Spiral- Suiri no Kizuna no me pertenece, es propiedad de Eita Mizuno y Shirodaira Kyou, hago esta historia sin fines de lucro ya que no gano nada de dinero al publicarla.
Spiral- Suiri no Kizuna:
La Vida que Quedó Atrás.
E p . 3 :
L a V e r d a d O c u l t a .
"Mi nombre es Narumi Kiyotaka" se presento al castaño de ojos azules, alto y de complexion delgada. "¿Me dejaras pasar, o no?" dijo, pidiendo permiso.
"Mm... nop" Kanone sonrio y volvio a cerrar la puerta, esta vez con mas fuerza. "Vaya tipo raro..." murmuro y al darse la vuelta se encontro cara a cara con Eyes, sus rostros demasiado cerca. Ninguno de alejo.
"¿Quien era exactamente?" pregunto el alvino, viendo de reojo la puerta cerrada.
"Em... ¿la vecina? ¿un tio vendiendo quesos, algo asi deberia haber sido..." Kanone sonrio, se rasco la cabeza con incredulidad, y luego dijo la verdad. "Un tal Kiyotaka Narumi... sabe mi nombre, y probablemente el de ustedes tambien" añadio con seriedad. "Seguramente es un Cazador que se quiere hacer pasar por bueno" y movio la mano de arriba a abajo en señal de despreocupacion, mientras caminaba rumbo al marco de la cocina. "Sigamos en lo que estabamos" le menciono. Eyes entro junto con el a la cocina, y ambos se sentaron en la mesa, con el cereal remojado y un abrumador momento de silencio.
"¿Que era lo importante que querias decirme, Kanone?" pregunto el otro chico sin mas rodeos. "Era sobre nosotros".
"..." Kanone dudo un momento. ¿Y si la verdad era demasiado para Eyes?... incluso él mismo se habia quedado impresionado, perturbado y, mas profundamente aun, herido por su propio origen, sabiendo que no eran nada normal, y que en definitiva no fue deseo de Dios que llegaran a ese mundo. Aunque bueno, él nunca habia dependido de Dios de cualquier modo... "Creo que..." lo penso mas. No, no y no. "... que deberiamos... ¡distribuir las tareas de la casa!. Exacto, exacto. Poner un calendario y..."
"Eso no era lo que querias decirme" interrumpio Eyes bruscamente, mirandolo a los ojos.
"... Lo se" Kanone sonrio nerviosamente, "de cualquier modo... lo pienso mejor y me doy cuenta de que... podemos hablarlo luego. No es tan importante una vez que lo razonas" concluyo, poniendose de pie. Se estiro, "creo que ya me ire a dormir. Tengo algo de sueño... Buenas noches, Eyes" agito la mano y desaparecio en las sombras del resto de la casa. La unica luz prendida era la de la cocina.
Eyes se quedo solo y en silencio. Ya no tenia hambre.
Algo rodando por las escaleras a las 11 en punto. No se podria decir que era humano...
"¡Ed!" exclamo Kanone algo preocupado al ver a la pequeña bola blanca de pelos a sus pies. "Dumm katze..." lo cargo en sus brazos para asegurarse de que estaba bien, este empezo a ronrronear caprichosamente, recibiendo cada caricia.
"¿Otra vez trato de suicidarse?" pregunto Kousuke con cierta ironia, mientras bajaba las escaleras. "¿No deberiamos hacer lo mismo nosotros?"
"Supongo" Kanone sonrio, y dejo al animal en el suelo, aunque a este no parecio agradarle demasiado, termino por irse ante la falta de atencion por parte de su dueño.
Fue entonces cuando una musica tranquila rompio el silencio del lugar; era una melodia suave pero no lenta, algo hermoso pero a la vez escalofriante. Eyes estaba tocando el piano, asi que Kanone camino rumbo a la habitacion de donde provenia el sonido para poder apreciarlo mejor. Quien escuchaba a Eyes decia que tocaba como un angel, quiza tenian razon; despues de todo, era demasiado amable, él siempre se lo habia dicho.
La melodia se detuvo poco antes de que Kanone entrara en la habitacion de piano y comenzara a aplaudir ligeramente.
"Magnifico, Eyes, como siempre" se acerco sonriente. "¿Será posible que toques algo para mi?" pregunto una vez al lado del pianista.
"¿Qué te gustaria escuchar?".
"Mmm..." el castaño lo penso. "No lo se... Sorprendeme".
Luego de buscar un poco en sus memories, Rutherford comenzo a tocar algo que mas tarde se distinguio como la 9na Sinfonia de Beethoven. Aunque se debia admitir que esa musica se escuchaba mas llamativa en orquesta que solo en piano, cualquier cancion que fuese tocada por las manos angelicales de Eyes Rutherford resultaba una sutil y delicada pieza de arte.
Pasaban lo dias, los meses, los años. Llevaba tanto tiempo conociendo a Eyes... la unica persona digna de su confianza, y de sus sentimientos. Siempre lo vio asi, como si él fuera el unico en esa casa que valiera la pena. El resto no le interesaba en lo absoluto, eran simplemente...
... ¿Sacrificables?.
¿Entonces por que los tenia ahi?. Respuesta simple: por que si no, Eyes se iria. Y no queria estar sin Eyes.
"¿Qué era eso que querias decirme ayer?" pregunto el albino pero la musica seguia suavemente, como un fondo a la naciente conversacion.
"..." Kanone estaba demasiado ensimismado como para escuchar, con la mente ida y la mirada perdida en las teclas.
"¿Kanone?" Rutherford dejo de tocar.
"..." no fue sino hasta que la musica se detuvo que Hilbert volvio a la realidad como su un cubetazo de agua fria le hubiera caido en la cabeza. Estaba silencioso, solo viendo a Eyes.
"Mio" murmuro. Luego se dio un fuerte golpe en la cabeza y finguio una sonrisa torpe. ¿¿En qué diablos estaba pensando?... ¿Acaso su retorcida mente le estaba jugando otra vez algun sucio juego?.
"¿Qué?".
"¡No, ¡nada!. Es solo que..." se recargo en el piano, quedando su rostro frente al de Eyes. "... cuando Beethoven compuso esa Sinfonia, ya estaba completamente sordo" comento. "Y dicen que esa canción es la cima de la musica universal. ¿No te parece ironico?. Quiza nosotros somos como Beethoven... solo que sin exito".
"¿En qué sentido exactamente?" Eyes entendia a medias lo que su amigo queria decir. Habia muchas interpretaciones para la expresion que acababa de usar.
"En el hecho de que intentamos vivir una vida normal, lo mismo que Beethoven intento escribir musica estando sordo, la diferencia es que a él le salio bien y a nosotros no" respuesta definitiva. Silencio, dando tiempo para pensarla.
"Tiene sentido" acabo por decir Rutherford. "No vuelvo a tocar musica de Beethoven" el tono fue mas de ironia que de seriedad. Kanone sonrio ampliamente.
"Un comentario algo hilarante aunque sin la intencion de serlo" comento. "Cambiando el tema, ¿salimos a caminar, si sigo encerrado en esta casa acabara por tratar de suicidarme como Ed".
"¿Rodó por las escaleras otra vez?". Kanone asintio, mientras Eyes se ponia de pie.
Caminaban ya por el parque cercano, alrededor de las cuatro de la tarde, con el insoportable calor de Tokio en sus cabezas. Salir no habia resultado tan buena idea despues de todo, al menos en la casa habia aire acondicionado...
"Mejor vamonos a Londres... el clima ahi es perfecto" comento Kanone, mirando a Eyes de reojo. "¿Te molestaria si nos fueramos a ese lugar, Eyes?".
"¿Por que habria de molestarme?" al momento de hacer esa pregunta, una balón de soccer la tocó los pies al chico de ojos azules, para que despues un joven como de su misma edad, se acercara a ellos. Eyes pateó la pelota, pero con poca fuerza.
"Tienes punteria, si quisieras serias bueno en los deportes" cambio de tema del castaño, viendo que el balón iba a dar directo a los pies del chico de cabello cafe y...
Sintio una mano en su hombro. No, no era la de Eyes, no era su estilo agarrar el hombro de las personas. Se dio media vuelta tratando de sonreir, y si, otra vez el hombre castaño con los ojos azules estaba ahi, sosteniendo una botella de agua.
"Nos volvemos a encontrar" saludo.
"Lo ultimo no fue un encuentro" Kanone no dejaba de sonreir. "Fue un acoso".
"Diciendolo asi haces que suene horrible" Kiyotaka arqueo una ceja.
"Es que es horrible".
Silencio. Eyes no entendia demasiado, solo el hecho de que la voz de aquella persona sonaba como la que habia escuchado la noche anterior desde la cocina.
"Cabello blanco..." murmuro, mirandolo. "¿Eyes Rutheford?" pregunto, ignorando completamente el hecho de que la sonrisa de Kanone torno en una mueca de fastidio.
"¿Quién eres?" Rutherford fue directo al grano.
"La persona que fue a su casa anoche. ¿Kanone-kun no te comento nada?" miro a Hilbert de reojo. "Narumi Kiyotaka" extendio la mano, pero Eyes no la estrecho. "Entiendo. Yo solo quiero ayudarles..." dijo, mirando hacia donde estaba el chico castaño, jugando soccer con una mujer atractiva y de cabello negro. "... Proyecto Blade Children" concluyo, empezando a caminar.
"¿Proyecto Blade Children?" le pregunto Eyes, y Narumi se detuvo en seco.
"Los vere en este parque, hoy a las diez" respondio. "El destino se puede cambiar" fue cuando volteo a mirarlos, sonriendo ampliamente, y corrio en dirección a la mujer y el joven castaño.
Hubo un silencio.
"Se me quitaron las ganas de estar fuera" Kanone jalo a Eyes del brazo y emprendieron el camino a casa.
Esa persona...
.. no le agradaba en absoluto.
Llegaron, pero a nadie le dijeron lo sucedido. A Eyes seguia dandole vueltas en la cabeza la frase Proyecto Blade Children... ¿qué significaba?. Al no entenderlo, llego la frustracion, y como no hay nada peor que un talentoso artista frustrado, se dirigio al piano con Kanone a sus espaldas.
"Quieres ir, ¿cierto?".
"Necesito respuestas" aclaro el ingles, sentandose frente al instrumento.
"Respuestas que yo no puedo darte".
No se escucho ni un ruido, ni una voz. Nada. Solo las suaves notas del piano empezando a tocar. Kanone se acerco a Eyes, le puso las manos en los hombros y le hablo al oido.
"¿Piensas ir?" le pregunto.
"¿No vas a acompañarme?" Eyes dejo el piano.
"No. Podria ser una trampa de los Cazadores, no creo que deba ir ninguno de los dos" respondio Hilbert, alejandose de su amigo.
"No suelen ser tan directos. Simplemente matan, no avisan".
"Pueden cambiar de metodos". Una discusion habia empezado, ambos lo sabian. No solian pelear, pero en aquella ocasion, las cosas eran diferentes.
"Si no quieres que vaya, solo dimelo" inquirio Eyes.
"Esta bien" ya no habia una sonrisa en el rostro de Kanone. "No quiero que vayas".
"¿Porque?" Rutherford se puso de pie frente a él.
"Porque no".
"Dame una razón para no ir" no era una sugerencia, era una orden. Las cosas no iban bien, si no se detenian de una vez acabarian mal...
"Me preocupas".
"No creo que sea por eso".
Se miraron a los ojos en silencio. Momentos despues, Eyes se dirigia a la puerta de la habitacion.
"Como trataste de mentirme, ire. Si tan preocupado estas por mi, entonces acompañame" dijo Rutherford friamente, sin voltear a verlo, y avanzando rumbo a las escaleras para subir a su habitacion.
Pero tenia razon. No era tanto que estuviera preocupado por que algo malo pudiera pasarle, despues de todo, ya no era una niño, se lo habia dicho antes directamente.
¿Entonces que era?. ¿Temia que supiera la verdad por otros medios?.
No, tampoco se trataba de eso.
No soportaba el hecho de que Eyes estuviera mas interesado en las palabras de otra persona que en las suyas. Al menos sentia que era de esa forma.
Ahi empezo su error.
¡No me maten, no me maten! Toda la culpa la tiene... ¡¡Kanone, si, él mismo. Me amenazo con una pistola si seguia escribiendo, ya saben como es.
"n.n Pero yo no hize eso" Kanone.
o.o ... u.u Bueno, la verdad es que no hayaba como seguirle. Esta completamente decidido que este fanfic estara basado en una de las teorias mas... "realistas" (¿¿llamas realista a eso?. En fin... es anime nada es completamente realista xD) sobre el origen de los Blade Children. Averiguaran una parte en el siguiente capitulo... Y si, el chico y la mujer a los que Kiyotaka veia eran Ayumu y Madoka, o sease que Eyes y Ayumu ya se habian visto o.o pero obviamente nuunca se acordaran.
Por cierto, si alguien sabe cómo demonios va a ayudar Ayumu a los Bure Chiru T.T que me lo diga por que yo no tengo ni idea u.u. Ultimas aclaraciones: si, esto es un EyesXKanone, shounen-ai, no creo que yaoi; y si, amo la musica de piano, de hecho fue por eso que Spiral me llamo la atencion.
Madoushi Akai Kiri,
Julio, 2005.
Parte de la produccion "T.T ¡Quiero vivir! Les juro que no me tarde casi cuatro meses por gusto".
Nuta: Perdon por la mala ortografia y gramatica, pero es que le movi al programa y no quiere revisarla bien u.u.
