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32 Una de Detectives…
Al finalizar la clase con los alumnos de sexto año, Dolores Umbridge estaba ya agotada. No estaba acostumbrada a explicar lo que pensaba, mucho menos a gente como esa…
Pociones comenzó con varios murmullos por parte de los de Slytherin
Sev- ¡Silencio! -. La migraña aún persistía, y eso que la poción era muy fuerte. Neville comenzó a temblar, sin embargo, Penélope le apretó una mano y Longbottom pareció cobrar un poco más de confianza. – Esta semana comenzaremos con otra poción… -. El maestro estaba muy enojado, más que nada por las miradas extrañas que Umbridge le prodigaba…
Al fin Agatha tenía una seria rival en cuanto a sacar de sus casillas a Snape.
Hablando de dolores de cabeza, Agatha y Remus comían (por primer día en silencio) unos huevos revueltos. Ya Lupin estaba mejor de salud y se había acabado al fin la dieta liviana. Molly parecía más tranquila, en toda la casa se respiraba paz… pero Remus no podía dejar de mostrarse un poco inquieto por el súbito término de las pataletas de su colega… Vane se traía algo entre manos…
Uther bajó la escalera con un poco de sueño. Se había quedado estudiando hasta muy tarde sobre algunas cosas de Herbología… hacía tiempo que se graduó de Medimago, es verdad, sin embargo debía seguir al tanto de lo último, más si estaba trabajando para el ministerio de la Magia, en calidad de funcionario del hospital de San Mungo… A propósito, aún no se decidía a reintegrarse a sus labores luego de aquel viaje relámpago a tierras lejanas.
Uth- Buenos días!... ¿Desayunando civilizadamente al fin? -. Preguntó con ironía. Agatha le respondió con una sonrisa socarrona.
Ag- Aquí estamos comiendo con el compañero Lupin, que por cierto está completamente recuperado -. Green se quedó callado mientras se servía un poco de café para iniciar la jornada bien despierto.
Uth- ¿Acaso dudabas de mis habilidades? -.
Ag- Más bien dudaba de la obediencia del paciente… -.
Rem- No me iba a quedar en la cama para siempre. Creo, Agatha, que aún me queda el instinto de supervivencia… -.
Ag- Ya, no quiero pelear, no estoy de humor… Green, tengo que hablar contigo, pero será más tarde… ¿Alguien sabe cuándo va a llegar el famoso Profeta?... En Francia las cosas son siempre puntuales… -.
Molly- Tal vez deberías seguir en Francia si quieres tu periódico a la hora… -. Vane no dijo nada al respecto. Se llevaba con todos los Weasley, menos con los más cercanos a la Matriarca, es decir; Percy, Ron… Y la misma Molly. Aquellos que aún no le desobedecían del todo y se atrevían a ser completamente independientes…
Gracias a Dios, ella ya no tenía problemas con las figuras maternas… Sencillamente las borró de la faz de la tierra cuando le comenzaron a molestar. Como llamada por el pensamiento, una hermosa lechuza entró por la chimenea de la cocina y se posó cerca de Vane. La Auror tomó el periódico distraídamente y sacó de su túnica verde botella una knut para pagar. Una vez realizada la transacción, la avecilla se largó dejando caer algunas plumas… Ag- Veamos… El Ministerio cae en el Caos… Mortífagos fueron vistos cerca de Kent… ¡Dios! -. Melodramáticamente Agatha deja escapar algunas maldiciones… Muy extrañado, Uther y Lupin inquieren por la razón de sus palabrotas. La joven se limita a leer el pequeño artículo.
HORRIBLE HALLAZGO EN EL LEAKY COULDRON --------------------------------------
EXTRANJERO SE SUICIDA
El domingo 19 de Enero fue hallado en uno de los cuartos (cuyo número no daremos por razones de seguridad) el cuerpo sin vida de uno de los inquilinos. El hombre fue identificado como Theodore Grass, de 24 años y de nacionalidad Italiana, aunque sus padres son británicos, según el occiso comentó al posadero del pub Londinense alguna vez.
Me dirigí al cuarto como todos los días, y toqué la puerta. Como no me contestaron, le pregunté a mi jefe si el chico se había ido y me dijo que no. Luego de varios golpes en la puerta, abrimos y le hallamos – Declara una empleada de la limpieza – Estaba tirado en el suelo, desnudo y con una botella en la mano… ya estaba descompuesto y la pieza olía a rayos… -
Miembros del Ministerio de la Magia llegaron de inmediato y se han negado a hacer declaraciones… Sin embargo la idea de que el muchacho se haya suicidado es la que suena más fuerte.
Uth-¿Qué tiene de importante eso?–
Ag- Uth ¿Recuerdas a un tipo que estrellé contra la pared el día que te fui a buscar al Leaky Couldron? -.
Uth- Si… -.
Ag- Es éste… Él me dijo su nombre cuando me invitó un trago-. Dijo en tono de enfado… Todos se guardaron el comentario sobre la edad del fallecido y los añitos que Agatha tenía- No me gusta… El sábado fui a ese lugar y me molestó el tatuaje… Además, ese hombre estaba vivo. Yo lo vi con mis propios ojos…-.
Rem- ¿Dices que te quemó la Marca Tenebrosa? Cosa curiosa… -.
Ag- Sí. No me cuadra nada de esto. Cuando le conocí, el tipo tenía muchas ganas de pasar un rato alegre. No creo que en menos de una semana se suicidara… -.
Molly- O tal vez sólo se trata de que tú estás desesperada por hacer algo mejor con tu vida ¿No es así? –
Ag- ¿Quién estará compartiendo demasiado tiempo con mi Severus Snape por aquí…? – Murmuró – Quiero ir a ver ¿Algún voluntario? -. Nadie respondió – Bah! Como quieran… Llamaré a Thomas… Es el único que aún me sigue en mis cosas – Y se puso de pie, para después acercarse a Remus – De veras lamento haberme comportado de manera tan infantil, pero creo que ya no me meteré más en tu vida… Por ahora – Uther miró feo a Vane – Haz con tu vida lo que te plazca, pero después no me pongas caritas cuando te diga "Te lo dije"… -. Y sin más se marchó.
Th- Okay Agatha, pero convenimos en que llevaré a Apolus… Sabes que el pobrecito es parte de la Orden y nunca hace nada… -. Le dijo el joven con voz somnolienta a través del teléfono. Agatha se escandalizó.
Ag- Por dios! Es tu marido Thomas… Si te escucha, te deja y se va a la casa de su madre… -.
Th- Madre!, No conoces a Apolus, mi amor… -. Se burló.
Ag- Vale. Dale algunas ropas extrañas, para que pase desapercibido, pero te advierto que esto no es un asunto de la OF… Yo voy por mi propia cuenta y riesgo -.
Th- Pero… ¿Por qué te interesa tanto ese muerto, primita? -.
Ag- Te lo explicaré cuando nos reunamos. ¿El Sortilegios otra vez?
Th- No… En Flourish & Blootts -.
Ag ¿Por qué? -.
Th- Cassandra está antojada de libros… Dice que se aburre con Umbridge de regreso -. Vane no replicó. Ya sabía que todo era culpa suya por precipitarse…
Los tres se reunieron en menos de una hora en la tienda. Para variar, estaba llena de todo tipo de gente buscando los más variados volúmenes… Thomas ya había realizado compras y venía con las bolsas. Vane no se sorprendió porque su primo llevara el pelo de un rojo llamativo, pecas en la cara y se desplazara con un paso desgarbado y tonto. Iba vestido con un terno a rayas de confección ordinaria, y de veras se veía bastante idiota.
Ag- ¿Qué tanto traes ahí? -.
Th- Son algunas historias Muggles para mi niña -. Dijo con orgullo, impostando una voz gangosa y modulando lentamente. Apolus estaba en la segunda planta, revisando unos tratados de Necromancia, sin duda interesantísimos, porque vio a Vane y no le saludó.
Ag- ¿Y qué tanto le llevas? –
Th- Lecturas inocentillas… Anne Rice, Algunos cuentos de Poe y… El Silmarillion, que aún no lee -.
Ag- ¿Intentas decirme que una niña de doce años de edad lee a Rice y a Poe? -.
Th- Si… -. Entonces la pareja de Thomas se acercó a los dos. Se trataba (normalmente) de un hombre alto (Sobrepasaba el 1.75 de estatura), con cara de asesino a sueldo y unos bellos ojos verdes Nilo. Su piel era morena y le gustaba entrenarse en manejo de espadas, por lo que sus brazos eran especialmente musculosos. Agatha siempre se dijo que su primo se quedó con Apolus por la sencilla razón de que tenía la misma manera de mirar y actuar que Severus Snape. Y en verdad, cuando se hablaba de carácter no había dos tipos más parecidos. Claro que Apolus era más callado… Ese día iba con una túnica de color púrpura y tenía su pelo de color pajizo (normalmente es de color negro azabache). Tenía la espalda curvada y su rostro se contorsionaba cómicamente, como si llevara un tic.
Apolus- Hola Va- Vane. No te atacan los años ¿no?... Ya deberías te- tener la cara llena de arrugas… -. Medio tartamudeaba para completar el cuadro, pero no era tan diestro en eso como su novio.
Ag- También es un placer verte de nuevo, Apolus -. Replicó en tono ofendido por el piropo.
Th- Sólo limítate a explicarnos qué demonios te pasa con ese tipo que hallaron muerto en Leaky… -.
Ag- Verán… Tuve algunas incomodidades el sábado cuando vine a ver a Caín… Nos juntamos allá, y ese tipo estaba vivito y coleando, yo lo vi… Se trataba de un chico que buscaba relaciones rápidas, pero quiero saber algo más… Dicen en el diario que le hallaron con un frasco de veneno en las manos, completamente desnudo, y estaba con muy mal olor, por lo que llevaba más de un día muerto, o por lo menos toda la noche…-.
Ap- ¿Sobredosis de Arthur Conan Doyle, de casualidad? -. Se le olvidó que tartamudeaba.
Ag- Sino te gusta, te vas. No me molesta. No podemos perder más tiempo. Ya me cercioré de que hubiera un solo encargado y de que los otros tontos del Ministerio no se aparecerían en un buen rato… -.
Ap- No te conviene deshacerte de mi… A lo mejor te ayudo… -.
Ag- Vamos ¿Quieren?, Veneno y Marca molestando en el mismo sitio y el mismo día no me da más que un resultado… -
Th- Death Eaters en ajuste de cuentas... -.
Leaky aún estaba cercado por los miembros del Ministerio de la Magia. Vane utilizó su apariencia normal y se acreditó como Auror, exigiendo que se le mostrara el sitio del suceso. Un hechicero más o menos bonito y moreno se acercó a los tres chicos y les puso todo tipo de reparos para que accedieran a la escena del crimen.
- No están oficialmente autorizados por el Ministro de la Magia… -. Estuvo argumentando por un buen rato, pero como Thomas y Apolus notaron que estaban solos y se lo dijeron a Agatha, la mujer no dudó en lanzarle un Imperius para que empezara a hablar y no parecieran demasiado sospechosos. Sin embargo, no pasaban precisamente desapercibidos… Era como si salieras a bailar con "Ojoloco Moody", por ponerlo en términos sencillos. Rápidamente pudieron acceder al lugar del suceso. Ya para esas horas, obviamente el cadáver había sido levantado, sin embargo, lo demás estaba inalterado. Los tres se pusieron a investigar. La primera cosa anómala con la que se toparon fue con que la cama no estaba deshecha, ni ninguna otra cosa parecía haber sido ocupada. Agatha comenzó a interrogar al chico para saber más detalles.
Ag- ¿Ya se han llevado el cuerpo a la morgue Muggle, no?... ¿No sabes si la data de muerte ya ha sido confirmada? –
- Esos datos aún no me los han dado… Ag- mmmh! Ya veo. Dime todo lo que sepas. ¿A qué hora lo hallaron? ¿Cómo estaba el Cuerpo?... ¿No tenía ninguna marca más allá de las de los envenenados…? ¿Forcejeo, si acaso alguien más estuvo aquí? -.
- El chico fue hallado a las 10:00 del domingo 19 de este mes… El cuarto estaba en estas condiciones… No hay nada fuera de lo normal, la chapa no ha sido forzada ni el muerto presentaba señales de haber luchado con alguien… -
Ag- ¿Algo más? -.
- La posición del cuerpo era supina, y ya presentaba el Rigor Mortis característico… Según lo que dijeron los forenses Muggles, la única causa de la muerte fue el veneno… El cuerpo presentaba pequeñas excoriaciones en rodilla y codos, debido, seguramente, a que se arrastró por la pieza tratando de pedir ayuda… Estaba detrás de la puerta, por ello tomó un poco de tiempo abrirla… -
Ag- ¿Sobre el veneno…? -.
- Lo único que se sabe es que fue de acción rápida y dolorosa, a juzgar por el rostro del muchacho… -.
Ag- ¿Cómo es eso? -.
- Pobre… Su rostro era de terror… Seguramente debió tomarse el veneno y no presupuestó lo que le iba a suceder… -. Los tres se miraron con el entrecejo fruncido. No parecía ser normal, ni lógico. Agatha y Thomas se habían intentado suicidar un par de veces, y sabían mejor que nadie las cosas que pasaban por la mente de aquellos que pretendían quitarse la vida. Apolus, que nunca había pasado por aquella necesidad, seguía observando con atención las cosas que el chico poseía para ver si pillaba algo; cajones, clóset… Nada debía salvarse… Los tres eran amantes acérrimos de los antiguos escritores del género policial y seguirían el manual al pie de la letra. McKellen guardó los libros de Cassandra en un bolso negro y le dijo a Agatha que despidiera al chico. Así lo hizo la mujer, y cerraron la puerta, dejándole al moreno expresas órdenes de decirle a cualquiera que había unos Muggles investigando y que no molestaran.
Ag- ¿Viste que esto no pinta para suicidio? -.
Th- Es verdad… Pero háblanos más del muchacho… ¿Lo conocías hacía mucho? -.
Ag- Por el contrario. Hace como una o dos semanas vine acá para recoger a Uther Green – El novio de Thomas dio vuelta la cara.
Ap- ¿El Green que conozco? -.
Ag- Sí… Pero eso es lo de menos. Sólo se me acercó para ofrecerme un trago e invitarme a su cuarto… Era un papanatas. Por eso me llama la atención que se haya "Suicidado"… -.
Th- MMMH!... Miren- Los chicos se acercaron a McKellen y notaron algo muy peculiar. El chico había mirado bajo la cama con atención, y al notar rastros de tiza decidió que lo mejor era mover el lecho hacia un costado. Así lo hicieron y hallaron diversos símbolos medio borrados, y que parecían no tener ninguna conexión coherente.
Ag- ¿Crees que lleve allí mucho tiempo? –
Ap- No… Aún no se ha asentado mucho polvo… Seguramente lo hizo antes de morirse… Un círculo de invocación oscura… ¿Qué estaría haciendo?- Dijo pensativamente. Apolus era el experto en círculos y todo lo que requiera de tizas en el piso.
Th- ¿Encontraste algo entre sus cosas? -.
Ap- No… Miré en los cajones, pero sólo tenía la ropa… Seguramente llevaba un tiempo más o menos largo aquí –
Ag- El chico dijo que no había opuesto resistencia a nada ni que ninguna otra persona estaba aquí… -
Th- Sin embargo piensas que no pudo haberse suicidado… -
Ap- Lo más curioso es el hecho de que haya intentado pedir ayuda… -
Ag- De aquí no sacaremos mucho. Lo mejor es interrogar a los empleados. Tal vez hay algo que se les haya pasado a estos tipos…-
Ap- Mejor dicho: sigamos jugando a los detectives …-. Agatha hubiera dejado pasar el hecho si su Marca no le hubiera ardido justo el día en que se supone murió el muchacho… Y en parte Molly tenía algo de razón. Quería ocupar la mente en cualquier otra cosa que no fuera Remus Lupin, Severus Snape o Hogwarts…
El posadero parecía muy contrariado. No había podido evitar que el suceso pasara desapercibido, y la clientela (La mínima clientela, luego de que en menos de unas horas el artículo de El Profeta le arrebatara a la gente que había reservado y echara abajo el prestigio del pub) se marchaba muy molesta por la invasión de Muggles y personas raras. De todas maneras, Agatha fue paciente y le preguntó con toda la calma y dulzura del mundo, en tanto Apolus y Thomas se iban a mirar a ver si pillaban algún otro empleado que les pudiera decir algo más.
Ag- Sé que esto no es agradable… Soy su conexión entre la policía Muggle y los agentes del Ministerio de la Magia… Acabo de llegar – Dijo mostrándole su identificación de Auror – Y necesito que me ponga al tanto –
- Ya se los dije una y otra vez… Otras personas que decían lo mismo que usted vinieron y… -
Ag- Es una cosa agotadora, lo sé. Yo también tengo otras cosas qué hacer y sólo le haré unas preguntas – El hombrecito bufó, fastidiado.
- Está bien… Lo haré una vez más… -. La mujer sonrió, satisfecha de haberle convencido. - ¿Quiere algún trago? -
Ag- ¡Qué amable!... Me gustaría sólo una cerveza de mantequilla – Y sacó de sus bolsillos su cajetilla de cigarros, una libreta y los fósforos. Su manera de comportarse al comienzo desconcertó al posadero, pero después pudo entrar en confianza.
Ag- Veamos… ¿Cuánto tiempo llevaba alojando la persona aquí? .
- Si mal no lo recuerdo, desde las Navidades, más o menos -
Ag- Podría corroborar la fecha para mí – Con algo de lata se puso a revisar los libros de registros.
- Estaba registrado exactamente desde el… 20 de Diciembre… .
Ag- Anotado… ¿protagonizó alguna pelea en este lugar? ¿Estuvo inmiscuido en alguna situación extraña? -.
- A ver… El tipo no era de muchos amigos, y solía molestar a las mujeres que venían solas o esperaban por alguna cita en la barra. Hace poco que tuvo una discusión muy fuerte con una tipa… Ella lo estrelló contra la pared y estuvo inconsciente un buen rato… -. Vane reprimió una sonrisa satisfecha de sí misma. Se había encargado de ponerlo en su lugar.
Ag- ¿Y el sábado 18 de enero? -.
- Nada… No salió más que al callejón Diagon a eso de las tres… No me acuerdo muy bien – A Agatha le llamó la atención eso último… ¿Callejón Diagon?
Ag- Por favor, intente recordar si llegó con algo de allí… Cualquier cosa… -. Pasó un largo rato antes de que el pobre hombre separara sus cejas, que hasta ese momento habían estado tan unidas como las de un cavernícola.
- Creo que sí… Pero no era nada de importancia, la verdad… Sólo una bolsa de papel -.
Ag- ¿No tenia ningún sello? ¿Algo que la distinguiera como de alguna tienda? -.
- Nada; precisamente por ello llamó tanto mi atención, a pesar de todo -. Agatha parecía contrariada… En aquella bolsa bien podría haber llevado el veneno o las tizas para la invocación… Cualquier cosa.
Ag- ¿Le molestaría mostrarme el libro de registros? -.
- Para nada, pero no me lo vaya a quemar ¿eh? .
Ag- Soy profesional. No quemo nada mientras fumo -. Replicó la mujer.
Por otro lado Thomas y Apolus creían haber hallado algo interesante. Los muchachos nuevamente habían regresado al cuarto, en tanto el agente del Ministerio (aún con los efectos de la Imperius) montaba guardia al pie de las escaleras (tarea inútil y que por supuesto ilustra la estupidez del Ministerio)
Ap- Mira esto… Creo que pillamos lo que Agatha andaba buscando – Insignificante, un trozo de madera estaba atascada en el marco de la puerta del baño. El joven tomó la madera con sus manos enguantadas y se la llevó a la nariz.
Ap- Esto es madera de pino… Y está barnizada-
Th- A ver… -. Y se preocupó de examinarla también. Luego de un rato de cavilaciones, los dos concluyeron que se trataba de un trozo de bastón o algo por el estilo… - El muchacho tuvo visitas… Y si no nos equivocamos, las visitas cojeaban o estaban ya muy viejitas… -. Apolus entendió hacia dónde iban las cavilaciones de su pareja y le atajó con un sonoro NO.
Ap- Ni siquiera lo pienses… No existe en este mundo un Death Eater tan estúpido como para venir a matar a un don nadie, sabiéndose al descubierto… -.
Th- Perfectamente podría haberse disfrazado… -.
Ap- En ese caso cualquiera… Si sólo pudiéramos saber de qué tipo de veneno se trataba… Esto me está comenzando a interesar… -.
Vane, un piso más abajo, anotaba una serie de nombres de inquilinos que se registraron por lo menos una semana antes… Aquel que asesinara a Grass necesariamente debía haberse registrado para subir… Era una regla en el Leaky Couldron específicamente para situaciones como esta. Entre los nombres, el de Caín Rodríguez y el de una tal Claire Larson también estaban anotados.
Pero un nombre en especial dejó a Agatha con el presentimiento de que Grass estaba metido en algo muy grande…
JACK LAWRENCE
Se registró el día 16 de Enero y había dejado el hotel el 17 del mismo mes…
A Vane le sonaba el apellido por alguna razón… Pero no se podía acordar… Ya lo averiguaría más tarde.
Ap- Ya, agente Vane, debemos marcharnos – Dijo el joven tocándole el hombro, y luego bajó a su oído para susurrar – El tipo está volviendo en sí… -. Efectivamente aquel que estaba bajo el Imperius comenzaba a moverse autónomamente, pero había partido al baño, así los tres se despidieron secamente y se marcharon de regreso a Diagon.
Ag- Pillé muy poco la verdad. Necesitamos averiguar sobre el veneno. Las pericias Muggles, sin duda aclararán nuestras dudas… - Dijo desanimadamente. No había sacado nada en concreto de su interrogatorio al hombre de la posada… Por desgracia tampoco estuvieron mucho tiempo (ni siquiera se terminó la cerveza)
Ap – A mi me fue mucho mejor que a ti… -. Se burló. Y le mostró el trozo de madera.
Ag- ¿Y qué es eso, chico maravilla? -.
Ap- Madera… Un trozo de palo que no pertenece a ninguna de las puertas -. Murmuró con una amplia sonrisa.
Th- Agatha, mírala bien, tal vez recuerdes algo… -.
Ap- Deja la cantaleta ¿bueno? No creo que… -. Vane los acalló con un gesto de su mano.
Ag- SHHHH!... Lugar público Miles de imbéciles escuchando. Esto lo veremos más tarde ¿Vale? Ahora tenemos que irnos a Grimmauld Place -. McKellen frunció el ceño.
Th- ¿Ya hablaste con él? -. Agatha dejó escapar una sonrisa de disculpa.
Ag- Ammm… No -. Thomas se llevó una mano a la cara.
Th- Me salía más corto mandarle una lechuza… -.
Ag- No te enojes!. Yo tengo otras mil cosas que hacer… -.
Th- Mira, no opinaré sobre eso porque terminaremos peleando. Vamos Apolus. Es hora de ir a ver a Remus… -. Apolus alzó una ceja en protesta por única réplica, pero permitió que el otro joven le tomara la mano y siguieran por el callejón, con dirección desconocida entre el tímido gentío que se agolpaba para comprar lo que necesitara.