Cielos, empezar con este segundo capítulo hace las cosas mucho más interesantes y más que nada por Vivian. Los dejo con el segundo capítulo por ahora... Disfrútenlo!

Capítulo 2

Durante su camino a Petalburg, en lo único que Vivian podía pensar era en ver a sus amigos -...¡No puedo creerlo!Cuando llegue veré a Mario!Hace meses que no lo he visto!- se decía pensativa.

La joven estaba tan adentrada en sus pensamientos que nisiquiera se fijó en el accidente que estaba a punto de tener. Un bandit tropezó con ella - ¡AAHHH!- gritó la chica al sentir un empujón –Ouchhh!- exclamó el bandit -¡Toma!Quédate con esto!¡Es una pesadilla! ¡Te lo doy!- continuó el ladrón al dejarle un extraño espejo –¡Al fin! ¡La pesadilla terminó! ¡Yúju!- gritaba al desaparecer corriendo.

A la chica le pareció algo totalmente extraño, es decir, ¿por qué un bandit daría sus pertenencias a cualquier persona? -Oooouuucchhh!... está bien, gracias por disculparte!- prosiguió Vivian al levantarse molesta -¿Qué rayos es esto?¿Un espejo?- siguió al admirar el extraño objeto que obtuvo –Oh, cielos! Son las 2:36! Quedé con los chicos a las tres en casa de Koops!Tendré que tomar un atajo!- dijo Vivian al apresurarse sin tomar en cuenta lo ocurrido, llevando el espejo con ella.

Mientras tanto, en Petalburg todos se encargaban de los preparativos para el pequeño picnic que tendrían.

-Oye, Koops! ¿Te ayudo con algo, amor?- decía Koopie Koo.

-Koopie Koo! Deja de decirme "amor"!- contestó Koops –además, te dije que es solo un picnic!... tú sabes: un mantel, platos, comida...- contestó.

-Sí, pero aún as! No quiero que te lastimes, amorcito! –continuó lanzandose sobre él (algo así estilo Amy y Sonic, no?) –Ahhh...- Koops hizo un gesto de cansancio. Yoshi, Gombella y Madame Flurrie acomodaban las cosas dandole el toque final al lugar, Bobbery descansaba bajo la sombra de un árbol y todo estaba casi listo.

-Muchachos! – sonó una voz a lo lejos –Peach! Mario! – gritaron Koops y compañía muy alegres al verlos -¡AALLLTTOOOOO!- gritó Vivian al llegar apresurada cayendo por consiguiente barriendo en el piso –Llegué!Je, je!- dijo Vivian –Batiste record, Vivi!1:06!- continuó Yoshi mientras Vivian se levantaba -Mario, Peach...Bienvenidos!- dijo la chica muy feliz – Hola a todos señores... es un gusto volver a ver a los héroes de Rogueport- exclamó la princesa –Oh... em, ¿por qué nos quedamos aquí parados? Es decir, vamos a comenzar el picnic que preparamos!- dijo Koops.

Todos se acomodaron alrededor con el mantel y las cosas listas, el día era el adecuado para una buena plática.

-Es maravilloso el poder pasar más tiempo juntos!- exclamó Gombella –Sí, es como un sueño hecho realidad!- dijo Koops – Oye,Gonzalez! Espero que podamos ir a las luchas de nuevo, sí?- continuó Yoshi. La plática continuaba y Vivian aún no sabía que platicar, su vida era algo tediosa y mucho más con sus hermanas, excepto por Doopliss que era el que la alegre siempre con sus bromas y chistes, por lo que prefirió utilizar el tiempo para contemplar el extraño espejo que le "regaló" aquel bandit –Es extraño... hay algo en él... que no me agrada...- comentó en voz baja la joven bruja –Y dinos, Vivian ¿qué tal con tus hermanas?¿Cómo han estado?- dijo Peach sorprendiendo a Vivian, quien rápido guardó el espejo con tal de no llamar la atención- Yo... pues... em... nada nuevo, ya saben, jeje...- rió Vivian nerviosa –Ya veo...jeje- exclamó Peach quien parecía estar feliz en compañía de todos y en especial de su querido Mario, por supuesto. Cuando Peach desvió su mirada su entorno, Vivian aprovechó para tomar de nuevo el espejo, que no dejaba de ver con curiosidad, lo miraba detenidamente, la chica pronto sintió que el entorno se volvía oscuro, como si solo fueran ella y el raro espejo. Comenzó a tener variados pensamientos, era como si el esoejo pudiera leerle la mente, algo en el fondo no la dejaba quitar su mirada de aquel espejo. Pronto, sintió que su corazón se calentaba, cada vez más y más... Sí... en el fondo... había algo que ella deseaba...y mucho. El ambiente oscuro volvió a lo que era el tranquilo día de campo; un grito brotó de los labios de la chica -Ahhhh!- todos la miraron -¿Estás bien?¿Qué te ocurre?- todos acudieron en su ayuda –N-No es n-nada!- dijo al levantarse -¡D-D-Debo irme!- huyó lo más lejos posible, todos contemplaron lo ocurrido.

Vivian escapó lo más que pudo, su cabeza le provocaba un intenso dolor que no le dejaba pensar las cosas con claridad. No sabía que hacer. Avanzó lo más que pudo hasta caer inconsciente en el piso. Todo se tornó blanco...¿sería su fin acaso?...