a la mañana le decía que se iba a casar con alguien más. ¿Y por qué? Por la simple, estúpida e ilógica razón de que deseaba tener una gran descendencia y él no se la podía dar. James Potter necesitaba un hijo a quien heredar su riqueza y fama, un pequeño que siguiera con su familia y lo hiciera sentir orgulloso. Y Severus Snape no se lo podía dar...

Un vaso de cristal voló por los aires y se estrelló en la puerta de madera, mientras una lágrima negra rodaba por la mejilla de Severus... había tomado ya una decisión para su futuro, destruiría su vida poco a poco, tratando de olvidar a ese, su gran amor...

'Mi Lord...'

'Adelante, Lucius'

Tras una pronunciada reverencia, Lucius Malfoy esperó una señal de su señor para poder hablar

'Mi Lord... hace unos instantes alguien recurrió a mí con el firme deseo de convertirse en uno de sus siervos... y desea la autorización suya para ello...'

'¿Y qué es lo que esperas, Lucius¡Tráelo hasta mi!'

Esa era la señal que Severus esperaba. Con una fuerza sacada de quién sabe dónde, traspasó la puerta que lo separaba de su terrorífico destino y se adentró en las tinieblas de la oscuridad.

Al centro de aquella nueva habitación, un hombre alto se encontraba sentado frente a un gran escritorio, esperándolo. Sus ojos rojos le infundían pánico, pero ya estaba ahí... ¡qué mas daba continuar!

'Señor...'

'¡Vaya, vaya¿Pero qué tenemos aquí? Severus Snape decide unirse a nosotros...'

'Si, mi señor'

'Y piensas que voy a creerte, Snape'

'¿Y por qué no hacerlo?'

'¡Esa impertinencia! '– rugió furioso el Señor de las Tinieblas - '¡Crucio!'

Gritos desgarradores inundaron la sala...

'¿Aprendiste la lección, Severus?'

'Parece ser que sí...' – sonrió malévolamente – 'y ahora dime... ¿qué te motiva a unirte a mi causa?'

'Yo, mi señor... apoyo sus ideales... '– dijo más bien convenciéndose a sí mismo – 'Creo fervientemente que el poder debe estar en manos de los más aptos para tenerlos, y que la magia es un privilegio que los Impuros no deberían gozar...'

"Deseo la venganza e incluso la muerte de todos aquellos que traicionan el legado de magia pura ancestral. Quiero demostrarle al mundo que no vale la pena proteger a seres inferiores a nosotros, al contrario, los muggles deben ser sometidos por aquellos que tenemos el poder de hacerlo... No puedo ser gobernado por un inútil Ministro de Magia y no quiero ser la marioneta de un vejete amante de los caramelos de limón – añadió irónico – es por ello que me pongo a su disposición."

Después de su discurso, se arrodilló frente a un aparentemente tranquilo Voldemort, pero que por dentro estaba realmente asombrado de la capacidad de este ser. Le impactaba el ver que Snape no buscaba ni fama ni poder... por lo visto, a él lo que le interesaban eran los ideales. Esa mente no se debe desperdiciar...

'Bienvenido a mi familia... Severus...'

No sé qué me ha dado por escribir, pero por increíble que parezca, este es la segunda historia que escribo en un día... bueno, más bien en una noche...

Ahora... no gozo la lectura de historias sobre los merodeadores... pero esta pareja me dio una idea, y como Itsaso no puso muchas condiciones para el fic, pues me aventuré en ello...

Sólo tendrá dos capítulos, por lo que próximamente subiré el siguiente...

Muchos besos y abrazos.

Analí Snape

Clan Riddle