Ya voy llegando... UFFF, no saben lo que ha costado.
47
El último nudo: Espiral de regreso.
Apolus observaba fijamente a Harry Potter por sobre el escritorio. El moreno se sentía muy cohibido, tenía la sensación de que el chico de ojos verdes le saltaría encima para asesinarlo. Y cuando habló, su voz era como un trueno, el gruñido de una fiera...
Ap- ¿Cómo sabías sobre un tema tan delicado? -. Le preguntó. - ¿Cómo te enteraste del verdadero nombre de Lord Voldemort ?-.
Harry lo entendió todo.
H- ¿Hace cuánto tiempo lo sabes tú, Apolus? -.
Ap- Muy observador... Siempre he sabido ese dato -. Sonrió a medias. - Pero no quería revelarlo hasta que fuera absolutamente necesario -.
H- Por la salud de Agatha... Pero ¿Por qué ella no lo sabía¿Por qué le afecta tanto? -. Inquirió, sin entender.
Ap- Ella no lo sabía porque no le interesaba saberlo... Bueno, hasta que se cruzó contigo, le daba igual... Pero creo que debes responder a mi pregunta antes de que yo prosiga -.
El moreno Gryffindor le explicó todo lo que creía necesario, obviando los comentarios del Dark Lord sobre su familia. El hecho relevante era su ascendencia de "MudBloods"...
Ap-... Igual que tú. Al círculo interno no le afecta el origen del Señor Oscuro. Por eso no se inmutaron cuando tú les contaste la verdad... Su fanatismo sobrepasa los límites de cualquier razón, y deberías haberlo aprendido hace mucho tiempo -. Harry desconfiaba, recelaba del hombre frente a él, a pesar de lo familiar en sus ojos. Potter luego de ésta conversación fue a ver a Agatha que estaba dormida, y nuevamente se preguntó por qué le hizo tan mal enterarse... ¿Qué razón explicaría su palidez y su temblor?. Apolus había obviado la respuesta a propósito. Lo mejor era preguntárselo a ella misma después, cuando ya no estuviera tan débil y lo hubiese abofeteado según costumbre...
Se fue a su Salón Común. Lo aguardaba Hermione, ávida de noticias.
Her- ¿Qué pasó¿Por qué Agatha fue a buscarte al Comedor? -.
H- Porque... -. Agarró de un brazo a su compañera y la llevó a un lado - Creo que es mejor que lo conversemos en otro lado... -.
Her- ¿El baño de los Prefectos? -. Propuso después de una corta reflexión. Harry recordó a la sirena en el cuadro. Sería demasiado anómalo que alguien que no fuese un Prefecto estuviera allá.
H- Mejor vamos al baño de Myrtle -. Por lo menos, ella era conocida, y mejor fantasma conocido que sirena pintada por conocer.
Her- Vale. Lleva tu Saeta de fuego -. Dijo como leyéndole la mente.
Tras deshacerse de su capa invisible, el Gryffindor le relató de su encuentro con Sirius Black y lo que le sucedió a la profesora de DAO. Granger se mostró muy entusiasmada respecto a lo primero.
Her- ¿En serio pudiste "tocarlo?" -. El muchacho se cuidó muy bien de inventar una versión de la historia que no contemplara a Lynn Kadyars en ningún pasaje. Y al parecer, tanto Apolus como Hermione le creían capaz de crear un conjuro tan complicado.
H- Sí. Y hablé con él. Es reconfortante saber que mi padrino aún esté vivo... Aunque no posea un cuerpo -.
Her - Pero... -. Meditaba sus palabras - " ¿Cómo sabías que él estaba vivo?" ¿Cómo saber que no era sólo una ilusión que te has inventado? -. Harry no pudo responderle. Él sólo "sabía" que Sirius estaba vivo. Myrtle apareció entonces (bueno, sólo apareció su cabeza con coletas a través de la puerta del cubículo en el que los chicos estaban escondidos)
H- Hola Myrtle -.
- Hola - Replicó ella con su tristeza habitual. Parecía más desganada que de costumbre. Aún no hacía ningún comentario sobre el evidente hecho de que Harry y Hermione estaban allí, encerrados.
H- ¿Qué te sucede? -. Inquirió con genuina preocupación. Esa actitud no era normal en ella.
- Nada -. Fue todo lo que dijo, y se fue.
Hermione y Harry no pudieron reprimir un gemido de sorpresa.
El fantasma atravesó la pared del baño y despareció.
Unos pasos se sintieron entonces...
Sin que los chicos pudieran darse cuenta de cuándo alguien más entró en el baño y les abrió la puerta del cubículo, se encontraron con la cara de Agatha Vane. No sonreía, para nada. Estaba tan melancólica como Myrtle, incluso, su expresión era igual a la de ella...
Ag- ¿Qué hacen aquí? -. Potter la observó bien. No, no era Thomas haciéndose pasar por ella.
Her- Es que... -.
Ag- Lo que sean que estaban haciendo, háganlo en otro lado. Peeves ya fue a hablar con Filch y en menos de 10 minutos estará acá -. Su voz desganada preocupó a Granger sobremanera.
Her- ¿Qué le sucede profesora Vane? -.
Ag- No es de incumbencia del planeta, señorita Granger. - Con todo el respeto del mundo le ruego que no meta su nariz en lo que es mío -. Harry se puso de pie y avanzó (Con algunas dificultades) hacia la mujer. Le tocó la cara.
H- Dame la bofetada. Me la merezco -. La profesora suspiró.
Ag- Ya te dije que no era necesario... -. Miró al techo y se alejó de Harry. - Síganme. Lo mejor es que si quieren hablar, lo hagan en el Salón de Godric. Es más seguro -. Los chicos obedecieron, y Vane los dejó a la entrada del pasillo.
Ag- Ya no tengo nada más qué hacer... -. Y se marchó, dejándolos solos.
Her- ¿qué le pasará? -.
H- Lo que sea, es culpa mía... -.
Her- No te hagas el mártir, Harry. No todo lo que le pasa a ella es culpa tuya -.
H- Casi la maté anoche, con mi torpeza -.
Her- Entremos ¿Quieres? -.
H- Vale -.
La escenita que tuvieron que contemplar fue completa y absolutamente gratuita. Ron había llevado a Ruri, para estar a "solas" y en ese momento se estaban besando "fogosamente".
H- Em... -. Ron se dio la vuelta, y Ruri se levantó, ruborizada. Por un largo rato los tres amigos se observaron en silencio.
Her- Biblioteca... - Murmuró sarcásticamente - Ya lo veo -.
Ron- ¿Y¿Hay algún problema? -.
Her- Si, lo hay. No tengo necesidad de ver cómo intercambias saliva con otra persona. Ya tengo el estómago bastante revuelto -. Se hablaban con una cortesía que erizaba los pelos de la nuca de cualquiera. Duncan agarró de un brazo a Ron, y se fue con él, muy digna. Harry prefirió no decir nada de nada. Lo mejor era mantenerse al margen de ese asunto. Ya tenía bastantes problemas con sus propios actos como para juzgar al resto.
Pero Hermione no parecía dispuesta a dejar pasar el tema.
Her- ¿Tú sabías? -.
H - No. Ni idea -.
Her- ¿Cómo puede ser tan descarado¿Cree que este lugar es para venir a besuquearse con cualquiera... ¡Maldita sea! -. Se veía más molesta de lo que creía - Me enferma que anden usando estos sitios a escondidas ¿Y si por la imprudencia de esa Ravenclaw alguien descubre este lugar? No sólo nos meteríamos en problemas nosotros... -. Se quedó callada. Estuvo a punto de decirlo, Potter daba completa fe de ello.
H- ¿Ibas a decir que Agatha también tendría problemas¿Por qué no reconoces que algunas cosas te afectan? -.
Her- No vinimos a hablar de mí ¿O sí? -. Suspiró - Mejor hablemos de lo de Sirius. No creo que Ron se atreva a interrumpirnos -. Se sentó en una silla que hizo aparecer de la nada, uno de sus últimos trucos aprendidos en compañía de Raphael. También le dio un asiento a Potter. - ¿Cómo lo sabes? -. Retomó otra vez.
H- No es una esperanza a la que me aferro ciegamente. Yo siempre supe que estaba "Vivo", siempre -. Afirmó. Y era cierto. A pesar de que una parte de su cabeza le repetía incansablemente que no podía ser cierto, otra se lo recordaba constantemente. Luchar contra la parte lógica de su cerebro le había salvado más de una vez el pellejo¿Por qué no confiar ahora?.
Her - No lo sé... -.
H- Sólo necesitaba hablarlo con alguien Hermione - Concluyó cuando se le acabaron los argumentos para convencer a su amiga - Gracias... -.
Her- Escúchame ¿por qué no me lo cuentas todo? Siempre te quedas con la parte que me falta para comprender lo que haces. Tengo la sensación de que ya no somos amigos, sino conocidos. Que nos reunimos sólo cuando me necesitas para comprobar alguna cosa. No te olvides de esto; No quiero sentirme como la enciclopedia a la que vienes a consultar de vez en cuando, sin importarte lo que yo piense o quiera. No me uses, porque sino, ahí vamos a tener problemas -. No era una amenaza, sino una mera declaración de principios. - Que ahora ya no pasemos todo el día juntos, no quiere decir que ya no me importe lo que te suceda. Te muestras distante, y te respeto. Sé que después de lo que ha pasado necesitas estar solo, pero por lo que más quieras, no me eches de tu vida. Eres mi mejor amigo -.
H- Lo siento... -.
Her - No lo sientas -. Tenía los ojos llenos de lágrimas. Le había dolido que Ron no le contase nada, le dolía que Harry se cerrase como una ostra y se pasara todo el día en sabía Dios qué cosas... La única persona que la trataba con cariño era Lupin, y eso, eso era lo que le emputecía más. Que sólo él se mostrara más abierto con ella, siendo que le conocía hacía tan poco tiempo...
La chica esperaba el abrazo de Harry, pero éste se contuvo. No se sentía capaz de prometerle que todo iba a cambiar, porque sabía que nunca cumpliría. Ya habían tomado caminos separados...
Ya nadie iba a entender lo que estaba pasando por su cabeza. Y menos ella.
------------------
El martes había reunión del Priorato, y como Lynn le recordó amablemente en clase de Pociones, debía cumplir con su parte del trato: Dejarlos entrar en la orden, como si fueran personas importantes. Harry se sentía un poco azorado, pues sabía perfectamente la reacción que tendrían, más que los otros miembros y Ron, su querida Hermione. Le haría más daño, porque en todo el revuelo del día anterior, no le había comentado su nueva decisión; la chica iba a sentirse traicionada otra vez.
Bueno, no le quedaba de otra. Aunque le daba rabia, el deseo de Agatha se impondría nuevamente.
H- ¡Silencio o los saco! -. Por supuesto no había cambiado para nada el tonito que usaba con sus compañeros. ¿No se suponía que tenía el mando? - Antes de que comencemos la sesión, hay un nuevo anuncio - Cuchicheos que fueron acallados con una sola mirada del moreno. Hasta Ron estaba murmurando - HE DECIDIDO... -. Hizo hincapié en el YO - Que entren nuevos compañeros a la Orden. Ellos están más interesados en el bien de este equipo que otros, que tomaron sus cositas y se fueron a la primera de cambio. ¡PASEN! -.
Uno a uno, los chicos fueron entrando. Lynn Kadyars exhibía su sonrisa de autosuficiencia, al igual que Alexandra. Blaise lanzaba miradas asesinas a diestra y siniestra. El que le contaba a Draco estaba frito. Kenji, en tanto, observaba todo con curiosidad. Estaba más pendiente de los cuadros y la decoración que de las miradas curiosas sobre su espalda. Obviamente iba escuchando música. Pero no fueron ellos los que llamaron la atención de Harry, que no se la podía creer...
Cerrando el grupo iba ni más ni menos que la cazadora de Slytherin que había humillado a Ron siete veces...
Justinne de Lioncurt, que llevaba una mirada inescrutable, como la de su padrino cuando estaba incómodo.
Obviamente el Niño Que Vivió no pudo objetar nada. Lynn había dicho que llevaría a quien quisiera.
Margaret- ¿Se te cayó algo en el partido de Quidditch? -. Preguntó amablemente - Algo como... ¿La última neurona que te quedaba? -. El moreno hizo caso omiso de los comentarios que se escuchaban a su alrededor. Eso era más escandaloso que haber metido a Agatha Vane.
H- Estoy cansado de que mis decisiones se sometan a cuestionamiento -. Comenzó - Se han ganado su puesto en este lugar, todos... La puerta es ancha - Concluyó, bastante irritado. - El que crea que voy desvariando, que se incluya entre los que están afuera de esto -.
Ginny - Tranquilízate Harry... Nadie te cuestiona -. La advirtió, pero era evidente tamaña mentira.
Lynn seguía sonriendo, ansiosa de empezar a hacer de las suyas.
H- Excelente -. Hizo como que no pasaba nada - Lynn y Margaret Black se preocuparán de enseñarles el uso de la esgrima -. A la Slytherin se le quedó la cara de piedra... ¿Obedecer a Potter¡Ni loca!. El chico captó su confusión, y sonrió...
Cuando hicieron el trato, en ninguna parte se aclaró que la joven no quedase bajo las órdenes del líder... (N/A: Nada en la vida es tan sencillo, mi querida Lynn...)
Raphael estaba consternado, casi tanto como los demás ¿Qué corno estaba pasando? Las cosas se ponían cada vez más raras...
H- Muy bien, creo que es el momento de que nos pongamos manos a la obra -. Cuando terminó de decir esto, un clic sonó a sus espaldas. Uno de los anaqueles con espadas se había abierto.
Eran en total 15 armas.
Al finalizar la clase, Harry se acercó a Lynn. Al menos tenían más que claro que su relación era meramente comercial.
L- ¿Qué pasa? -.
H- Quería preguntarte... Si acaso podías invocar nuevamente a Sirius. Quiero que Remus lo vea -. Le dijo quedamente. Los demás habían abandonado el Salón, quedando sólo ellos dos. La chica lo meditó por un rato.
L- Si, puedo. Pero va a costarte -. Le señaló majaderamente.
H- Lo tengo claro... -.
L- Aparte de que no podrás darme órdenes, sino "sugerirme"... -. Puntualizó - Quiero otra cosa: Un libro -.
H- ¿Un libro? -.
L - Sí - Sonreía - Un libro muy difícil de conseguir para un menor de edad... -.
H- Pero... -.
L- Si quieres volver a ver a tu "Sirius", vas a pagar lo que te pido ¿Claro? -.
H- Está bien -. Medio bufó. Estaba dispuesto a lo que fuera para que Remus tuviera una razón por la cual sonreír.
L- Puedo hacerlo mañana -.
H- ¿Mañana?... Está bien. Mañana entonces -.
L- ¿Dónde? -.
H- Aguárdame en las lindes del Sauce Boxeador -. Estaba de más advertirle que esa cosa pegaba duro. Kadyars se mostró curiosa, pero adivinando que al día siguiente lo sabría todo, prefirió callar.
L- Perfecto. Entonces te esperaré a las diez. Debo preparar el rito. Esta ocasión será un poco más complicado... -.
Y Harry ya lo creía. Acababa de recordar que algo así los podía dejar sin profe de DAO.
L- "Ciao", Potter -.
-----------------
Ron- ¿Estás loco! -. Neville no se metía en la pelea, a pesar de que también estaba un poco enojado con Harry por esta situación. El pelirrojo se había aguantado hasta que llegaron al dormitorio común para explotar como volcancito - ¿Cómo se te puede ocurrir meter a estos Slytherins en el Priorato de Canis Major... ¡Sirius jamás te perdonaría algo así! -.
H- ¡No te atrevas a hablar de Sirius! Tú no sabes lo que piense o no -. Le dijo desde su cama, donde estaba acostado de lo más cómodo
Ron- Ese no es el punto de la discusión. No nos preguntaste, no nos avistaste ¿Creías que íbamos a recibirlos con los brazos abiertos?. ¿A gente como Kadyars? -.
H- No soy el único que no comunica a quién decide meter o no al Salón de Godric ¿Verdad? -. Weasley tenía rojos hasta los dedos.
Ron- No me exijas que acepte a esos chicos... -.
H- No te lo estoy exigiendo... -.
Ron - Noteatrevassiquieraadecirlo... -. Respiró hondo y se calmó - Entonces, sí tú llevas a quien te place, yo también tengo derecho ¿no? -.
H- Lo que sea para que te vayas a la cama y me dejes en paz -.
Neville - ¿No crees que estás siendo un poco irreflexivo, Harry? -. Inquirió tímidamente. No podía reconocer en este chico antipático a la persona a la cual había confiado su vida hacía tan poco.
H- Las cosas van cambiando, Neville... Y lo sabes. A veces nos llevamos sorpresas de la gente que menos esperamos... A las que menos fe les tenemos -.
Nev- Pero ¿Viste la cara de Hermione¿La expresión de Ginny? -.
H- Sí, lo hice una y mil veces -. Reconoció con pesadez. - Pero no hay vuelta atrás. Retroceder me ha costado bastante... -.
Ron- Y seguir adelante tozudamente, también. Mira, durante años te he seguido en todo lo que se te ocurre, pero esto es demasiado... -.
H- Aprende a deshacerte del orgullo, Ron. Tú mismo lo dijiste: Bajar la cabeza y escuchar, escuchar... -.
Ron- No me refería a esto... -.
H- Hay algo que he aprendido en estos meses a solas: Que no puedo cerrarme a toda ayuda... Kadyars va por jugar, y lo sabes. Los demás tienen cosas que hacer. Por ejemplo, Zabini; él quiere vengarse... Mientras podamos sacar provecho de lo que saben, mejor ¿No lo crees? -.
Ron- ¡Escúchate!... Estás hablando como... -. Se quedó callado; se le estaba pasando la mano.
H- ¿Como un genocida¿Por qué no terminas la frase? -. Se reclinó en la cama, afectado por aquellas palabras. - ¿Estoy hablando como Voldemort? -. Todos (menos Dean, que no se sentía tocado) debieron ahogar un gemido - Tal vez... ¿qué piensas¿Que, después de todo, ya me está manejando¿Que él ha puesto en mi mente estas ideas? -. Se encogió de hombros - A lo mejor si estoy perdiendo la cabeza... No sé ni para qué me preocupo de esto... -. Se dio la media vuelta y se acostó.
Ron- Harry... -.
H- Ya no más. Es tarde, mañana tenemos Herbología y será una clase complicada. Hasta la mañana, cuando con la cabeza más fría, podamos hablar -. Y se puso a dormir enseguida, estaba agotado.
----
Lo más temprano que pudo (Considerando que no había pegado ojo en toda la noche) el Chico Maravilla estaba frente al despacho de Vane. Tocó la puerta, y una Agatha con el cabello revuelto le fue a abrir.
Ag- ¡Ah¡Tú! Pensé que Thomas ya había vuelto -. Dijo la mujer, somnolienta (Eran las seis y cuarto) Eso le iluminó la cara al Gryffindor. No le gustaba la gente histérica metiéndose en los asuntos ajenos.
H- ¿Thomas no está? -.
Ag- Si, y deja el tonito inocentón. Ya sé que te cae de la patada. Mejor pasa -. El cuarto estaba perfectamente ordenado, con rumas de libros abiertos en varias páginas, pero lejos del piso. El hogar ardía alegremente y era evidente que ella tampoco había dormido.
Ag- Ahora iba a ponerme a hacer un poco de poción "Fresco como lechuga" Toma asiento y comienza a hablar -. Potter obedeció.
H- Quiero hacerte una advertencia y pedirte dos favores -. Silencio.
Ag- Te escucho -. Ni una variación en su rostro.
H- Primero: Hoy invocaré nuevamente a Sirius... -. Se volvió a quedar callado, esperando una respuesta.
Ag- Deja de esperar a que te diga algo. Yo sabré cuándo hablar¿Bueno? -. Le molestaba que la gente se comportara como si en cualquier momento fuera a soltar una palabrota. - Me estás advirtiendo, no pidiéndome permiso¿Verdad? -.
H- Si... Los dos favores son éstos. Uno; que lleves a Remus a la Casa de los Gritos a las doce de la noche exactamente, y que luego te marches... Mañana te diré la otra cosa que necesito -. Un largo silencio en que el Agatha fue a por su cepillo de cabello y comenzó a desenredarse la masa castaña que tenía arriba de la cabeza. Se miraron largo rato, Harry preguntándose qué pasaba por la cabeza de su profesora, hasta que ésta habló.
Ag- Vale. Aunque no creo que Remus quiera ir... Por supuesto, le diré lo que pretendes. Si me ha pillado en cada cosa que he hecho por ayudarlo, que le mienta una vez más no me lo va a perdonar... Yo creo que esto no le va a gustar... -. Murmuró pensativamente.
H- ¿Y por qué no? Estoy seguro que se sentirá tan contento como yo de saber que existe una posibilidad de recuperarlo, de arrancarlo del silencio -.
Ag- Hay que pensar como Remus, Harry, y por lo que noto, tú aún no has pasado por suficiente como para entender lo que quiera o no quiera, lo que le haría feliz o no -. Repuso enigmáticamente - Ya que no tienes nada más que decirme, te ruego que te vayas a duchar. Llega cinco minutos antes al aula de DAO, para que te dé la poción -. El chico se fue, sin poder preguntarle a Agatha si eso sería muy peligroso para ella o no. Cuando se supo sola, la mujer abrió la carta que le había llegado al día anterior, y que por estar durmiendo había medio leído luego de ir al baño.
Era de Caín.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Queridísima albacea de mis gastos:
Oye "Shiquilla" (Escrito en español todo lo que lleve comillas) no sé qué le pasa a éste lobito tuyo. Anda "re-tristón". Lo he invitado a beber un par de veces, y no se muestra interesado en hablar mucho mientras tanto. Ahora tiene como una obsesión media "tránsfuga" por matar "Chupasangres". Se ha "echado" como quince desde que me pidió que lo llevara a la cacería. Me "Tá" dando "meyo". "Ligerito" me va a quitar la "Pega" (N/T: Trabajo) Espero que lo llames y hables con él para ver qué le pasa. Esto no es nada normal. Antes se ponía contento cuando se "mandaba al seco" (N/T: bebía de un trago) un par de "Piscolas", pero ahora se larga a llorar como "Magdalena en entierro". ¿Será la Luna¿Se pone así cuando nieva tanto?. Esto no era parte del trato, yo no le hago a la sicología, y no me gusta que mis "Compipas"(N/T: Compadres) se larguen a llorar en mis brazos, murmurando cosas de la onda #Yo debería estar muerto# #No hago falta acá# o #Harry no necesita más que a PadFoot# El "Peludo tá con depre".
Eso, respondiendo a la orden de que te mantuviera informada
Caín Rodríguez
El "Master" de los "matashupasangresodiososquemolestanporhambreyporgusto".
Pd¿Quién es #PadFoot#?
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Agatha suspiró.
Ag- Otra vez... Otra vez... Esta es un arma de doble filo, pero creo que Harry debe saber. Y Remus le tiene que contar -. Agarró un pergamino, y la pluma con su bote de tinta verde esmeralda (¿No les dije que le gustaba ese color, no?) para ponerse a escribir.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Remsi-Pooh (Sé que odias que te diga así):
Recién ha venido Harry y me ha pedido un favor. Quiere que estés a las doce de la noche en la Casa de los Gritos...
Se detuvo, pensando que tal vez debería empezar de otra forma la carta. Sin embargo, siguió esta misiva.
... Va a convocar a Sirius Black nuevamente. Creo que no te lo he comentado, pero PadFoot está vivo, como te lo temías cuando te conté todo lo que sabía. Ahora es posible llamarlo y darle un cuerpo tangible. Harry está muy emocionado ante la idea de traerlo de regreso, y busca formas de estar más tiempo atado a aquella esperanza. Ahora, tú decides si venir o no, yo por mi parte he cumplido con informarte.
Si decides ir, te esperaré en las Tres Escobas, en Hogsmeade, a las once en punto. Quisiera hablar contigo más a fondo sobre esto, para que sepas a que te estás enfrentando. Y cambies la cara antes de llegar con tu "sobrino" postizo.
Agatha Vane
Profesora de DAO
Hogwarts
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Veinte para las diez, Harry se despidió de sus amigos, y dijo que iba a la biblioteca, y luego a dar un paseo por los alrededores del castillo. Que iba a ver a Hagrid y que si querían lo alcanzaran allá. Hermione le hizo un vago gesto de asentimiento, medio levantando la cabeza de unos libros que revisaba con Raphael Lupin. Las investigaciones iban de lo más bien, aunque el muchacho no era capaz de comprender por qué su amiga se interesaba tanto en la manipulación astral de los elementos, un tema que no se trataba hasta séptimo, con un profesor competente en Metamagia Elemental, y que, por supuesto, era muy complicado de entender, más de poner en práctica (N/A: Ya Rapha, ahora sabes qué estás buscando ;)Se embozó en la capa invisible y corrió a encontrarse con Lynn, esquivando por milagro a Snape, que pareció olerlo antes de que llegase al vestíbulo.
L- ¿A dónde vamos? -.
H- A la Casa de los Gritos... -.
L- Pero... -.
H- Hay otra forma de llegar allá -. Elrond (el gato de Agatha) los estaba aguardando, y solícito, fue a tocar el nudo para que se abriera el pasadizo secreto. La chica no pudo evitar que un brillo se apoderara de sus ojos, un brillo de astucia. Utilizaría sin duda ese lugar en lo futuro.
L- ¿Hablaste con la Vane sobre esto? No quiero que me pongas caritas después -.
H- Ya lo hice ¿A qué vienen tantas velas? -. La chica acunaba en su regazo un bolso de cuero, del cual sobresalían las barras de cera roja.
L- El hechizo de invocación será un poco diferente. No es nada del otro mundo -.
Mientras tanto, Agatha y Remus se encontraban en las Tres Escobas. Agatha le tiró por sobre la mesa la carta de Caín.
Ag- ¿Muy ocupado como para mandarme una lechuza tú? -. Le preguntó con voz cansada, por sobre su vaso de jugo (el brebaje que le había mandado Apolus en la tarde demandaba que no bebiera ni una gota de alcohol, ni fumase. Nada que no fuera natural debía invadir su cuerpo) El hombre dejó escapar un bufido.
Rem- Bocón... -.
Ag- Le pago para eso. Remus, sé que te está afectando más de lo que debiera, y quiero saber si acaso estás... -.
Rem- Mira, háblame de lo que hizo Harry. Lo que sienta o no, no es de tu incumbencia -. Replicó molesto.
Ag- No... No lo voy a hacer hasta que me lo digas ¿No entiendes que te está envenenando por dentro¿No ves que te está consumiendo esto? -.
Rem- No es tu problema Agatha... -.
Ag- Hace mucho que lo es, Remus John Lupin. Desde que me dieron la misión y regresé, es mi asunto. No olvides que te conozco mejor de lo que quisieras. No en vano te he espiado desde que tenía once años... -. Le dio un beso rápido en la mejilla - No soy tu amiga, pero si tenemos muchos secretos en común. Por honor a eso, por honor a lo que sabemos y por proteger a Harry, dímelo -.
Rem- No metas a Harry en esto... -.
Ag- Sí que lo meto -. Repuso, enojada - Más que por su dolor, él quiere regresar a Black a este plano por tí. Te ve triste, pensativo. Piensa que es porque te falta la amistad de otro como tú, y no es por eso, es por otra cosa. No permitas que este teatro estúpido siga. Dime qué te pasa, para poder hacer las cosas más sencillas -.
Rem- Lo sabes muy bien - Dejó escapar, derrotado. - Es precisamente por eso... -.
Ag- ¡Cobarde! -. Luego, cambió el tema. Era todo lo que necesitaba saber - Oye¿por qué no me dijiste de la verdadera identidad de Voldemort¿Por qué me siguen guardando secretos los de la Orden, eh? -. Y le dijo todo lo que Harry le había contado a Apolus, incluso esas palabras tan raras de Black... Eso de que no aceptara nada que viniera de Agatha. También le habló sobre la ubicación de la casa de Pequeño Hangleton, y de lo poco que le había costado a Apolus hallar la tumba del padre de Tom, y las evidencias que habían quedado allí de la batalla entre Harry Potter y Lord Voldemort. A pesar de que estaban en un cuarto privado, hablaban muy bajo, y cada cierto tiempo echaban hechizos de impasibilidad. Era la única protección que podían tener.
Rem- No creo que Harry lo hubiese hecho solo -. Replicó al escucharlo todo. Llevaba mucho tiempo pensándolo - Él no es capaz de conjurar magia tan poderosa y quedar indemne.
Ag- ¿Miau¿Cómo que no¡Él no es capaz de mentir sin que yo lo pille! -.
Rem- Una cosa es usar indiscriminadamente la Legeremancia y otra, es conocerlo. Harry ha cambiado, es verdad, pero no tanto. Y te lo digo: ese tipo de magia demanda mucha energía, y en alguien de la estabilidad de Harry, eso lo habría dejado, por lo menos, dos días en cama. Ni hablar de repetirlo tan luego -.
Ag- ¿ Y desde cuándo tú sabes tanto de las invocaciones a los espíritus? -.
Rem- Desde que iba a un lugar llamado Biblioteca, y que tú, obviamente, pasabas por alto. Tiene 16 años, es un niño con un cuerpo que no ha llegado a la madurez. Y si Severus no ha dado señas de haberse enterado, es porque Harry no lo ha hecho. ¡Es magia Oscura! Piénsalo un poquito -.
Ag- AHHHHH! Si es así, Tengo que ver a Harry COMO UN SLYTHERIN ¿NO LO CREES? -. Declaró, abrumada. La habían hecho tonta, y todo porque no estaba en condiciones de hurgar en la cabeza de nadie.
Rem- Todos tenemos secretos, y todos mentimos. No es bonito, ni correcto, pero lo hacemos ¿No me lo dijiste alguna vez? -.
La mujer bufó, y mandó a pedir un vaso de cerveza, que no se tomó porque ya era la hora.
Ag- Hasta acá llego yo -. Murmuró al llegar a la verja que separaba la calle de la casa - Ahora, es cosa tuya lo que suceda allí. Pero Remus, por lo que más quieras, sé sincero con Harry, él debe saber que tú... Que tú ya no quieres ver a Sirius. Que lo prefieres muerto y enterrado a tenerlo a tu lado-. Y se alejó, embozada en su capa negra, con su cabello cayéndole a la espalda, tan brumosa y extraña como un fantasma.
Remus entró, suspirando. No le iba a decir a Harry una cosa tan aberrante como esa. No estaba en sus manos hacerlo cambiar de opinión. Si quería ver a Sirius una y otra vez, era su capricho.
He aguantado por años este secreto. Nadie me lo va a arrebatar, nadie... Es todo lo que me queda para sostener esta estúpida sonrisa
Así que cuando Harry se le echó a los brazos, tan alegre, su decisión estaba absolutamente tomada. Iba a actuar de nuevo. Iba a mostrarse feliz de ver a Sirius, al que ya sabía vivo, y otra vez prisionero. Usaría la máscara hasta que se muriera, siempre sonriendo, siempre feliz de todo lo bueno... Siempre alejado de su propio corazón, y su dolor.
H- ¡Te echaba de menos¡Vamos ya todo está listo!... Pero debo decirte algo antes: No estoy solo -.
Ya decía yo que era mucho para tí, Harry
Pero nada lo había preparado para la sorpresita que se llevó al ver a una Slytherin de tomo y lomo arrodillada ante el círculo de invocación, con las muñecas abiertas, acabando la preparación.
Rem- ¿Cómo...? -.
H- Eso es lo de menos -. Replicó el chico alegremente - Ella me ha ayudado amablemente. Al comienzo pensé que era una broma, cuando me dijo que veía a Sirius cerca de Agatha, pero cuando yo lo ví... No pude menos que creer -.
Rem- Podría ser una ilusión... -.
H- No lo es. Sirius habló conmigo de cosas que nadie más podía saber... Cosas que eran tema entre nosotros. Yo estuve hablando con el espejo, y él lo sabía todo... Lo sabía -. Había tanto fervor en sus palabras que Remus no quiso insistir sobre este punto. No había ninguna explicación lógica, sólo la fe.
Lynn - ¿Se pueden callar? Esto es un rito serio, no una reunión social -. Murmuró malhumorada. Le estaban echando a perder la concentración con sus cuchicheos.
H- Bueno... -. Dijo algo incómodo - Creo que yo no debo estar más acá. Seguramente querrás hablar a solas con él. No te preocupes por Lynn. Ella no sabe nada de lo que pasa luego de que inicia la invocación. Será como antes, como cuando hablaban encerrados en Grimmauld Place. Nos veremos más tarde -. Y se fue, bajando las escaleras. Lynn miró a Remus a los ojos, y algo pudo adivinar, pero no dijo nada más que...
L- Esto durará poco tiempo, tal vez quince minutos... Ojalá no se extienda mucho en la conversación -. Remus asintió, nervioso. - Y por favor, no lo abrace ni nada de eso. Potter no entendió esa parte del trato -. Murmuró.
Rem- Como digas... -.
L- Lynn Kadyars -.
Rem- ... Kadyars. Muchas gracias -.
L- Ya, silencio -. Sonreía muy halagada.
ADONAI, ADONAI
TAT SABITUR VERENYAM
Remus no podía creerlo. Pronto cada rincón del añoso cuarto se llenó de una luz muy tenue, algunas partículas de polvo como bailando al ritmo de las palabras musicales de la joven...
BHARGO DEBASYA
DHIYO YO NASH PRACHODAYAT
Podía sentir cómo la energía vital se desprendía del cuerpo de la Slytherin, y tuvo miedo. ¿No le haría eso mucho daño?. Quiso detener la invocación, pero ante el sólo gesto, la adolescente levantó una ceja: No podía interferir. Ya había comenzado el rito; detenerlo era aún más arriesgado que continuarlo.
UNLUD SHASOLMON
PERTMAITIN GRED
La cabeza del licántropo se llenó de preguntas¿Qué le diría a Sirius¿De qué hablar con alguien que estaba muerto? Para él no era lo mismo que fue para Harry. Aunque sonara cruel, al verlo atravesar el velo y decirle a Harry que ya no había más nada qué hacer, Remus se había liberado de una pesada carga. Por eso ahora su desazón...
ASHOR- MIMPALIEL
GRED-CAGUR ASHOR-MIMPALIEL
... Porque ya había perdido a James, y a Lily, porque había perdido a Sirius una vez y otra vez, y otra vez... Porque ya su corazón estaba viejo, y no soportaría el dolor, ya no quería más dolor. La paz que lo había invadido en lugar de la tristeza luego de esa aventura en el Ministerio se trocó en amargura y enojo cuando las lucecitas se condensaron y el rostro de Sirius comenzó a hacerse visible... Él no era tan fuerte, ya no era joven, ya no tenía nada más qué hacer en el mundo...
GASHTNIN GANAIFAR TUMAR-OLOD
BUER TAT SNAITUR VERENGAN
Sólo quería acabar con toda esta locura. Sirius nuevamente abrió los ojos, desorientado, aún antes de que su cuerpo estuviera completamente formado. Remus pudo leer sus labios antes de que tuvieran voz...
ADONAI-ADONAI
Moony...
Rem - PadFoot -. La máscara otra vez. La emoción se apoderó de sus ojos miel, en un encuentro tan íntimo que no necesitó del abrazo, únicamente de que Sirius le tocara la cara y quitara de sus mejillas las lágrimas solitarias que se asomaron.
S- Te echaba de menos. Pensé que Harry se tomaría más tiempo... Aquí ha pasado sólo un parpadeo -.
Rem- Han pasado dos días en el mundo real -. Replicó, por decir cualquier cosa - Siempre sí James tenía razón ¿no? -. Sonrió débilmente, recordando una vez que se habían enfrascado los cuatro en una conversación sobre el Velo. En sus últimos años de colegio, las ejecuciones de los Death Eaters eran muy populares. James decía que el tiempo era diferente allí, basados en las investigaciones que habían hecho ellos, y el padre de James, Jonathan (N/A: Lo sé, no se me ocurrió un nombre mejor. Acepto sugerencias) Padre e hijo estaban obsesionados con ese tema, y Sirius les seguía la corriente. - Estarían encantados con una narración desde DENTRO del Velo -. Ambos sonrieron. Estaban pensando exactamente lo mismo. Hasta ese punto había llegado la unión de Remus y Sirius... Eran como trillizos, con James. Los tres eran parte de un todo, aderezado con los sentimientos más humanos de Peter Pettigrew...
Los Merodeadores...
S- Me siento muy solo en este silencio... Me gustaría que el tiempo fuese más lento para seguirte mirando, para cerciorarme de que esta es la realidad, y no un producto de mi alma, que no me voy a perder y explotar como lo han hecho los otros que están conmigo... Sólo tú y Harry me tienen atado a la vida, porque sino... Me hubiera perdido hace mucho tiempo -. El talante de la conversación era completamente diferente. Ya no más risas. Con Remus podía mostrarse tan serio y desesperado como sólo se había mostrado a sí mismo en Azkabán, recordando, rememorando... Pensando...
Rem- No olvides tu venganza... -.
S- ¿A quién engaño? -. Repuso sinceramente - ¿A quién, Moony?. Yo ya no creo en la venganza. Si tuviera a Peter le partiría la cabeza y lo desparramaría a los pies del Innombrable, pero ya no tengo fuerzas para eso. ¿De qué me va a servir? Me han dicho tantas cosas aquí, tantas otras he visto con los ojos de mi razón, limpia ya del aturdimiento... Sé que esto no va a calmar mi sed, que no calmaría mi rabia... Perdí a casi todos los que amo, y ahora tengo que luchar por los que me quedan... El regalo que James dejó en mis manos al nombrarme Padrino... Y tu sonrisa -. Remus permitió que esa falsedad siguiera su curso, y sonrió como por reflejo. Siempre que Sirius hablaba de su sonrisa, Remus se sentía algo azorado, sentimiento que se intensificó durante el último año...
Rem- No te preocupes, te sacaremos. Harry va a buscar el método, con o sin mi ayuda, pero, en serio ¿Quieres volver? -. Se miraron a los ojos, las pupilas de Sirius veladas por una suave telilla - ¿Deseas tener un cuerpo aquí, con todo lo que ello conlleva? -. Black bajó la cabeza, su cuello incapaz de sostenerlo por alguna razón, Remus pensó que había captado la verdadera intención de la pregunta, pero no, Eso no podía ser posible.
S- Hay... Razones muy poderosas que puedo esgrimir para regresar, y verdades aún más grandes que me llevarían a decir que no... -. Meditaba mucho sus palabras antes de decirlas - Aunque ya no podré ser el mismo, aunque ya no habrá nada más que el amor de Harry, quiero volver -. Lupin se quedó callado. ¿Qué verdad sería esa que mencionaba tan subrepticiamente? Millones de símbolos en cada gesto de ambos, millones de símbolos tan privados, que las palabras eran algo extras. - Dime Remus, a pesar de lo horrible que soy, a pesar del dolor que te he hecho sufrir... ¿aún me quieres¿Aún me aceptarías contigo?
Debe saber que tú... Que tú ya no quieres ver a Sirius. Que lo prefieres muerto y enterrado a tenerlo a tu lado Las palabras de Agatha. Remus tocó ese rostro tantas veces acariciado, tantas veces marcado por el rictus amargo de un recuerdo que no podía ver, sintiendo un gran vacío en la panza.
Rem- Siempre estaré a tu lado Sirius. Eres lo único que tengo de entonces... Yo te querré siempre, eres mi mejor amigo... -.
L- Ya... No puedo más... -.
Sirius, al saber que era el último momento abrazó a Remus y le susurró al oído.
S- Esperaré... Por favor Remus, aleja a Larson de Hogwarts. Ella es un monstruo, capaz de hacer de Harry un monstruo también... Que no se le acerque, protégelo, vuelve al castillo... ¿no recuerdas lo que nos hizo?... Es capaz de cualquier cosa, esa bastarda... -.
Rem- ¿por qué dices eso? -.
S- No es por su tía, no es por su madre, ni por su familia... Acuérdate Remus... De lo que te hizo, de lo que nos hizo... -.
Un ruido sordo, y el contacto se había acabado. Lynn se desmayó y su cuerpo se había golpeado fuertemente en el suelo. Remus le tomó en brazos y bajó las escaleras, pisoteando el círculo mágico, barriendo la sangre con sus zapatos viejos.
Harry estaba subiendo cuando se los encontró a los dos, y la cara que llevaba su "tío" le desconcertó. Se veía muy triste y preocupado, pero cuando se miraron a los ojos, Lupin se esforzó por dejar que la calidez se apoderara de cada célula de su cuerpo. Estaba contento.
Tenía que estarlo.
Rem- Tenemos que llevarla a Hogwarts. Está desmayada y le vendrá bien un largo descanso. Harry, creo que es mejor que dejemos este juego de llamar a Sirius -.
H- Sí... ¿Lo dices por Lynn? -.
Rem- Ella estaba usando parte de su vida. Por eso está así, y claro, también por Agatha. Vamos -.
Por el camino se fueron hablando. Harry le contó todo lo que había hablado con PadFoot, y Remus, por su parte, le había contado de su deseo de volver.
Rem- Te conozco -. Lo acusó cuando el moreno se quedó callado.
H- ¿Qué?... -.
Rem- Nada... -.
-------------------
Raphael se mostró bien molesto al saber que Remus venía y no tuvo la deferencia de avisarle. De todos modos, Harry los dejó a solas. Antes habían pasado por la enfermería, y luego de despertar al pobre Uther (Que se asustó un poco al ver las condiciones en que le traían a la Slytherin), dejaron a Kadyars, claro que Potter no estaba muy tranquilo con eso, pues Agatha estaba metida en la enfermería, profundamente dormida con la ayuda de un par de ritos de protección que el solícito Medimago le había echado encima para que dejara de odiosear.
