Perdón por el retraso, pero al fin me hice con el tiempo y pude terminar.
Espero que les guste el resultado. Y como lo prometido es deuda, quedo más largo que el anterior.
Capitulo 2°
Peticiones
-No Ron, lo estas haciendo todo mal-la alterada voz de Harmione, reprendiendo una ves más a Ron, saco de sus cavilaciones a Harry, que dormitaba en uno de los sillones cercanos al fuego.-si le presentas ese trabajo a Snape tendrás asegurado un asiento junto a Neville en sus clases.
Harry sonrió ante la amenaza, sabía que para Ron sentarse junto a Neville en una de las clases de pociones seria terrible, porquen el profesor Snape parecía tener un rencor especial contra el descuidado chico y todo el que se sentara junto a el.
-si no me quieres ayudar, almenos deja de regañarme-Respondió Ron de mal modo. Se le veía muy alterado. Llevaba dos horas trabajando en un ensayo sobre pociones curativas que Snape le había dado como castigo por lanzarle a Malfoy un frasco con una poción para hacer crecer el cabello.
Una sonrisa maliciosa se dibujo en sus labios. El pelo de Malfoy había, fácilmente, alcanzado los dos metros de largo, antes de que corriera rumbo a la enfermería envuelto en su rubia cabellera.
-pues note voy a ayudar-respondió Hermione testarudamente-y si quieres terminar para mañana será mejor que te des prisa-añadió con frialdad, sentándose junto a Harry.
Harry miro a Ron, que murmuraba cosas para si, y vio que, de los dos pergaminos que tenia que tener redactados para la mañana siguiente, antes del desayuno, solo llevaba las tres cuartas partes del primero.
-¿realmente piensas dejarlo hacer todo el trabajo solo?-pregunto Harry a Hermione en un susurro, para que Ron no pudiera escucharlos.
-claro que no-respondió ella dejando asomar una sonrisa maliciosa-pero quiero que sufra un poco.
Harry la miro arqueando una ceja.
-eres mas cruel de lo que pensaba-dijo, sorprendido del comportamiento de la chica.
Hermione se rió por lo bajo.
-pero no le digas a nadie-murmuro, mirando a Ron de reojo-me gustaría guardarlo como secreto.
Harry extendió los brazos y, tomándola por la cintura, atrajo a Hermione hacía si.
-valla-dijo Harry sonriendo.-así que mi querida hermanita tiene madera de bromista después de todo.
Hermione se acurruco en su pecho con una sonrisa cómplice en los labios. Siempre sonreía de la misma manera cuando Harry la llamaba así, algo que Harry agradecía mucho, al menos ya no se le ponían los ojos vidriosos a causa de la emoción.
Ron los quedo mirando receloso, aun no se acostumbraba a las muestras de cariño que se entregaban esos dos.
Harry y Hermione rieron al ver la cara de su amigo, el, al igual que la mayor parte del alumnado, pensaban que existía algo entre ellos.
-continua trabajando-le dijo Harry, comenzando a acariciar el cabello de Hermione-y si te portas bien puede que Hermione se apiade de ti y te ayude, ¿no es así?-pregunto, dirigiéndose a la chica, que se encontraba con los ojos cerrados y sonreía ampliamente.
-tal ves lo medite-respondió ella-pero por el momento aquí estoy muy cómoda.
Ron bufo, parecía molesto. Harry no lo culpaba, eran más de la una de la mañana y ellos tres eran los únicos en la sala común. Ellos y Crookshanks, que descansaba placidamente cerca al fuego.
Luego de media hora en la que Ron no hizo nada más que escribir y desechar ideas, Hermione suspiro.
-esta bien-le dijo al pelirrojo-descansa un poco, yo le pondré orden a el desastre que tienes en la mesa.
Ron se hizo el desentendido, y continuo trabajando como si no hubiese oído a Hermione.
-si no te levantas ahora mismo te juro que voy a dormir-amenazo Hermione que se había puesto de pie y miraba a Ron con el entrecejo fruncido.
Ron la miro un momento, desafiando la mirada de la chica, pero luego sonrió y se puso de pie, enseñándole el asiento con un gesto de la mano, haciendo una pequeña reverencia.
-pero que tonto-dijo Hermione sentándose rápidamente, para que Ron no pudiese apreciar el leve color rojo que habían adquirido sus mejillas
Ron bostezo a sus anchas y se sentó junto a Harry.
-¿Por qué no vas a acostarte?-le pregunto sin entender el porque del desvelo de Harry.
-porque puedes necesitar mi ayuda para el trabajo-dijo Harry como obviando la situación.
Ron estallo en una sonora carcajada. Ambos sabían que con Hermione bastaba y sobraba para hacer un trabajo de pociones, auque se tratara de una materia que recién comenzaban a ver en clases.
-shhh-silencio Hermione exasperada-intenta no hacer tanto ruido, compórtate como prefecto-Ron movió la cabeza, aburrido al escuchar la alterada voz de Hermione, pero se limito a asentir y dejar de reír inmediatamente.
Crookshanks se incorporo arqueando la espalda, muy molesto con Ron por haberlo despertado.
-Si Snape te castiga para que no puedas asistir a el entrenamiento del sábado, tendré que hablar con el-dijo Harry, desanimado ante la sola idea de hablar con su profesor de pociones. Aunque sabía que era necesario que Ron entrenara todo lo posible para el partido que se avecinaba.
-No creo que pueda castigarme luego que vea el gran trabajo que realizare.- respondió Ron despreocupadamente apuntando con su dedo pulgar a Hermione a sus espaldas.
Un ruido de pasos alerto a los tres jóvenes que no se encontraban solos.
¿Qué hacen ustedes aquí?-pregunto un vos femenina.
Ron Hermione y Harry vieron, a los pies de las escaleras de las chicas, a Ginny, que bajaba envuelta en una gruesa cobija que dejaba asomar únicamente su cabeza.
-¿nosotros?-pregunto Ron-¿Qué haces TU aquí?-dijo, poniéndose de pie y avanzando, para encarar a su hermana menor.
Ginny pasó a su lado sin prestarle la menor atención, y se sentó en un sillón frente a Harry, que le sonrió a modo de saludo.
-¿no podías dormir?- le pregunto, preocupado.
-así es-respondió Ginny moviendo energéticamente la cabeza de arriba abajo, haciendo que su rojo cabello se moviera de una manera que provoco que Harry sintiera el estomago agitarse rápidamente.
-esa no es razón para venir a la sala común a las dos de la mañana-se quejo Ron, molesto por la indiferencia que le mostraba su hermana.
-pero ustedes están aquí-rebatió Ginny molesta.
-pero nosotros estamos trabajando-contesto Ron en tono de dar por terminado el asunto.
-perdón-la voz de Hermione sonaba alegre-¿estamos?-pregunto con inocencia.
-bueno, nosotros estábamos trabajando-respondió el pelirrojo en apuros-¿no es así Harry?
-pero mi trabajo lo termine hace mucho-dijo Harry, apuntando los dos rollos de pergamino que componían su trabajo de transformaciones, que reposaba tranquilamente en una de las mesas.
-pero...pero...-balbuceo Ron quedándose sin argumentos.-pero mañana hay clases, así que de todas formas tienes que irte a dormir.
-Ron-intervino Hermione exasperada-mañana Ginny no tendrá clases hasta pasadas las dos primeras horas, recuerda que ayer Hagrid salio de viaje, y no hay reemplazo aun.
Ron miro con recelo a Hermione por apoyar a su hermana, luego miro a Ginny que sonreía mostrando los dientes, feliz por saberse ganadora del pleito, miro a Harry en busca de apoyo, pero este solo atino a encogerse de hombros.
-esta bien-musito, dándose por vencido-pero tendrás que acostarte cuando nosotros nos vayamos-anuncio, retomando su lugar junto a Harry.
-claro hermanito-respondió Ginny, acomodándose en su sillón.
-¿en que esta trabajando Hermione que le toma tanto tiempo?-pregunto con curiosidad un rato después Ginny.
-me esta ayudando con un castigo-Respondió Ron sin darle mayor importancia.
-¿te castigaron?- Pregunto su hermana, dejando asomar una sonrisa malvada en sus labios-¿y yo podría conocer el motivo? mamá estaría muy interesada.
Ron se puso pálido al oír eso, y miro a Ginny como si lo hubiese amenazado de muerte.
-tu no...no serias capaz...-murmuro. Anonadado.
-lo que sucedió-comenzó Harry- fue que Malfoy llamo a Hermione "Sangre sucia" cuando la clase de pociones estaba por terminar, y Ron salio en su defensa, lanzándole en la cabeza una...
Para cuando termino, Ron y Hermione estaban rojos como tomates, porque Harry había resaltado todas aquellas partes en las que Ron defendió los intereses de Hermione, haciéndolo parecer como una especie de héroe.
-Ron-dijo Hermione cuando Harry concluyo. por alguna razón no miro a los ojos al chico cuando le hablo.-ya esta listo, ahora tienes que terminar de transcribir, te deje todo lo mas ordenado que pude y marque lo que tienes que copiar esta todo sobre la mesa.
-gracias-Ron tampoco la miraba a los ojos, por eso no vio a Hermione ponerse de pie y pasar por detrás del sillón en que se encontraban el y Herry.
-Creo que será mejor que me valla a dormir, ya es muy tarde y no quiero llegar retrasada a mi clase de Artimancia-las palabras salían apresuradamente de su boca mientras caminaba sin voltear rumbo a las escaleras que la llevarían a su habitación.-buenas noches.-añadió antes de perderse de vista.
-bien-dijo Ron suspirando cuando Hermione ya se había ido-será mejor que termine cuanto antes.
Harry bostezo despreocupadamente mientras Ron tomaba la pluma y la empapaba en tinta, desenrollando un pergamino nuevo.
-¿mañana tendremos entrenamiento de la AD?-le pregunto Ginny a Harry cuando Ron ya llevaba medio pergamino redactado.
-no lo se-admitió Harry pensando en la idea-es Hermione la que se encarga de los horarios, pero supongo que como Hagrid no esta podríamos hacer una sesión improvisada.
-nosotros tenemos libre mañana las horas después de la cena-dijo Ron, sin voltear, desde la mesa donde escribía-y a esa misma hora los alumnos de 7° estarán desocupados, el problema seria con los menores, como Ginny o Luna.
-así es-corroboro Harry, asintiendo-pero de todas formas podemos empezar sin ellos, ya que solo estarán una hora ocupados, y eso no es mucho. ¿Qué te parece Gin?
El rostro de Ginny se torno color carmesí cuando escucho que Harry la llamaba "Gin"
-si, si estará bien-atino a decir, ocultando su rostro en la frazada.
-¿estas bien?-pregunto Harry, ceñudo por el comportamiento de la chica.
-si-respondió Ginny muy rápidamente-se...será mejor que me vaya a dormir.-y, sin decir nada más, salio lo más rápidamente que pudo de la sala común, subiendo rápidamente a su habitación.
¿Qué les sucede a esas dos? pensó para si.
-¿Cuánto te falta?-Harry le dirigió una mirada apremiante a su amigo, estaba a punto de dormirse ahí mismo.
-ya...casi.... ¡TERMINE!-dijo Ron de manera triunfal-esa Hermione si que sabe hacer bien los deberes.
-al fin-dijo Harry incorporándose del sillón.
-Snape no podrá decirme nada cuando le presente esta obra de arte-dijo Ron enrollando su trabajo.
Harry tomo de la mesa su trabajo para McGagonagall y subió, junto con Ron, a su habitación.
Dentro, sus compañeros de clase dormían apaciblemente. Harry se acerco a su cama y dejo el trabajo en su mesita de luz.
Lo más rápido que pudo, se cambio de ropa y se metió en la cama, cubriéndose con las cobijas y dejando sentir el sueño adueñarse de su cabeza adormilada.
-Buenas noches-oyó murmurar a Ron, pero no tuvo tiempo de responder, porque inmediatamente pudo escuchar el sonido de sus ronquidos.
-¡¡HARRY!!-el estruendoso grito de Ron hizo que Harry por poco se cayera de la cama.-¡¡VAMOS A LLEGAR TARDE; DATE PRISA!!-Bramo.
Harry tardo unos segundos en entender a que se refería Ron, pero cundo lo hizo se cambio de ropa mas rápido de lo que lo había hecho en toda su vida.
Tomo su mochila, que había arreglado el día anterior, y salio como una flecha junto a Ron rumbo a clases.
-dile a la profesora que no tardare-le dijo Ron antes de virar en una esquina. El aun tenía que entregarle su trabajo a Snape.
Harry corrió lo más rápido que pudo, tenia muy poco tiempo para llegar a la sala de adivinación antes que diera comienzo, si no lo lograba, tendría que presentar tanto sus excusas como las de Ron.
Cinco minutos y dos regaños después (proporcionados por Filch y McGagonagal) Harry había logrado llegar junto a la clase de Adivinación. La profesora Tralewney aun no abría la trampilla.
-Harry te ves agotado-le dijo Parvati, acercándose preocupada.- ¿te sientes bien?-pregunto tomándolo de la mano.
Harry la miro con curiosidad preguntándose desde cuando Parvati le tenía tanta confianza.
-estoy bien-respondió, separando su mano de la de la chica-gracias por preguntar.
Parvati bajo la cabeza, dolida, justo en el momento que la profesora Trelawney habría la puerta y los instaba a subir.
-profesora-la llamo Harry, mientras sus compañeros tomaban haciendo.
-dime-Respondió la profesora de forma cortante, siempre que se dirigía a Harry era de la misma forma, al parecer se había dado cuenta de que el muchacho no prestaba atención a sus clases.
-eh...se trata de mi amigo Ron Wesley-aclaro Harry-el llegara tarde porque el profesor Snape pidió verlo a esta hora en su salón.-la profesora Trelawney lo miro con ojos inquisidores antes de responder.
-esta bien, siéntate-dijo al fin.
Harry la obedeció, tomo haciendo junto a Neville, y se preparo para pasar la siguiente hora aparentando escuchar algo de lo que se decía.
Quince minutos después llego Ron, se le veía muy cansado, pero parecía satisfecho.
-no tendré ningún problema para asistir a las practicas-anuncio sentándose junto a Harry y Neville-Snape tuvo que aceptar mi trabajo a regañadientes, pero no añadió detención alguna.
-estupendo-dijo Harry en voz alta-ya estaba pensando en lo que tendría que decirle.
-ahora solo necesito que McGonagall califique mi trabajo como excelente y que no tengamos problemas con la junta de la AD para poder calificar mi día como perfecto.-Ron parecía un niño pequeño hablando de lo que haría en su cumpleaños.
-¿tendremos junta hoy?-pregunto Neville muy interesado.
-así es-corroboro Harry-hoy en la tarde estaremos libres durante dos horas, así que pensé organizar una pequeña lección.
-estupendo-la voz de Parvati les llego desde atrás, Harry la miro a los ojos y ella desvió la mirada, azorada.
Ron los miro a ambos y se rió, intentando hacer el menor ruido posible.
Harry lo ignoro y se dedico a seguir poniendo atención a la clase.
Ron escondió la cabeza tras su libro de adivinación para poder bostezar con más tranquilidad.
-¿Cuánto queda para que termine la clase?-pregunto, más para si que a Harry.-McGonagall nos regañara por llegar tarde.
-no fue culpa nuestra-respondió un distraído Harry-ella entenderá......-de pronto el rostro de Harry tomo un color pálido, y miro a Ron, horrorizado.- e...e....el trabajo, no lo guarde en mi mochila-tartamudeó- lo olvide en la habitación.
Ron pareció a punto de estallar en carcajadas, pero al ver el rostro preocupado de su amigo, prefirió adecuarse a las circunstancias.
-Será mejor que hagas algo compañero-le dijo poniéndole una mano en el hombro.-o McGonagall seria capaz de dejarte castigado.
Harry palideció aun más, busco rápidamente a la profesora con la mirada para poder hablar con ella.
La profesora Trelawney se encontraba sentada en su gran sillón, envuelta por los vapores que inundaban la sala. Harry respiro hondo y se puso de pie, avanzando con decisión, lo que decía Ron era cierto, McGonagall seria capaz de castigarlo y mucho más.
-eeee...¿profesora?-pregunto, sorprendiéndose d su propia voz, casi había sonado tímido. la profesora Trelawney lo miro con sus ojos aumentados por los anteojos que traía.-es que olvide un trabajo que tengo que presentar en mi siguiente clase, y quería saber si usted me permitiría ir por el.
-¿para quien es el trabajo?-pregunto ella. Harry estuvo a punto de decir que el trabajo era para la profesora Mcgonagall, pero no estaba seguro si al escuchar ese nombre la convencería- para la profesora Sprout-dijo al fin.
-en este momento voy a dar un anuncio-le dijo incorporándose-pero si quieres ir por tu trabajo, esta bien, luego tus compañeros te pondrán al corriente.
Harry asintió, agradecido, y, tomando su mochila se encamino lo más rápido que pudo rumbo a su sala común.
Cinco minutos después, jadeando, se movía entre los estudiantes que ya comenzaban a salir de sus respectivas clases.
-cabeza de cerdo-musito, apoyándose en sus rodillas para recuperarse del cansancio al llegar frente a la dama gorda.
El retrato se movió, dejando a Harry entrar a la sala común. Un grupo de gente se aglomeraba frente al tablón de anuncios, murmurando emocionados.
Harry no les presto atención, tenia demasiada prisa para preocuparse por eso.
Subió a su habitación a toda velocidad, se acercó a su cama e inspecciono su mesita de luz. Ahí estaba tal y como el lo había dejado. Lo tomo sin demora y retrocedió lo andado.
-Harry-pregunto una voz cuando entro a la sala común-¿Por qué no estas en clases?
Harry volteo para encontrarse con una preciosa cabellera de color rojo.
Harry levanto el pergamino a modo de explicación.
-lo olvide-confeso.- ¿y tu que haces aquí?-quiso saber.
-ya sabes-contesto Ginny lanzando una fugas mirada a algunas de sus compañeras que la miraban-Hagrid.
-a es cierto-recordó Harry dirigiendo la mirada a algunos de los chicos que aun inspeccionaban el tablón.- ¿Qué es lo que leían?-pregunto.
-es el anuncio de la fiesta-Ginny bajo la vista a sus zapatos.
-¿fiesta? ¿Que fiesta?
Ginny lo miro sin comprender.
-la fiesta-dijo como si fuese lo más obvio del mundo-la fiesta que se realizara una semana antes de navidad.
Harry se sorprendió mucho con la noticia, pero supuso que esa era la noticia que había mencionado la profesora Trelawney.
Los ojos de Harry y Ginny se encontraron por un segundo, Harry pensó que nunca había visto una mirada mas hermosa que aquella.
-¿te gustaría ir conmigo?-pregunto antes de darse cuenta de lo que estaba haciendo.-claro que si tu...tienes pareja...no hay...Hay problema...Es que solo...quería saber si...te gustaría....-su rostro adquirió un tono rojo intenso mientras la cara de Ginny se volvía del mismo color que su cabello.
-cl...cl...claro-articulo Ginny sin despegar la vista de sus muy interesantes zapatos-será un...Placer...
-ge...ge...genial-Harry se sentía como el chico más estupido del planeta, pero a la ves el más afortunado. Podría asistir al baile con Ginny y no tendría que sufrir nada de lo que había sufrido el baile de cuarto para encontrar pareja.
El y Ginny se miraron, ambos como tomates, y intentaron dirigirse mutuas sonrisas de satisfacción.
-¿Qué pasara con tu trabajo?-pregunto Ginny notando el pergamino en la mano de Harry.
El chico recordó porque había regresado a la sala común, y sintió como un balde de agua fría le recorría la espalda.
-¡¡McGONAGALL!!-Grito. la clase comenzaría en unos minutos.-tengo que darme prisa.
Ginny estallo en una carcajada, el color de su rostro no había cambiado para nada, pero la reacción del chico la hizo olvidar por un momento su nerviosismo.
Harry sonrió, alegre por la alegría de la chica.
-nos vemos luego-le dijo mientras emprendía nuevamente una frenética carrera para poder llegar a tiempo.
-¿Por qué venias corriendo?-interrogo Hermione cuando llego al salón de transformaciones, había llegado a tiempo nuevamente.
-porque olvido su trabajo en la torre-contesto Ron, permitiéndole a Harry tomar una gran bocanada de aire para recuperar el aliento.
Harry noto que Ron también presentaba signos de cansancio.
-¿estuviste corriendo?-le pregunto cuando ya había recuperado el aliento.
Para sorpresa de Harry, tanto Ron como Hermione se sonrojaron notoriamente, y evitaron mirarse entre si.
-lu...luego de que te fuiste, Trelawney dio un anuncio...y es que en tres semanas más se realizara un baile-explico su amigo entre tartamudeos.
-y luego de terminar la clase Ron corrió hasta el salón de artimancia para invitarme-Hermione parecía encantada de interrumpir a Ron, y relatar ella los sucesos.-y asegurarse que nadie más lo hiciera.
Harry sonrió ampliamente.
-y supongo que tu aceptaste-especulo Harry, esperando que la respuesta fuera afirmativa.
-pues claro-contesto Hermione haciéndose la sorprendida-tenia que premiarlo por haber recorrido medio castillo para buscarme, ese detalle merecía un si.
Harry y ron se rieron con ganas y, aunque Ron parecía muy nervioso, actuaba con bastante naturalidad.
-Harry-lo llamo alguien a sus espaldas.-¿podría hablar contigo un momento?- era Pravati.
Harry asintió y se acerco a ella.
-yo...quería saber si te gustaría venir al baile conmigo-pregunto sonrojándose rápidamente.-es que la profesora Trelawney anuncio que....
-si, Ron ya me lo dijo-interrumpió Harry-lo cinto Parvati, pero ya tengo pareja-anuncio encogiéndose de hombros.
Parvati lo miro a los ojos, su rostro se dividía entre la sorpresa y la desconfianza.
-pero acaban de anunciarlo-dijo. Como creyendo que lo único que quería Harry era deshacerse de ella.
-lo se, pero cuando fui a la sala común me encontré con Ginny, ella me dijo lo del baile y...
-y te invito ¿no es así?-el tono de voz de Parvati era áspero.
-no-aclaro Harry-yo la invite, lo siento.-y, dando media vuelta, regreso con sus amigos.
-¿Qué queria?-pregunto Ron con picardia.
-invitarme al baile-contesto Harry lacónicamente.
-¿iras con ella?-Hermione miro a Parvati con el entrecejo fruncido.
-no, le dije que ya tenia pareja.
Ron se hecho a reír con ganas, estaba claro que pensaba que era una excusa para librarse de la chica, pero hermione lo miro inquisidoramente.
-¿con quien iras?-la risa de Ron se detuvo en seco, y miro con curiosidad a su amigo.
-Ginny-Harry pudo sentir la sangre salir disparada hacia sus mejillas.
Antes de que ninguno de sus dos amigos pudiera decir nada, la voz de la profesora McGonagall resonó como un látigo, ordenándoles entrar.
-creo que con eso estará bien por hoy, lo hicieron muy bien-Harry estaba satisfecho, había sido una cesión estupenda, incluso Neville había logrado dominar su Patronum.-lo mejor será que volvamos a nuestras salas comunes.
Seamos callo al suelo, rendido.
-al fin, creí que no nos dejarías descansar ni un segundo, realmente te estas volviendo un maniático por la practica.-hubo algunas risas, pero todos parecían compartir esa opinión.
-algún día entrena en el equipo de quidditch con Harry como capitán y sabrás lo que es maniático- dijo Ron, respirando agitadamente.
Las risas se repitieron mientras el grupo comenzaba a despedirse.
Parvati pasó cabeza gacha delante de Harry, quien recibió la mirada de reprobación de su hermana Padma y su amiga Lavander.
Suspiro, resignado, viendo pasar a Luna, quien cada ves que veía a las tres chicas, dejaba escapar una risita.
-Harry ¿puedo hablar contigo?-Harry miro a su derecha cuando estaba por salir de el salón, la persona que lo llamaba era Ginny, quien parecía triste por alguna razón.
-ustedes adelántense-les dijo a Ron y Hermione que se detuvieron a su lado- los veré en la sala común.
Hermione tomo a Ron por el brazo y lo alejo de la escena.
-dime-dijo sonriendo nervioso a la chica de cabello rojo fuego.
-es sobre el baile, Harry lo siento mucho pero no podré acompañarte, perdón.-dijo ella apresuradamente, y luego con mucha prisa se volteo y corrió pasillo abajo, descendiendo por las escaleras.
-Ginny-la lamo Harry desconcertado, corriendo tras ella.
Harry no podía comprender cual era el problema, ella parecía tan feliz al momento de responder que lo acompañaría, que nunca se le paso por la cabeza la existencia de algún problema. Pero fuera cual fuera, estaba decidido a averiguarlo.
Harry recorria los pasillos a toda velocidad, intentando dar alcance a la velos chica. Estaba seguro de que la perdería hasta que noto que camino tomaba ella: se dirigía a los terrenos.
Unos minutos después se dio cuenta de que tenía razón.
Eran más de las ocho y el viento en las afueras del castillo golpeaba muy fuerte. Harry busco con la mirada hasta que dio con lo que buscaba. Ginny sentada en la orilla del lago con la cabeza hundida entre sus brazos.
-Ginny-le dijo cariñosamente cuando se le acerco-¿estas llorando?
-vete de aquí Harry-dijo ella con voz angustiada-ya te dije que no podría ir contigo.
-¿pero por que razón?-quiso saber el chico-¿Qué problema tienes?
Ginny lo miro a los ojos.
-yo...yo...-murmuro, mientras Harry se sentaba junto a ella.-yo no tengo vestido-soltó al fin, avergonzada.
Las carcajadas de Harry resonaron en todas direcciones dado el silencio que cubría el lugar, Ginny le dirigió una mirada de indignación.
-si te parece graciosa mi...
-no me parece graciosa-interrumpió Harry recuperando la compostura-pero si lo único que necesitas es un vestido yo puedo regalártelo.
El rostro de Ginny se sonrojo aun más.
-jamás podría aceptarlo-dijo con calma, sus ojos reflejaban decisión.
-pues tómalo como mi regalo de Navidad-arguyo Harry sonriente-de todos modos tenia que regalarte algo, y prefiero que lo escojas tu.
Ginny lo miro, sorprendida.
-tu ¿harías eso por mi?-sonaba muy emocionada.
Harry revolvió el cabello de la chica con una mano, sonriendo.
-¿Qué crees tu?-le pregunto.
Los ojos de Ginny se anegaron con rapidez. Y con un Harry se lanzo en los brazos del chico llorando en su hombro, agradecida.
Fin capitulo 2°
Espero no tardarme tanto en el siguiente capitulo.