Hola, otra vez :)
Nidia, muchísimas gracias. De verdad que es genial que mi historia esté gustando mucho y suscitando que la gente deje reviews, no sabéis cuánto me anima. Éste fic realmente lo estoy escribiendo con todo el corazón, mi pasión por ésta maravillosa obra y..qué demonios, que no puedo dejar de escribir :p
Es verdad que no hay mucho fic en español...yo también he tenido que recurrir a leerme alguno en Inglés para calmar un poco la "adicción" a fics de phantom. Aunque missing ahora mismo ocupa todo mi tiempo ;)
Oh,de nada por el pequeño momento tierno. Habrán más, pero tal y como tú has dicho...no os animéis demasiado pronto. Efectivamente, se aproxima una tormenta..y está cerquita.
De nuevo, gracias por vuestra fidelidad.Tengo muchos capítulos ya hechos, asi que iré dejando updates a diario ( o haré el intento.. :) )
Lovephantom83
PS---> Eh, bien, escribo ésto para intentar rectificar una cosa que la opción de subir y cambiar el documento no me deja. Hay un trozo de un diálogo que, por alguna extraña razón, no me deja poner ¿completo? o al menos se come parte de la frase..es ésto
"¿Entonces por qué vas a la residencia si no?-medio sonrió- Nosotros no dejamos las cosas pasar por alto, sabemos que ocultas algo que evidentemente nos más que para tomar el té, diría yo"
Sólo una pequeña nota de autora, para que no os extrañéis..
PS II---> Agh¿Qué demonios...? Ni siquiera volviéndolo a pegar. Bien, las palabras que faltan son "interesa" después de nos y luego después de un punto y seguido "conversaciones"...disculpad las molestias...
" I love you even more than I did before,
But what can I do? For you don't love me..
And I'll always be..
Crying over you!"
Apoyó su cuerpo en la puerta de madera. Su respiración rápida, su frustración incrementando por cada segundo al mismo tiempo que su dolor...
Estaba claro que ya se habían agotado todas sus fuerzas
Había ido hasta allí con la inicial intención de buscar conversación, quizás de...volver las cosas a donde estaban a través de una confesión limpia de sentimientos que no acabara en ningún tipo de discusión.
Pero ya no había nada que pudiera hacer. En un simple gesto toda esperanza que pudiera quedarle se esfumó. Vio tanto amor, tanta dedicación,tanta ternura. Cosas que ella no había sentido nunca cuando estaba en su compañía.Hubiera llegado a hacer todo lo posible por recibir de él la misma mirada que le dedicó a ella mientras descansaba su cabeza en su hombro, sus dos manos tomando su brazo cariñosamente...
Christine era perfecta, demasiado perfecta. Tanto que se le hacía odioso.
Se miró al espejo, que le devolvía el reflejo de una mujer cansada, desesperada por recuperar lo que creía suyo y al borde del colapso
¿Suyo? Por Dios¡no había sido suyo nunca! Desde el principio, siempre, había estado ella ahí.Aún cuando desaparecíó, aún cuando comenzaron a conocerse.
También cuando fue tan estúpida de creer que él empezaba a amarla.
Parecía que Erik, o el fantasma de la ópera, sólo tenía corazón y vista para una persona.
Fue dando pasos rápidos hasta el mismo. Su pelo ese día lucía suelto, pero despeinado por el viento y los viajes de un sitio a otro.
Miró hacia su mesita de noche, y a la tijera que utilizaba no muy a menudo.En caso de algún arreglo, o algo parecido. La tomó entre sus manos, decidida.
"No voy a destrozar mi vida más por ti, y juro que a partir de ahora lo pienso cumplir"
Se había lanzado una promesa a sí misma. Tenía que hacerlo así
Las tijeras dieron el primer corte en su melena
No más dolor por ti..
Y el siguiente, haciendo que los cabellos fueran falleciendo en el suelo
No más desesperación por ti..
Un nudo se le hacía en la garganta, apunto de llorar, al tiempo que continuaba
No más lágrimas por ti..
Bajó su cabeza por un momento, intentando asimilar las palabras que se había dicho a sí misma, preguntándose si podría cumplirlas..
Una voz, muy conocida llegó a sus oídos acompañada por el sonido de la puerta al cerrarse.
"¿Te has cansado ya de intentar parecerte a ella, Angeline?"-Su tono rudo, irónico, furioso.
Se volvió hacia él. Quería rudeza, quería furia. Bien, la iba a tener aunque por dentro su alma se estuviera rompiendo.
"Que yo sepa no te he dado ninguna clase de permiso para que entres en mi apartamento siempre que te plazca"
Una risa escapó de sus labios, mofándose del comentario- "Nunca lo he necesitado, es más, en alguna ocasión he sido bastante bien..recibido"-La última palabra la pronunció dejando caer una insinuación bastante evidente.
Aquello la encendió en furia. Encima tenía el descaro de nombrarlo.
Se acercó hasta él, dejando sin pensarlo dos veces una torta en su mejilla derecha-"¿Cómo te atreves! Pensaba que a lo mejor podía quedar aunque fuera un poco de respeto hacia mí en ti- rió en su cara, prácticamente escupiendo todo lo que decía- Incluso, por un momento, pensé que eras la persona con el alma más preciada que se podía encontrar en el mundo-le miró con auténtico odio- Has conseguido que todo pensamiento positivo que haya podido tener sobre ti desaparezca-ahora estaba calmada, pero fría- No tienes alma, no tienes corazón para nadie excepto para la persona que cubre toda tu obsesión- se apartó bruscamente- Y márchate ahora mismo, no quiero verte y éste no es tu maldito teatro de la ópera"
Estuvo sin reaccionar durante un segundo. ¿Su teatro de la ópera? De nuevo, había averiguado más de la cuenta...eso y asimilar el arranque de pequeña rabia física hacia él...
Y no lo quería reconocer, pero aquellas palabras le habían dolido.
Ella estaba de espaldas a él, esperando a que se marchara. La volvió girándola sin mucho cuidado
Vaya...-su voz era baja, pero tan terriblemente amenazante que daba escalofríos- Veo que ya has conocido al asesino, monstruo,obsesivo, frío y sin sentimientos "fantasma de la ópera"¿no? Efectivamente, querida, éste no es mi teatro pero pensaba que había la suficiente confianza entre los dos-la obligó a mirarle- ¡ Y habla de obsesión una persona que se riza el pelo con el objetivo de que yo te preste más atención!-medio sonrió-¡No tienes entonces idea de lo que es el amor si lo ves como un simple cambio físico!"
No pudo más. Eso último que había dicho sí que no era cierto. Lágrimas comenzaron a salir de sus ojos.
"¡No debo conocerlo si resulta que llevo estando a tu lado desde que te conocí!-gritó- ¡Si he estado junto a ti en el momento que más destrozado te sentías sin huír horrorizada al ver tu rostro completo¡Sí...-finalmente terminó resignada- me he entregado a todos y cada uno de tus besos y caricias sin recibir nada a cambio, y creyendo que podrías amarme!-su voz ahora era la desesperación personificada- Puede que no lo conozca, Erik. Tienes razón"
Él no dijo nada, simplemente la miró..
Era cierto. Si algo había quedado claro es que se había entregado a él...pero ya era tarde para retirar esas palabras.
Ante la falta de respuesta, volvio a lo que estaba haciendo antes de que fuera interrumpida.
"La Angeline que un día conociste e incluso te atreviste a besar y acariciar ´-continuó cortando- no es la misma nunca más. ¡Te odio!- lloraba descontroladamente- Ya no significas absolutamente nada para mí..."
Nunca había gritado algo tan contradictorio a lo que gritaba su corazón.
Ahora su rabia se había transformado por completo. Por alguna razón, no podía soportar verla tan rota y sentía que si no la frenaba podría cometer alguna locura.
"Angie, escucha..."-fue a tomar la mano que sostenía la tijera, pero ella la retiró rápidamente
"No me toques. Tu piedad y compasión no los quiero-le miró a los ojos, era horrible verlos ahora enrojecidos- Vete¡Vete!-golpeó ligeramente con su puño su pecho- Por Dios no hagas las cosas más difíciles.."
Y rompió de nuevo a llorar, apoyando su cabeza inconscientemente en su pecho
Erik la rodeó con sus brazos, y con una pequeña caricia en su pelo para que se calmara, pudo tomar las tijeras de su mano.
No supo cuánto tiempo pasó hasta que sus llantos cesaron.
Quedaban sólo escasos pasos hasta la residencia. Todo parecía ir en su camino correcto, o al menos eso pensaba..aunque por otra parte la reacción que había tenido la muchacha ante una respuesta tan simple le había dejado inquieto.
¿Es que acaso sabía más de él de lo que decía? No, eso no podía ser...jamás recordaba haberla visto antes de ese momento.
¿O era el abrigo lo que la había hecho darse cuenta de algo?
Parecía absurdo pero no como para no considerarlo. Era perfectamente consciente de que esa prenda, habiendo estado con él prácticamente toda su vida y añadiendo el hecho de la explicación de sus padres adoptivos, indicaba que posiblemente..sería lo único que dejó su padre antes de que le entregara a aquella familia
Aún así, ahora lo que rondaba su mente era algo distinto
¿Qué tenía que ver ella con él, o su familia?
Un gruñido de frustración escapó a su garganta. Sea lo que fuere que ella hubiera averiguado, no pensaba dejar que interfiriera en sus conversaciones. Las necesitaba, y más ahora que estaba esperando una respuesta.
"Vaya, vaya vaya Monsieur Édmond...- Reconoció la voz de Jacques en mitad de aquella calle-precisamente nos preguntábamos por usted"
Su mirada se encontró precisamente con quienes menos deseaba...
Maurice y su compañero.
Guardó la compostura-"¿Señores..? He de suponer que quereis algo de mi"
Maurice medio sonrió-"¿Y cuándo no nos hemos visto con algún propósito fijo? Y ahora, si no te importa, nos gustaría que te dejaras de rodeos. Supongo que tienes información interesante que contarnos"
Frunció el ceño. Sabía a lo que se referían, pero iba a callar-"¿Información? Mucho me temo que no, ya os dije que en tal caso..."
Jacques fue directo-"¿Entonces por qué vas a la residencia si no?-medio sonrió- Nosotros no dejamos las cosas pasar por alto, sabemos que ocultas algo que evidentemente nos más que para tomar el té, diría yo"
Sus ojos se abrieron ligeramente en sorpresa, la cual supo camuflar bien con frialdad- "Las conversaciones que yo tenga o deje de tener, me parece, que no son incumbencia de nadie excepto mía"
Éste fue hasta él , agarrándole de la camisa con rabia.
"Creo que se te olvida que trabajas para nosotros¿no?- la rabia inundaba los ojos grises de Jacques- así que mucho me temo que sí nos incumbe"
Se miraron durante unos segundos, cada uno conteniendo su propia rabia, hasta que fue Édmond finalmente el que se apartó de forma brusca.
"Contactaré cuando sepa algo de interés. Por el momento, creo, que no es necesario que nos volvamos a ver"
La rudeza se dejó notar en su tono, y sin dejarles responder, se marchó con paso rápido.
Xxx
No sabía cuánto tiempo había estado abrazada a él llorando, sólo que no hubo manera de que pudiera evitarlo. La necesidad de tenerle cerca de nuevo había podido con ella, y en parte se culpaba por ello
Pero por otra no.
Aquello había sido como un bálsamo sobre sus heridas, como alcohol para secarlas. Volvió a suspirar, apoyando su cabeza sobre la almohada.
Al menos, el hecho de saber que se preocupaba por ella y de que había estado a su lado en el que había sido su momento más bajo..
En realidad, era como si la hubiera devuelto el favor, pero de todos modos...aquello la hizo sonreír y rendirse al sueño
