Disclaimer

Spiral- Suiri no Kizuna no me pertenece, es propiedad de Eita Mizuno y Shirodaira Kyou, hago esta historia sin fines de lucro ya que no gano nada de dinero al publicarla.

Spiral- Suiri no Kizuna:

La Vida que Quedó Atrás.

E p . 1 :

S i t u a c i o n e s D e s m a d r o z a s.

Ese día, Kanone se levanto cuando sintió el sol tocar su rostro, se levanto con un tanto de pereza y se talló los ojos. No habia podido dormir bien por la onda de calor que estaba azotando los primeros días de mayo, no estaba acostumbrado al clima de Tokio. Le dio mas pereza levantarse al ver las cajas que se alzaban a sus pies, odiaba la mudanza, aunque muchas veces era recomendable; seguro terminaria por acostumbrarse.

Un golpe en la puerta termino por despertarlo, y no era exactamente que alguien estuviera tocando, sino mas que bien que una persona acabab de tropezar y habia ido a estamparse ahí. ¿Quién mas podria ser?. Abrió la puerta, sólo para ver a sus pies aquella mata de cabello rojo.

- Buenos días, Kousuke- lo saludo educadamente, para luego dirigirse a la cocina, sin la menor duda de cual habia sido el motivo por el que habia quedado en el suelo. Ultimamente, Kousuke estaba insinuandosele demasiado a Ryouko, desde que esta habia conseguido un novio, no dejaba de molestarla noche y día. Ella, obviamente, no se lo tomaba muy bien.

Sin importarle eso, Kanone bajo tranquilamente a la cocina, mientras aun se tallaba ligeramente los ojos y su estomago comenzaba a gruñir. ¿Tan tarde se habia levantado?. Entró, y lo primero que vió fue a Eyes leyendo el periodico entre lineas, mientras arqueaba las cejas con sarcasmo. Kanone odiaba el japones. Kanjis complicados, cada uno formando una palabra distinta según su ubicación en la palabra...

En verdad, los odiaba.

Pero a Eyes parecian interesarle, ya que desde su llegada a aquel pais no habia parado de mirar el periodico.

¿Algo interesante- se animo a preguntar, Eyes lo miro de reojo.

- Nada.- dijo con desgano, dejando el papel a un lado, y dandole un trago a la taza de café a su lado.

- Cualquiera que te viera, diria que eres un empresario- comentó Kanone, mientras husmeaba en el refrigerador, deberias buscar una nueva imagen, o te vas a hacer viejo demasiado pronto. -por mas que busco en el refrigerador, no encontro lo que estaba esperando. ¿Es que acaso no tenemos nada en esta casa?.

Eyes movio la cabeza con desaprobación.

- No.- respondio ironico.¿Que buscabas?

- Algo. Cualquier cosa.- dijo y al instante, su estomago complemento la respuesta.- Pero ni siquiera tenemos leche... Creo que ire a comprar más.- suspiro resignado, y se dirigio a su habitación para cambiarse de ropa e ir rapidamente a la tienda que quedaba cerca de ahí. Antes de eso, Eyes hablo.

- Iré contigo por que...- se vio interrumpido por el sonido de una especie de cosa rompiendose al estrellarse en la pared.

¡Ya deja de molestar- escucharon vagamente la voz de Ryouko, seguida por un breve quejido por parte de Kousuke y la risa de Rio.

- ... por que cualquier cosa es mejor que estar en este campo de batalla- continuo, mientras ambos subian por las escaleras rumbo a sus respectivas habitaciones para cambiarse de ropa.

Kanone habria deseado salir desnudo.

No habria sido una mala idea¿verdad? (n/a: n;;;n Lo siento, no pude evitar el comentario), puesto que afuera estaba haciendo un calor del mismo infierno. Se puso una camiseta de tirantes de un amarillo palido y unos jeans azul oscuro, seguido de unos tennis que complementaban el look de "me acabo de levantar". Luego de pasarse el cepillo tres veces por el cabello, salio de la habitación, bostezando por lo bajo, mientras escuchaba una cuantas maldiciones de Kousuke hacia Rio justo en la parte de abajo.

¡Eres un total baka, Kousuke-kun- oyó decir a Rio de manera caprichosa, mientras sus mismos pasos comenzaron a escucharse por las escaleras.

¡Lo mismo va para tí, sucia enana- respondio el pelirrojo en un grito.

Mala idea.

Rio estuvo a punto de agarrar la fotografia colgada en la pared para lanzarsela en la cara; de hecho, lo habria hecho si Kanone no se hubiera dignado a parar aquella discusión absurda.

¿Y ahora por qué pelean- dijo, arqueando una ceja y sonriendo vagamente.

¡Kousuke-kun es un idiota- replico la niña de dos coletas, que tenia apenas 13 años.

- Eso ya lo sabemos, Rio- respondio Kanone, y enseguida Kousuke gruño con molestia- pero¿que te hizo esta vez- si, "esta vez", y aquella y la anterior a esa. Desde que habian llegado a Japón esos dos no paraban de discutir, ya fuese por que estaban euforicos por regresar a su pais, o simplemente por que la onda de calor no los dejaba descargar sus energias en otra actividad.

¡Mira- sacó un pequeño elefantito de peluche rosa, roto por el cuello con claras señales de una navaja. ¡Él lo hizo-

¡Con un carajo, Rio¡ya te dije que no fui yo- resongo el otro, y de inmediato tomó rumbo hacia su habitación. Escasos segundos despues, una especie de J-Rock lleno el lugar.

¡Bajale un poco el volumen- tuvo que gritar Kanone para que lo escuchara, el sonido disminuyo. - Veamos esto...- dijo, tomando el muñeco en sus manos-.

¡Ya no tiene arreglo- suspiro Rio un tanto triste, mirando al elefantito en las manos de Kanone.¡Y es el que me habia regalado Eyes-kun en mi cumpleaños!.

Ah, si... el cumpleaños de Rio... ¿cuanto habia pasado: un mes. Sólo un mes.

Y el elefante ya estaba roto por el cuello.

O Rio era descuidada, o Kousuke era un destructor. La segunda era la respuesta.

- Creo que puedo hacer algo...- murmuro Kanone, y Rio lo miro esperanzada.

- Yo me encargare. No te molestes, de seguro tienes mucho que hacer- dijo Ryouko, al fin, con fastidio. Al decir "mucho que hacer" se referia a asesinar. Matar. O como quiera llamarle, el caso es que ella se rehusaba a hacerle daño a alguien sólo por su seguridad. Kanone consideraba aquello como estupidez, y habia preferido ignorarlo, no sin molestarla algunas veces por el asunto.

- Descuida, por mi no hay problema. -respondio, con una gran sonrisa. Ryouko iba a responderle, pero en ese momento se escucho abrir una puerta cercana a las escaleras y luego unos pasos muy suaves. Sólo Eyes caminaba de aquella forma tan sutil. Ryouko gruño con molestia y salió de la escena.

- Kanone-kun... - comenzo Rio, pero Kanone la interrumpio.

- Tu lo viste claramente. Fue ella quien empezo- dijo, sonriendo, mientras miraba de reojo a Eyes bajar hacia él, y pensando "ella empieza y despues sale perdiendo". El chico ingles llevaba puesta una camisa de manga corta blanca, junto con un pantalón de vestir negro. La prenda posterior iba semi-desabrochada, por que incluso Eyes (que parecia inmune a todo) podia sentir aquel calor infernal de 39 °C que hacia en la región de Shinjuku.

¿Otra vez pelearon- pregunto Eyes aunque fue mas una afirmación.

¿Van a salir- dijo Rio con cierto entusiasmo.

- Si, sólo un momento, pero...- en aquel momento, nuevamente, se escucho el sonido de una bofetada y unas zancadas, seguido de una puerta cerrada de par en par. -... pero quiero encargarte una misión: cuida que aquellos dos no se maten.- dijo, y luego penso "Ryouko no me importa, pero Kousuke si me sirve de algo".

¡Hai- exclamo Rio, mientras bajaba las escaleras y corria hacia la sala. - Vere un poco de televisión.- aclaro. Kanone sonrió.

Señalo con la mirada la puerta, y él y Eyes salieron, al clima caluroso de verano, sin una sola brisa, pocas personas se veian en las calles, y las que andaban por ahi llevaban poca ropa y una expresión de fastidio.

Definitivamente, el clima de Japón los estaba afectando a todos de una manera muy extraña. Perjudicial, o no, a Kanone no le importaba, siempre y cuando nadie llegara a meterse en sus asuntos.

Un tanto corto, pero es mas bien un epilogo que un capitulo. Ojala y les guste, dejen review.