Actualización: 4 deNoviembre del 2005
AVISO: Cada vez que hable de Seven Dark Years, mi historia larga de Bellatrix, pondré SDY okis?
N/A: Bien, aquí tenéis el siguiente capítulo. Este me ha costado algo más, lo tenía muy poco preparado, pero espero que os guste igualmente Si os fijáis en la fecha han pasado los meses... Estoy pensado que se lían a gritos y a conversaciones y se supone que tiene dementores las 24 horas del día delante de sus celdas, además de que no les hacen efecto. Ejem, espero que me disculpéis ese pequeño detalle. Ya sabemos que Sirius permanece cuerdo, pero no sabemos cómo afectan a Bellatrix, y he pensado que si está lúcida las conversaciones serán más interesantes. Al fin y al cabo, poco iban a hablar si Bellatrix se vuelve muda y se sienta en un rincón a pasar el tiempo.
Contesto reviews (¡muchas gracias a todos!):
-Angela30: Te has aficionado a mis historias? Como me alegra oir eso! La verdad es que estos dos son mis personajes favoritos; encuentro que tienen una personalidad muy compleja.
-Selene: Wenasss... Bueno, para saber ese odio mutuo puedes ir a leer Seven Dark Years. Con el paso de los capítulos se descubrirá por qué se odian. En este en realidad no pensaba meter eso... tan solo conversaciones, y por tu review parece que tienes muchas ideas ¡Eso me gusta!
-AnnaTB: Uh... ya te exo de menos. Hace muxo k no hablamos, a ver si algún día de estos coincidimos por el msn. Si, una nueva de Sirius (y Bellatrix, que nunca puede faltar jejje), y tranki, que como los xapis son cortitos los escribo muy rápido. Cuando reciba unos cuantos reviews subiré el xapi 3.
-Fyon ¿No aguantas a Bellatrix? . Jejje, genial... siempre me propongo hacer cambiar a los lectores de opinión con respecto a este personaje. Yo lo encuentro la mar de interesante¿sabes? (bueno... más bien estoy algo obsesionada con ella, jejje). A ver si te hace cambiar de opinión. ¡Eso espero, al menos¿Cosas de Hogwarts? Vale, meteré un capítulo de eso. Tal vez el 6 (aunk para saber cosas de ellos en esa época, te digo como a Selene, ve a leer SDY! "publicidad encubierta")
Lettice-Evans-Potter: Te indentificas con Bella? Uh... tal vez sea hora de preocuparte entonces, jejje Me alegro de que te gustase el primero. ¡A ver si te parece que la historia continua bien con este! Bexitos, wapa!
Helen Black Potter: Jjeje... volvemos con la publicidad encubierta. Para saber porque se llevan mal ve a leer SDY. Ahí acabaré poniendo mi teoría... con el tiempo. ¿Algo de Hogwarts¡Pues claro que sí!
Mina Lovette: No me has dejao review, pero weno... te vi bastante "emocionada" leyendo este fic el otro día, y como me dijiste que el xapi 2 te gusto muxo, pues na, te menciono aki y to Has visto k wena soy? XD
Gracias a estos reviews he decidido hacer más largo el fic En principio iba a ser sólo de 6 capítulos cortos, pero en vista de que varios me han pedido sobre su infancia en Hogwarts, he decidido meter más capítulos. Por el momento me está gustando como va quedando, y además es que lo escribo en un momento. Las conversaciones me salen muy naturales (me debería preocupar? . ). Así que, como he dicho, meteré más conversaciones... supongo que me las iré inventando por momentos (que tal una conversación por año o así?). El tres ya está escrito, y el 4 y el 5 casi, así que no tardaré mucho en subir.¡Bexitos!
CAPITULO 2Lo único que cura el miedo es el peligro autentico.
Alain
Prisión de Azkaban
Celdas #137 y #138
24 de Abril de 1982
- Nunca sabrás lo que significa ser mortífago, Sirius –susurró Bellatrix con desprecio.
- Nunca he podido entender a los asesinos.
- Y, sin embargo, tú estuviste a punto de convertirte en uno.
Sirius apartó la vista, desconcertado. Recordó la mirada de Remus esquivándolo a la mañana siguiente de que él intentase matar a Snape.
- No me mires así... ¿creías que sería tan idiota como para no darme cuenta de que era un licántropo? No estoy ciega. Lo estudié muy de cerca... siempre me han fascinado las criaturas oscuras.
- CÁLLATE. ¡NO TIENES NI IDEA DE LO QUE HABLAS! –explotó Sirius, golpeando con violencia los barrotes.
- A mí me parece que sí. Siempre has odiado demasiado, Sirius. Tu familia primero, Severus después... te conozco muy bien, y sé que eres perfectamente capaz de matar.
- ¡CÁLLATE, PUTA, CÁLLATE! –bramó, tapándose los oídos con las manos, dando vueltas como loco por toda la celda.
- Aunque bueno... técnicamente tú no serías el asesino ¿no? –continuó ella cada vez con más intensidad en la voz, ignorando los gritos e insultos de su primo-. Usar a un amigo para asesinar... es ruin, y me encanta –añadió, estremeciéndose de placer.
- Me das asco –escupió Sirius, mirándola con absoluto desprecio.
- No todos comparten la misma opinión sobre mi modo de vida –replicó Bellatrix con indiferencia, apoyándose en los barrotes–. Ni todos están hechos para ella. Es algo demasiado grande...
- Sois vulgares asesinos.
- De eso nada, Sirius. No puedes imaginarte lo que es estar ahí dentro. Se respira el miedo, el terror. No todos pueden soportarlo. Los débiles no aguantan y mueren, o los matamos.
- Sois esclavos.
- Esclavos... ¿De qué, de quién?
- De Voldemort.
Bellatrix rió con frialdad, mirando a Sirius con esos ojos que tanto se parecían a los de él.
- No me hagas reír. ¡Todos somos esclavos! Buscamos poder, defender nuestras ideas... lo que busca todo el mundo ¿o acaso tú no, Sirius? Lo único que cambia es el método para conseguirlo. ¡El Señor Oscuro es el poder! Yo sigo a un dios, mientras que vosotros seguís al dinero y a los altos cargos. No creas que es tanta la diferencia.
- Os arrastráis, suplicáis... Habéis perdido todo el orgullo del que siempre alardeáis.
- No insistas, primito, porque no tienes razón. ¿Nos arrodillamos, nos sometemos? Eso dices. ¿Y qué? Lo primero es preservar la vida. ¿O es que vas a vas a volver de entre los muertos para llevar a cabo tus planes?
Sirius se quedó mirándola en silencio, sin decir ni una palabra, echando chispas de furia por los ojos.
- Olvidaba que tú darías la vida por tus amigos –dijo Bellatrix, soltando una carcajada-. ¿Y para qué te ha servido esa valentía? Mírate, Sirius. Si hubieses demostrado la misma lealtad por el Señor Tenebroso que por Potter hubieses sido uno de los mejores. ¡ESTARÍAS EN LO ALTO!
- Prefiero estar muerto.
Bellatrix puso los ojos en blanco, despectivamente.
- ¡No entiendes nada! –soltó, apretando los puños–. ¿Piensas qué sólo eran asesinatos? Estás muy equivocado, había mucho más, pero todo se resumía en conquistar el poder. Llevar el terror a las calles. Ser temido... era muy gratificante, como un premio por tu duro esfuerzo. Cada día era una cosa nueva, no como esos aburridos trabajos a los que os dedicáis vosotros. Al final hasta acababas encontrándole incluso el placer a matar. Era como una droga... te cegaba, y ya sólo deseabas eso. Uno, otro y otro asesinato, sin importar quién, cuándo, ni dónde. No sabes lo que se llegaba a aprender... maldiciones que no puedes ni imaginar, que te paralizarían la sangre. Podías elegir. ¿Cuál usarías para matar a esa inocente niña, o tal vez para ese viejo? No necesitabas ni siquiera una razón. Te apetecía, y con eso era suficiente. Nada de explicaciones ni excusas. Yo no necesitaba esas tonterías. Amaba ser asesina.
- Y a ti para qué te ha servido todo eso ¿eh? –consiguió decir Sirius, mirándola fijamente sin poder creer lo que acababa de escuchar-. ¿Me lo puedes decir?
- Para vivir los mejores años de mi vida –contestó con suavidad–. Y pronto volverán a repetirse. Esto no ha terminado aquí, Sirius. Él volverá, y yo estaré esperándolo.
- Si antes no te mueres.
- ¡Yo no puedo morir!
Sirius soltó un bufido irritado, y se cruzó de brazos.
- ¿Ahora eres inmortal? –preguntó alzando las cejas.
- Siempre lo he sido.
- Creo que esa es la mayor idiotez que he oído salir de tu boca. Te engañas, porque tienes miedo a la muerte. ¡Un miedo horrible, que no puedes soportar!
- Y, sin embargo, es terriblemente excitante. Vamos, tú también has probado los duelos a muerte, Sirius. Estar jugando con ella... ¿Hay algo mejor que esa sensación?
- Yo no tengo miedo a la muerte, Bellatrix –aseguró Sirius–. A diferencia de ti, y te sientes débil, y por eso buscas el peligro.
- Tú también adoras el peligro, primito. Eres temerario; lo llevas en la sangre.
- Yo no tengo Sangre.
Bellatrix se llevó el pulgar a la boca, mordisqueándose la uña. Una sonrisa asomó a sus labios.
- Qué familia tan rara –ironizó–. Yo no muero y tú no vives.
Hubo unos segundos en los que ninguno dijo nada, limitándose a mirarse el uno al otro, valorando el último comentario.
- Esa Sangre que desprecias es lo único que te queda ahora –susurró Bellatrix, acercándose tanto a la puerta de la celda que sus labios asomaron entre los barrotes, moviéndose lentamente mientras pronunciaba esas palabras.
- Es mejor estar sólo.
- Eres una vergüenza para esta Sangre. No te mereces pertenecer a esta familia. ¡NO PERTENECES A ELLA!
- Ni te imaginas lo que hubiese dado por nacer en otra.
- ¿En una Muggle? –preguntó con profunda repugnancia.
- En una Muggle –repitió Sirius.
- Traidor.
- ¿Te he decepcionado? –preguntó con una sonrisa amarga–. Muchas veces me he preguntado lo que hubiese dado mi madre porque su primogénito no hubiese sido yo.
- Todo –murmuró Bellatrix–. Hubiese dado todo por un heredero con honor.
- No siempre se consigue lo que se quiere.
- Eso parece.
- Sin ir más lejos, yo te tengo delante. ¡Ni te imaginas lo que daría por que no fuese así!
Bellatrix empezó a reírse, convulsionándose en una risa histérica que dejó a Sirius muy confundido. La mujer se había apoyado en la pared, y se llevaba la mano al pecho intentando controlarse, apartándose las lágrimas de la risa que rodaban por sus mejillas hundidas.
Aún casi sin respiración, gritó en un chillido:
- ¡Pero qué pretendes dar si no tienes nada!
N/A: Este me ha quedado más cortito, lo sé, pero el tema de conversación no daba más de sí (y eso que he buscado muy bien las posibles relaciones que podían tener con otros temas). El próximo ya está escrito, y será más largo (lo subiré en unos días), pero antes os agradecería si me dejáis algún comentario. ¡Muxas graxias! Joanne Distte