Un Plan De Amor
No tenia rumbo determinado, solo quería alejarse de aquel lugar. Sentía sus ojos rojos. En el corto camino que llevaba estuvo mordiéndose la lengua para no gritar, apretaba sus puños para no llorar y caminaba para no caer al suelo.
-"¡Todo fue en vano! La partida de Rusia, ir a buscarlo, el mar, lo de Spencer, la rosa, el violín"-
-¡Tala! –
El chico pelirrojo se detiene, dándole la oportunidad a Bryan para alcanzarlo
-si claro. Kai te quiere, no te preocupes todo saldrá bien. Veras que mañana serán mas que amigos- cae al piso de rodillas
-Tala- no sabia que decir
-solo fueron falsas esperanzas lo que me dijiste. ¡El no me quiere!- golpea el suelo con sus puños
-calmate Tala-
-¿Quieres que me calme! Como a ti no te rompieron el corazón-
-lo siento- pone una mano en el hombro de Tala
-Déjame solo- quita con su muñeca aquella mano que quería darle su apoyo
-se lo que sientes-
-tu no sabes lo que se siente. Nunca haz sentido esto, nunca haz estado en mi situación-
-… no sabia que decir, era cierto lo que decía el pelirrojo
-debí de haber seguido viviendo como me enseñaron en la abadía, sin sentir mas que odio, rencor y venganza. Debí de haber seguido siendo un cyborg- no aguanto más y dejo caer las lágrimas que estuvo reteniendo- ¿Por qué malditasea me deje llevar por las emociones y los sentimientos¡Porque?. Boris siempre lo dijo, esas cosas nos destruirían y no se equivoco.-
Tala no paraba de llorar, el dolor era muy grande. Ian y Spencer se acercan a sus amigos.
-Yuriy- Ian se sentía tan mal a ver a su capitán en ese estado
-discúlpenme por haberles hecho perder su tiempo, chicos. Volvamos a Rusia.- se levanta y seca sus lagrimas- regresemos a la abadía-
-¿Te vas a dar por vencido tan fácilmente?- pregunta Ian intentando darle esperanzas a Tala
-para que pelear-
-¿Cómo para que? Si serás imbecil. Tu amas a Kai lucha por el-
-el ya tiene a Rei-
--y eso que, Rei se puede ir mucho a la chi…., tu eres mejor que ese gato-
-Ian tiene razón, no nos podemos ir así, darnos por vencidos. Podemos seguir intentando-
Mañana podríamos hacer otro plan- sugiere Bryan
-gracias chicos, pero son ilusiones vagas. El amor no es para mí.-
-¿Cómo piensas olvidar a Kai? Nunca lo olvidaras- dice Ian
-un cyborg no siente-
-tuya no eres un cyborg- dice Spencer
-no por mucho tiempo-
-¡eres un cobarde! Prefieres convertirte en un estupido robot para no sufrir. Después de tanto tiempo haz vuelto a ser el mismo que antes, tanto trabajo te ha costado. Y solo porque te tropezaste en el camino, dejaras que otra vez te cambien- dice enojado Bryan
-volví a ser el mismo, porque tenia por quien serlo. Ahora no tengo a nadie-
- nunca tuviste a Kai- dice Bryan
-pero tenia la ilusión y la esperanza-
-¡Malditasea. Aun la tienes!- grita Ian
-se quedan o se van?- comienza a caminar
-Déjalo Ian, si el quiere cometer esa equivocación, es su decisión. Nosotros ya hicimos todo lo posible por ayudarlo-
-no todo Bryan-
-ni pienses decirle a Kai que Tala lo ama. Ivanov tiene razón esto solo fue un error. Regresemos a casa chicos-
-pero-
-debemos seguir entrenando para ser el mejor- dice Spencer
los tres chicos caminan detrás de su capitán, cada quien con sus pensamientos-
-"Los golpes que me dio Hiwatari fueron en vano"-
-"los cursos de violín, perdida de tiempo"-
-"tantas veces que ensañe mi voz de niño para que Kai no me descubriera"-
el camino hacia el aeropuerto fue callado, nadie hablaba. Solo caminaban como maquinas, pero para su mala suerte no lo eran. Eran personas que en ese momento la decepción los invadía.
En el vuelo hacia Rusia, cada minuto pasaba lentamente, como si el tiempo quisiera detenerse. Nadie se a dirigido la palabra desde que el avión despego. Bryan, Ian y Spencer pensaban en la humillación que seguramente Boris les daría y en el castigo que recibirían por huir de la abadía.
El chico de ojos azules miraba la ventanilla mientras escuchaba música, una canción en especial, a que le canto a su fénix.
-que es lo hacer.. para que seas mi cariño.. que es lo que tengo que dar.. para ser mas que un amigo.. mas que un amigo..- canta casi como un susurro, derramando una s lagrimas de sus bellos ojos azules
así transcurrió lo que sobraba del vuelo, el chico pelirrojo escuchaba una y otra vez la misma canción hasta que se acaba la batería del aparato. Los demás solo viendo el paisaje.
-Listos para ser humillados por Boris?- sarcasmo
-lo soportare- dice Spencer
-por mi culpa tendrán que pasar por esto-
-somos tus amigos- dice Ian
-en este lugar solo somos compañeros de equipo, recuerdas?- aclara Bryan
-si-
-otra vez a fingir lo que no somos- dice Spencer
-así debe ser si quieres sobrevivir en este lugar- dice Bryan
Los cuatro entran a la abadía,., sus pasos firmes como el suelo que pisaban. Sus semblantes fríos y duros, podían ver en sus ojos orgullo, la tristeza que poseían fue guardada en lo más profundo de su alma.
Al entrar se encontraron a un sujeto de gafas, quien los recibía.
-Vaya, vaya. Miren quien esta aquí, si son los Demolition Boys-
Los cuatro chicos tenían ganas de partirle la cara a ese imbecil, ( yukari: no son los únicos), pero no podían, habían regresado a las reglas y deberían cumplirlas, si no serian castigados.
.no me digan que sus ilusiones y sueños las cuales les dieron las fuerzas para escapar de aquí sean roto y destruido ( Yukari: eso fue una indirecta muy directa para Yuriy?) sabia que volverían, ustedes no son nadie en aquel mundo, solo son mierda. A cambio aquí en su hogar son mas que eso.-
se acerca mas a ellos.
-que patéticos se ven regresando aquí, como perros falderos buscando ser perdonados, para tener un lugar donde sobrevivir. Aunque no han pedido perdón a su dueño. ¡Que esperan!-
-"Maldita seas Boris"- pensó Ian
-"estupido Boris"- piensa Bryan
-"Jamás pensé hacer esto"- piensa Spencer
-no los escucho- (Yukari: ¬¬ será porque no han hablado)
-Discúlpenos- dice Tala
-veo que hablas por todos-
-soy el capitán-
-quiero escuchar a todos pedirme perdón. No disculpas.-
Tomaron fuerzas y se tragaron su orgullo para gritar a la vez
-Perdónenos, señor Boris-
Boris sonríe, ver como los cuatros chicos pedían perdón era confortable para el.
Los perdono. ya se pueden ir por donde vinieron-
-¡que- gritan los cuatro chicos
-creen que son indispensables para este lugar? Otros jóvenes han ocupado su luar. Ya no los necesitamos, ja, ja, ja, ja, ja-
-hijo de mi….- dice Bryan
-esas no son palabras para referirse a mi, si no a ustedes. Adiós-
Los chicos miran desaparecer a Boris den la oscuridad.
-Maldito- Spencer intenta correr hasta Boris pero es detenido por su capitán.
-no te humilles mas de lo que te han humillado. Vamonos-
-nos hizo pedirles disculpas y luego nos desecha como basura- expresa Bryan
Caminaron sin rumbo, no sabían que seria de su vida. No tenían dinero para pagar un hotel toda su vida. Tendrían que comprar un departamento pequeño para los cuatro y tendrían que trabajar.
-hoy dormiremos en un hotel y mañana buscaremos un departamento y trabajo-
-¿Trabajo?- pegunta Ian
-si, como piensas mantenerte- dice Spencer
- lo siento chicos, todo esto es mi culpa-
-no te culpes Ivanov, nosotros tomamos la decisión de ayudarte, nosotros somos los culpables-
-¿de que vamos a trabajar si no sabemos hacer nada?-
-tenemos inteligencia, fuerza- dice Bryan
-sobreviviremos- comenta Spencer
buscan un hotel barato para pasar la noche, jamás creyeron que salirse de ese lugar les doliera tanto. En ese lugar eran seres perfectos, admirados, lo tenían todo y ahora no tenían nada. Solo son simples personas en un mundo oscuro.
Después de tanto caminar encontraron donde hospedarse. En un hermoso hotel, de lindos jardines y alberca. Pidieron dos habitaciones que no les salio nada caras pues el dueño de aquel lugar era un gran admirador de los Demolition Boys.
Cada habitación tenia dos recamaras, lo que les alegro a nuestros rusos. Porque no tendrían que compartir sus camas.
En una habitación…
-Tala¿Te sientes Bien?- pregunta preocupado Ian
-si- se mete a su cuarto
-mejor hubiera compartido la habitación con Spencer-
el pequeño joven se mete a su dormitorio que consistía de una cama matrimonial, dos buró a lado, un guardarropa, un tocador y un baño con tina incluida
los rayos del sol entraban al cuarto del chico pelirrojo, quien estuvo llorando toda la noche. Aun se podía percibir las lágrimas que dejaron huellas en su hermoso rostro. Su compañero de habitación ya se había ido con sus otros dos amigos en busca de trabajo y departamento. A el lo dejaron dormir pues lo necesitaba después de lo ocurrido.
Pasaron las horas y aun Tala no se levantaba, seguía acostado. Las lágrimas secas de su cara le empezaban a incomodar, pero no tenia ganas de levantarse. Se sentía tan deprimido; no quería pensar, porque sabía que acabaría pensando en el bicolor y comenzaría a llorar.
-"Kai"- a pesar de sus esfuerzos, volvía a recordar a la persona que amaba. Sus ojos rojos tiraron mas lagrimas. – debo dejar de pensar en ti… pero no puedo olvidarte.. no están fácil matar este amor, que vive con la esperanza que lo ames. Kai, te amo…-
Siguió llorando, ya no le importaba su orgullo, ni la voz de su interior que le decía lo patético que se veía.
-todo el mundo sabe… lo que yo te amo.. que no estar conmigo.. me hace tanto daño… que es lo que tengo que hacer.. para que tu me hagas caso.. que es lo que tengo quedar.. para tenerte aquí en mis brazos- en cada pedazo que cantaba derramaba una lagrima más.
Realmente el chico ruso estaba desvastado, pero no mas como la rosa que estaba en el buró de la cama. Sus pétalos se habían marchitado y caído; solo un pétalo aun rojo quedaba. El tallo se tiño se un color café al igual que las hojas. No quedaba ya nada de aquella rosa que fue aquel día
Se escucha a alguien tocar la puerta, el joven ruso no tenia ganas de ver a alguien y menos de que alguien lo viera en ese estado.
-quijero estar solo- supuso queeran sus amigos.
El chico que llamaba a la puerta no concedió el deseo del ojiazul. Entro al cuarto, camino despacio hacia la cama. Tala al oír los paso acercarse volteo para encontrarse a…
-Kai-
-Hola Yuriy-
Tala se tapa con sus sabanas para que el chico de ojos carmín no viera su estado.
-¿Por qué te tapas?-
-no quiero que me veas en este estado-
-ya te vi-
-que importa. Estoy muy desarreglado-
-no seas vanidoso Ivanov- le jala las sabanas
-no Kai- "malditasea, vera que estaba llorando"- dame mis sabanas- se las arrebata de las manos del bicolor y se limpia su cara con ellas
-tienes los ojos rojos-
-yo? Como crees-
-no es para tanto Tala. Se que era tu hogar, tu mismo me lo dijiste, pero la vida sigue-
-de que hablas?- pregunta Yuriy confundido
-de la abadía. Me entere que los desecharon como basura-
-ah.. de eso-
-estuviste llorando? Si tanto quieres regresar a tu agujero, le dijo a mi abuelo que te de otra oportunidad-
-No- "Kai, vete de aquí. Tu presencia me hace daño"- Que haces aquí?-
-vine a visitarlos y a que me digas ¿Por qué te fuiste así de Japón?-
-…-"por ti"-
-no piensas responder?-
-tu lo sabes- sus ojos se enrojecían mas- por que yo te…-
Kai abrazo a su amigo, recobijándolo en sus brazos, lo cual Tala correspondió, el calor de su amado consolaba a su alma lastimada. Quedaron varios minutos así, el pelirrojo no quería separarse, quería estar en sus brazos por más tiempo, respirar su aroma aunque sea un minuto más. Desafortunadamente para él, Kai deshizo el abrazo.
-Ya no llores. Ya estoy aquí- dice Kai dulcemente
ambos chicos se perdieron en los ojos del otro, lentamente sus rostros se iban acercando. ; podían sentir sus respiraciones. Los centímetros de distancias se desvanecieron en un dulce beso. El pelirrojo sin pensarlo lamió los deliciosos labios del bicolor y metió su lengua en aquella exquisita boca. Probando el sabor de su amado.
Aquel momento varias veces soñó el ojiazul, era uno de sus cuantos sueños de amor. El corazón del pelirrojo se reconstruía; tenia una razón por cual latir.
Al necesitar aire se separaron. Sus respiraciones eran agitadas al igual que el latir de sus corazones.
-Kai.. yo te amo- miro profundamente los ojos del fénix
-Yo también te amo-
Las palabras que tanto anhelaba escuchar el pelirrojo fueron pronunciadas por los labios que hace un rato degusto. Parecía que cada uno de sus sueños se hacían realidad.
-¿Y Rei?-
-termine con él-con una bella sonrisa- quieres ser mi novio?-
-Si- abrazo a su pareja
Después de un rato de silencio entre los dos chicos…
-como me encontraste?-
-te fui a buscar a la abadía. Ahí Boris me dijo la noticia. Después los busque en las calles de Moscú y me encontré a Bryan, Ian y Spencer. Ellos me trajeron aquí, contigo- le da un tierno beso.
-estamos listos Kai-
Un chico de pelo morado entra al cuarto.
-Para que?- pregunta Tala
-para regresar a Japón.-
-Kai nos ofreció su mansión para quedarnos a vivir- explica Ian
-cambiate y empaca tus cosas te espero afuera-
Yuriy, se baño limpiando sus lagrimas de su cara, sabia que no volvería a llorar, jamás una lagrima rodaría de sus ojos pues ya tenia a la persona que amaba; todo seria felicidad. Después de arreglarse empaco sus cosas y entre ellas se encontraba un pequeño cofre que contenía pétalos de rosa, los mismos que cayeron de la rosa que le obsequiaron y entre esos pétalos marchitados se encontraba el último pétalo rojo que poseía el tallo.
Los Demolition Boys y Kai regresaron a Japón. Sus vidas cambiaron por completo: Bryan sale con Rei, quien iba a decirlo. Spencer le ayuda a Ian con su florería, si, Ian puso una florería y su mayor mercancía son las rosas de cualquier color, pero mas las rojas. Y en honor a Tala le puso a su negocio: "Un pétalo de esperanza"- al principio Spencer se reía por el nombre tan cursi, pero entendió el porque; la esperanza que tuvo el joven Ivanov al ser algún día correspondido por su amor.
Kai y Tala son muy felices, su relación va muy bien a pesar de las pequeñas discusiones que tienen por lo celos. Cada vez que esos chicos se pelean, siempre Kai contenta a Tala con una rosa roja (que por cierto se lo vende Ian) y un dulce beso. Que mas podrían pedir esa pareja, claro la boda. Pero eso ya lo planearon en 3 mese.
Fin
