UNA NUEVA ORGANIZACIÓN

Comentarios míos

"Lugar"

En el capítulo anterior…

"6,55 pm. Agencia de detectives Mouri."

-Venga, vamos. Iremos en taxi.

-Vale. Allí viene uno. Taxiii!- dice Sonoko.

Se para. Bien, no hay marcha atrás.

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Capítulo 4: Matrimonios oscuros

Adelante. Me preguntaréis: estás segura de lo que vas a hacer? Bueno y si no lo preguntáis, da igual. La respuesta es NO. No estoy segura. Pero quiero mucho a Shinichi, y no quiero que salga perjudicado.

-Ya hemos llegado.-es lo último que quería oír. Le pago, y nos vamos. Es un barrio oscuro, tétrico, y…en fin, óptimo para ese tipo de gente.

-Bueno, a ver…Era la nave más grande. Y tenía fachada despintada.- recuerdo yo.

- Bien, me parece que es aquella de allí.- tiene razón. Qué recuerdos…

Sonoko se pone la máscara de Yukiko. Sí, yo creo que es bastante creíble. Con la bata de científica, y los guantes de cirujana…Y una cámara oculta en el botó superior de la bata. Todo listo.

-Vamos, llama a la puerta. Ah! Y pregunta por Ronnie. Oí su nombre la última vez que entré. Creo que es la jefa. Es la que me dio el veneno. Te acuerdas de la Organización de Shinichi? Pues utilizaban nombres en clave a base de bebidas alcohólicas. Así que puede ser que éstas hayan seguido el ejemplo. Ronnie puede venir de alguna bebida alcohólica…

-Ron. Es el ron.

-Eh? Y tu como sabes tanto de bebidas de este tipo.

-Mi padre es dueño de una pequeña empresa de estas bebidas, y he oído algún nombre…

-Perfecto. Toma. Es un transmisor de los de los detectives juveniles. Yo tengo otro. Si tienes dudas, solo tienes que decírmelo. Es que la cámara no tiene sonido.

-Sí. Vale.

Llama a la puerta. Como la noche lo ha cubrido ya todo con su oscuridad, no a sido difícil esconderme. Me extraña que no haya guardias ni nada vigilando la puerta. En fin…

Veo una mujer más bien bajita, también de negro. Lleva una targetita enganchada al traje. "Wine". Era de esperar. Le hace pasar. Pasillo oscuro. Una puerta al final. Se abre. La misma habitación donde me pusieron a mí, bueno, donde me dejaron a mi. Sonoko habla con la mujer. Enciende el transmisor.

-Me gustaría que me dieran información sobre algunos venenos, ya sean mortales o enco…Digo…O que tengan otros efectos sobre los humanos.

La mato. Casi mete la pata. Vaya susto.

Wine: Sobre alguno en concreto?

Sonoko: Bueno, oí algo sobre un veneno llamado aptx 4869. Es posible?

Wine: Sí, es nuestra última adquisición. Le gustaría ver su composición?

Sonoko: No me gustaría parecer tan directa. Bueno, en realidad, como desde siempre había querido formar parte de una organización así…Tenga.

Oigo el ruido de unas llaves.

Wine: Qué abren esas llaves?

Sonoko: Abren una nave de aquí cerca. Hace poco lo robé del Central Bank, en USA.

Wine: En Estados Unidos? Pero si es el banco más bien vigilado del mundo!

Sonoko: Es que mi sistema es único. Tengo mucha gente trabajando para mí…

Wine: Bueno, creo que nos serás útil. Aquí tienes el ordenador. Tienes aquí toda la información que necesitas.

Sonoko: Vale, gracias.

Wine: Bueno, para empezar, esta es una organización seria. Nosotros comerciamos y negociamos ilegalmente con el extranjero, o en el país mismo. Cada 10 años renovamos personal, y buscamos nuevo. Este año toca, así que has tenido suerte.

Sonoko: Y con la gente que ya no os sirve? Se jubilan?

Wine: Je, nos deshacemos de ella.

Sonoko: Eee…Sí, vale.

Wine: En la organización sólo aceptamos mujeres. Cada una tenemos nombre de bebidas alcohólicas. Tú te llamas…-consulta una libreta.- Heineken. Si necesitas algo estoy en mi despacho, al final del pasillo de la planta de arriba.

Sonoko se queda sola. Se le ve aliviada. Se mete la mano en el bolsillo y saca el transmisor. Se sienta delante del ordenador. Una pantalla donde pide una contraseña.

-Crxxxx…. Crxxxx…Ran! Ran? Me oyes?

-Xxt! No grites! Sí, te oigo. Qué tal?

-Perfecto. Esa tal Ronnie se lo ha creído. Me han dado un nombre. Es algo así como…Hein…No sé qué.

-Heineken? Vaya nombres. Sí. Es el nombre de una cerveza. Bueno, eso no viene a cuento.

-En una sala oscura, con una sola ventana, bajo la que supuestamente, estás tu.

-Sí, oigo tu voz ahí arriba. Además no me lo cuentes, que te he estado viendo por la pantalla de este mini ordenador.

-Bien. A ver. Estoy delante de un ordenador portátil. Hay una ventanita en que me pide una contraseña.

-Una contraseña? A ver…Tiene que ser algo realacionado con el alcohol. Prueba con el nombre de la jefa. Por si acaso.

-Tic-Tic-Tic-Tic-Tic-Tic. Contraseña incorrectaY por qué no se lo preguntará a alguien de la organización?

-Uff…Mira, yo no soy Shinichi, yo no puedo pretender…Mira, Sonoko, pregútaselo a alguien de allí.-me rindo.

Oigo pasos. Una voz masculina. Mascullina? Pero si… Si era una organización de mujeres! Sonoko! No puede ser que… Ay Dios mío, tengo que entrar ahí dentro!

-Mira, no sé si debería meterme, pero creo que es demasiado precipitado darle ese tipo de información a un novato.

-Ya lo sé, cariño, pero nos puede ser de gran ayuda. Es una científica precoz, y se ve que es una superdotada, y no sé qué más. Nos viene muy bien alguien así en la Organización.

Cariño? Pero de qué va esto? La mujer parece que es Ronnie, la jefa.

-Puede que sí, pero…No sé…

Menuda es Sonoko. Superdotada? Científica precoz? Y quién es ese hombre? No puedo verle. Arriba se enciende una luz. Bien así podré ver quién…Aaa….AAAAAAAAAAH! Es…Es…Este hombre es…GIN!