Los llantos ahogados habían ido cesando de modo progresivo mientras la sostenía entre sus brazos. A pesar de que dos minutos antes le hubiera dicho que no la tocara y suplicado que se marchara...pero sus manos se habían mantenido sujetas a su chaleco mientras descargaba todas aquellas lágrimas. Notó que su cuerpo se relajó en un preludio del estado onírico y al sentir que la respiración iba bajando su ritmo la apartó de su abrazo dejándola suavemente sobre la cama y cubriéndola con la sábana.

No tienes sentimientos, no tienes corazón...

Ciertamente, hace un tiempo hubiera podido jurar que era así. Jamás se había preocupado por nadie, ni había sentido compasión, ni pena, ni simpatía..

Sólo frialdad y odio.

Había matado con sus propias manos a mucha gente, sin parpadear, sin costarle.Sí, sin sentimientos o corazón alguno. Incluso una semi sonrisa se formaba en sus labios cada vez que alguien caía en sus redes, cuan insecto que se queda atrapado en la tela de la araña que acecha desde la distancia a su presa.

Pero¿acaso le habían enseñado a diferenciar lo bueno de lo malo, o conceptos éticos¿Acaso había tenido el trato amoroso de una madre, o de alguien?

No, de hecho aún recuerda a la primera persona que no acompañó a las risas de todas aquellas personas que lo hacían, después de haber sido apaleado por aquel...odioso,sudoroso,materialista, abusador y corrupto individuo.

"El hijo del diablo"

Qué apodo tan apropiado para nombrar la "atracción" que él representaba.

Pero fueron los ojos de aquella muchacha los que por primera vez le miraron sin miedo, o mofa.

La que le sacó de aquel infierno cuando él tenía tan sólo 15 años.Sí, aquella chica..hoy en día mujer, fue la primera en mostrar algo de amabilidad. Al menos, en su teatro, no volvería a ser apaleado.

Pero aún así, había crecido solo, se había tenido que educar solo. Se creó su gran casa, su lugar de creación, el sitio en el que comenzó a desarollar su arte, pero ahí pasaban los días,semanas meses y años. Actuando, exactamente, como un fantasma.

Fue en realidad Christine la que le enseñó que los buenos sentimientos, de hecho, existen y que no todo el mundo era igual de descorazonado.Que existía un poco de...luz entre todas aquellas velas y composiciones. Un poco de luz dentro de su modo de vida prácticamente inhumano. La única, aparte de su rescatadora a la que aún admiraba, que pudo saber que era un hombre.Algo más que rumorología y una sombra en danza. Incluso dejó tirada su propia felicidad por darle a ella la suya.

¿Es que no lo entiende¿Que no se trata de una simple obsesión o capricho¿Que si tenía sentimientos o corazón se debía precisamente a lo importante de su presencia en su vida?

Llevándose una mano a la frente, retiró un mechón de pelo rebelde hacia atrás, revuelto producto de la discusión anterior...

Al abrir la puerta la vio, sentada en la silla con expresión confusa y preocupada.

Simuló tranquilidad, a pesar de que sabía que en esos momentos le era imposible. Esto sencillamente estaba pudiendo con él- " Todo está en orden, no hay de qué preocuparse. Solo aclararle algo a la muchacha sobre el trabajo, eso es todo"

Continuó cruzando el salon con la simple intención de ponerse algo más comodo y relajarse, o trabajar, tener la mente en otra parte...pero su mano le frenó

Y su mirada.¿Le estaba suplicando que le fuera sincero?Dios, no podía evitar que sus sentimientos fueran transparentes ante ella.

"Tengo algún trabajo que atender y tú debes estar algo cansada.Quizás podamos continuar con la música en algún que otro momento.."

Avanzó sus pasos pero escuchó el moverse de la silla y los pequeños zapatos de ella contra el suelo, llegando hasta él y tomando su mano en la de ella. Abrió sus labios, pero frustrantemente su mudez seguía persistente..solo un casi inaudible e incomprensible leve sonido salió de su garganta.

El sentir de su tacto le hizo volverse.Era...todo demasiado complicado como para contárselo en ese momento. Inconscientemente se dio cuenta de que uno de sus dedos estaba proporcionando pequeñas caricias a su mano y sus dedos se habían semi entrelazado con los de Christine.

Suspiró,mirando hacia otro lado brevemente, después a ella de nuevo-"Solo estoy algo cansado, eso es todo..."

Y con esto separó su mano, yendo hasta su cuarto y cerrando la puerta tras de él.

Bajó su cabeza, resignada. Había visto ese..pequeño brillo de tristeza en esa última mirada...

Estaba apagado y confuso. Sabía que no la estaba diciendo la verdad

Porque pudo escuchar perfectamente a Angie gritar que le odiaba

La mañana siguiente fue algo necesario. Aún el recuerdo de lo sucedido estaba en su mente, al igual que lo agridulce de sus brazos confortándola hasta que cayó medio dormida.

Pensó en un pequeño detalle a modo de disculpa, o de intentar comenzarlo todo de nuevo. Quizás una conversación tranquila..

"¡Por Dios, Édmond!-casi rió ante la situación-vigila por donde vas, si llegan a caerse éstas cosas.."

" Mis disculpas -rió-parece que vamos algo precipitados los dos ésta mañana-con el fortuito encuentro, no se había fijado en su melena..estaba iregular y más corta-Querida¿algún accidente?"

Cayó en la cuenta. Claro, su pelo-"Sí..una tontería en realidad,-mintió- no lo tengas en cuenta"-sonrió amable al mismo tiempo que él la retiraba a un lugar menos concurrido.

"En tal caso supongo que no debo de preocuparme,ya te dije que no querría tener que regañarte-medio sonrió -¿Y bien? No he sabido de ti en unos días¿Ha mejorado tu situación? Te fuiste muy bruscamente la última vez que hablamos..."

Esa última afirmación la dejó casi sin respuesta.¿Debería decírselo?

Miró hacia un lado, insegura.

" Lo sé, y lo siento mucho. Estaba...bueno, había tenido un día horrible y me quedaban algunas cosas que atender"

"No pasa nada...-la miró divertido-pero creo que no me has respondido la otra pregunta"

Sus facciones se pusieron serias-"Quizás sea porque no quiero hablar demasiado sobre ello...es todo cada vez más duro y lo paso cada vez peor"

Realmente sentía pena por la chica.Parecía totalmente herida y abandonada a su suerte

"Vamos, vamos..-su brazo la atrajo hacia él- ¿No tienes demasiada vida por delante como para estar pasándolo tan mal?"

Suspiró-"Tú mismo me dijiste que esas cosas no pueden evitarse...y ahora estoy pagando por ello"

" Pero se te olvida que te ofrecí algo en bandeja"

Tenía razón.Entregar a Christine...

"Yo..aún tengo que pensar en ello. No..no estoy segura de si esto está bien.."

"Escucha- la tranquilizó-no tienes por qué tener miedo de lo que pueda pasarte, o las consecuencias. Yo te cubriría las espaldas, y tú tendrías lo que quieres¿no es cierto? Positivo lo mires por donde lo mires..-al verla pensativa, continuó- Ven a verme a mi apartamento en un par de días-la sonrió, extrayendo un papel de su maletín y escribiendo una dirección en el mismo- y hablamos con calma-tomó su hombro-Tengo que irme, pero no lo olvides¿de acuerdo? Nos veremos pronto, Angeline"

Asintió, viéndole marchar.

"Nos veremos pronto..exacto"-su voz poco más de un susurro

Le miró desde la distancia, ya sabiendo quien era ahora. Su propio hermanastro..Pero¿tendría algún día el valor suficiente para decírselo?

Con esto se levantó, tenía algo que comprar antes que nada