"You look in my eyes and I'm screaming inside that I'm sorry.."

"Mademoiselle Giry-Emma se acercó a ella, en un principio amable- Simplemente responde a todo lo que te preguntemos y todo esto no supondrá ningún problema. Saldrás de aquí, sana y salva"

No se lo creía. Absolutamente nada de lo que esas personas le dijeran era de fiar a partir de ahora. Sólo le quedaba enfrentar la situación, responder y rogar a Dios que la dejaran marchar.

Asintió, esperando a que los demás prosiguieran.

"Ha llegado a nuestros oídos-Édmond intentaba calmar su visible nerviosismo con sus gentileza- que conoce a Christine de Chagny...o Daaé, ya que ese es aparentemente su apellido de soltera"

Le miró tímidamente a sus ojos claros, asintiendo.

"Bien, bien..- sus pasos eran astutos, aguardando cada respuesta-¿Y qué fue lo último que supiste de ella?"

Un nudo se formaba en su garganta. ¿Debía decirlo? Sentía que de algún modo estaba defraudando su confianza de alguna forma. Respondería, sí, pero tan sólo lo poco que sabía..

" Lo último que supe de ella-tragó- es que era una mujer casada y vivía en tranquilidad.No volví a saber más de ella, hasta que leí la noticia de la muerte del Vizconde. Desde entonces no sé de su paradero.."

" Pero eran amigas desde hace tiempo, al menos eso dejó ver claramente la carta que llegó a nuestras manos"

La carta. Ya le había contado su madre acerca de esas dos personas que la visitaron inesperadamente. Pero parecía ser que más de uno se había hecho eco de la misma. Temía por la vida de Christine, pero no iba a dejarles el camino fácil a raíz de su información

"Sí- una entereza que hasta hace unos minutos no tenía se adueñó de ella- de hecho, ella era y es mi mejor amiga. Estuvimos juntas durante años en el ópera populaire..pero por..-No.No lo digas. No nombres lo que ocurrió, ni a nadie más- ciertas circunstancias y su compromiso con el Vizconde decidió marcharse a las afueras de Paris. La visité una tarde, y desde entonces no sé absolutamente nada más, Monsieur"

Édmond sonrió, poco a poco iba consiguiendo lo que quería- " Entiendo.Verás, la desaparición de una vizcondesa no es absolutamente algo fácil, y es además preocupante ahora mismo. ¿No..sabes donde puede haberse marchado?"

Ella negó con la cabeza. Parecía ir calmándose...hasta que la ruda voz de Jacques interrumpió el silencio.

" Édmond. Creo que será mejor que hable yo con la señorita.."


Su corazón dio prácticamente un vuelco cuando volvió la vista hacia la cama. Ahí estaba, su cuerpo cubierto por las sábanas mientras se cubría más al darse cuenta de que no llevaba más que su corsé avergonzada.Su mirada directamente centrada en la de él. Ambos como asimilando que se tenían uno frente al otro.

La mirada que Angie vió en sus ojos fue lo más doloroso que pudo experimentar: En todo el tiempo que habían estado juntos, jamás, en ninguna de sus ocasiones íntimas, la había mirado de la forma en la que la estaba mirando a ella. Sentía como si alguien con su mano estuviera oprimiendo su pecho hasta el máximo. Bajó la cabeza, lágrimas apunto de salir de sus ojos..

Erik finalmente se acercó hasta ella. Lo que verdaderamente quería era tomarla entre sus brazos y confesarle lo mal que lo había pasado pensando que la iba a perder. Pero no. De nuevo, su lado frío pudo con él.

"Madame..-medio sonrió, ocultando su alegría interna- veo que ha despertado"

Intentaba hablar, de nuevo, esperando que su voz volviera, pero no era así. Dios, todo aquello se parecía cada vez más a lo que siempre había temido..¿la odiaba¿Había acabado aborreciéndola? Sus ojos lo miraban triste, queriendo gritar por dentro lo mucho que lo sentía.

"Sería mejor que no forzara la garganta, el frío debe haberle dañado las cuerdas vocales"-se sentó de nuevo en su silla.

Ella se limitó a asentir,dolida, y lanzar una mirada cuestionante hacia la muchacha pequeña y de cabellos cobrizos

" Angie..-la llamó, ésta acudiendo enseguida reprimiendo su dolor- ella ha estado ayudándome durante todo éste tiempo. Es mi asistenta"

Christine la dirigió un gesto amable, sin embargo ella no pudo corresponder de la misma manera, sin embargo. ¿Asistenta¿Cómo había podido definirla así? Su dolor aumentaba por segundos...

Se volvió hacia ella- "Querida¿serías tan amable de preparar un baño caliente para la señorita? Aún está en shock por el frío del agua"

Resignada, asintió, retirándose del cuarto. Una vez se retiró, Erik volvió su mirada hacia ella. Durante unos minutos sus miradas se cruzaron. No pudo evitarlo, sus ojos se tornaron vidriosos ante su mirada, e instintivamente se lanzó hacia él en un abrazo, con tanta fuerza que le costó mantener el equilibrio.

En ese momento no supo que hacer, ni cómo reaccionar al sentir sus dos brazos alrededor de su cuello al mismo tiempo que, silenciosamente, lloraba.

Xxx

Jacques se acercó peligrosamente hacia Meg. La tomó bruscamente de los dos brazos.

"Deja de hacerte la tonta con nosotros¡¿Entendido!- sus dos ojos grises se clavaron en los de ella- Y ahora, dinos dónde demonios estás Christine de Chagny"

Tragó. Su cuerpo temblando de manera violenta- " Le estoy diciendo- los sollozos interrumpían sus palabras- todo lo que sé. Monsieur, por favor..déjenme ir"

Édmond volvió a intervenir

"Jacques, la muchacha no nos es útil y ya la hemos tenido retenida demasiado tiempo. Dejémosla marchar.."

Él respiró rudamente. Llevándose una mano a su frente, exasperado

"De acuerdo. No la necesitamos. Emma, Marie, llevadla fuera"

Ambas accedieron, tomandola cada una por un brazo.

" Más te vale que no cuentes nada, pequeña"

Ella se fue corriendo, sin decir ni una palabra. Quería llegar a su casa lo antes posible. Necesitaba a su madre con ella más que nunca.

Madame Giry recién entraba al apartamento. Visiblemente alterada y apartándose las lágrimas, se sentó en la silla del salón. Dos días había estado buscándola por todas partes, sin dar con ella. Temía lo peor. Su hija había sido arrebatada de su lado vilmente. Se llevó una mano a su entrecejo, cansada. Justo cuando iba a levantarse, la puerta se abrió.

Su hija aparecía ante ella. Sus ojos cansados, y su cara empapada. Su cuerpo temblando.

"Madre..-fue hacia ella, abrazándola- quieren saberlo, quieren saberlo todo"