HOLA A TODOS!

Bueno, al fin pude continuar con esto del fic, la verdad es que esto no ha sido a propósito, un user cuyo nick ahora no recuerdo, ha reportado a una de mis historias por tener yo no se que y no es si no hace a penas medio día que he podido regresar, me siento muy feliz de poder actualizar y responderles todos los magníficos reviews que me han dejado. (Creo que esta es la segunda vez q me pasa me da la impresión de que le caigo mal a unas cuantas personas por aquí)

Loreto W: Jajajaja pues si, en el cap anterior decidí entrarle a seto de una vez (¿no tardé mucho verdad?) bueno, la verdad es que como no considero tener un estilo único ni una originalidad peculiar creo que trato de que mis descripciones sean lo más explícitas posibles para destacar en algo mi fic, la verdad es que te entiendo, a mi me gustó el nombre Akhenatón porque es el nombre que se le dio a un antiguo héroe egipcio que concuerda muy bien con el personaje (no puedo decirte específicamente por qué ya que eso te darás cuenta eb este cap) tiene una cualidad que es la que revelo en este cap sobre akhenatón en común y eso me impresionó mucho, y, bueno Yugi llegará dentro de un tiempo (dudo que sea pronto) pero ya veremos yo nunca tengo un plan definido y no te preocupes, por los fics que he leido tuyos ¡son muy buenos! (y no te creas que a mi esto de escribir me sale fácil ¡Tengo que investigar muchísimo!) bueno sin más espero que te guste el cap.

Eiri Saiyuki: Bueno, aquí he decidido dejar de molestarte, como verás aquí explico claramente quien se muere (es una escena del pasado) y espero de todo corazón que se entienda, y lo de la técnica si se puede hacer…pues…Joey tardó su buen tiempito pero creo que él lo logró ahora yo creo que no podría hacerlo, dicen que nada es imposible si se practica mucho oo aunque yo por más que practique no me sale ni saltar la cuerda) y lo del enojo…si en este cap no te queda claro dímelo y yo trataré de explicarte lo mejor que pueda. Gracias por leerme! XD

Dodo-Doremi-Kaiba: Pues aquí si ya te respondí directo al fic quien es que sale al principio y con respecto a los diálogos bueno incluso yo me hago rollos, pero estoy tratando de hacer que se entienda un poco más en cada cap espero que no pierda el encanto por este detalle, y he entrado desde ya con seth para que las cosas comiencen a ponerse divertidas ¡Ojala te siga gustando!

anya shoryuky: haaaay tranquila amiga, sabes que para mi no hay problema con lo de los reviews, bueno espero con muchas ganas tu nuevo cap (si ya lo publicaste no me he enterado porque no me dejaba publicar como te conté y anduve depre mucho tiempo) bueno sobre los detalles es que trato de saltar mucho para que luego ustedes lo relaciones (muajajajaja) pero espero que eso nos sea un inconveniente para ti ya que se que eres una lectora muy inteligente y astuta para esto, y sobre lo de la continuación de mi amigo secreto no me siento preparada para una secuela, ojala pronto lo esté y te pueda dar una de algún otro fic XD) en fin tarde pero lo publiqué ¡Espero tu respuesta!

Kida Luna: HERMANA! Leí su fic y me ha parecido increíble, en verdad se lo agradezco mucho, tiene ese estilo crudo y dramático muy suyo el cual me gusta y disfruto (no piense en sadismo de mi parte XD) donde golpearon a kura? oo todavía ni entra en el fic! XD bueno yo lo he golpeado pero en mi mente y otra case de golpecitos (muajajaja) pues si fíjese que le quise poner medallitas y todo al cachorrito, es que me harté un poco del estereotipo "perro que no sirve para nada si no para acostarse con kaiba" así que en el pasado le di fama y fortuna, aunque una infancia tortuosa, y sobre la comida de letras, siempre me las como, saben bien con salsa.

innocence taken: me alegra mucho que te gusten los escenarios ubicados en el antiguo Egipto, la verdad es que yo soy una gran fan de ellos y por eso quise escribir uno (me da cosa porque son poquitos) y me alegra que entiendas esto de los cambios de tiempo, la verdad es que la confusión era algo que me preocupaba mucho, y sobre la mente atrofiada por el nintendo ya somos dos, tranquila, aunque me encanta leer los reviews te perdonaré SOLO por esta vez, y Joey yo quería que fuese soldado porque no me pegaba como lo que el quería a demás quería darle honor y fuerza y ya verás que nadie resulta ser lo que quería ser…bueno, no todos, lamento no haber escrito muy pronto pero más vale tarde que nunca y no fue mi intención retrasarme (de hecho no podía hacer nada) ojala sigas pendiente a pesar del retraso.

Capítulo 4:

Oía como el filo de su arma era asestado con fuerza sobre el cuerpo de los atacantes, que profanaban aullidos desgarradores de dolor ante el corte de su carne, al caer sobre la orilla de las dunas los cadáveres sin vida de sus agresores levantaban pequeñas marejadas de arena que se encajaban en sus heridas haciéndole soltar pequeños lamentos incómodos, que intentaba ahogar en su garganta presa de su inmortal orgullo.

Pronto el dueño de la voz que había sentido en la lejanía y había combatido contra los que preparaban su muerte se vio apagada durante unos instantes, sintió los pasos dirigirse hacia el, las cuerdas que apresaban sus manos fueron desechas con un corte bien dirigido de un cuchillo corto, sus muñecas, magulladas antes la presión de las ya nombradas.

Soltó un gruñido molesto y se recargó sobre los brazos de su salvador.

Un hombre de barba mal afeitada, parpados flácidos, hebras sucias y castañas a modo de cabello y mirada cansada se arrodillaba frente a su amigo con el fin de ayudarlo a levantarse, de sus ojos resplandecían ese brillante color verde, aclarado bajo el sol el cual, reflejaba con tristeza el maltratado cuerpo del ojiazul.

Akhenatón: nuevamente me has salvado sobek ya me siento como una campesina de pocas artimañas y agilidad nula.

El hombre, silencioso, aunque con una pequeña sonrisa divertida ante el comentario de su amigo sacó de su bolso una pequeña botella y le llevó el agua a los labios de su amigo, los cuales, plagados de cortes y roturas la agradecieron con gentileza arrebatándole al frasco hasta sus últimas gotas, el liquido recorría lo que quedaba e su cuerpo reconfortándolo casi de manera milagrosa.

Sobek: Calla Akhenatón, tus heridas son profundas, te llevaré a mi hogar, ya he llamado a algunos médicos. A demás, no tienes idea de lo que son capaces esas campesinas que tú nombras.

Akhenatón hizo un gesto incomodo y alzándose para evitar teñir a su amigo de aquel viscoso líquido carmín lo sujeto con fuerza insospechada de su armadura toscamente labrada.

Akhenatón. No me hables del futuro cuando aun no conozco los acontecimientos del presente, dime mi buen amigo ¿Qué ha pasado con Heribor? ¡Por favor, dime que mis heridas han ayudado a debilitarlo, dime, que mi sangre no tiñe estas arenas en vano!

El mayor le dedicó una mirada seria, con un deje de tristeza imposible de ocultar o percibir, carraspeo un segundo, dudando, musitó un susurro silencioso y colocó una de sus manos en el hombro de su amigo.

Sobek: Akhenatón, sería incapaz de mentirte, y mucho menos darte ánimos cuando en verdad no vale la pena darlos…Heribor no solo está con vida y mantiene su poder, si no que ha conseguido lo que tu tanto has deseado Akhenatón…el tiene un heredero..

Los brazos del ojiazul cayeron pesados sobre la arena, su carne se volvió dura, sus músculos se tensaron, su mirada como siempre perdida, presa del fulgor de aquel pálido color azul y su aspecto, ahora más moribundo que nunca, y sin embargo se veía incluso ahora orgulloso.

Akhenatón: Sobek, no entiendo, no es posible…sabes bien que Heribor está maldecido al igual que yo, sin la capacidad de ofrecerle a los dioses un hijo…no puede haber nacido su primogénito, me estás mintiendo.

Sobek enternecido con la imagen derrotada de su amigo, sintió un sabor amargo en su paladar y un estremecimiento en sus entrañas al estar en la necesidad de darle tan mala noticia a aquel que su vida pendía de un frágil hilo.

Sobek: No Akhenatón, sabes que sería incapaz de ello…Heribor ha comprado uno de los mejores esclavos de Egipto, un niño sano y fuerte, maduro e inteligente y lo ha adoptado ofreciéndoselo a los dioses, incluso, le ha dado el nombre de Seth…es su hijo Akhenatón, y el pueblo lo reconocerá como tal, y será tratado como lo que es, siguiendo los pasos de su padre…

Akhenatón se desplomó sobre el pecho de su amigo castaño, el dolor de las sentidas jamás se sintió tan agudo como en aquel instante, el calor de la sangre tan sofocante y el ardor de sus llagas tan enloquecedor, todo se tornaba devastado y las esperanzas eran derrumbadas como telones frágiles ante las grandes ventiscas del desierto.

Akhenatón: no tendré fuerzas para luchar contra su descendencia…

Akhenatón reparó nos instantes sus ultimas palabras desprendidas de sus labios casi de a modo de gemido y posó una de sus ensangrentadas manos sobre los hombros de su amigo.

Akhenatón: Si aquello ha sido válido para Heribor entonces yo también adoptaré a un esclavo como hijo, le enseñaré de la manera más dura y sufrirá todos los entrenamientos que me han hecho el guerrero que hoy soy. será vanagloriado incluso por pueblos lejanos y su sangre no será egipcia al igual que la mía nunca lo fue, se criará sabiendo que yo no fui su padre real pues quiero ganarme ese titulo y no nacer con el, seré su amo, su maestro y su padre, y mi descendencia, y la de heribor lucharán, terminando mi hijo con lo que yo no he podido lograr.

Y así quedó sellada la promesa de Akhenatón, pasaron varios meses y Akhenatón buscaba con desesperación a aquel que su sangre no fuese egipcia y sus amos jamás le hubiesen infundados aptitudes guerreras, buscaba al más hermoso y envidiado, quien sabe si tal vez frágil, y encontró, un día, en un mercado nocturno, oyó su nombre y entendió, que aquel hermoso niño, cumpliría su papel, como guerrero máximo de Egipto.

Jounouchi y Seth, seguirían sus pasos, al igual que sus ancestros lo habían hecho, y la batalla, debería continuar, tal vez, durante muchos años…convirtiéndose, en el abad de su familia en muy poco tiempo…

(POV de Joey)

Refulgentes destellos adornaban el torrente diáfano que se sumía en la oquedad de la noche, Joey se estremecía del frío lanzando múltiples tosidos ahogados, escupiendo agua desde el fondo de sus magullados pulmones desbordantes de líquido, entrenando sobre una roca que sobresalía de entre la interferencia del oasis y la cascada recibiendo por parte de esta, la presión de sus golpes mientras intentaba, casi en vano, mantener el equilibrio de sobre la resbaladiza superficie.

Terminó pues cayendo nuevamente al pequeño lago, Akhenatón ya cansado y un tanto preocupado por el exceso de agua que había recibido sus pupilo, le indicó que se acercase, el rubio, entre tanto, dando fuertes respingos y tiritando salió del agua con sus harapientos ropajes escurriendo y su cabello empapado.

El mayor sacó de una pequeña maleta una piel de antílope, de esas raras de ver en Egipto, y colocándose tras del joven le infundió un profundo abrazo entrelazando sus manos en su cintura y ciñendo la piel al cuerpo del niño mientras descansaba en su hombro, tratando así de infundarle parte de su calor corporal.

Joey, tiritando, se sintió fervientemente reconfortado y dándole escasas y tullidas palabras de agradecimiento a su amo este le selló sus labios entre sus dedos de manera cariñosa y se apartó de el buscando un poco de alimento y bebidas calientes al niño que aunque irrisorio, siempre eran agradecidos con su típico aire divertido.

Estos tratos para con él ya no eran tan ajenos en la conducta de su amo, su apego hacia el rubio había crecido con presta y el, se había encariñado de una manera muy poco usual, si bien no conocía sus intimidades sus consejos y ayuda siempre estaban presentes, a demás sus modales atractivos y porte deslumbrante siempre lo habían cautivado a pesar de ser tan solo un niño y estar acostumbrado a rodearse de gente de belleza envidiable.

Akhenatón, sentándose a su lado nuevamente le tendió unos pequeños trozos de pan fresco y se dedicó a tararear una melodía la cual muchas veces lo había oído tocar en su arpa, en ese instante Joey sintió una extraña paz, aquel sonido, volando a través de los aires, el agradable trozo de pan que tenia placer de poder agradecer a los dioses, y aquel deslumbrante paisaje nocturno que se habría paso en toda la extensión de sus ojos le hacían sentirse vivo y reconfortado.

La voz de su amo era dulce aunque un tanto melancólica, su amo…le gustaba llamarlo de esa manera, Akhenatón hacía mucho ya que le había confiado en darle al libertad en cuanto terminase su entrenamiento, lo que el hombre no sabia es que Joey se había encariñado con el mismo de una manera muy peculiar, al verlo, le nacía un sentimiento entrañable, como el que se le dedica a un padre, a un maestro y…bueno, lo demás no podía saber que significaba.

Akhenatón: has tenido bastantes problemas al inicio de la noche.

Joey se sobresaltó, se había quedado tan embelezado con el sonido de la naturaleza combinado con el de la voz propia de su amo que se había ido muy lejos de la realidad.

Akhenatón le dedicaba una sonrisa llena de dulzura a lo que el niño, emitiendo u agudo sonrojo le respondió lleno de congoja

Joey: me ha costado un poco adaptarme a la oscuridad, señor, sin querer sonar desafiante ni con ánimos de faltarle el respeto ¿Por qué insiste tanto en que los entrenamientos sean de noche? Creo que la luz es uno de los elementos necesarios para que un gran guerrero muestre su potencial, de otra manera ¿Cómo podríamos atacar a nuestro enemigo si no podemos verlos?

Joey notó como un suspiro se desprendía de la imagen cabizbaja de su señor, éste se giró con una expresión fervientemente dolida en su rostro, Joey rápidamente se dispuso a pedir disculpas por el atrevimiento de su comentario pero las frases se mantenían estancadas en su garganta, Akhenatón se aproximo al menor clavando sus ojos pálidos sobre los del menor, aquella mirada que el siempre le había intimidado tanto, aferró sus manos al mentón del pequeño obligando a profundizar la mirada a medida que ambos rostros se acercaban, Joey, nervioso, pudo sentir como un fuerte sonrojo acudió a su rostro, y sin embargo, una fuerza muy superior a la propia le impedía apartar su mirada de aquellos bellos ojos, jamás los había visto como ahora y dudaba que algún otro esclavo lo hubiera hecho jamás, se veían perdidos y nublados, opacos y sin vida, carentes de brillo o movimiento alguno, diferentes a los suyos propios que temblaban al compás de su alma, sus labios se aproximaron mucho más y Joey estaba, comenzando a cerrar su mirada cuando oyó a su amo en un susurro ahogado, y sintió su aliento golpear sus labios vírgenes.

Akhenatón: Eso…jamás ha sido un problema para mí.

En ese momento Joey abrió su mirada con horror, ambos rostros se separaron y Joey advirtió el deje de tristeza en el rostro de su amo, un dolor profundo lo embargó y se sintió amargo, más amargo que el veneno de los lirios, más frío que la brisa que ahora calaba sus huesos, esa mezcla de compasión y dolor que le había dado su amo ante aquella devastadora revelación…jamás lo había imaginado, pero aquellos hermosos ojos, aquella mirada que jamás le había dirigido, era sencillamente inútil, ahora, por fin comprendía la grandeza de su amo, porque sabía, que le había enseñado todo cuanto sabía convirtiéndose en ese poderoso hombre que era a pesar…de ser ciego.

(Pov de Joey)

Joey: y es por eso mi Faraón que se me a ocurrido que ocultando a algunos soldados entre los cardos, y usando una antigua estrategia de enterrar a varios en la arena para atacar sorpresivamente los ha confundido, me atrevo a decir que las tropas de las fronteras persas son bastante torpes, mal dirigidas diría yo, aunque su fuerza es extraordinaria y su disciplina envidiable sus estrategias dejan mucho que desear y ese es su punto vulnerable.

Atemu se reía gozando de buena gana, los comentarios del héroe militar, y pidiendo de manera cortes (cosa que desagradaba enormemente a Seth) que contase con más detalles, puesto que disfrutaba de los relatos de acción y batallas. Seth por su parte se había dedicado a fijarse en otros asuntos, manteniendo sus aires altivos y de vez en cuando haciendo comentarios más por educación ante el Faraón que por designio propio, sin embargo Joey no pudo dejar de notar las miradas furtivas que le dirigía de vez en cuando.

Otogi sin embargo participaba aunque conociendo sus límites en la conversación bastante animado, ofrecía opiniones y hacía preguntas un tanto más explícitas que las del mismo faraón, y se divertía pidiendo detalles superficiales sobre las personas y los lugares de los que se hablaba.

La conversación transcurrió con soltura y agilidad moderadas y el Faraón encantado con la valentía y renombre de su compañero le ofreció quedarse unos días en el palacio disfrutando así de sus exquisitas decoraciones.

Joey le dirigió una mirada dubitativa al castaño el cual había adoptado una expresión incomoda y dirigiéndole la mirada por tercera vez aquella noche, esperaba su respuesta con impaciencia.

Aquello solo podía tener dos interpretaciones o deseaba fervientemente que se quedase (cosa que la veía improbable dado el hecho de su escasa participación aquella noche, y el trato arisco que le había dedicado incluso en presencia del faraón había descargado esta alternativa y adoptado como realidad la segunda.

Joey le dirigió una sonrisa altanera al castaño en respuesta a sus pensamientos, él había aprendido a gozar con incomodar a quienes desagradaba con su presencia, cosa que hacia muchos años su maestro le había enseñado, aparte de su actitud terca y maliciosa desde nacimiento.

Joey: sería todo un honor, mi señor, estaría encantado de poder gozar del privilegio de contemplar por entero su palacio.

Atemu: puedo asegurarte que no encontrarás bellezas semejantes, nuestro pintor real acaba de hacer unos murales magníficos que estoy seguro alguno de mis esclavos personajes te podrá dar un recorrido muy completo.

Joey agradeció de manera formal la invitación y dirigiéndole una mirada al ojiazul el cual había adquirido una expresión incomoda y un tono pálido parecía que seriamente quería Salir de ese lugar, pero por las miradas de impaciencia que le dirigía al faraón era obvio que su obligación real era quedarse junto al mismo.

Más tarde el faraón agotado ya de las amplias charlas y ante la entrada de la noche recordaron que las fiestas no podían ser recibidas por Amón-Ra y retirándose del recinto el faraón le indicó a uno de sus esclavos donde estaba la habitación del rubio.

El espacio en si era deslumbrante, las camas ricamente decoradas, con telas de finos encajes, eran amplias y poco comunes en los palacios donde, extrañamente la modernización de los muebles hogareños siempre era bastante lenta, sin embargo en el palacio esto parecía haber sufrido un amplio ultraje.

Las alfombras bastante elegantes, los adornos y las colgaduras le daban un aire pomposo a la habitación, prosiguió a quitarse su uniforme dejando su espalda al descubierto, las heridas hechas en batallas, cicatrices y manchas de sol cubrían su piel que a pesar de estar fuertemente curtida bajo los rayos solares y había adquirido una tez morena no dejaba de ser suave y apreciable tanto al tacto como a la vista.

Se sentó dudoso, había legado a aquel palacio con tan solo un propósito, propósito el cual estaba siendo frustrado de una manera un tanto, molesta, su actuación aquel día no habría sido la menos apropiada, se había intimidado con la mera presencia del sujeto, lanzó un nuevo suspiro ahogado y buscó entre sus embalajes su más preciado recuerdo, una carta hecha por su amo akhenatón redactándole sus últimos recuerdos…era una pena, hacía tan solo unos meses que le había dedicado sus postrimeros alientos al mundo, al menos al mundo que el conocía.

(Flash Back)

Joey corría airoso a través de los pasillos, había sido citado por su amo hacía ya varias horas, conocía, por experiencias pasadas que no eran muy apropiadas en aquel instante recordar, que su señor, era un hombre muy estricto en cuanto a lo que se refiere a la puntualidad, por todo, se detuvo respirando fatigosamente ante la puerta y tocó a esta por educación.

Recibió a su señor con una amplia sonrisa la cual fue devuelta con igual cortesía, Akhenatón le pidió que se sentase frente a el, Joey obediente lo hizo contemplando todo cuanto se hallaba a s alrededor, desde los instrumentos hasta los cuadros, extravagancias y objetos raros que residían en aquella habitación.

Akhenatón: iré al grano Joey, ayer finalizamos nuestro entrenamiento, por lo cual cumpliré mi promesa, mañana me presentaré ante los representantes sociales del emperador y te daré la libertad.

Joey sorprendido se vio expectante, ante aquella nueva revelación pero, sin poder evitar sentirse un tanto preocupado en el fondo.

Joey: señor, se lo agradezco de verdad, se que no me pudo otorgar mayor privilegio pero…¿Por qué tan pronto?

Akhenatón: Joey…tienes ya 14 años y has cumplido la edad suficiente para entrar en la milicia, he solicitado a los jefes mayores de mi escuadrón unirte, combatirás en mi lugar, y dentro de unos años, cuando logres explotar todo tu potencial y encaminarte al plan que yo te encomendaré en retribución a mis servicios. Partiré a tierras lejanas, quiero conocer nuevos mundos e ir más allá de las fronteras de egipcio, después de eso, poco o nada volverás a saber de mí.

Joey carraspeó, sobrecogido ante los designios de su señor…si en verdad aquello era lo que le deparaba su amo, el le haría caso, después de todo, le había dado lo que nunca tuvo, fuerza, valor…y el amor.

(Fin del Flash Back)

Joey: No le fallaré mi señor…

Plegó la carta que le había dado el que solía llamar su amo y se tumbó entre sus sabanas…el le había jurado a su señor cumplir su promesa sobre cualquier cosa…y eso haría…no importaba…quien se opusiese, Seth no iba a ser un inconveniente para el…NUNCA.