Capítulo 8

Era un domingo, Haruka se encontraba en su departamento viendo la televisión, cambiando constantemente de canal, clásica programación de domingo, aburrida o repetida. De pronto sonó el teléfono y dió un brinco del susto, sacudió un poco la cabeza para despavilarce y se dirigió a contestar.
-¿Bueno?- preguntó con voz de flojera.
-Hola Ruka - se escuchó un saludo cordial y dulce.
-Hola!- al reconocer la voz su semblante inmediatamente cambió. -¿Cómo estás sirena¿Qué haciendo en este maravilloso domingo de flojera?
-Estoy bien, en la recepción, y qué hago, pues esperándote para presentarte a alguien- al escuchar eso, Haruka inmediatamente salió corriendo de su departamento con el teléfono inalámbrico en la mano. Cuando se dió cuenta volvió y lo aventó en el sillón, luego salió corriendo nuevamente.
Michiru se encontraba en recepción hablando por el teléfono, pero nadie le contestaba, se estaba impacientando.
-¿Hola¿Haruka?- preguntaba constantemente para que el corredor contestara pero era en vano.
-Hola preciosa- escuchó una voz detrás de ella, volteó y ahí estaba su amigo parado. -¿Me buscabas?- preguntó con una sonrisa.
-Loco, te estoy habla y habla pensando que sigues en el teléfono- dijo la chica molesta, de pronto se dió cuenta de algo -¿Cómo llegaste tan rápido?- dijo sorprendida.
-Je, je, es que bajé corriendo las escaleras, el elevador es muy lento- dijo riendo ligeramente.
-Estás loco de remate- dijo la violinista moviendo la cabeza.
-Bueno y dime¿para qué soy bueno?
-¿La verdad...?- preguntó ella sarcásticamente. El corredor levantó una ceja haciendo cara de "mmmm" - Es broma, Ruka, no te enojes- dijo la chica con una gran sonrisa que logró alegrar a su amigo.
-Está bien, no me enojo. Dime ¿qué pasa?- preguntó el muchacho tratando de no sonar muy impaciente.
-Bueno, como tu fuiste sincero conmigo aquella ocasión me gustaría devolverte el gesto. Esperame aquí- dijo antes de salir corriendo a la calle. Haruka ahora si que estaba intrigado, qué estaría planeando enseñarle esa niña. Cuando regresó iba agarrada de la mano de un muchacho alto, más o menos de su altura, cabello castaño corto, ojos azules y bien parecido.
-Haruka, te presento a Yuto Ryo- el muchacho extendió su mano -mi novio- el corredor no pudo disimular su sorpresa, se quedó pasmado por un segundo y cuando reaccionó estrechó la mano que el otro joven le ofreció.
-Tenoh Haruka- fue lo único que pudo decir ante tal sorpresa.
-Michi me ha hablado mucho de ti.
-¿En serio?- dijo el joven con un tono extrañado.
-Si, no para de hablar de ti por el chat jejejejejeje... Eso del chavo patán fue una idea excelente- dijo riendo ligeramente el muchacho mientras colocaba un brazo al rededor de los hombros de su novia.
-Bueno, era lo menos que podía hacer por mi amiga- dijo Haruka desviando un poco la mirada.
-Veo que eres un buen muchacho- comentó el otro joven con una sonrisa -Bueno, creo que ya es hora de retirarnos. Vamos a comer ¿gustas acompañarnos Haruka.
-Este... no gracias, me voy a quedar a estudiar- dijo el corredor un poco nervioso, tratando de que no se notara mucho su desconcierto.
-¿Seguro?- preguntó Michiru un poco preocupada, ella si notó el extraño cambio en su amigo.
-Claro, no hay problema, ustedes diviértanse, mañana nos vemos- dijo con una sonrisa un poco forzada.
-Está bien, cuídate y nos vemos mañana- dijo la chica con una sonrisa triste. Después tomó el brazo de su novio y ambos salieron del lugar. Haruka se quedó ahí parado un momento hasta que los perdió de vista. De pronto aparecieron sus amigas que veían a la pareja que se iba y luego al muchacho parado ahí con cara de sorpresa.
-Hola Haruka¿esa no era Michiru?- preguntó Ami volteando a ver para donde se había ido la pareja. El joven sólo asintió con la cabeza. -Oye¿qué pasa¿está todo bien? - preguntó ahora angustiada.
-O esto es un sueño o estoy en un mundo bizarro- dijo como ido. Las cinco chicas levantaron una ceja y se vieron entre ellas levantando los hombros.
-Ahora si nos estás asustando¿qué pasó¿quién era el chico que iba con Michiru?- preguntó Lita muy angustiada.
-Su novio- dijo el corredor simplemente. Las chicas se quedaron con la boca abierta.
-¿Su novio!- gritaron las cinco jovencitas al mismo tiempo.
-Si, su novio- repitió el corredor. Las chicas se voltearon a ver extrañadas y luego a él.
-¡WOW¡Está guapísimo!- dijo Mina toda emocionada. Una gota de sudor apareció en la frente de Rei que estaba parada junto a la chica que aplaudía emocionada -¿No me lo querrá presentar.
-Este... Mina... creo que no permitiría que le bajaras al novio- dijo Rei poniendo una mano sobre el hombro de la chica para tranquilizarla un poco.
-Tienes razón... demonios- dijo agachando la cabeza en frustración. Lita se acercó a su amigo junto con Serena.
-¿Estás bien?- preguntó la chica de cabello castaño notando que el muchacho aún seguía desconcertado.
-Si, no hay problema, sólo me tomó por sorpresa- dijo Haruka sonriendo ligeramente. Las dos niñas se voltearon a ver un poco angustiadas. -Vamos chicas, no es para tanto.
-Pero... - Serena trató de decir algo pero Haruka la interrumpió poniendo un dedo sobre su boca.
-No hay peros, cabeza de bombón, sólo me sorprendí, no sabía que ella tuviera novio, nunca lo había mencionado- el atleta sonrió -Sólo me confesó un secreto, no tiene nada de malo.
-Pero no te agradó la idea - dijo Lita viéndolo seriamente.
-¿Cómo crees que no?- preguntó el muchacho tratando de hacerse el inocente.
-Por la cara que tienes- respondió la chica de ojos verdes cruzando los brazos.
-Sigo sorprendido, en serio, no me afectó- dijo el joven encogiéndose de hombros.
-¿Pero si te gusta?- preguntó Serena tímidamente. Rei y Mina, al escuchar la pregunta, inmediatamente se acercaron y pararon las orejas para escuchar la respuesta. Ami se quedó atrás negando con la cabeza en señal de desaprovación.
-No- dijo Haruka seguro -Michiru sólo es mi amiga, no tengo ningún sentimiento más allá que el de amistad con ella.
-¡Entonces si tengo oportunidad!- gritó emocionada Mina señalando al cielo con un dedo y colocando la otra mano en su cintura. Las chicas la voltearon a ver con gotas en sus frentes.
-Estás completamente loca- dijo Rei tomándola del brazo y jalándola a la salida -Mejor vámonos a comer que me estoy muriendo de hambre.
-¡SI SI SI!- gritó Mina emocionada.
-¿Quiéres acompañarnos?- preguntó Serena a Haruka con una sonrisa. En respuesta, el corredor le dió una leve palmadita en uno de sus chonguitos con una sonrisa.
-¿Por qué no?
-¡Perfecto!- dijeron las chicas al mismo tiempo y emprendieron la partida. Haruka quedó tras de ellas, las vió alejarse un poquito y sonrió tiernamente. De pronto sintió una mano agarrando la suya, volteó y ahí estaba la niña de los chonguitos.
-No estés triste- dijo con una voz muy dulce.
-No lo estoy.
-No te preocupes, todo va a salir bien y pronto encontrarás a alguien que te pueda corresponder- dijo la chica con una sonrisa tierna, tanto que el corredor sintió que el corazón se le detenía.
-Gracias- respondió el joven casi en un susurro -Tal vez... ya encontré un camino -¿Mande?- preguntó Serena al no entender lo que había dicho su amigo.
-No, nada, estoy pensando en voz alta jeje- dijo llevándose una mano a la nuca y riendo nerviosamente.
-Bueno¿ya se apuran?- gritó Rei deseperada desde la puerta de entrada. Serena apretó la mano de Haruka y corrieron a encontrarse con sus amigas. Lita vió el cambio en la expresión del rostro de Haruka y sonrió confidentemente.
Era lunes en la tarde, Michiru se encontraba en la puerta del salón cuando Haruka apareció. Ella se paró frente a su amigo y lo recibió con una gran sonrisa. Él se quedó un poco extrañado por esa misteriosa reacción.
-¿Qué pasa?- preguntó Haruka sospechando de que algo tramaba la chica.
-Nada- dijo inocentemente la violinista -¿No puede darme gusto ver a mi amigo?
-Este... pues... si... supongo- respondió aún más extrañado -Ahora dime¿qué pasa?
-Vaya contigo¿cómo puedes pensar que pasa algo?- preguntó un poco ofendida la chica.
-Está bien... entonces¿qué necesitas?
-Mmmm... ¿cómo puedes pensar que quiero algo?- preguntó más ofendida. Haruka levantó una ceja y la vió con ojos impacientes -Bueno, bueno, está bien, si necesito algo.
-Dime, soy todo oidos- dijo Haruka con una sonrisa triunfal.
-Quiero que me des tu opinión sobre Ryo- dijo la chica con una gran sonrisa de emoción -Me gustaría que me dijeras qué te pareció.
-¿Y por qué yo?- preguntó Haruka señalándose a sí mismo.
-Pues porque eres mi amigo, confío en ti y me gustaría que me dieras una opinión sincera y objetiva.
-AAAHHH, bueno...- se rascó la cabeza -Se ve que es un buen tipo, nos tratamos muy poquito así que no puedo darte un juicio muy bueno.
-¿Entonces si te cayó bien?
-Pues si- dijo el corredor medio extrañado por los cuestionamientos.
-Es que ayer me pareció como que no muy te simpatizó... pensé que tal vez había sido un error presentarlos- dijo Michiru bajando un poco la mirada, su tono se tornó un tanto triste, lo que provocó que Haruka se asustara.
-No, para nada, me cayó muy bien, se ve que es buena persona y que te quiere- dijo nerviosamente, medio tartamudeando, cuidando sus palabras, tratando de animar a su amiga. -A todo esto... ¿dónde dejaste al indibiduo?
-¿A quién?- preguntó la chica con cara de "what"
-A ver¿de quién hemos estado hablando todo este tiempo?- dijo un poco sarcástico su amigo.
-AAAHHH... ya regresó a su casa.
-¿Y eso es?
-En Hiroshima.
-Vaya... eso queda un poquito lejos de aquí- dijo Haruka sorprendido.
-Si, por eso viene poco a visitarme- respondió encogiendo los hombros un poco.
-Ya veo, es un escapista como Darien que viene cuando quiere- dijo riendo. A Michiru no le causó tanta gracia y le dió una palmada en el brazo. -Bueno, ya no te enojes, estoy jugando- dijo sobándose el brazo.
-¡TENOH!- En ese instante apareció el profesor tras Haruka quien puso cara de "gulp.
-¿Si querido profesor?- preguntó con una enorme sonrisa.
-¿Haría el favor de tomar asiento?- preguntó el maestro muy enojado.
-Este... por supuesto, ya nos vamos a...- volteó a ambos lados buscando a Michiru pero la chica ya se había sentado. Una gota gigante apareció en la frente de Haruka.
-¿Qué decía señor Tenoh?- preguntó el profesor cruzando los brazos.
-Que por eso ya me voy a sentar- corrió a una silla que estaba vacía junto a Michiru.
-Sentadito y calladito - dijo Michiru riendo.
-Me las vas a pagar¡me abandonaste!- dijo enojado.
-Eres un indisciplinado, no es mi culpa.
-Mmmmmm.
-Bueno, ya no te enojes- dijo la violinista con una sonrisa - Mejor cuéntame de lo que hiciste ayer- Haruka siempre se contagiaba de esa sonrisa.
-Salí a comer con las chicas.
-Que bien- respondió Michiru con una sonrisa - No te dejaron solito.
-No, de echo llegaron después de que te fuiste.
-Lo bueno es que ibas a estudiar.
-Je,je,je...- Haruka rió ligeramente -Si, pero no puedo rechazar un par de ojos azules suplicantes.
-Oh, ya veo... así que ella fue quien te invitó- dijo la violinista -¿Acaso estás celosa?- preguntó Haruka con una sonrisa malévola.
-Tal vez...- respondió ella sonriendo confidentemente.
-¿Y qué pasó¿Haz hablado con ella?- Michiru insistía para sacarle información a su amigo que era hermético en ese tipo de cosas.
-Nos hemos tratado como amigos, obviamente. Primero tenemos que conocernos, ya después veremos qué pasa.
-Nunca pensé que el gran conquistador Tenoh Haruka, quien tiene a todas las niñas de esta escuela babeando por él, se dejara intimidar por una niña de secundaria- dijo la violinista con una sonrisa burlona.
-Ja, qué graciosa... a mi ninguna niña me intimida- respondió Haruka ofendido.
-Excepto ella- dijo maliciosamente la chica, a lo que el corredor no supo que responder. -Lo sabía, te mueres por ella- una gran sonrisa se dibujó en el restro de Michiru - ¿Cuándo te le vas a declarar¿La vas a besar¿Le vas a regalar algo¿Le pedirás matrimonio y tendrán muchos hijos?- empesó a bombardear la violinista con preguntas al pobre chico que puso una cara de susto que no podía disimular.
-¿MATRIMONIO!- gritó Haruka a media clase.
-Señor Tenoh, al pasillo... ¡AHORA!- gritó el profesor furioso. Una gota gigante apareció en la frente de Haruka y salió con una nubecita negra lloviendo sobre su cabeza agachada. Volteó a ver a su amiga de reojo quien se reía disimuladamente para que no la castigaran también. "Me las vas a pagar sirena" pensó Haruka saliendo del salón y quedando parado en el pasillo todo el resto de la tarde esperando a que la clase terminara.

Inicio: Jueves 15 de Abril del 2004 Fin: Martes 20 de Abril del 2004