Capítulo 3: Confusiones
Esa misma tarde Yugi se encontraba en su casa-tienda, aunque ya era más una casa que tienda pues desde que su querido abuelito murió decidió vender todos los artículos y cerrar el lugar no quería tener tristes recuerdos cada vez que entraba por ella pero por más estos siempre acudían a él, se había quedado de pie por un buen rato solo mirando cada rincón del lugar, como siempre recordando cada bello momento vivido junto a su querido abuelito dejando caer lágrimas sobre sus mejillas en cada recuerdo, luego sacudió su cabeza para que estos se esfumarán y con el dorso de su mano secó los caminos que las lágrimas habían dejado y lentamente subió hacia su habitación dejando sus cosas sobre su escritorio y bajo para prepararse algo de comer…
- ¡Por todos lo cielos la despensa está por terminarse! –exclamó al momento de abrir el refrigerador y darse cuenta de que se encontraba casi vacío- Mañana iré a sacar un poco del dinero que el abuelo me dejó, no esperaba tocarlo tan pronto… pero lo repondré en cuanto me consiga un trabajo jejeje –sonrió
Din Don sonó el timbre de la puerta.
- Alguien llama a la puerta ¿Quién será? No recuerdo haber invitado a nadie –se dirige hacia la puerta para abrirla- Tea! Pero qué sorpresa!
- ¡Hola Yugi! Te preguntarás que hago aquí ¿no?...casualmente pasaba por estos rumbos y decidí venir a verte si no te molesta –respondió nerviosa-
- Para nada! Adelante pasa –la invitó a pasar cortésmente el muchacho guiándola hacia la pequeña salita- Toma asiento, enseguida vengo.
- Gracias –dijo Tea al momento de pasar y ver que el chico se dirigía hacia la cocina- Oh, interrumpí tu cena Yugi?
- De ninguna manera, en realidad estaba a punto de prepararme algo de comer, pero no has interrumpido nada por cierto ¿deseas que te prepare algo?
- Mmm mejor deja que te ayude –se levanta de su asiento- pero Yugi ¿es todo lo que tienes para cenar? –preguntó sorprendida al notar la poca comida que había en el refrigerador-
- Eeehhh si… he estado tan ocupado con los deberes de la escuela que ni cuenta me di de que la despensa se me estaba terminando –respondió avergonzado-
- ¿Tienes dinero? –inquirió preocupada-
- Solo un poco, la verdad es que también me olvidé de sacar un poco más de la cuenta de mi abuelo, la verdad no quiero tocarlo pues solo es para sustentar mis estudios –repuso entristecido-
- ¿¡Por qué no nos lo dijiste antes!? -replicó un poco enojada- Yugi, somos tus amigos ¿o no? –Yugi asintió- Sé que estás pasando por momentos difíciles desde que tu abuelo murió, pero de ninguna manera dudes en pedirnos ayuda que para eso estamos –suavizó su voz al notar la tristeza en los ojos de su pequeño amigo que había bajado la mirada- Yugi, si me lo permites yo podría prestarte algo de dinero e ir de compras esta misma noche.
- Tea, no…–dijo levantando la mirada notando la determinación de su amiga- Gracias.
- Bien, no se diga más y vayamos de compras ¿de acuerdo?
- Si –musitó el chico. Tea solo sonrió agradecida-
Yugi subió de nuevo a su habitación para cambiarse el uniforme, poniéndose en su lugar unos jeans azul eléctrico, sujetados por un cinturón negro y una camisa de manga larga en color gris y zapatos negro, bajó lo más rápido posible ya que no quería hacer esperar a la chica por la que desde hacía mucho tiempo sentía algo especial y esta oportunidad de volver a salir a solas con ella no se la perdería por nada, pero en su prisa se había olvidado de algo importante, cosa que Tea notó enseguida provocándole un cierto rubor.
- ¡Yugi! Te… te olvidaste de ce-cerrar tu camisa –tartamudeo Tea pues aunque Yugi ya había crecido un poco más aun era un poco bajo de estatura para su edad, pero eso no quería decir que el chico no tuviera buen cuerpo, al contrario, aun sin realzar ejercicio alguno con el paso del tiempo este se iba moldeando y tomando una forma más varonil, cosa que ella había notado y le hizo ruborizar-
- Es verdad, se me había olvidado, discúlpame no me di cuenta de que la traía así –dijo avergonzado mientras se abrochaba la camisa-
- S-si, no te preocupes –repuso aun más sonrojada- "Tea pero qué es lo que te sucede, Yugi es tu amigo no tienes por qué ponerte así ¿o si?... Bueno admito que Yugi es un chico encantador pero nunca me imaginé que tuviera tan buen cuerpo… Pero qué demonios estoy pensando! Es mi amigo!! –se reprendió en pensamientos- ¿Ya nos vamos Yugi?
- Eh, si –respondió esbozando una sonrisa, el rostro que traía Tea le parecía gracioso-
- "Oh no, esa sonrisa no… es tan lindo… Yugi!! Tea, contrólate!" –volvió a pensar mientras se reprimía por lo que con ella sucedía- Bien, vamonos –dijo haciendo a un lado sus pensamientos-
- ¿Sucede algo Tea? –inquirió después de notar la reacción de su amiga ante su anterior incidente-
- ¿Eh? No nada, es solo que… -se detuvo en seco antes de decir cualquier locura- Nada, no me pasa nada
- Si tú lo dices y ¿a dónde iremos primero? –preguntó curioso-
- Mmm… qué tal si cenamos primero, eso es lo que iba a hacer ¿no? –el chico asintió- Bien y después iremos a comprar la despensa… ¿Cómo qué se te antoja para cenar?
- Mmmm… -se puso pensativo- Ah! ¿Sabes? hace mucho que no pruebo una deliciosa hamburguesa ¿te parece que vayamos a algún restaurante de comida rápida?
- Bien, pues hamburguesas serán –dijo Tea con una alegre sonrisa- pero yo invito eh… en el King Burguer obtengo buenos descuentos ¿te parece bien ese lugar?
- Si claro! –sonrió gustoso-
- Pues no se diga más y vamos –le devolvió la sonrisa y tomándolo de la mano, lo guió camino al lugar, Yugi se sonrojó un poco al sentir la mano de la chica sobre la suya no pudo evitar un ligero rubor al igual sucedió lo mismo con ella- "Esta va a ser una noche inolvidable"
Desde lo más recóndito de mi corazón
Quisiera decirte lo mucho que te quiero,
Pero no me atrevo a decirte,
Que eres lo más bello.
Los dos jóvenes entraron al restaurante con gran alegría, uno por probar una vez mas el delicioso sabor de una hamburguesa y la otra porque presentía que ese momento sería especial…
Desde aquel momento en que te conocí,
Me cautivaste con tu ternura;
Pues en ese momento comprendí,
Que me estaba enamorando de ti.
Uno de los meseros les ofreció un asiento para dos en un cómodo lugar cercano a una ventana con vista hacia una espectacular fuente subterránea de la que al salir sus chorros de agua a la superficie estos parecían bailar y jugar con los que anduvieran de pie sobre el lugar y para rematar las aguas a su vez cambiaban de color según la iluminación que las coloridas luces le daban.
- ¡Que hermosa vista! –Tea se mostraba emocionada ante tan bella vista-
- Es verdad. Mira se ven muy divertidos –dijo Yugi al mirar a una pareja jugar-
- Si. ¿Sabes? me encantaría mucho ir a hacer lo mismo, pero las veces que he venido es de día y solo funciona de noche, siempre he soñado con jugar en ese lugar se ve tan divertido –exclamó risueña-
- Eeehh… si gustas podemos ir apenas terminemos de comer –le propuso un sonrojado Yugi-
- ¿De verdad? Nada más que eso me encantaría –Tea sonrió con gran alegría-
- De acuerdo, pues así será…
Tu manera de ser y la apacibilidad
Con la que me tratas,
Son algunos de tus atributos
Que me despiertan esa necesidad de amor por ti.
El mesero que les brindó la mesa, fue el mismo que les atendió y sirvió su pedido. Ambos chicos le agradecieron y con una feliz sonrisa le dieron el primer mordisco a su hamburguesa, Tea logró morderla con total limpieza cosa contraria a su compañero a quien le resbalaba la catsup desde la comisura se sus labios, la chica rió divertida y Yugi torpemente se limpió con la servilleta que en vez de eliminar la mancha, esta se esparcía aun más…
- Ja ja ja… Yugi, permíteme ayudarte –se ofreció Tea tomando una nueva servilleta y acercándose cuidadosamente hacia el chico para poder quitar aquella traviesa mancha que Yugi no logró borrar-
- Gracias Tea, en vez de mejorar solo estaba empeorando la mancha jejeje –le agradece completamente ruborizado-
- No es nada… Yugi –murmuró Tea con la mirada perdida ante aquellos hermosos y brillantes ojos violetas que aun denotaban la inocencia e ingenuidad del dueño-
Pero hay algo que me incomoda
Y es que deseo decirte lo mucho que te quiero,
Pero por miedo a un rechazo tuyo
Me acongoja ese sufrimiento.
- Vaya, la cena ha estado muy buena, de nuevo gracias Tea por invitarme a cenar –Yugi se notaba muy feliz y agradecido-
- Ya te dije Yugi, no es nada ¿listo para la diversión? –preguntó emocionada-
- Listo –respondió Yugi igual de emocionado. Esta vez el chico fue quien tomó la iniciativa tomando a Tea de la mano para llevarla fuera del restaurante- Eh? Creo que ya no funciona –dijo el chico después de que los dos llevaran cierto tiempo de pie sobre el lugar y nada sucediera-
- Espera y verás –le aseguró Tea- 10…9…8…7…6…5…4…3…2…1…
- Pero ¿cómo sabes que…? Aaahhh –gritó Yugi al ser interrumpido por un chorro de agua que surgió a sus espaldas-
- ¡Corre! –gritó Tea emocionada mientras jalaba a Yugi para que corriera junto con ella-
- ¿No que nunca habías estado aquí Tea? –inquirió Yugi con una gran duda dibujada en su rostro-
- Y no te mentí Yugi, lo que pasa es que estuve midiendo entre tiempo y tiempo cada vez que se accionaba la fuente –le contestó sonriente-
-Ah ya veo jejeje… ese chorro si que me tomó por sorpre… -un nuevo chorro hizo su aparición pero esta vez tomó por desprevenida a la joven pareja y por resultado ambos quedaron completamente empapados- Creo que hablé demasiado pronto –sonrió divertido-
- Si… jajajaja.
Todos observaban a la alegre pareja jugar entre el agua, se veían tan tiernos y muy felices corriendo de aquí para allá sin siquiera poder adivinar donde saldría el siguiente chorro, realmente estaban disfrutando el momento, hasta que de pronto se vieron acorralados en el centro de la fuente y sin darse cuenta los dos se estaban abrazando…
Pero como quisiera decirte
Lo mucho que te quiero,
Ya que mi amor por ti
Será siempre sincero.
El primero en notarlo fue Yugi quien inmediatamente la soltó ruborizado, levantó la mirada para observar la reacción de su compañera quien de igual manera su rostro se encontraba del mismo tono pero si no fuera por el reflejo rosa de las luces, ambos lo hubieran notado, aunque esta vez sus miradas quedaron atrapadas ante el enigmático brillo que en ellas se reflejaba…
- Yugi yo… -musitó Tea poniéndose nerviosa por la mirada del chico- quería decirte que…
- Si Tea… te escucho… -le dijo el chico de lo ojos violeta incitándola a continuar, algo extraño estaba sucediendo con él pues por más que lo quisiera no podía quitarle la mirada de encima y si por poco fuera su corazón comenzaba a latirle casi a mil por hora si no es que era a más-
- Lo que quería decirte es… "Oh por dios, cómo poder decírselo, cómo poder confesarle este sentimiento, reprimido por tanto tiempo y surgiendo de nuevo por estar frente a él. Y si se lo digo? Y si me rechaza por no sentir lo mismo que yo? No –se niega a si misma- No podría soportar su rechazo, su indiferencia y peor aún perder su valiosa amistad pero… ¿y si él también siente lo mismo que yo? ¿Y si se lo confieso y mi amor es correspondido? Demonios ¿por qué es tan difícil sentir lo que siento? ¿Y por qué tanto poder confesarlo y así saberlo?" –pensaba la chica hecha un lío por tanta pregunta-
- "Tea será acaso que tú…" -pensó tratando de adivinar los pensamientos y la tierna mirada que la chica le dedicaba- "No, no lo creo… Yo se que quien te gusta es alguien que ya no está aquí, lo sé muy bien por la forma en que le mirabas cada vez que estabas junto a él… Pero ¿y si en realidad quien le gusto soy yo? No, ella aun debe sentir algo por él y solo me mira así por mi gran parecido… Es tan difícil esto del amor… ¿Seguiré sintiendo algo por ella? O será que hay alguien más… no lo entiendo todo esto es muy confuso"
- "Bien Tea, se valiente y díselo de una buena vez, que no te importe ya lo que Yugi te diga, solo respira profundamente… 1…2…" -la chica inspira profundamente lista a confesarse- "¡¡3!!"
- ¡¡Yugi tu me gustas!!
- ¿¡Qué!? –Dijo Yugi que no daba crédito a las palabras de su amiga- Tea yo… –la miró con ojos de sorpresa-
- ¿Si Yugi? –Tea se notaba ansiosa por escuchar alguna respuesta
- Dime… lo que sientes por mi es real o es porque me parezco a Yami –Yugi estaba confundido, no sabía que decir ni como reaccionar y solo habló sin siquiera pensar las palabras ni el tono que uso pues se escuchó un poco rudo- Disculpa no quise ser grosero
- Yugi! –la chica estaba sorprendida por la pregunta- No te disculpes pues tienes razones para reaccionar así y…a decir verdad, en un principio así lo creí pero solo me dejé deslumbrar por su forma de ser, luego me di cuenta que eras tú quien realmente me ha gustado desde entonces, tal vez suene cursi pero me gusta tu sencillez, tu amabilidad y gentileza, pero lo que más me agrada de ti es tu inocencia y tu gran corazón lleno de bondad.
- Je, por favor no me halagues tanto no lo merezco, solo soy un chico común y corriente –Yugi se notaba muy avergonzado después de escuchar los halagos por parte de Tea-
- No Yugi, eres un chico especial… eres como un ángel que cayó del cielo y se convirtió en una bendición para todos sus amigos –le sonrió al notar el rubor que cada vez subía más de tono en el rostro de Yugi-
- Gracias –le agradeció bajando la mirada en vergüenza, tantos halagos eran demasiado para él-
- Al contrario, gracias a ti –le dijo ella mientras lo tomaba del rostro para levantar su mirada, nuevamente sus ojos se conectaron- Y dime ¿sientes algo por mi? No tienes que responder ahora, yo te lo dije porque ya no podía seguir guardando este sentimiento…
- Discúlpame Tea pero quisiera poder responderte que si… pero me encuentro confundido, todo esto es tan repentino que no sé que decir –le contestó desviando la mirada-
- Esta bien no te preocupes… solo quería que lo sepas –le sonrió mientras reprimía una rebelde lagrima que amenazaba con salir-
- Gracias. Te prometo pensarlo bien y cuando mis dudas hayan desaparecido te podré responder.
- Pero no te apresures, no quiero que tu respuesta vaya a ser solo por sentirte comprometido ¿de acuerdo? –le aconsejó inclinándose ligeramente con una mano en la cintura y con la otra señalando la punta de su nariz mientras guiñaba un ojo-
- Je j eje… si –sonrió nervioso-
La fuente terminó su ciclo, la cortina de agua que se había formado a su alrededor comenzó a bajar y los que estaban ahí presentes pudieron ver a la joven pareja que se había dado un abrazo, todos rompieron en aplausos, los habían visto correr, jugar y el cerrar su pequeño espectáculo de esa forma les enterneció el corazón, ambos se separaron avergonzados y con mucha educación realizaron una reverencia en muestra de agradecimiento por los aplausos. Los encargados del restaurante les ofrecieron unas toallas para secarse y una vez secos Yugi acompaño a Tea hasta su casa, y de ahí el chico emprendió el camino de regreso a casa no sin dejar de esbozar una gran sonrisa, esa noche había sido una de las mejores en su vida después de haber estado tanto tiempo sumergido en la tristeza Tea logró brindarle un poco de felicidad… Ya en su casa Yugi descansaba sobre su cama, estaba analizando las cosas cuando el sueño finalmente lo venció y mientras dormía unas imágenes comenzaban a visualizarse entre sus sueños, el lugar se mostraba oscuro y frío, él temblaba de miedo, aquel lugar se parecía tanto a "El Reino de las Sombras"…
- ¿Dónde estoy? Acaso es… -de solo pensarlo el cuerpo del pequeño Yugi temblaba- ¡Tea, chicos, me escuchan! –no hubo respuesta- ¿¡Me escuchan!? Por favor alguien que me escuche… -Yugi comenzaba a ser presa del miedo, de pronto el lugar en el que se encontraba de pie comenzó a agrietarse cual cristal débil y culminó en un rompimiento total- Aaaaaahhhhh… Abuelito ayúdame!!! –gritó desesperado mientas estiraba la mano en espera de que alguien lo rescatara-
- No tengas miedo, yo siempre te ayudaré –le respondió una mística voz, Yugi se sintió seguro y agradecido, en un intento por ver el rostro de aquella persona, no pudo ver nada más que una silueta iluminada por una gran luz que sin ser cegadora mantenía oculta la identidad de su salvador-
Continuará…
KonnichiwaLoreto W!! De nuevo muchas gracias por tus comentarios, no importa que hasta ahora seas la única en escribirme, es bueno saber que a pesar de todo me vas a seguir en esta nueva aventura y bueno como agradecimiento a ello he tomado la decisión de cambiar la historia y convertirla a Yaoi! Siii!!! porque tú lo pediste!!! Jejeje… la verdad ya tenía terminado este capítulo con la historia un poco diferente así que tuve que modificarlo, claro que no fue un gran problema pues para ser sincera desde un principio este fic iba a ser yaoi solo que no estaba muy decidida y gracias a ti va a tener ese cambio.He aquí el comienzo...las letras centradas son de un poema titulado "Te quiero" ydesconozco al autor... En fin, nuevamente gracias por seguirme y nos leemos en el siguiente Review-Chapter
Dewa matta!!!
Hikaru Darkness
