Capitulo 10


Perdón por semejante retrazo, el siguiente capitulo ya esta casi terminado, así que no tardare mucho en actualizar.

Este es el penúltimo capitulo, así que si quieren pueden leer el fic en orden cronológico:

Capítulos:

2-4-6-8-10-1-3-5-7-9

así que solo faltaría el capitulo 11 o.O


De ojos y victorias.


Ginny abrió los ojos con pereza, no sentía ningún deseo de levantarse tan temprano, se estaba realmente bien así, cubierta por las cobijas y alejada de ese odioso frío.

Suspiro, sabía que debía bajar a desayunar pronto, hoy enfrentarían a Revenclaw en Quiditch, y la "cazadora estrella" del equipo no podría quedar fuera; No quería ni pensar en lo que le diría Harry si llegaba tarde…

Harry…

Una gran sonrisa le ilumino el rostro y se sintió invadida por una energía renovadora que la impulsaba a reír, era como si alguien la hubiese despertado a la mitad de la noche y ahora se encontrara completamente desperezada, lista para hacer cualquier cosa y enfrentar todo obstáculo que se le interpusiera.

Soltó una pequeña carcajada sin aparente motivo y se incorporo en la cama completamente despierta, sin la menor señal de modorra.

Tomo su bata y se puso de pie. Busco su equipo y entro al baño, del que salio completamente lista diez minutos después.

Le lanzo una mirada a sus compañeras, en busca de algún signo de conciencia, pero ninguna parecía ni remotamente cercana a despertar. Meneo la cabeza de un lado a otro y, intentando no hacer ruido, tomo su escoba y salio con paso firme de la habitación.

Llego a la sala común pensando en que hacer para ocupar el tiempo antes de que el resto de la escuela se levantara y bajara al campo para ver el partido de Quidditch, cuando un par de vosees la llamaron, sacándola de su momentáneo trance. Levanto la mirada y se encontró con dos pares de ojos fijos en ella.

Ron, con su equipo ya puesto, le hizo una señal con la mano para que se acercara a el y Hermione, sentados en el sillón más cercano al fuego.

-¿Qué hacen en pie tan temprano?-les pregunto acomodándose en una silla de espaldas al fuego. –no pensé toparme con nadie hasta dentro de un rato.

Hermione le lanzo una fugaz mirada a Ron y luego regreso la vista a Ginny, a quien, con un deje de superioridad, dijo:

-es que necesitábamos hablar de algunas cosillas que no podían esperar-Ginny alzo una ceja y sonrió con picardía, provocándole un leve sonrojo a Hermione, quien se apresuro a añadir-como lo que hiciste ayer con Harry. Cuando regresamos a la sala común lo encontramos medio dormido en el piso, atado de pies a cabeza…

-Pero de mejor humor¿o no?-atajo la pelirroja antes de que comenzaran los regaños.

Ron soltó una carcajada que intento hacer pasar por una áspera tos, cuando Hermione lo fulmino con la mirada.

-por más gracioso que le parezca a tu hermano-dijo la castaña regresando la mirada a Ginny-no puedo creer que hicieras algo como lo de anoche. ¿En que se supone que estabas pensando!

Ginny sonrió tímidamente. No le importaba lo que dijera Hermione; Si Harry estaba bien, entonces no podía haber hecho nada muy malo. Y…ahora que lo pensaba…

-hablando de eso. Ustedes me dijeron que Harry estaba algo deprimido.-Hermione y Ron asintieron-pero cuando hable con el parecía encontrarse muy bien, como si nada en el mundo pudiera preocuparlo.

Su hermano y su mejor amiga se miraron con cara de entendidos, sonriendo ligeramente.

-bueno-murmuro Hermione con tranquilidad.-eso era obvio.

Ron miro a su hermana con un brillo especial en los ojos, como si nunca la hubiera visto en verdad; Sonrió para si, alegre por algún motivo, y se dejo caer pesadamente de espaldas en el sillón.

-¿Obvio¿Qué quieres decir con eso de obvio?-inquirió Ginny luego de un par de segundos, al darse cuenta de que su hermano no le respondería.-si era obvio que Harry se sentiría mejor, entonces ¿Por qué me pidieron que le hablara?.

Ron soltó una carcajada áspera y volvió a incorporarse. Le dirigió a Hermione una mirada interrogativa manteniendo aun una sonrisa en sus labios.

-¿me permites?-pregunto con delicadeza, apuntando a Ginny con la mano.

Hermione inclino la cabeza condescendientemente, sonriendo con gusto.

-por supuesto. No faltaba más.

Ambos rieron sin dejar de mirarse y casi como si se hubiesen olvidado de que Ginny seguía ahí y esperaba que le respondieran.

-OK!-exclamo Ron, esta ves hablándole a Ginny, luego de un minuto entero de intercambiar miradas con Hermione-¿quieres saber por que era obvio que Harry se sentiría mejor?-espero a que Ginny moviera la cabeza afirmativamente antes de proseguir.-pues eso se debe, hermanita (y quiero que sepas que no esperaba que lo notaras), a que desde que Harry se enamoro de ti, cuado estas cerca de el siempre parece recuperar todo su animo y buen humor. Por eso era obvio. Solo tenias que acercártele un poco para que todo rastro de depresión se fuera inmediatamente.

-¿enamorado?-susurro Ginny más para si que para Ron-Harry…¿enamorado de mi?.

Hermione le había dicho que Harry gustaba de ella…y en realidad ni siquiera se lo había dicho, sino solo insinuado…enamorado…eso era mucho mejor a que solo le gustara…enamorado era mucho mejor que cualquier cosa que pudiera pensar en este momento…

-¿Qué esperabas?-la voz de Hermione la saco de sus pensamientos con rapidez.- ¿crees realmente que a Harry se preocuparía por una chica si solo le gustara? Después de todo lo que ha tenido que enfrentar y soportar, era evidente que si llegaba a sentir algo por una chica, solo le daría importancia si fuese algo más que un simple gusto.

Ginny medito las palabras de su amiga un momento, mientras una sonrisa de felicidad se extendía a lo largo de si rostro. ¿Qué otra cosa podía pedir¡Ya lo tenía todo¡Harry estaba enamorado de ella¡Ya no tenía que preocuparse por nada, Ron y Hermione eran los mejores amigos de Harry, así que no podían equivocarse… ¿o si?

-¿Harry les ha dicho todo eso¿Cómo pueden saberlo¿Cómo es que están tan seguros?-inquirió con un evidente tono de desesperación en la voz, mirando expectantes a sus interlocutores.

-bueno…no es algo que Harry hable muy a menudo, la verdad.-murmuro Ron rascándose detrás de la nuca y mirando a Hermione, dudoso.

La chica se encogió de hombros por toda respuesta, ignorando las miradas que Ginny le lanzaba a ella y a Ron alternativamente.

-¿quieren decir que Harry no se los ha dicho nunca?-podía sentir como toda su alegría se transformaba en decepción.

-nos ha dicho que le gustas-afirmo Ron con vehemencia.

-pero no que esta enamorado…

-¡Ay Ginny! Harry no necesita decírnoslo-exclamo Hermione de pronto-solo con verlo…pues… ¿es que nuca te has dado cuenta de?...no, claro, no puedes…

-¿Quisieras explicarte mejor?

-Hermione tiene razón-arguyo Ron antes de que Hermione dijera nada- tu no puedes darte cuenta de cómo se comporta Harry cuando no estas…

-¿Cómo se comporta¿Es diferente cuando no estoy?-Ginny se encontraba cada ves más confundida.

-No es su comportamiento…es más su apariencia.-puntualizo Hermione pensativamente.

-¿Quieres decir más deprimido?

La castaña negó con la cabeza. Ella y Ron parecían no lograr dar con las palabras correctas para explicarse.

-Son sus ojos-dijeron al final, al unísono y se miraron, muy sorprendidos por responder exactamente lo mismo.- ¿Desde cuando lo sabes?-se preguntaron, también al mismo tiempo, y luego estallaron en sonoras carcajadas.

-valla-dijo Ron sonriéndole risueñamente a Hermione-pensé que solo eran ideas mías. Jamás pensé que tu también lo hubieses notado… ¿desde cuando…?

-no estoy segura-respondió la chica intentando recordar-creo que desde principios de tercero, cuando escuchamos aquella conversación en las tres escobas ¿lo recuerdas? Cuando se ocultaba de los profesores…

-Si, si, lo recuerdo-asintió Ron con amargura.-yo lo note en segundo, justo después de que te petrificaran-añadió con un gran escalofrió, aun le costaba soportar el recuerdo de Hermione petrificada.

-¿alguno de ustedes podría explicarme de que rayos están hablando?-quiso saber Ginny, sobresaltando a Ron y Hermione.

-Es algo difícil de explicar Ginny, aunque puede que tu misma lo hayas notado sin haberte dado cuenta, quizás en nuestro cuarto año, cuando se hizo más evidente…y no es para menos…luego de lo de Cedric…-Hermione se sumergió nuevamente en sus pensamientos, olvidándose por completo de la pelirroja.

-¿nunca te has fijado en los ojos de Harry?-le pregunto Ron de pronto. Evitando que Ginny regresara a Hermione a la realidad.

-¿los ojos?-Ginny miro a su hermano como si se hubiera vuelto loco-claro, son…verdes…y muy bellos si me permites añadir.

Hermaione estallo en carcajadas al oir lo ultimo, pero Ron se limito a negar con la cabeza.

-no me refiero a eso... ¿nunca te has fijado que, dependiendo de los estados emocionales en que se encuentre, los ojos de Harry pareces brillar más intensamente que otras veces?

-¿o que, por el contrario, en ocasiones parecen apagarse casi hasta la totalidad?

Tanto su Hermano como Hermione le dirigían miradas interrogativas. Así que antes de preguntar algo más, Ginny decidió pensar en lo que le decían, por disparatado que pareciese.

¿Alguna vez había visto a Harry con la mirada "encendida" o "apagada"…no que ella recordara.

Si, era verdad que cuando había muerto Sirius no parecía muy animado (¿y quien lo estaría?) pero decir que su mirada se había "apagado"…claro que recordaba muy bien que ella misma había pensado en una ocasión que la mirada de Harry parecía haber cambiado…y fue justo después de que regresaron del ministerio…y también luego, en el tren que los transportaba a casa…

Algo de lo que pensaba debió reflejarse en su rostro, porque tanto Hermione como Ron sonrieron satisfechos.

-¿lo ves ahora?-inquirió Ron lanzándole una mirada significativa.-la mirada de Harry nunca miente, siempre puedes saber como esta de animo solo viéndolo a los ojos.

-en nuestro primer año, los ojos verdes de Harry parecían brillar como pequeñas gemas.-dijo Hermione con un suspiro de melancolía.

-pero a medida que pasa el tiempo, su mirada parece apagarse poco a poco…en especial desde lo de Cedric…-añadió Ron lanzándole una mirada a las llamas.

-Pero cuando tu estas cerca todo cambia, parece que el brillo que tenía en años anteriores regresara con energía renovada.

Ginny miro a cada uno sin saber que decir, una mezcla de sentimientos se habían apoderado de su pecho, la embargaba una gran tristeza al pensar en que Harry estaba sufriendo…pero también una inmensa felicidad por enterarse de que podía hacerlo sentir mejor, aunque solo fuera por algunos momentos….

-Harry no necesita decirnos lo que siente por ti, Ginny, para que estemos seguros de que

Esta enamorado.

Los tres se miraron algunos instantes más, sonriendo.

-¡Al fin bajas!-exclamo Ron al verlo llegar a la mesa de Gryffindor para desayunar, acompañado por una explosión de aplausos de los miembros de su casa.-creímos que tendríamos que jugar sin nuestro capitán.

Saludando a sus amigos, Harry se sentó entre Ron y Ginny y alcanzo un tazón de cereales con leche, que comenzó a comer rápidamente.

-no tengas prisa, aun falta para que comience el partido-dijo Ginny mirándolo engullir la comida a toda velocidad-Lo que menos necesitamos en este momento es tener que llevarte a la enfermería con algo atorado en tu garganta.

El equipo se río, Harry tuvo el impulso de replicar que no habría llegado tan tarde si "alguien" le hubiera permitido dormir en su habitación en lugar de en el piso de la sala común, y completamente atado, pero logro contenerse.

-Es que quiero que vayamos a inspeccionar el campo antes de que empiece el partido-respondió, con la boca llena de cereales, tratando de no escupir nada.-Trago, tomo un poco de jugo y miro a su izquierda-ustedes dos ¿han comido algo?- pregunto, mirando detenidamente a Andrew Kirke y Jack Sloper, que se veían especialmente pálidos y nerviosos. Ninguno de los dos parecía poder pronunciar palabra alguna, pero, a su lado, Natalie McDonald hizo un gesto afirmativo con la cabeza, mientras masticaba con dificultad una salchicha, notoriamente nerviosa.

Harry lo comprendía, el, durante sus primeros partidos, siempre se había puesto sumamente nervioso…al menos hasta que se elevaban montados en las escobas.

-¡Muy bien!-exclamo algunos minutos después, dejando su tazón a un lado y mirando a sus compañeros-ya es hora, así que, si ya están listos.-se puso de pie, y junto con el, los otros tres integrantes del equipo.

La mesa de Gryffindor estallo en aplausos, y todo el gran salón los siguió con la mirada hasta que salieron por una puerta rumbo a los vestidores.

Harry ya podía sentir aquella sensación peculiar en el cuerpo que solo le producían los partidos de Quiditch. Le lanzo una breve mirada a su equipo, y sonrío.

Los bateadores Jack y Andrew habían mejorado de una manera sorprendente en el ultimo tiempo, y ni que hablar de Ron, que se había vuelto mucho más seguro de si mismo desde el año anterior. Además estaban las cazadoras, Ginny, Natalie y Katie, las tres sin lugar a dudas las mejores en su posición dentro de la escuela. Definitivamente eran un gran conjunto.

El frió los golpeo con fuerza cuando salieron del castillo y descendieron a los vestuarios. Harry lanzo un pequeño gruñido pensando en que la nieve había escogido un muy mal momento para caer.

-se ve muy hermoso-comento Katie, y Ginny hizo un gesto de aprobación.

-Nos impedirá un despegue rápido-espeto Harry mirando al cielo- y el viento no nos ayudara mucho tampoco…

Katie negó con la cabeza y Ginny entorno los ojos, pero ninguna dijo nada. Una ves dentro de los vestuarios, todos miraron a Harry expectantes. Katie se permitió una pequeña sonrisa: ella llevaba en el equipo el mismo tiempo que Harry y, igual que el chico, podía recordar los discursos motivadores de Word.

-bien-comenzó Harry paseándose frente a sus jugadores.-todos ustedes conocen su posición en el equipo, y ya saben lo que tienen que hacer. Solo háganlo igual que en los entrenamientos y todo ira bien.

"el equipo de Ravenclaw no es un oponente fácil, en especial desde que su sus tres cazadoras adquirieron las Nimbus 2004, pero tengo mucha confianza en que nuestras cazadoras sabrán equiparar el juego con su gran habilidad" –las tres chicas sonrieron satisfechas, Natalie se sonrojo ligeramente y pareció perder algo de la tensión en los músculos-además de que nuestros bateadores- "Jack y Andrew se quedaron tiesos en su sitio-no les harán nada fácil acercarse a los postes"-sonrío y miro a Ron-"custodiados por el portero estrella de la escuela"-el pelirrojo trato de no parecer excesivamente agradecido.

-Y, claro esta, el mejor buscador que haya tenido Hogwarts en los últimos cincuenta años-añadió Ginny, apoyada inmediatamente por Katie y Natalie.

Fuera, el bullicio les indico que los estudiantes ya comenzaban a llegar al estadio. Ron se acerco a la puerta y asomo la cabeza.

-Ya esta todo lleno-anuncio, cargando el ambiente de una ligera tensión.

Antes de que ninguno pudiera decir nada, una agitada muchacha de enmarañado cabello castaño entro corriendo desde la puerta que daba al castillo.

-Chicos…es…urgente…-mascullo Hermione con la respiración agitada, parecía que había llegado corriendo hasta ahí. Se callo un segundo y trago aire, con una mano sobre el pecho.-Es Cho-añadió al fin- luego de que ustedes salieron del gran salón recibió un paquete-explico a el expectante grupo-es su nueva escoba: una saeta de fuego…

-¿Qué?-gritaron todos, menos Harry, que sonrío levemente-

-Genial-murmuro ante la mirada atónita de todos-eso hará del partido algo mucho más interesante.-era la primera ves que podría jugar contra un buscador con una escoba tan buena como la suya. Miro a sus compañeros y con mucha calma añadió:-la escoba de Cho es algo que a ustedes no les afecta en lo más mínimo, así que no se preocupen por eso, yo me encargare de ella. Solo tienen que hacer como en los entrenamientos y todo saldrá bien.

Sus palabras parecieron reanimar nuevamente a sus amigos, momentáneamente atemorizados por la noticia.

-y, si nadie tiene nada más que decir, creo que ya es hora de que salgamos al campo.-opino tomando su escoba-muchas gracias Hermione. Será mejor que te des prisa si quieres ver el despegue.

La chica asintió y, tomando una gran bocanada de aire, se precipito fuera del cuarto en una frenética carrera.

Sin decir una palabra, los 7 integrantes del equipo de Quiditch de Gryffindor salieron al campo de juego.

-¡y aquí llega el imponente equipo de Gryffindor!-anuncio la aumentada vos de Ernie Macmillan, que hacía de comentarista. El sector del estadio designado a Gryffindor estallo en aplausos, aunque fueron mitigados por potentes abucheos provenientes de los Slytherin.

Del otro lado del campo, y encabezados por Cho Chang (que caminaba de tal manera que su escoba se resaltaba claramente), entraba el equipo de Ravenclaw, recibido por aplausos tanto de su casa como de la casa de las serpientes, que parecían dispuestos a apoyar a cualquiera que se enfrentara a los Gryffindor.

-¡Capitanes, al centro y dense la mano!-exclamo Madam Hooch. Harry camino hasta quedar de frente a Cho, que le sonreía coquetamente. Se estrecharon las manos y Madam Hooch comenzó la cuenta.-3…2…1-con un potente silbatazo, los dos equipos se elevaron muchos metros por encima del nevado campo.

Inmediatamente Harry se puso a buscar a la dorada y pequeña Snitch, procurando no perder de vista a Cho.

-Gryffindor en posesión de la Quaffle-escucho Harry que gritaba Ernie-Weasley esquiva una Bludger y se la lanza a Bell, Bell pasa a McDonald, McDonald de regreso a Weasley y… ¡DIEZ A CERO A FAVOR DE GRYFFINDOR!

Harry lanzó una exclamación de júbilo pensando que debían haber marcado un nuevo record en velocidad por marcar tantos. A su lado, Cho gruño sonoramente.

-Linda escoba-afirmo Harry, pasando a su lado con rapidez y plantándose a un costado de uno de los postes de su equipo.

-Gracias-respondió Cho elevándose algunos pies en el aire-es mi regalo de navidad adelantado.

El juego transcurrió a toda velocidad durante otros quince minutos, sin que la Snitch diera señales de vida. Las nuevas escobas del equipo de Ravenclaw les habían traído buenos resultados, y el marcador se encontraba 50-70 a su favor. Aunque Ginny, Katie y Natalie lo hacían estupendamente.

Ron por su parte, se estaba luciendo como nunca. Había logrado parar un número sorprendente de tiros, y los únicos que habían logrado entrar eran jugadas en equipo complicadísimas.

El gran problema por el momento parecían ser los bateadores de Ravenclaw, Christopher Wren y Leigh Teabing, que mantenían a raya en todo momento a las cazadoras de Gryffindor.

-Y Bell en posesión de la Quaffle, pasa a Weasley, regresa a Bell, pase para McDonald, una Bludger la hace perder el balón, recupera Weasley, El portero de Revenclaw, Landon, se acerca para detenerla, Weasley lanza…Punto para ¡Gryffindor¡60-70!

Harry le sonrió a Ginny desde la distancia, y levanto un pulgar en señal de aprobación. Se encontraba a cinco metros por sobre el nivel del partido, con Cho a un lado buscando con ansias la ansiada Snitch.

-y… ¿Ya tienes pareja para el baile?-interrogo la chica de pronto, sin dejar de examinar el campo.

Harry se giro un momento y volvió a cambiar de posición sobre su escoba.

-pues…si. Le pedí a Ginny que fuera mi pareja y acepto-narro. Justo en ese momento Ginny hacía una acrobacia impresionante para esquivar a dos de los cazadores de Ravenclaw que intentaban quitarle la Quaffle.- ¿y tú?

Cho estaba por responder cuando su vista se fijo en un punto cercano al suelo. Harry busco con la mirada que es lo que había visto Cho, y logro divisar un par de diminutas alas volar unos quince metros por debajo de ellos, cercanas al suelo, seguidas un segundo después por Cho, que se había lanzado en picada en busca de la Snitch.

Sin perder más tiempo, apunto su escoba directamente hacia la Snitch y la espoleo, bajando a una velocidad impresionante. Sabía que ahora podría probar quien era el mejor buscador, porque para llegar al preciado y pequeño balón volador era necesario cruzar por entre todos los demás jugadores.

Ya no escuchaba lo que decía Ernie. Toda su concentración se centraba en alcanzar la Snitch antes que Cho. Acelero a todo lo que daba la escoba, quedando codo a codo con la oriental, a su diestra. Ambos hacían todo lo posible por esquivar a los demás jugadores sin perder de vista el balón.

-vamos…vamos…-le susurro Harry a su Saeta- solo un poco más. La Snitch giro violentamente hacia la izquierda de Cho. Harry maldijo para sus adentros y viro lo más rápidamente que pudo (la multitud contuvo la respiración) al mismo tiempo que la muchacha intentaba detenerse.

Ahora era Harry quien tenía la delantera, pero Cho no se quedaba atrás y rápidamente logro pegarse a Harry, aunque algo retrasada. Ambos aceleraron.

La pequeña y brillante Snitch se encontraba a menos de dos metros de ellos, alejándose, Harry y Cho se empujaban ligeramente el uno al otro para ganar terreno. ¡PUM!

Una Bludger paso zumbando a toda velocidad a un costado de Harry, permitiéndole a Cho quedar a su altura. Un segundo después, una segunda Bludger había aparecido tres metros por delante de ambos, y se acercaba a ellos a toda velocidad.

Paso rápidamente junto a la Snitch, apuntando directamente entre Cho y Harry. Pero ninguno quería esquivarla, porque ya solo estaban a dos metros de ganar el partido.

La Bludger se acerco más, Harry pudo oír un pequeño quejido por parte de Cho. Sabía por que, el tampoco quería que un balón le destrozara el rostro…

Un metro…treinta centímetros…

Al ultimo momento Cho viro y la Bludger envistió contra Harry, quien sonrió: si lograba seguir con ese ritmo, luego de pasar a la Bludger solo se encontraría a un metro de la Snitch, mientras que Cho estaría mucho más atrás, porque al virar para esquivar al balón, había perdido una considerable distancia.

Sin ponerse a pensar en lo que hacía, Harry separo su mano izquierda del mango de la escoba, y golpeo con todas sus fuerzas a la Bludger que intentaba derribarlo. Sintió un punzante dolor en la muñeca y escucho lo que seguramente sería alguno de sus huesos romperse. Pero no se detuvo. Alzo la vista y, a muy poca distancia, vio lo que buscaba.

Con un ultimo esfuerzo separo también la mano derecha de la escoba, y se impulso con los pies para lograr acortar la distancia que lo separaba de su objetivo…sus dedos se cerraron alrededor de la pequeña esfera.

-¡SI!-exclamo con júbilo mientras en las tribunas se oían los aplausos de los miembros de la casa de Gryffindor. El silbato de Madame Hooch anunciando el ganador rompió el aire.

Con una sonrisa que le cruzaba toda la cara, Harry aterrizó en el nevado césped todo lo elegantemente que pudo con un brazo roto y el otro sujetando la Snitch, que batía frenéticamente las alas.

-¡Ganamos Harry!-Grito alguien sobre su cabeza. Alzo los ojos y vio como todo el equipo se abalanzaba sobre el, rodeándolo en un tumultuoso abrazo.

-¿tu brazo esta bien?-interrogo Ron con cautela, antes de que la barra de Gryffindor llegara hasta ellos.

-o creo que Madame Pompfrey tenga muchos problemas para arreglarlo-respondió el chico sin darle importancia, aunque con una leve mueca de dolor.

-Será mejor que vallamos a comprobarlo enseguida-puntualizo Ginny mirándolo con severidad-vamos, te acompañare a la enfermería.

Harry asintió obedientemente, y comenzó a seguir a la chica pelirroja por entre la multitud que los había alcanzado para felicitarlos. Ginny, con la varita en su mano, despejaba el camino de cualquiera que pudiera darle un golpe a Harry por error.

-¿no te parece un método algo extremo?-pregunto el chico de anteojos una vez se hubieron alejado un poco de las demás personas, mientras Ginny ponía su varita a buen recaudo dentro de su túnica.

Esta no se altero por la pregunta. Se limito a caminar junto a Harry con determinación, sonriendo ligeramente.

En el trayecto a la enfermería no se toparon con nadie, seguramente todos se encontraban aún en el estadio, o dirigiéndose a sus respectivas salas comunes. Ninguno de los dos hablaba, aunque ocasionalmente se dirigían miradas furtivas.

-y… ¿te duele mucho?-Inquirió Ginny al fin, sin poder dejar de pensar en lo que Ron y Hermione le habían dicho esa misma mañana sobre los sentimientos de Harry.

-¡no!-aseguro el chico, con la cabeza llena de pensamientos de lo bella que se veía Ginny.-ju…jugaste estupendamente…-murmuro, sonriéndole sin dejar de caminar.-definitivamente eres la cazadora estrella del equipo.

Ginny le sonrió agradecida.

-Tú tampoco lo hiciste nada de mal, si me lo preguntas.-opino ella a modo de respuesta –aunque estoy seguro de que hubieses podido derrotar a Cho sin la necesidad de romperte la mano-añadió con una nota de enfado en la voz.-eso fue muy peligroso, podría haberte dado en el rostro.

Harry se encogió de hombros, restándole importancia. Si Ginny lo reprendía por haber hecho eso, no quería ni imaginar en lo que le diría Hermione cuando regresaran a la sala común.

-aunque…si me pidieras mi opinión-hablo nuevamente Ginny, con un tono de diversión.-Creo que valió la pena solo por ver como la pobre Cho se ponía tan triste por la derrota.-un brillo peligroso le asomo en los ojos. Harry sintió un extraño hormigueo en el estomago. Al mismo tiempo que un estremecimiento le recorría la espalda. Sintió el repentino deseo de liberar la pequeña Snitch que aún llevaba aprisionada en la mano y acariciar con delicadeza una de las mejillas de la pequeña pelirroja, solo para comprobar que en verdad existía una chica llamada Ginny Weasley y que caminaba a su lado…quería asegurarse de que aquella chica tan perfecta si era real…

-¿Te has enamorado alguna vez?-la melodiosa voz de Ginny lo saco de sus cavilaciones antes de que se decidiera a tomar una decisión-¿te has enamorado de alguien?

El deseo de acariciarla cambio rápidamente por el de abrazarla y responderle que si, que se había enamorado de la chica más preciosa que alguna vez hubiera existido, y que la tenía sujeta en sus brazos en ese momento…

-una ves-contesto simplemente, evitando mirarla a los ojos-y aún lo estoy.-A su lado Ginny se estremeció ligeramente y sonrió, pero lo disimulo rápidamente cambiando su semblante al de total seriedad.- ¿Y tu?-la pelirroja le lanzo una mirada interrogativa-¿te has enamorado de alguien?-Con un pequeño suspiro, asintió y sonrío nuevamente. Harry dejo entrever una media sonrisa y murmuro- valla que hay chicos con suerte.-Ginny lo miro sorprendida, pero antes de que pudiera hacer ningún comentario, Harry abrió una puerta a su lado, ya habían llegado a la enfermaría y, sin mirarla, le dijo-te veré luego, Madame Pompfrey no tardara en curarme, pero lo mejor será que vallas a la sala común y te unas a la fiesta.

Al cerrar la puerta tras el, Ginny frunció el entrecejo.

-Pero será…decirme eso y luego escapar…y además echarme…-frunció los labios por un segundo para luego sonreír ampliamente.-así que el chico de quien estoy enamorada es afortunado ¿he?-murmuro por lo bajo. Comenzó a caminar dando pequeños saltitos.-así que jugué muy bien…así que si estas enamorado…-se tomo las manos por la espalda, dando saltitos cada vez más rápido y sin dejar de sonreír. –Parece que Ron y Hermione no se equivocaron esta vez…-soltando una carcajada y comenzando a correr por entre los corredores, Ginny se alejo de la blanca y gran puerta de la enfermería. Pensando en su ya muy próxima salida a Hogmeade con el pelinegro de sus sueños, el afortunado chico del que estaba enamorada.


Por favor déjenme una Review!