Respuesta a los rewiews:
Daga: Yo también pienso que se me quedan algo cortos… Espero que este capítulo te guste. Gracias por el rewiew
Jean-kate: Sería muy fácil contestar "por que sí y punto" pero no soy así. Ron si lo ha sentido, pero la profesora Trelawney no le dejó ir… Y que Draco lo sintiera… bueno, se me ocurrió de golpe así que ya intentaré (intentaré…) explicarlo en este capi. '¡Gracias por el rewiew!
Elisa: ¡Hey! ¡Holaa! Que alegría que te gusten mis historias. Hasta ahora lo que te enseño te gusta ¿no? XD. Intentaré explicar el comportamiento de Draco en este capi (intentaré…). Gracias por el rewiew!
.:CaRoLiNa:. Y seguirá estando en suspenso, pues es lo que me pedís todos. Gracias por el rewiew.
Selene1981: Soy una malvada, muajajaja…ejem… Que eso, que me alegro que te guste la historia. Gracias por el rewiew.
Aidee: ¿Cómo te dejo con esa duda? Fácil, cojo el teclado y empiezo a escribir. Ya se sabrá que pasará. No en serio… me alegra que te guste. ¡Gracias por el rewiew!
Agus y Moony: Gracias por el rewiew.
Barby-black: Se han agotado los pedidos. Mira, vas a hiperber, buscas en la zona de infusiones, cojes la caja naranja y la compras. Luego, sacas una taza y la llenas de agua. La pones al microondas a 3 minutos. Luego, le pones dos sobrecitos de tila, y esperas a que coja el sabor. Y finalmente, te la tomas (cuidado, que sabe muy mal). XD En serio, gracias por el rewiew.
Capítulo 3: Pequeña lucha
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Admítelo Hermione, Harry ha desaparecido
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Hermione intentó contener el llanto, pero no pudo. ¿Cómo había pasado? ¿Dónde estaba Harry?
Granger, hay que decirle a Dumbledore sobre la desaparición de Potter. – Hermione asintió. Se limpió la cara con su pañuelo y salió de la enfermería seguida por Draco.
Corrieron hacia el despacho del profesor Dumbledore. Después de que Draco casi se matara al resbalarse por las escaleras, llegaron a la gárgola que daba paso al despacho del director. Entonces cayeron en la cuenta de que no tenían idea de la contraseña.
A ver… -pensó Hermione- recuerdo que Harry me dijo una vez que el director siempre ponía la contraseña con el nombre de algún dulce… En fin… ¡Empanada de calabaza!
¡Fallaste! –dijo la gárgola. Hermione puso una expresión entre confusión y irritación.
¡Pastel de Caldero!- exclamó Draco
No, no. ¡Jajajaja!
Euh… ¡Grillos de chocolate!
Por dios niña, vaya cosas que se te ocurren para fallar (n/a: ¿algún problema con mis ideas?�)
¡Plumas de azúcar!- dijo Draco
¡NO! ¡jajajajaja! –rió la gárgola
¡Polvorón de canela!
¡Muggles fuera! Jajajajaja
¡Cerveza de mantequilla!- la gárgola le sacó la lengua en señal de diversión.
¡Ohh! ¡Por favor, déjanos pasar!- exclamó Hermione bastante irritada- ¡Tenemos que avisar a Dumbledore sobre una cosa bastante importante!
Sin contraseña no abro. Muajajajaja
Uuuuuuff- emitió Hermione desesperada- ¡¡¡Déjanos pasar, asquerosa salamandra de nata!!!
Correcto
¿Qué?- dijeron los jóvenes al unísono, mientras la gárgola daba paso a unas escaleras que debían llevar hasta el estudio de Dumbledore. Se miraron para luego subir por las escaleras de caracol que habían ante ellos.
Abrieron la puerta lentamente y entraron algo temerosos. Se sorprendieron al ver el despacho del director repleto de objetos, aunque había algunos que estaban rotos.
¿Qué os trae por aquí? –dijo una voz anciana. Draco y Hermione se sobresaltaron al oírle. Empezaron a hablar apresuradamente- No puedo entenderlos a los dos a la vez. Que hable uno solo. ¿Granger?
Profesor, ¿recuerda el accidente en pociones?
Que Harry fue enviado a la enfermería, eso lo sé.
¡Ha desaparecido!
¿No será que le han dado el alta?- aunque la voz de Dumbledore tenía un deje de preocupación.
Si fuera así, la enfermera no estaría inconsciente en el piso ¿no?- respondió Malfoy.
No puede ser- exclamó Dumbledore. Se levantó de su sitio para salir apresuradamente, junto a Draco y Hermione, hacia la enfermería.
¡Espere!- exclamó Hermione
¿Qué ocurre?- preguntaron Draco y el director a la vez.
¡Tengo una idea! ¡Vosotros investigad! –Hermione se fue por otro pasadizo diferente
¿Qué mosca le ha picado en este momento? –preguntó Malfoy. Pero Dumbledore tenía sospechas…
Purple Phoenix- dijo Hermione. La señora gorda le permitió la entrada. Hermione atravesó corriendo la sala común y fue a la habitación de los chicos. Abrió de golpe el baúl de Harry y rebuscó entre las cosas que tenía hasta dar con el mapa del merodeador. –Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas- el mapa dio su presentación original, pero ella lo abrió rápidamente y buscó el nombre de Harry.- "Harry Potter, Harry Potter, Harry Potter…"- pero no lo encontraba.- ¡Eh! ¡Oh no!- guardó el mapa rápidamente y fue hacia la enfermería.
¡Profesor Dumbledore! ¡Malfoy!- exclamó al tiempo que llegaba.
¿Qué pasa ahora?- preguntó Malfoy. Pero menuda sorpresa se llevó cuando Hermione les agarró del brazo a los dos y los arrastraba escaleras a bajo. – Granger, ¿se puede saber el porqué de tu comportamiento?
Ves sacando tu varita. Harry todavía está en Hogwarts
¿Cómo lo sabes?
El mapa del merodeador ¿verdad señorita?
Exacto. ¿Cómo lo sabe?
Intuiciones de ancianos.
Pero eso no es todo. ¡Está rodeado de mortífagos!
¡¿Qué?! ¡Vamos rápido!- exclamó Draco. Aumentaron la velocidad.
McGonagall y Snape estaban pasando en ese momento por ahí y los pararon extrañados
¿Se puede saber que pasa?- Hermione no respondió, si no que los arrastró consigo. Cuanta más ayuda mejor. Al tiempo que bajaban por el 2º piso, les explico todo rápidamente.
Eso es terrible. –dijo la profesora.
Atravesaron el vestíbulo y salieron por la puerta para llegar a los terrenos. Los rostros de todos palidecieron. Harry estaba rodado de mortífagos, pero ellos no les atacaban. Era el más temido de todos el que estaba batiéndose en duelo.
¡Harry!- exclamó Hermione corriendo hacia allá. Los mortífagos se volvieron al ver a los intrusos, y para dar tiempo a su señor, les atacaron.
¡Desmaius!- exclamaron Draco y Hermione. El hechizo se unió y hizo que al menos 10 mortífagos perdieran el conocimiento.
¡Impedimenta!- exclamó Minerva. Otros 5 mortífagos hicieron puf contra el suelo. Pero habían demasiados. Eran inferiores en número. La profesora McGonagall se apuntó con la varita al cuello y susurró: -sonorus- de inmediato, pronuncio unas palabras- ¡TODOS LOS PROFESORES DE LA ESCUELA, QUE ACUDAN INMEDIATAMENTE A LOS TERRENOS DE HOGWARTS Y MANTENGAN A LOS RESTANTES ALUMNOS A SALVO!-
En breves minutos, todos los profesores aparecieron. McGonagall ya se había quitado el hechizo que le había permitido hablar con esa potencia de voz.
¡Desmaius!- exclamó Hermione
¡Protego!- exclamó el mortífago desviando el hechizo de la alumna. Pero sonrió al ver quienes se acercaban. El frío que les había recorrido a todos fue delatante. Miró hacia arriba y comprobó su sospecha. Centenares de dementores se acercaban a ellos.
¡¿Qué?! Maldición. ¡Expecto Patronum!- exclamó Harry. El gran ciervo plateado salió de su varita y embistió contra ellos, pero no era suficiente. Necesitaba a más gente que le ayudara.
¡Expecto Patronum!- Malfoy fue el que conjuró el hechizo, saliendo de él una serpiente enorme que embistió contra los dementores, ayudando así a Harry. Se había puesto a su lado después de evitar a todos los mortífagos que se cruzaron en su camino. Este le dedicó una sonrisa de agradecimiento y siguió con el conjuro.
Pero todavía eran demasiados, y las energías de los muchachos se agotaban. Los demás los cubrían de Voldemort y los mortífagos.
De repente, alguien le lanzó un encantamiento aturdidor a Harry dejándolo inconsciente. Draco lo cogió con un brazo para que no cayera y lo atrajo hacia sí. Al apartar la varita, el Patronum dejó de ahuyentar a los dementores. Era más importante que su ex-enemigo, Harry, no cayera en manos de Voldemort. Eso sería catastrófico para el mundo mágico.
¡Protego! –gritó Draco, para así evitar el ataque que iba lanzado hacia él y Harry. Todos los que estaban peleando contra mortífagos salieron corriendo en su ayuda.
¡Desmaius!- exclamó Hermione, alcanzando a un par de mortífagos. Se puso delante de Draco con los brazos extendidos. - ¡Para atrapar a Harry y a Draco tendréis que pasar por encima de mí! –exclamó. Draco admiró por primera vez a Hermione por su valentía. La vez que le pegó una bofetada no contaba. Pero podía sentir como ella estaba hecha una furia y que en cualquier momento los mortífagos correrían la misma suerte que Draco.
Enérvate- susurró este a Harry. – Antes de que abras los ojos. Haz como si todavía estés inconsciente y cuando yo me acerque a atacarles, te diré ya, tu te levantas y les atacas ¿vale?- Harry hizo un leve asentimiento con la cabeza que pasó desapercibido por todos. Draco se levantó del suelo y pasó por el lado de Hermione- ¡YA! –Harry se apartó de Malfoy y lanzó el primer hechizo aturdidor.
Todos volvían a atacar. Hermione lanzó un hechizo silenciador a Voldemort, para que este no atacara a nadie. Sin embargo no funcionó. Voldemort podía realizar hechizos sin hablar. Solo con el pensamiento. Dejó a Hermione inconsciente en menos de 1 segundo y se fue acercando a Harry y a Draco. Les hubiera pillado por sorpresa de no ser porque la cicatriz de Harry le escocía cada vez más. Este se dio la vuelta.
¡Protego!- exclamó. Voldemort no le llegó a dar a tiempo, pero dejó inconsciente a Draco.
Ahora, Harry, te toca a ti- dijo con voz falsamente dulce, intentando ocultar su rabia.
¡Jamás iré contigo! ¡Antes muerto!- exclamó el chico.
Entonces tendrás que ir por las malas. ¡Crucio!- Harry empezó a gritar de dolor, llamando la atención de todos los profesores. Quisieron acercarse, pero los mortífagos les rodearon.
¡Inmovilus!- dijo una voz. Ron Weasley se acercaba corriendo. Los había visto a todos en el mapa. Inmovilizó a casi todos los mortífagos que habían.
Ahora Harry…- seguía Voldemort, al tiempo que había dejado a Harry en grave estado después de parar el hechizo- ¡Desmaius!- Harry cayó inconsciente a sus pies. Voldemort lo tomó en brazos antes de llamar a sus mortífagos con una sonrisa socarrona.
Mi señor, lo ha conseguido. –exclamaron
No hay nada imposible para mí- rió Voldemort. -¡No os acerquéis!- dijo antes de que los profesores se acercaran. -¡o Harry pagará las consecuencias de vuestros actos!- ahí todos pararon, al ver que Voldemort podía cumplir su promesa.- Ahora, adiós!- dicho esto, se apareció con sus mortífagos y en 5 segundos, ya no estaban ahí.