Capítulo 5
Mi deseo hecho realidad.
Pasaba ya más de medio día y entre la calles de ciudad Domino se encontraba un gran almacén en cuyo ventanal se podían ver artículos diversos y adecuados para cada ocasión, un joven de cabello tricolor que va desde un negro profundo pasando por un violeta para finalizar con unos mechones rubios, ojos de un hermoso color violeta cuya mirada tan dulce, inocente y angelical se encontraba centrada en un solo objeto… un deck de duelo, le recordaban tanto al suyo y los que su abuelito vendía… movió su cabeza para alejar tristes recuerdos y miró para buscar algo más, vaya que había de todo, de pronto algo llamó su atención… ahí casi en la esquina del mostrador se veía un tierno angelito con un corazón en manos…
- Masaka! Ese angelito se parece a la carta Change of Hearth, la carta favorita de Ryou –dijo un muy emocionado Yugi-
- Ese es uno de nuestros mejores artículos, se llama Corazón de Ángel –le informó una linda chica de largos cabellos oscuros con reflejos violetas y negros ojos, llevaba puesto su uniforme con la insignia del local-
- De verdad? Entonces debe costar una fortuna… -murmuró con desaliento-
- Si, su precio es de 10 dólares
- T-tanto? –Yugi estaba muy sorprendido por la cantidad mientras un tic nervioso se asomaba a través de su sonrisa, metió las manos en sus bolsillos solo tenía 5 dólares-
- Oh, pero hoy es un día especial joven –sonrió ante el gracioso gesto del chico- Nuestro almacén está de aniversario y por lo tanto contamos con descuentos del 50 al 70 por ciento de descuento –le susurró guiñándole el ojo mientras que posaba su dedo índice sobre la punta de la nariz del chico- No se preocupe, le podrá alcanzar… le aseguró que será un muy buen regalo para esa persona especial
- A-Arigato… –respondió ruborizándose de sobremanera y entrando rápidamente al lugar, del nervio ya no le dijo que era un regalo su amigo-
- Le puedo ayudar en algo joven? –inquirió otra de las encargadas-
- Si… disculpe ¿podría mostrarme el angelito con un corazón en manos?
- Corazón de Ángel? –Yugi asintió. La chica se dirigió hacia uno de los anaqueles donde ya solo estaba el ultimo de los angelitos- Vaya tiene suerte, es el último que nos queda. Si no es mucha molestia ¿es para alguien en especial?
- Eehh… no, digo si, es para un amigo que hoy cumple años y recordé que le gustan los ángeles
- Vaya, es la primera vez que alguien lo pide con esos motivos –se sorprendió la chica-
- Cómo dice? Tiene algo de malo que se lo vaya a regalar –preguntó confundido-
- No, no… Veo que usted no sabe lo que significa –Yugi negó- Bueno no se preocupe, mire este es un ángel que simboliza la esperanza pero más que eso simboliza el amor y se dice que si una persona se lo regala a la persona amada, su será eterno –Yugi abrió los ojos en sorpresa- Pero, si se da con motivos de amistad, entonces simboliza que usted le esta ofreciendo una amistad sincera a aquella persona.
- Wow, eso no lo sabía!... "Lo bueno es que es para una amistad" –pensó mientras una gotita resbalaba por su nuca, miró el precio que marcaba 4.50 dólares- Me lo llevo señorita.
- Buena elección joven –la chica tomó el ángel y lo envolvió en papel de seda para luego ponerlo en una cajita de regalo- Aquí tiene… Ah y en agradecimiento por su compra le obsequiamos este kit de velas aromáticas y decorativas, sirven para una buena relajación.
- Arigato gozaimasu -Yugi cogió los regalos y salió de la tienda- Haaaa… al fin tengo todo lo que necesitaba –se dijo en un suspiro- Je… Si tan solo Yami estuviera aquí… este angelito sería el regalo perfecto, significa mucho para mi y… -recuerdos del sueño acudieron a su mente-
Flash Back
¿Dónde estoy? Acaso es… -de solo pensarlo el cuerpo del pequeño Yugi temblaba¡Tea, chicos, me escuchan! –no hubo respuesta�- Me escuchan? Por favor alguien que me escuche… -Yugi comenzaba a ser presa del miedo, de pronto el lugar en el que se encontraba de pie comenzó a agrietarse cual cristal débil y culminó en un rompimiento total- Aaaaaahhhhh… Abuelito ayúdame! –gritó desesperado mientas estiraba la mano en espera de que alguien lo rescatara-
- No tengas miedo, yo siempre te ayudaré –le respondió una mística voz, Yugi se sintió seguro y agradecido, en un intento por ver el rostro de aquella persona, no pudo ver nada más que una silueta iluminada por una gran luz que sin ser cegadora mantenía oculta la identidad de su salvador-
- Esa voz yo la conozco… ¿Yami, eres tú? –preguntó presuroso, poco a poco la brillante luz fue desapareciendo dejando ver con más claridad al dueño de aquella voz-
- Vaya, aun no me has olvidado –respondió el antiguo faraón regalándole una calida sonrisa-
- Masaka! –Yugi estaba sorprendido, no podía creer que aquella persona que tanto extraño se encontrara ahí frente a él¡Yami! eres tu… que alegría volver a verte –se lanzo en un abrazo tan efusivo que logró tirar al faraón al piso-
- Aibou pero qué fuerte te has vuelto –murmuró feliz-
- Iie… no soy tan fuerte como te imaginas demo… -contestó con tristeza¿Daijoubu? –preguntó al darse cuenta de que había tumbado al chico-
- Daijoubu… Dime Yugi… ¿por qué dices que no eres tan fuerte¿Acaso te ha pasado algo malo¿Alguien te hizo daño? –Yami estaba preocupado por el triste semblante de su compañero-
- Yami… si supieras por todo lo que he pasado desde que tú regresaste a tu época… -su voz se escuchaba triste y apagada-
- Entonces, cuéntamelo –le animó a decir-
- Iie… no es momento, el solo recordarlo me atormenta –lágrimas comenzaron a surgir de sus ojos-
- De acuerdo, pero no llores… que me duele el corazón cuando lo haces. Por favor sonríe, no me gusta verte así –lo tomó del rostro y con sus dedos secó las lágrimas- Sabes? por difícil que parezca, aun en la oscuridad brilla la luz y tarde o temprano todas tus dolencias serán recompensadas.
- De verdad, así lo crees? –un ligero rubor apareció en sus mejillas, el faraón asintió- Arigato, espero que sea pronto ya no quiero sufrir más –le agradeció esbozando una pequeña sonrisa-
- No es nada –sonrió apenado- es lo menos que puedo hacer por ti, eres mi hikari y es mi deber apoyarte y si tu pones de tu parte, todas tus tristezas se irán.
Fin del Flash Back
- No puedo creer lo que pasó en ese momento pero al sentir sus manos en mis mejillas y esa mirada, algo muy cálido surgió en mi interior, algo que me pedía lo abrazara y no lo soltara nunca más, pero más que eso sentí tantos deseos de besarlo… pero qué cosas estoy pensando –se reprochó a si mismo- No lo puedo entender… ¿qué significa todo esto?
No sé decir lo que me gusta de ti,
Algo me mata pero me hace vivir
Tal vez es amor
Es tu mirada o es tu forma de estar
O la tristeza que da si te vas
Tal vez es amor, quizá.
- Todo es tan similar a lo que sentía por Tea… un momento ¿dije sentía?... Es extraño, por qué decir eso… a caso mis sentimientos hacia ella han cambiado… no estoy seguro pero cuando estuve con ella en mi solo acudía un profundo sentir de agradecimiento y aprecio por su gran amistad, ya no de atracción o amor, pero… ¿por qué?... ¿por qué cada vez que pienso en Yami es como si ahora los sintiera por él?... No lo logro entender
No sé por qué todo me sabe a ti
Una palabra, un verso, una canción
Es un misterio de mi corazón
Que no me quiere ni contar a mí…
(se repite desde el principio)
En el antiguo Egipto el sol comenzaba a declinar y sus dorados rayos dejaban de bañar con su luz los hermosos valles y a las majestuosas pirámides… caminando por las entrañas de la tierra, dirigiéndonos hacia la pirámide principal, recorriendo cámaras, corredores angostos, hasta llegar a la intimidad del enterramiento, nos encontramos con la silueta de un joven faraón sentado en su trono real, cuya mirada penetrante y gallarda se posaba con fastidio sobre una de las figuras hechas en honor a su gran dios Ra, llevaba tiempo esperando el momento de ver su deseo hecho realidad y nada sucedía… dos chicos mas o menos de su misma edad le acompañaban
- Ra que fastidio ¿cuánto tiempo más tendré que esperar? –dijo impaciente-
- Ja que tonto eres faraón… Esta bien que seas el consentido de Ra, pero eso no quiere decir que cumpla tu deseo en un santiamén –le dijo con sorna uno de ellos-
- Tu y tus estúpidos comentarios Malik –le dijo con desprecio-
- Oh vamos faraón, la verdad duele pero no mata –respondió con una sonora carcajada-
- Además míralo por el lado bueno, te están dando chance de compartir tus últimos y bellos momentos con nosotros antes de tu partida –se burló el albino-
- Bakura tiene razón faraoncito… te vamos a extrañar tanto y tus nos tratas así… que malo eres… buaaaa –dijo Marik haciendo un cómico ademán de llanto-
- Jhm… Baka –murmuró con fastidio mientras desviaba su mirada en pensamiento- "Ra… no puedo evitar el sentirme impaciente, tengo tantos deseos de volver a ver ese rostro tan angelical y esa mirada tan dulce y tierna… Yugi te extraño tanto"…
Daría lo que fuera por volverte a ver
Daría hasta mi vida y mi fusil, mis botas y mi fe
Por eso en la trinchera de mi soledad
Tus ojos son mi luz y tu esplendor mi corazón
Y si no fuera por ti yo no podría vivir
En el vacío de estos días de no saber
Y si no fuera por ti yo no sería feliz
- Tierra llamando al faraón… Farón ¿me escuchas? –le llamaba Malik pero Yami no respondía�¡FARAON! –le gritó al oído-
- Aaaahhhh… Malik por que demonios me gritas –reaccionó enojado-
- Te grito porque se me da la gana. Mira llevo rato llamándote y tu en las nubes ¿quieres dejar de fantasear con tu hikari? –le dijo con una maliciosa sonrisa-
- Nani? No es lo que piensas –desmintió sonrojado-
- Uy si te puedo creer, tus suspiros y sonrojos te delatan –le dijo Bakura con burla- Además el cuida tumbas quiere hablar contigo
- Qué es lo que quieres? –le preguntó al notar una extraña mirada en el chico-
- No sé Bakura pero yo lo he pensado bien y… -ojos entristecidos- Yo también tengo deseos de volver con mi hikari, no me podrías hacer el favor de llevarme contigo ¿Siii? –mirada de cachorro suplicante-
- Que actuación mas estúpida Malik, va perfecta contigo –se burló Bakura de él-
- Cállate ladroncito… que más estúpido te verías tú con esa tonta cara que tienes –respondió retóricamente-
- Qué ustedes también quieren ir¡Ra que sorpresa! Pero si hace un rato festejaban por mi partida, jajajaja quien lo hubiera imaginado –ahora era el faraón quien se burlaba de ellos-
- Si, ríete todo lo que quieras… nos harás el favor ¿si o no? –repuso Malik enojado-
- Je… lo intentaré…
- "Atem hijo mío el momento ha llegado…"-de nuevo la prominente voz de Ra se dejó escuchar, al instante todo el recinto se vio iluminado por una brillante luz- "… el deseo podrá ser cumplido…"
- Ra! –exclamó un Yami sorprendido-
Como lo soy cuando con tus besos me veo partir
Y es que solo con saber que al regresar
Tu esperarás por mí
Aumentan los latidos de mi corazón
Volverte a ver es todo lo que quiero hacer
Volverte a ver para poderme reponer
Porque sin ti mi vida yo no soy feliz
Porque sin ti mi vida no tiene raíz
Ni una razón para vivir
lo único que quiero es poder regresar
Al instante tres cuerpos fueron iluminados por los rayos de luz como si fueran los brazos del sumo dios egipcio, los tres egipcios fueron transportados a través del tiempo hasta llegar a su destino final, el siglo XXI…
- "A partir de ahora comenzará tu prueba… demuéstranos que tan grande es tu deseo para permanecer en este lugar…" –finalizó la voz del dios antes de desaparecer su esencia por completo-
- Masaka! –murmuró Yami al momento de abrir sus ojos y mirar a su alrededor y tocar su cuerpo esta vez era real¡Masaka¡Tengo un cuerpo propio, mi deseo… mi deseo se ha cumplido!
- ¿Nani? Yo no veo nada –dijo Bakura quien aun tenia cerrado los ojos-
- Baka! Abre los ojos –dijo Malik al momento de propinarle un poderoso sape a Bakura-
- Itaiiii… Oye eso duele! –le recriminó el chico mientras se sobaba el golpe-
- Te lo mereces por tonto –cruzándose de brazos con orgullo-
- Hey ustedes dos ¿piensan quedarse ahí de pie discutiendo como un par de niños tontos? Que esperan, vámos –les llamó un alegre Yami-
- Jhm… que estúpido se ve el faraón con esa sonrisa –murmuró Malik-
- Si, pero… ¿te das cuenta? Nosotros también estamos aquí, y también tenemos cuerpo propio lo que quiere decir que nuestro deseo fue cumplido.
- Oye creo que te afectó el golpe… Nah, tu siempre has sido así de tonto –se burló el cuida tumbas-
- Cállate! –gruñó Bakura-
- "¡Yugi al fin podré verte!" –pensó un Yami emocionado, quien corría en dirección a casa de su hikari-
Poder todas las balas esquivar y sobrevivir
Tu amor es mi esperanza y tú mi munición
Por eso regresar a ti es mi única misión
Y si no fuera por ti yo no podría vivir
En el vacío de estos días de no saber
Y si no fuera por ti yo no sería feliz
Como lo soy cuando con tus besos me veo partir.
En Domino era de tarde y los rayos del sol aun iluminaban la ciudad, Yami al fin logró ver el hogar de su querido hikari, ya no estaba tan lejos así que corrió con más fuerzas hasta llegar a la puerta de entrada. Pero lo que ahí vieron sus ojos inmediatamente lo dejaron desolado, todo lo que era la tienda y su contenido ahora se encontraba vacío, a simple vista era como si ya nadie viviera ahí…
- NO, YUGI! –gritó el chico que repetidas veces había tocado la puerta sin que nadie saliera a su encuentro¡Maldición! Se ha ido –murmuró dejando caer pesadamente su mano mientras sus rubios mechones cubrían sus ojos-
Y es que solo con saber que al regresar
Tu esperarás por mi
Aumentan los latidos de mi corazón
Volverte a ver es todo lo que quiero hacer
Volverte a ver para poderme reponer
Porque sin ti mi vida yo no soy feliz
Porque sin ti mi vida no tiene raíz
Ni una razón para vivir
- No puede ser… �¡YUGIIII! –gritó Yami con todas sus fuerzas-
Eres todo lo que tengo
Y no me quiero morir
sin poder otra vez
volverte a ver
No muy lejos de ahí se encontraba el joven dueño de la casa quien caminaba muy pensativo aun seguía tratando de encontrar una respuesta a todas sus dudas, de pronto creyó escuchar que alguien le llamaba.
- Nani? Escuché que alguien me llamara –negó al darse cuenta que no había algún conocido que haya dicho su nombre- Debí imaginármelo…
- YUGIIII! –se escuchó de nuevo-
- No puede ser… -se detuvo en medio de la calle al escuchar nuevamente su nombre- Esa voz… proviene de mi mente, no lo puedo creer…puedo sentirlo, puedo sentirlo, mi corazón no puede estar equivocado esa voz es de… -el corazón de Yugi latía de gozo, no podía mentirle aquella voz la reconocería donde quiera que fuera, esa voz era de…¡Yami!
Presuroso Yugi se aventuró a cruzar la calle sin darse cuenta de que las luces del semáforo estaban por cambiar de verde a rojo, claro esto significaba que podía cruzar más nunca se imaginó que un impertinente conductor se atreviera a desafiar el cambio de luces. Yugi miró aterrado como el auto se precipitaba a su encuentro, el conductor al darse cuenta de la presencia del chico en medio de la calle presionó los frenos… Un fuerte chillido de llantas que en su esforzado detenimiento dejaban marcas en el asfalto, gente y el mismo conductor que miraban aterrados fueron testigos de ver como el desafortunado Yugi era alcanzado por el frente del auto y su cuerpo se viera impactando contra el parabrisas para luego caer malherido…
- Yugi? –Yami pareció escuchar el llamado de su aibou, también logró escuchar un estruendoso ruido que hizo estremecer su corazón, era un aviso de que algo malo había ocurrido-
Porque sin ti mi vida yo no soy feliz
Porque sin ti mi vida no tiene raíz
Volverte a ver es todo lo que quiero hacer
Volverte a ver para poderme reponer
Porque sin ti mi vida yo no soy feliz
Porque sin ti mi vida no tiene raíz
Ni una razón para vivir
- Yami ¿escuchaste ese ruido? –le preguntó Bakura que había llegado a donde Yami se encontraba-
- Provino de allá –señaló Malik- Miren… algo ocurrió, hay gente dirigiéndose hacia ese lugar
- Y eso que? A nosotros no nos importa lo que haya sucedido –espetó Bakura desinteresado-
- Yugi… -murmuró Yami cabizbajo, su corazón latía con congoja¡Yugi!
- Hey faraón, espera! –gritaron Malik y Bakura al ver a Yami correr en dirección de donde provino el ruido-
Mala jugada del destino… Cuando Yami y los otros chicos llegaron al lugar un brutal terror invadió el cuerpo del primero, aun no lograba ver quien era el accidentado pero algo en su interior le decía que no sería nada bueno, con mano temblorosa se fue abriendo paso entre la multitud y ocurrió lo que sus ojos, mente y corazón se negaban a ver… ahí en el medio de toda la gente yacía el cuerpo inconsciente de su pequeño y adorado ángel, reunió todas la fuerzas y el valor requerido para poder movilizarse y correr junto a él…
- YUGIII! –gritó un Yami perturbado- Yugi… Yugi… por favor contéstame… Yugi… –cuidadosamente lo tomó y colocó en su regazo, gruesas lágrimas se agolparon en sus ojos- Esto no puede estar pasando, tiene que ser una pesadilla. Si eso, es una pesadilla ¿verdad Yugi¿Verdad que nada de esto ha pasado y solo es un mal sueño¡Yugi! –continuó llamándolo-
- Ya… Yami… ¿E-Eres tú? –se escuchó decir en un hilo de voz por el chico-
-Yugi! Si… soy yo Yami… -le respondió esbozando una forzada sonrisa, no quería que su aibou lo viera preocupado y secó aquellas gotas saladas que amenazaban con salir- Aquí estoy Yugi, como te lo prometí…
- Ya…mi… que… que alegría verte de nuevo –Yugi hizo un esfuerzo para levantar su mano y tocar la mejilla de su yami¿Sa… sabes? Hoy… descubrí algo… ah.. yo descubrí que ah… ah… -el chico gritaba de dolor-
- No Yugi, por favor no hables, no te esfuerces, ya… ya habrá tiempo para que me lo digas –le respondió en suplica mientras tomaba la mano del chico sobre su mejilla-
- Por… favor, es… es algo importante –insistió el pequeño-
No sé decir lo que me gusta de ti,
Algo me mata pero me hace vivir
Tal vez es amor
Es tu mirada o es tu forma de estar
O la tristeza que da si te vas
Tal vez es amor, quizá
- Esta bien… pero no te esfuerces demasiado ¿de acuerdo? –le dijo con un pequeño puchero, para luego esbozar otra leve sonrisa-
No sé por qué todo me sabe a ti
Una palabra, un verso, una canción
Es un misterio de mi corazón
Que no me quiere ni contar a mí
Vivo, contigo
Es el sueño que yo tengo siempre
Vivo, contigo
No encuentro otra forma mejor de vivir
Yo no sé si es amor por ti
Me temo, me temo que sí
- De acuerdo –aceptó el joven Yugi con un ligero rubor en sus mejillas, como le encantaban esos gestos de su yami- Hoy descubrí que… que yo… ah… que tu… ah… que tu me… me… gus…tas… -confesó en un último esfuerzo-
De pronto la mano de Yugi que Yami sostenía resbaló y comenzó a caer… el brillo de sus ojos comenzó a desaparecer, el pequeño esbozó una ultima sonrisa, lentamente fue cerrando los ojos para dejarse caer en un profundo sueño…
- Yugi? –se asustó el chico al verlo cerrar sus ojos- No cierres los ojos, por favor… no lo hagas… ¡escúchame!... Yugi… No… no te vayas…–Yami le llamaba desesperado dejando caer gruesas lágrimas cargadas de dolor, se negaba a creer que un ángel tan dulce y puro como su Yugi fuera victima de una atrocidad como esa, se negaba a creer que tan bellos ojos tal vez nunca más se abrieran y le volvieran a brindar tan encantadora mirada ¿por qué? por qué su pequeño ángel, por qué a la persona que tanto amaba y que también había descubierto que le podía corresponder, el destino se había encargado de hacerle lo que le hizo�¡YUGIIIIII!
Continuará…
N/A: Snif… snif… hola que tal… les ha gustado este chapter? Muy triste ¿verdad? T-T Después de tanto esperar para que el deseo de Yami se hiciera realidad… y se encuentra con esto… jejeje… onegai no me odien por hacer sufrir a Yami de esa forma, pero es parte del trama ¿recuerdan la prueba que Ra quiere?... En fin, también quiero disculparme por la pequeña demora al subir este chap pero tuve problemas técnicos con la compu y todo lo que tenia de este fic se borró T-T asi que he tenido que comenzar de nuevo… y bueno ahora que lo pienso no fue tan malo pues siento que este chap me ha quedado mejor que el anterior que había escrito… No prometo actualizar pronto pero si dar más de mí para continuar mejorando la historia.
Y bien…
Gracias a Kao por su review… y sip Baku y Malik regresaran con sus hikaris o y al igual que siempre espero que este chap te haya gustado.
Ja ne!
