Bueno, primero que todo. Gracias por todos los reviews, de verdad que me agrada saber sus opiniones...

También, Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo. Espero que el próximo año sea mejor que este, mucho mejor...

Capítulo 18

"Hola Harry" dijo Ginny mientras le devolvía el beso. "¿Hermione ya está aquí?"

"Si, la acabamos de traer. Ya esta en su habitación" dijo Harry mientras la sostenía de la cintura.

"Iré a verla" dijo Ginny mientras subía las escaleras.

La pelirroja abrió la puerta del cuarto de Hermione. Ya estaba profundamente dormida pero podía escuchar una suave melodía. Busco por el cuarto a ver de donde provenía aquel dulce sonido y se dio cuenta de que era un dije. Hermione tenía en su mano la cadena que Draco le había obsequiado. Ginny decidió salir de la habitación.

"Todavía lo quiere" pensó Ginny mientras cerraba la puerta.

Harry la sorprendió cuando la abrazó. Ginny trató de actuar normal, después de todo Harry haría un gran alboroto por lo del dije.

"¿Esta dormida?" preguntó Harry

"Si" dijo Ginny

Harry la besó tiernamente. "Te extrañe mucho"

"Yo también. Pero sabes que tenía que atender el hospital" dijo la pelirroja.

"Si, lo sé"

"Vamos Harry, tengo sueño" dijo Ginny mientras caminaban hacia la habitación. "¿Dónde esta Ron?"

"Abajo. Está un poco preocupado, no ha parado de tomar y eso es muy extraño en él. Pero ya se le pasará" dijo Harry mientras entraban en la habitación.

"Si, se pondrá mejor" dijo Ginny mientras cerraba la puerta.

Todavía en la sala Ron estaba sentado mientras tomaba y veía fijamente las llamas de la chimenea. Esta preocupado por los sentimientos que podían resurgir en su novia.

No se le había olvidado la reacción de Hermione luego de la muerte de Draco. Fue un acontecimiento que la desgarró totalmente, y aunque él estaba todavía un poco celoso, siempre estuvo ahí para ella, nunca la dejó sola y la salvó de lo que sentía y de ella misma. La muerte de Draco había sido traumatizante.

Pero ahora que estaba vivo todo lo que había logrado con Hermione podía desmoronarse. Recordaba los celos desgarradores que había sentido cuando Draco empezó a alejar a Hermione de él. Estaba convencido de decirle lo que sentía justo al mismo tiempo en que se dio cuenta de que era novia de esa serpiente, esa asquerosa serpiente que le había robado el amor de su vida y ahora había aparecido nuevamente para arrebatarle todo lo que él había proclamado como suyo.

¿Por qué se sentía así? Hermione no era un objeto, no era un premio, sino lo que le daba sentido a su vida. ¿Qué importaba el Quidditch si no estaba ella para apoyarlo? Su vida simplemente era vacía si la persona que amaba no estaba a su lado, no sabía como había empezado a amarla pero se había enamorado de ella, o al menos eso creía. Sentía un cariño inmenso y no podía evitar las ganas de verla, verdaderamente le hacía falta.

Decidió levantarse e irse a dormir, estaba harto de pensar, harto de sentir. Entró a su habitación y se durmió rápidamente.

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Draco entró furioso a su habitación. Hermione se había ido, lo había engañado, nunca había estado bajo la maldición, todo este tiempo estuvo fingiendo. Blaise le había contado que una carta había sido enviada a Harry, utilizando una de sus lechuzas.

Él lo admitió varias veces, no era justo hacerle eso a la mujer que amaba, porque él verdaderamente la quería, su cariño no disminuyó ni un poco durante esos años que no la vio, todo lo contrario, iba en aumento.

De repente se dio cuenta de que la noche en que había estado con Hermione ella no estaba bajo la maldición, por lo que sucedió fue real. Lo que ambos sintieron fue realidad. Talvez Hermione seguía queriéndolo, tal vez no todo estaba perdido.

Buscó entre gavetas y ropa y finalmente encontró lo que estaba buscando, el regalo que le había dado Hermione, el Encanto Guardián. Lo miraba con detenimiento mientras miles de recuerdos del colegio venían a su memoria.

Tenía que hacer algo para recuperar a la mujer que amaba, la mujer que le había confiado la vida siendo tan solo una muchacha, la mujer que lo había amado con locura.

Como sufrió cuando tuvo que dejar todo para unirse a Voldemort, se había convertido en mortífago, Hermione no lo sabía, nadie lo sabía, aunque muchos lo sospechaban. Draco había sido amenazado por su padre. Si no se unía a las fuerzas del mal, la persona a la cual más quería, o sea Hermione, sufriría la peor de la torturas.

Draco no podía dejar que lastimaran a Hermione, simplemente prefería mil veces alejarse de ella que ponerla en peligro.

Odiaba a su padre porque por su culpa las personas que él más amaba habían sido alejadas de él, su madre y Hermione.

Pero él se vengó, claro que lo hizo, asesinó a su padre, lo hizo pagar por haberle arruinado su vida.

Ahora tenía otros intereses, cuando consiguiera todos lo amuletos gobernaría sobre todos, magos y muggles.

Pero ahora lo que ocupaba su mente era Hermione, esa mujer de cabellos castaños que le había robado el corazón, que se había entregado a él.

¿Cómo no se dio cuenta de que ella le estaba mintiendo? Debió sospechar algo cuando le dijo que se había asustado cuando vio a los dragones por la ventana. Eso no es posible, los dragones tienen terminantemente prohibido volar por esos alrededores. Pero se cegó por la inocencia de esos ojos color miel.

Se sentó en un sillón frente a la chimenea, murmuró algo y un vaso apareció en su mano. Empezó a beber lentamente mientras observaba el Encanto Guardián que se balanceaba en su mano.

Hermione lo había dejado para volver con cara rajada y la comadreja, como los viejos tiempos. ¿Por qué no había llevado las cosas con calma? Talvez habría podido recuperar el cariño de Hermione y no estaría sufriendo como ahora. Pero lo único en su mente era conseguir el estúpido amuleto. Se supone que Hermione sabía donde estaba pero en realidad ni siquiera sabía que era.

Se levantó y tiró el vaso al fuego de la chimenea provocando que las llamas aumentaran un poco. No podía quedarse ahí, ahora que Potter y la comadreja sabían que estaba vivo debía de irse a un lugar donde nadie lo encontrara. Empacó unas cuantas cosas y se apareció en una casa que tenía para vacacionar en un lugar que él siempre había apreciado por la paz que desprendía, Nueva Zelanda. No notó que unos ciertos ojos grandes y verdes lo miraban sorprendidamente.

Hermione se levantó, aún molesta con Draco por haberse pasado de tragos. Y luego empezó a recordar todo el tiempo que había pasado con él. Nunca antes le había fallado y no podía creer lo rápido que había pasado el tiempo.

Navidad y Año Nuevo pasaron rápidamente sin suceso alguno, Hermione pasó las festividades con su familia, mientras que Draco se quedó en Hogwarts, ya que por razones obvias no iría a su casa.

Y aunque no lo pasaron juntos aún así se regalaron cosas que ambos necesitaban.

Se conocían muy bien. Demasiado bien. Pronto saldrían del colegio. Hermione no tenía la menor idea de lo que harían luego. No estaba segura de nada, solo que si aún su futuro era incierto, ella deseaba que Draco fuera parte de su futuro, al igual que era parte de su pasado y de su presente.

Dejo de analizar tanto las cosas y se vistió luego de darse un reconfortante baño, se fue a buscar a Draco para ver como estaba.

Al entrar en la habitación se dio cuenta de que el episodio de la noche anterior no sería problema alguno, porque muy dentro ella estaba segura de que aquel enojo no duraría mucho. No cuando parecía un ángel mientras dormía.

Draco estaba aún profundamente dormido. Aunque en su cara se veía que no se encontraba muy bien.

"Draco, despierta" le dijo Hermione bajito mientras acariciaba su cabello.

Draco respondió al llamado y cuando se sentó en la cama se mareo un poco.

"¿Estas bien?" le preguntó Hermione.

"Si Herm, no te preocupes" dijo Draco disimulando. Se sentía mal, nunca antes había tomado tanto y no recordaba mucho de lo que había pasado.

Hermione le sonrió y miró al piso.

"Herm, lamento si te cause problemas, lo siento, no se que me pasó yo nunca tomo" dijo Draco tratando de explicarse. "Me deje llevar por mis compañeros, de verdad lo siento"

"No te preocupes Draco, esta bien" le dijo Hermione mientras miraba a Draco en los ojos. Hermione estaba un poco molesta pero no quería empezar una pelea, y la verdad es que no era tan grave.

"Tengo sed" dijo Draco mientras se frotaba la garganta.

"Te traeré algo para tomar" dijo Hermione, se levantó y le trajo a Draco un refresco.

"Gracias gatita" Draco se lo tomó. "¿Qué día es hoy?"

"Domingo" dijo Hermione mientras se acostaba a la par de Draco. Draco la abrazó.

"Entonces tenemos tiempo"

Sin darse cuenta ambos se quedaron dormidos, cuando se volvieron a despertar eran las 11:30, ya se habían perdido el desayuno.

Draco se fue a bañar mientras Hermione traía algo de comer de la cocina. Ambos comieron hasta que se llenaron.

Decidieron caminar por los alrededores del colegio, ahora que ya todos sabían que estaban juntos no les importaba.

Aunque de vez en cuando Hermione recibía miradas asesinas por parte de los Slytherins, al igual que los de Gryffindor amenazaban a Draco con la mirada pero no era nada que pudieran ignorar.

Harry y Ginny estaban no digamos que acuerdo con la relación, pero eran felices porque Hermione era feliz y de vez en cuando los acompañaban un rato a Hogsmeade y la pasaban bien juntos.

El que no tenía remedio era Ron, no le dirigía la palabra a Hermione, y últimamente había tenido varios encuentros con Draco que acabaron en peleas, Hermione sufría mucho porque no se llevaran bien pero no iba a dejar a Draco por nada del mundo.

Además el pelirrojo se sentía traicionado por Harry también ya que cuando le contó que andaba con Ginny, Ron se enojó bastante con ellos. Aunque después entendió que de verdad a Harry le interesaba Ginny y viceversa.

Draco y Hermione caminaban agarrados de las manos cuando notaron una gran multitud alrededor del lago, donde ahora había un barco que a Hermione le había parecido muy conocido.

"Ese barco me recuerda a algo" dijo Hermione mientras se acercaban al lago.

"A mi también" dijo Draco.

En ese momento se bajó un muchacho de cabello negro y cejas espesas. Hermione lo reconoció inmediatamente.

"¡Victor!" gritó Hermione mientras el muchacho pasaba a través de la multitud para saludar a Hermione.

"¿Cómo estas Herm?" dijo mientras la abrazaba muy cariñosamente.

"Muy bien ¿y tú?" dijo Hermione mientras se separaba de él.

"Perfectamente" dijo Victor mientras le sonreía.

Draco aclaró su garganta para que notaran que estaba ahí.

"Ah, lo siento se me olvidaba. Victor, este es Draco Malfoy, es mi novio" dijo Hermione

Victor se quedó inmóvil, sentía como su corazón se partía. Hizo lo que pudo para reaccionar y estrechar su mano con la de Draco.

"Yo te recuerdo, me agrada volverte a ver" dijo Victor

"Lo mismo digo" dijo Draco dándole una sonrisa fingida.

Hubo un silencio muy incómodo, luego Hermione volvió a hablar.

"Y dime Victor, ¿qué estas haciendo aquí?" dijo Hermione mientras agarraba dulcemente la mano de Draco.

"Pues, yo…vine…porque Dumbledore me invitó a pasar los últimos días aquí, además tenía muchas ganas de volver a verte"

Draco tenía ganas de pegarle en la cara a Victor. ¿Cómo se atrevía a decir eso en frente de él?

"Que bien" dijo Hermione notando la tensión del momento. "Bueno Victor hablamos luego"

"De acuerdo, nos vemos después" dicho esto Victor besó la mano de Hermione. Ella se ruborizó, y Draco tenía ganas de caerle a patadas.

"Nos vemos luego, Malfoy" dijo Victor mientras ellos se alejaban.

"Si, claro" dijo Draco mientras ambos se miraban con odio.

Cuando ya iban a entrar al castillo Draco agarró a Hermione de la cintura y la besó apasionadamente y por mucho tiempo. Para cuando se separaron mucha gente los estaba viendo, incluso Victor, que era exactamente lo que Draco quería que sucediera.

"¿Y eso porque fue?" dijo Hermione mientras recobraba aire, aun tenía sus brazos alrededor del cuello de Draco.

"Para demostrarte cuando te quiero" le dijo Draco mientras la miraba a los ojos. Luego entraron al castillo, no sin antes que Draco disfrutara la cara de frustración que tenía Victor.

"¿Te alegras de que tu amiguito haya regresado? Dijo Draco cuando no pudo aguantar más los celos.

"Si, hace tiempo que no hablaba con él" dijo Hermione ignorando lo que Draco sentía.

"Que bien" dijo Draco sarcásticamente.

Hermione notó perfectamente lo que Draco insinuaba.

"Draco, él y yo solo somos amigos" dijo Hermione mientras entraban en una clase para hablar tranquilos.

"Pues los amigos no se dan besos en la mano, ni abrazan así" dijo Draco mientras se acercaba a la ventana. Draco empezaba a enojarse.

"El es así Draco, es muy caballeroso"

"O muy aprovechado" dijo Draco mientras apoyaba su mano sobre la pared.

Hermione lo abrazó "Draco, no tienes porque preocuparte, sabes perfectamente que yo estoy contigo"

"Eso no evita que le sigas gustando, o me vas a decir que no sabías que él esta enamorado de ti"

"La verdad, yo si lo sabía, me lo dijo en una de las cartas que me mandó" dijo Hermione mientras Draco se separaba de ella.

"Si lo sabías, esto es perfecto" Draco ahora estaba enojado.

"Pero yo le dije que yo solo lo quería como amigo. Draco no puedo hacer nada más de lo que ya hice"

"¿Y él lo habrá entendido?" dijo Draco burlándose

"Draco, ahora estoy contigo, él para mi no significa nada. Pero no puedo dejar de hablarle, sería demasiado" dijo Hermione mientras se acercaba a Draco.

"Esta bien, te entiendo" dijo Draco mientras acariciaba la mejilla de Hermione. "Pero eso no impide que me den celos"

"No tienes porque estar celoso Draco, sabes perfectamente que soy toda tuya" dijo Hermione mientras abrazaba a Draco y este a ella.

"Prométeme que por lo menos no hablaras con él sin que yo este contigo"

"¡Que confianza me tienes!, ¿ahora vas a estar conmigo siempre que hable con cualquiera?" dijo Hermione molesta. ¿Por qué Draco era tan celoso?

"Si te tengo confianza, pero a él no" dijo Draco mientras trataba de explicarse a Hermione.

"Draco no te preocupes, con la aclaración de hoy creo que no le quedó duda de que nosotros estamos juntos" dijo Hermione mirándolo a los ojos.

"Solo prométeme que lo mantendrás a raya" dijo Draco mientras la agarraba de la cintura.

"Lo prometo" dijo Hermione. Draco la besó profundamente, no quería dejarla ir.

Hermione, tal vez te preguntes porque soy tan celoso, es porque eres lo único que realmente importa, eres lo que más amo, eres mi vida pensó Draco mientras besaba a Hermione y pasaba sus manos por la espalda de ella.

¿Por qué te importo tanto Draco?, ¿acaso no sabes lo que siento por ti?, ¿qué puedo hacer para demostrártelo? pensó Hermione mientras acariciaba los cabellos de Draco.

Cuando dejaron de besarse ambos se dirigieron al comedor. Al entrar Draco notó a Victor sentado en la mesa de los profesores. Se dio cuenta de que los miraba, le dio a Hermione un beso en la mejilla. Draco se fue a sentar a la mesa de Slytherin y Hermione se sentó en la de Gryffindor.

Dumbledore se levantó y todo el comedor se quedó en silencio. "Bueno alumnos quiero decirle que estos últimos días tendremos un invitado especial, muchos de ustedes lo conocen, es Victor Krum, espero que todos lo hagan sentir en casa. Ahora a comer"

Las mesas se llenaron de comida al instante. Draco no pudo evitar vigilar a Victor durante toda la comida. Lo miraba con odio, con rabia. No quería que alguien alejara a Hermione de él, no quería perder lo único que le importaba. Mientras Draco miraba a Victor notó un grupo de muchachas que lo llamaban y le gritaban, el propio club de fans de Krum en Hogwarts. Draco decidió concentrarse en la comida.

Hermione estaba contenta y empezó a comer como si nada.

"Mira Hermione, Vicky esta aquí, ¿por qué no vas corriendo hacia él?" eso era lo primero que Ron le decía a Hermione en días y la verdad es que hubiera preferido que se quedara callado.

"Sabes que detesto que lo llames Vicky, es Victor. No voy corriendo hacía él porque primero nunca lo he hecho y segundo por que tengo a Draco. Además no te debo explicaciones, no me has hablado en días y lo primero que me dices es un insulto, la verdad hubiera preferido que te quedaras callado" Hermione dijo esto un poco alto, la mayoría de los estudiantes de la mesa de Gryffindor se le quedaron viendo.

"¡Si debí haberme quedado callado pero desde el primer día que te vi, nunca debí haberme hecho amigo tuyo!" dijo Ron mientras ignoraba su comida.

"¡Pues me alegro que pienses así, de hecho ya puedo ver que yo como amiga nunca te he importado!, ¡¿Por qué tienes que ser tan rencoroso Ron, no podrías alegrarte por mi?!"

"¡No puedo alegrarme por ti porque se perfectamente que él no te conviene!" Gritó Ron y ahora todo el comedor los escuchaba, incluso los profesores. Hermione ya tenía los ojos llorosos.

"¡Ya basta, cálmense!" gritó Harry

"¡Cállate!" gritaron Hermione y Ron al mismo tiempo.

"¡Sabes que Hermione, desde ahora para mi estas muerta!" le gritó Ron.

Hermione no pudo evitar empezar a llorar y salió corriendo del comedor. Draco se levantó y salió corriendo tras de ella. Pero cuando pasaba por la mesa de Gryffindor le dijo a Ron.

"¡¿Qué demonios te pasa?! ¡¿Cómo se te ocurre gritarle así?! ¡Si quieres enojarte con alguien enójate conmigo, no con ella, ella no tiene la culpa de nada!"

Ron se quedó callado, era cierto, Hermione era su amiga antes que todo, ¿cómo podía ser tan insensible?

Draco salió del comedor buscando a Hermione, la encontró unos pasillos más allá sentada en el piso y recostada a la pared, estaba llorando mientras abrazaba sus piernas. Draco no sabía que decir, así que se sentó junto a ella y pasó su brazo por su espalda. Ella recostó su cabeza sobre el hombro de Draco. Él solo se quedó junto a ella consolándola. Las lágrimas de Hermione caían sobre Draco, pero a él no le importaba, solo quería hacerla sentir mejor.

"Fue muy cruel Draco, muy cruel" dijo Hermione entre sollozos.

"Si lo fue Hermione, no entiendo porque le cuesta tanto aceptarlo, debería estar feliz porque tu estas feliz, eso hacen los amigos" dijo Draco mientras secaba las lágrimas de Hermione con su pañuelo.

"No sé que hacer Draco, Ron me odia, me odia"

"Nadie podría odiarte gatita, Weasley solo es un idiota. No te preocupes él entrará en razón, ya lo verás"

Hermione se empezó a calmar. "Gracias por estar conmigo Draco, tu eres lo que necesito"

"Sabes que no te dejaré Hermione" dijo Draco mientras le daba un beso en la frente. "Siempre estaré contigo"

Moonlight soul...