Sakura, Shaoran Yami Koso Densetsu- Leyenda de Oscuridad.
Por Crystal.-"Simplemente no puedes escapar de tu destino".
Capitulo Nueve. "Una inesperada velada"
-¿Qué hacen aquí?- preguntó Sakura una vez Shaoran y Biatsi se encontraban instalados en la sala de la casa. Shaoran tenía en esos instantes dulces y cálidos recuerdos de la ultima vez que estuvo en el lugar: aunque el tapizado de los muebles en ese momento era verde pálido, contrario a años atrás, que era amarillo.
-Vinimos a buscarte para llevarte a la casa de Hiragizawa...- respondió Shaoran distraídamente.
-¿Eriol tiene casa?
-No- declaró Biatsi.- Tiene una suite en un hotel aquí...
-Ya veo...- sonrió agregándoles- bueno, espérenme un instante...- disculpándose y dejándole a solas.
En un momento de silencio Biatsi se puso de pie y notó las fotos a un lado- No sabía que Sakura tuviera una hermana...- señalando una de ellas en particular.
Shaoran se puso de pie y caminó mirando la que la chica señalaba. – no es su hermana, es su madre...
-¿En serio?- mirando por segunda vez- Si, se parece en sus ojos... ¿Dónde está ella?
-Nunca te lo conté: la mamá de Sakura murió cuando ella era muy pequeña...
-Otra de las coincidencias entre tu vida y la de Sakura...- opinó Biatsi ganándose por ello una mirada muy resentida de Shaoran.- Bueno, es verdad aunque no lo quieras admitir...
-Así que estás aquí con la chiquilla.- dijo una voz chillona detrás de ellos. Biatsi pestañó dos veces buscando de donde provenía la voz.- ¡no me sorprende!
-¿Quién dijo eso?
Shaoran señaló al lado de él, mostrando a Biatsi la figurilla que volaba a su lado quien dijo.- No es la chiquilla.
-¿Qué es eso?- señalando a Kero.
-¡Soy Keroberos!
-¡no!- dijo Biatsi no evitando sonreír y mirarle admirándole.- Keroberos... ¿La bestia de las cartas Clow?
-Así mismo.- dijo posando con gran galantería delante de la chica.- ¿y tú eres? Porqué la chiquilla era una petulante.
-Soy Reiko Biatsi- presentándose admirada- Shaoran: No era nada de lo que decías de él...- sonriéndole cortésmente.
-¿Qué has estado diciendo de mi mocoso?
-¡Cuidado con quien hablas! .- gritó Shaoran con ira- No soy el mismo de años atrás...
-¿No? Puedo ver que creciste mas... pero sigues siendo un mocoso...
-Por favor Kero- se escuchó decir de Sakura. A la puerta estaba una chica que, estaba con una hermosa falda escocesa que estaba por encima de sus rodillas, un suéter rojo (Que resaltaba aun más sus bellos ojos verdes) y unos zapatos negros. -¿nos vamos, no?
Shaoran tardó en reaccionar. Incluso la mirada arrojada a Sakura, sonrojó a la chica.
-Si, vamos- dijo Biatsi pasando delante de Shaoran y llevándoselo de la mano.-- ¿Vienes Keroberos?
-¡Sí, claro!- gritó el guardián.
Sakura no lo podía creer: Kero había congeniado con aquella chica.
¿Y si ella, era solicitada por los Li, que entregara las cartas, Kero y Yue a Biatsi? Es decir, (Pensaba ella), Biatsi era la prometida de Shaoran Li. Las cartas eran de ella, pero si ellos pedían las cartas y los guardianes,¿tendría acaso que entregarlas?
Era imposible. Kaho y Shaoran se lo dijeron una vez: las cartas una vez cambiadas le pertenecían a ella.
Con esos pensamientos reconfortantes, se marchó de su hogar.
Después de salir de allí, notó que, ni su hermano, ni Yukito estaban en la casa.
¿Adónde habían ido?
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Touya y Yukito observaban los perímetros cerrados por las autoridades. La suave brisa que se sentía, movían sus cabellos al compás del viento.
-No es coincidencia que ese muchacho esté aquí- dijo Touya con preocupación. Yukito se percató que, no era resentimiento de un hermano celoso. Mas bien era preocupación por como las cosas que estaban pasando en Tokio.- Que haya buscado a Sakura...- suspirando.- Algo grande se aproxima...
-Como te he explicado que la reencarnación de Clow le explicó a Yue, es el nexus... un día de estos, se abrirá...
-¿Tendrá relación con el ataque en Venecia? ¿con la aparición del sujeto ese el día que llegué de Venecia?
-Todo está relacionado.- Declaró Yukito.- Tal vez, será momento que hables con Hiragizawa en persona Touya, tienes que decirles lo que pasó en Venecia. Así por lo menos tendrán idea a lo que nos enfrentamos...
Touya no le respondió en ese mismo instante. Sabía que tenía razón. Pero la idea de aliarse con Li Shaoran no era de su agrado para nada.
-Vamos... volvamos a Tomoeda- declaró Touya a su amigo.- Tienes que proteger a Sakura...
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-¡Eriol: hola!- dijo Tomoyo al verlo ingresar al recibidor de la magnifica residencia.- ¡Qué bueno que viniste!
Tomoyo notaba desde las escaleras que descendía lo elegante que el sujeto se veía además de pulcro. La camisa blanca hacía un enorme contraste con los ojos añiles del joven.
-Hola querida Tomoyo.- dijo el sujeto no evitando sentirse complacido ante la figura de modelo que la joven poseía. Ese hermoso pelo largo atado en un listan dándole una imagen de muñeca de porcelana y fragilidad, fue lo primero que atrajo a Eriol cuando se dio la actividad en Londres donde se encontraron ellos. Claro que, Eriol en esos momentos, andaba con una chica muy importante en la sociedad Londinense para ocuparse de Tomoyo. Pero no así, fue un vistazo desapercibido acerca de la belleza de la joven.
Tomoyo conocía la reputación de su antiguo amigo de la primaria. No eran bien intencionados los rumores de "conquistador" o "Faldero" que había adquirido Eriol y se enteró a carta abierta, en los días que estuvo en Londres.
Recordaba como lo vio aquel día entrando del brazo de una chica de ojos verdes y cabellos dorados...
-"¿Ese no es..."- decía ella en voz alta con su copa de champaña. En esos instantes, estaban acompañadas ella y su madre, de varios funcionarios y personalidades de Londres.
-"Eriol Hiragizawa"- respondieron a su lado. Sonomi miró un instante al sujeto quien era la comidilla en esos instantes.- "Es hijo de un embajador..."
-"Claro que lo recuerdo"- sonrió Tomoyo a su acompañante.- "¡estudié con él un año en la primaria!"- atrayendo la fisonomía del sujeto a su mirada.- "vamos a saludarle"... – pero el sujeto le negó con la cabeza.
-"No, gracias"- dijo de manera insultante.- "conozco a Hiragizawa bastante. Es un mujeriego... desde la muerte de sus padres"- sorprendiendo a Tomoyo.
Pero esta salió a la defensiva diciendo.- "te Equivocas".- Declaró confiada.- "Eriol no es nada de lo que dices"
-"Hija"- dijo Sonomi apenada ante la testarudez de Tomoyo.- "Estas personas se conocen entre sí. Creo que, tendrá mas razón que tu..."
-"no madre" – Dijo Tomoyo confiada- "Conozco a Hiragizawa y no es lo que dicen".
-"Lamento sacarte de tu convicción dama". – dijo el sujeto inglés a su lado.- "pero ¿ves a esa chica a su lado?" – viéndole asentir.- "Esa es el sabor del mes..." – hablando con toda confianza. –"o de la quincena o la semana".- negando con su cabeza.- "olvídate de ese y te conviene no tenerlo como amigo..."-mirando donde el sujeto miró de reojo y declaró.- "Se percató que estoy aquí..." –y enderezándose. Dijo – "Eriol: por aquí".
Ahí notaron como Eriol se fijó en la presencia de la joven y llevando del brazo a su acompañante inglesa (quien observaba todo sin el mas mínimo interés), llamado mas por la belleza de la joven que otra cosa.
-Michael de Rosstensen- dijo Eriol cortésmente.- te hemos extrañado en el club.
-he estado ocupado, pues las ultimas actividades de la monarquía requiere mi presencia...- tomando del hombro a Tomoyo declaró.-"Permíteme presentarte a unas de las invitadas de Honor":-pero no hizo falta que Michael dijera mas nada.
-"Tomoyo ¿no es así?"- sonrió Eriol saludándole muy a lo inglés.- "Un gusto volver a verte".- declaró sonriéndole.- "Aunque no te recuerdo tan sublime como en estos momentos, si me percaté de que tu rostro se me hacía muy familiar. Un placer verte de nuevo..."
Tomoyo se sonrojó pero tal vez por un segundo y respondió diciendo.- "Eras la ultima persona que pensé que vería en un tiempo Hiragizawa".
-"Puedes llamarme Eriol"- declaró el sujeto.- "Aquí en Londres no es necesario tanto formalismo como en Tokio; aunque según recuerdo, tampoco en esos tiempos, llevábamos tales formalismos... ninguno del grupo".
-"Sonomi Daidouji" –Saludó la madre de Tomoyo a lo que Eriol respondió.- "No sabía que, se conocían."
-"Estudiamos en la primaria juntos mamá..."
-"Un año para ser específicos".- declaró Eriol.- "Permíteme presentarte a mi acompañante: Elizabeth of Grace Steffenson."- dirigiéndose a su cita.
-"Tanto gusto"- dijo Tomoyo y agregó.- "¡no sabes las veces que hablábamos de ti Sakura y yo!"- sonriéndole entusiasta. Cosa que fue percatada por Michael y Elizabeth. Eriol sonrió por su parte.
-"¿Cómo está la pequeña?"- preguntó Eriol.
-"En casa algo melancólica. Muchas cosas han pasado..."- comenzó a decir, pero la mirada que Elizabeth le lanzaba era de peligro.- "Pero no puedo decirte aquí... "
-"Por supuesto".- dijo Eriol sonriéndole. era notable que delante de todos ellos, no podían hablar nada de Sakura. Además, Eriol estaba mas que bien entretenido por Elizabeth según se notaba.-"Michael".- dirigiéndose a su amigo. "Dame los datos donde está hospedándose mi querida Tomoyo".- diciendo esto en perfecto ingles que fue comprendido por Elizabeth y Michael. Y despidiéndose de ella, agregó.-"Que esta no sea la ultima vez que te vea antes de que te vayas querida"- Besándole la mano con efusividad y pasión: cosa que notaron los allí cercanos al par. Elizabeth tenía cara de pocos amigos. parecía que nadie podría atreverse a robar la atención de Eriol de si.
Tomoyo asintió sonriéndole y vio marcharse con Elizabeth.
-" no creo que, vengas a decirme ahora, que te interesa ese hombre querida"- dijo Sonomi observando la mirada de intriga de parte de su hija.- "Un hombre sin camino o destino, me cuenta Michael"
-"Porque no lo conoces mamá; yo si: y te puedo decir algo: Eriol puede pretender ser quien quiera. Yo lo conozco."- sonriéndole.- Y puedo decirte que, no es nada de lo que ellos dicen".
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-¿vamos?- preguntó Eriol extendiéndole su brazo para que lo tomase. Tomoyo asintió notando un cierto calor en sus mejillas. Eriol estaba guapísimo y era notable. Pero ¿Acaso la identidad del Faldero de Londres era un impedimento para que fueran "mas que amigos"? aquella idea, le llamaba la atención.
Después de todo, supieron entenderse desde siempre. Era normal que tuvieran cosas en común y para Eriol, nunca fue extraño que Tomoyo era con Sakura de las chicas mas bonitas del salón de primaria, además de la hermosa voz de la cual era poseedora.
Pero ¿Eriol pensaba igual de ella?
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-Reiko- escuchó Ukio decir a una voz femenina cuando caminaba por los pasillos del Consejo. Cuando vio las dos figuras femeninas acercarse, se congeló y no con mala razón: una de ellas, Li Meiling venía con un rostro serio y rígido. A su lado, estaba Ieran Li caminando decidida hasta alcanzarle. Reiko respetuosamente, le dirigió un saludo formal y escuchó que decía.- ¡Vaya que has mantenido las cosas al margen!- siendo observada por rigidez por el sujeto.- Escondiendo el paradero de mi hijo...
Meiling trataba de advertirle pero Ieran le observaba de reojo.
-No le comprendo señora...- declaró el sujeto.
-Detente ahí.- viéndole en su sobrina, su afán de dejarles solos.- No puedes esconderme a mi los eventos ocurridos en Tokio- dijo con seriedad volviendo a Ukio- Es notable que Tokio se ha vuelto insegura... temblores y fenómenos sobrenaturales. Fenómenos que tienen que ver con algo que veinte años atrás, tu padre y mi esposo, trataron de detener ¿Qué tan cerca me encuentro?
-Bastante señora- dijo Reiko apenado--¡No fue mi idea esconderle lo que pasaba!! Es que el señor Li...
-Puedo imaginármelo. – declaró Ieran cruzándose de brazos.- Partirás inmediatamente a Tokio y lo llevarás a donde las Sacerdotisas de Gaia.- sorprendiendo a Ukio y confundiendo a Meiling.- Son un grupo que 20 años atrás, guiaron a los demás a la victoria. Ve allá e infórmale a Shaoran.-Extendiéndole un sobre doblado en dos.- Ahí dentro está su dirección...
-¿Cómo sabe todo esto? ¿quién le dijo?
Ieran declaró.- ¿Acaso crees que me quedo en la casa sin saber de nada que pase en las reuniones del Consejo o en el Consejo mismo? Tengo personas que me informan de todo lo que pasa. La ausencia de mi hijo, ha sido notada; la extraña entrada de un desconocido a media noche a su oficina. Y el encargado del interrogatorio y único testigo: Reiko Ukio. – Sonando preponderante. – no bastando con esto, el anciano se me acerca dos días atrás para felicitarme por el matrimonio de Li Meiling.- azorando a su sobrina- Quien supuestamente, desapareció también de la vista de los miembros. Ellos pensaron que los encubrías para evitar las tradicionales celebraciones nupciales según la rutina del Consejo. Si crees que no me entero de las cosas, no sabes nada.
-Pues está de mas que le preguntara quien es el contacto del anterior señor Li en Japón.- sorprendiendo con esto a Ieran.- ¡Vamos! En los diarios de mi padre, se habla de un colaborador en Japón de Hien Li. – bajando un poco su tono equitativo a la señora.- Señora...
Ieran no le respondió y agregó diciendo.- No sabía que eras tan persistente.- mirando a ambos lados.- ¿Desde cuando tienes un guardián?
-¿Guardián?- observando a un lado a Meiling.
-No la mires; ella no me dijo. Me enteré yo misma. ¿Cómo creías que, en la casa Li iba a ver un guardián suelto y no me enteraría? – sonrió.- me subestiman: tu y Shaoran.
-Lo siento. Pero es que, me pidieron que mantuviera la casa vigilada. No se me ocurrió mas nada.
-Pues informaré a los miembros para que agranden un poco mas la seguridad dentro de la residencia.- declaró con cierta sonrisa algo conspiradora. No se podía saber si estaba de acuerdo con el proceder del sujeto o de lo persistente que era de seguir las ordenes de su hijo a cabalidad. – Concéntrate en darle el dato a mi hijo allá en Tokio. Si quieres, llévate a tu guardián.- Agregando.- Ahora tengo que reunirme con los miembros del consejo...- suspirando.- no se de donde sacaron la idea que Meiling y Shaoran se casarán...- yéndose por el otro lado.
-¡Eso está bien! Iremos a Japón...- dijo la joven Li emocionada.
-¿Qué quiere decir con Iremos? Usted se queda...
-¿Por qué tengo que quedarme?
-Porque es peligroso y usted no tiene poderes mágicos...- puntualizó el joven asistente.
-¡no me digas lo que tengo que hacer!- gritó ofendida Meiling - ¡¡Voy porque voy a Japón!! – gritando mientras se alejaba.- ¡¡No puedes hacer nada para evitarlo!!
Las personas que caminaban en los alrededores se volteaban a observar a ambos mientras Meiling continuaba gritando. A Ukio se le formó una gota en su cabeza.
-Lo siento- dijo Shingo a su lado apareciéndose de entre las sombras.- no pude esconder mi presencia de la señora de la casa... tampoco del gato de una de las Li.
-Está bien. No eres tan poderoso Shingo para esconderte de Ieran Li. – frunciendo su mirada.- Aunque me parece extraño... cualquiera creería que tratarían de atacar la casa Li, pero no ha sido así.- mirando a su creación con una seria mirada.- Es decir, saben que Shaoran Li no se encuentran, ingresan a media noche a matarle...- levantando un dedo ante cada evento.- Pero, no ha habido atentados en contra de las Li...- exhalando.- Algo muy extraño está pasando...
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Naiko observó con persistencia en su alrededor, solo notando el cuerpo de la falsa identidad de Ruby Moon, tumbada en el sofá leyendo una revista de moda al momento de salir de su recamara.- Hasta que por fin sales...- dijo Nakuru.
-Tengo hambre.- declaró la joven azorada.- ¿Y Eriol?
-Se fue temprano a su cita-almuerzo con la joven Tomoyo.-declaró Nakuru.- Y me dejó encargada de vigilarte...
-¿Qué? ¿Por qué?
-Por si se te ocurre escapar– dejando su revista a un lado y volteándose a mirar a la joven.- ¡En serio, no se que se te metió para fugarte de tal manera!, TU –señalándole con un dedo- no actúas de ese modo.
-No me escapé.- se defendió la joven abochornada.- Salí a pasear... me sentía...
-¿Atrapada?- viéndole asentir. Rió para decir.- ¡¡Todos llegamos un momento al sentirnos así!!
-Además: nada me pasó.
-Porque te encontré.- dijo con superioridad.
-No. Porque el joven que me ayudó anoche...- mirándole retomar la lectura de su revista, se sentó a su lado preguntándole.- oye ¿Lo conocías de antes?
-¿A quien? preguntó distraídamente.
-Pues al sujeto de anoche...
haciendo un ruido mientras mantenía los labios presionados uno contra otro, dijo.- hace mucho tiempo; ya. Siglos...
Naiko alzó una ceja interrogante declarando.- Anoche lo reconociste....
-Pura suerte....
-Oye ...
-Dejadlo así. Es mucho mayor para ti además - Declaró a Naiko recelosamente.- De seguro, no lo volverás a ver. Ahora, trata por todos los medios de no desafiar a Eriol por favor.- imploró.- Porque se atreve a mandarte a Londres de nuevo y me tendré que ir contigo... además que ya encontraremos alguien adecuado para ti –volviendo a su actitud de casamentera-
Naiko asintió notando como la joven se complacía y volvía a su lectura. Mientras caminaba nuevamente a su recamara, pensó.- Pero... ¿Por qué se comporta así? Es como si estuviera nerviosa al preguntarle de ese sujeto de cabellos grises... además –sonrojándose ante la idea- a mi no me interesa algo así.. no por el momento..
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Eriol se despedía cortésmente de Tomoyo mientras ambos estaban en la puerta de la residencia. A un lado de la vereda, se notaba el coche rentado perteneciente al sujeto de ojos azules.
-¿Estás segura que no puedo convencerte de que vengas conmigo al hotel?- preguntó Eriol.- De todas maneras, Sakura y los demás, estarán allí.
Pero Tomoyo, tan extraña como Eriol la notó en toda la tarde, respondió.- No. Necesito pensar todo lo que me has dicho.- retrayéndose para decir algo mas.- Muchas gracias por venir...- despidiéndose muy cortésmente.
Y es que Eriol le contó con lujo de detalles todo lo que Shaoran y los demás habían averiguado todo ese tiempo acerca del nexus y todo lo demás. Ella aun no comprendía porque creían que, ella o al menos Touya, eran amenaza. Lo que si es que aquel encuentro con aquel sujeto la había dejado algo alterada días atrás. Si no hubiera sido por Touya...
-Tomoyo...- dijo Eriol atrayendo su mirada.- En serio, estoy preocupado.- notándose en verdad en aquella condición.- Tu no eres del tipo que se retrae; pensé que nadie mas quería a Sakura como tu la quieres.
-¡y así es!- defendió la chica de ojos azules.- Pero... pero...- dudando.
Eriol tomó su mano, sonrojándole y declaró.- Debo de admitir que una de las cosas por las cuales quise venir a Japón, fue para tratar de recuperar el pasado. No he sido un santo Tomoyo y lo sabes. De seguro, las columnas sociales, te mantienen al tanto de mi vida... o aquella vez, que estuviste en Londres...
-Tu vida privada Eriol, me tiene sin cuidado – se defendió la elegante joven. Solo estamos aquí, porque, bueno, porque Touya insistió que viniéramos... mas nada.
-Se nota que tu y el hermano de Sakura, se llevan muy bien...- dijo Eriol con cierta desconfianza salpicada en su comentario.
Tomoyo miró un instante al sujeto para decir.- bueno, es mi primo primero. – dijo la joven.- Se preocupa por mi al igual que yo por él.
-lo siento.- dijo Eriol disculpándose. Añadiendo.- Me gustaría que me acompañaras: Estoy seguro que, Shaoran y Sakura les gustará verte...
Tomoyo respiró profundo declarando con cierto dramatismo.- Bueno. Considerando que quiero ver lo bien que se ven ellos dos juntos...- haciendo reír a Eriol.- Supongo también que Shaoran Li, estará feliz de estar con Sakura... ¿Sabes si aun son novios?
-No que sepa.- declaró Eriol contento de cambiar de tema – Solo se que, Shaoran estaba muy nervioso cuando veníamos de Londres... ¿Qué pasa?- notando el rostro de pícara de Tomoyo.
-¡si no son nada, pondré todo mi empeño para que Sakura y Li terminen juntos!
-¿Qué???- preguntaba Eriol sorprendido. Recordando los últimos eventos en la vida de su amigo, dijo.- Mejor no te involucres...
-¿Qué dices?- preguntó sorprendida. Según recuerdo, estimabas mucho a Li y le tenías cariño a Sakura. Según recuerdo, querías que Yukito y Sakura estuvieran juntos y terminaste por darte por vencido dado los sentimientos de Shaoran... ¿Cómo ahora me pides que no me interponga?
-Cómo escuchaste... mejor, ven conmigo y entenderás el porque ¿De acuerdo?- notándose finalmente convencida.
-Muy bien, Eriol: Iré contigo...- declaró la joven – Déjame ir a cambiarme.
Raci, vestida como una persona común y corriente y portando un bolso de piel de color negra, miró a su alrededor cuando en los pasillos se encontró con la figura del profesor de universidad. Este tardó un segundo en reconocerla mas aun, en el ambiente del campus. Sonrió indicándole a las dos jóvenes que le acompañaban que se quedaran detrás. Así obedecieron ellas, mientras se aproximaba a la figura del profesor.
-¿Qué haces aquí?- preguntó Fujitaka.
-Tengo mas de dos mil años de vida Kinomoto.- declaró Raci con cierta gracia en su voz ante todo el asunto.- ¡Sabes cuantas universidades he visitado!
-Recuerdo una: la de Hong Kong.- haciéndole torcer su mirada, mientras ambos se dirigía a un lado..- ¿pensaste lo que te solicité?
Raci suspiró diciendo momentos después.- por quien eres y por lo que representas.- suspiró.- Te ayudo. – sacando de su bolso una pequeña cajita de cristal – Es un aniquilador de Lucifers. Cuando encuentra que en su entorno muy cercano está por pasar algo, se activa solo...
-¿Qué hace?
-¿Tendré que explicártelo aunque el nombre lo diga todo? –sonrió ella para que comprendiera la lógica en el asunto. Viéndole abochornarse agregó.- Aunque para tu hija, sino le informas, será una sorpresa.- Viéndole fruncir su rostro.- ¿Quieres que actuemos incógnito?
-Si está en lo posible...
-Recibimos una llamada- dijo de la nada y conociendo el pasado del hombre agregó.- Ieran Li...- sorprendiendo a Fujitaka.
-La esposa de Hien.- viéndole asentir.- ¿Qué? ¿se enteró de lo que pasa aquí?
-Entre otras cosas. – respondió.- también que, su hijo, el actual líder, está aquí investigando...
-Mientras mas mejor.- Dijo Fujitaka.- Hablaré con los demás para ver si es posible, localizarlo. Creo que tengo el número de la casa de Hien en Hong Kong.-sonriendo ante los recuerdos.- y si su hijo, es el líder... entonces, no tenemos nada de que preocuparnos.
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-¡¡Es una alegría verte Eriol!!- decía Sakura emocionada a la par que era efusivamente abrazada por el joven inglés, ante la mirada rencorosa de Shaoran Li, la sonrisa sutil de Biatsi y la emoción palpable en Tomoyo.
-En verdad que si...- declaró Eriol sonriéndole al separarse de ella.- ¡Cuánto extrañé tu hermosa sonrisa Sakura! dijo el abochornándole.- Y estás mas hermosa....- mirando a Tomoyo,- Ambas lo están...
-muchas gracias Eriol.—dijo Sakura ya roja ante los cumplidos de su antiguo amigo de primaria.
-Ay Sakura que alegría verte- decía Tomoyo ahora ella abrazando a su prima.
-¡Mira que no sabía que estabas en Japón!- gritó la joven.- ¡¡me hubieras dicho para pasar a recogerte al aeropuerto!
-Fueron circunstancias extenuantes que me permiten estar aquí hoy...- Dijo Tomoyo y notando a Kero dijo.- ¡¡Hola Kero!!- acariciándole la cabeza (Kero estaba muy a su gusto mientras Tomoyo lo mimaba).- Estás muy lindo de la ultima vez que recuerdo...
-Es un gusto verte... por lo menos alguien me mima... mira que Sakura me ignora...
-¡Kero! No es verdad- se defendió una abochornada Sakura.
-¿Acaso no estamos aquí para algo importante?- interrumpió la voz de Shaoran que sonaba muy grave.- ¿o no Hiragizawa?- preguntó Li con mirada asesina a su viejo amigo ya que este aun permanecía muy cerca de Sakura.
Eriol miró conspiradoramente a Tomoyo y esta le devolvió la mirada. Sakura ni se dio cuenta de aquello. Biatsi lo observaba detenidamente pero en silencio. En ese instante se sentía fuera de su ambiente.
Después de todo, estas personas tenían años conociéndose. Ella era la intrusa en el grupo. Pero... solo porque Shaoran pretendía estar comprometido a ella delante de Sakura...
Biatsi observó como Shaoran tenía las orejas rojas. Sonrió un instante. Si Shaoran no llamaba eso celos, no sabía entonces nada de él.
-Si, por supuesto, siéntense...- dijo Eriol . notando la llegada de la joven Chang con unas carpetas en sus manos y Spinel sun en su hombro. declaró.- Ah, permítanme presentarles a Naiko Chang.- ella saludó con la cabeza muy formalmente. Tomoyo lo miró extrañado. ¿hasta donde Eriol daba conocer a aquella joven ciertos puntos de su vida? Era notable que, existía confianza entre ellos, tanto así que, sabía que era un hechicero y notable, sabía los verdaderos propósitos de Naruku y Spinel y por supuesto, ¿que hacía con ellos ahí, en Japón ? – y por supuesto, se recordarán de Spinel...
-Hola Kerberos...- dijo Spinel.- ¿Sigues de glotón?
-Suppi...- dijo Kero mirándole con desafío.- ¿Sigues de tonto odiando lo dulce???
-¡Kero!- dijo Sakura.
-Gracias Naiko- dijo Li a la joven una vez le pasó el portafolios y este observó detenidamente a Sakura al extendérselo a ella.- Esto... era de mi padre...- sorprendiéndole al momento de recibirla.- Fuera de las arcas del Consejo.... se nota que, trataban de esconder esta información...
-¿Qué dice aquí? – preguntó Sakura una vez todos estaban sentados en la sala de la cómoda suite. Abrió el portafolios notando lo escrito en ella.- Se un poco de chino, pero...
-La idea general... hace veinte años, ocurrió un hecho sin precedentes y sin antecedentes dentro de la raíz misma del consejo.- comenzó Li narrándoles.- uno de sus miembros, llamado Hamagoro, fue encontrado traicionando a los miembros del Consejo, repartiendo valiosa información de la concentración mágica de Hong Kong a unas personas que en un principio se pensó que se trataba de humanos...
-¿Cómo que en un principio? Me contaste de Hamagoro... que fue una traición... ahora dices que ¿No fue una traición común?
-Existen fuerzas y poderes mas allá de nuestra comprensión, convicción y por supuesto, conocimiento...- dijo Biatsi atrayendo ahora todas las miradas a ella.- Una de las cosas por las cuales, el padre de Shaoran pudo evitar esto, fue gracias a personas... personas cuyos nombres aun son anónimos para nosotros...
-Sabemos por lo ultimo que Reiko Ukio ha mandado de Hong Kong que, entre las arcas hay nombres.. .nombres entre los documentos de mi padre que, lo conecta a personas de Japón...
-¿Sabes quienes son? ¿tienen nombres?- preguntó Sakura.
Shaoran negó con su cabeza. – Los nombres nunca han sido revelados... – dijo Biatsi.- Lo que si sabemos es que, gracias a ellos, fue impedido...
-¡un momento!- dijo Tomoyo interrumpiéndoles.- Déjenme ver si entendí: alguien acusa a ese sujeto Hamagoro de traidor; el consejo o tu padre- señalando a Shaoran.- Entonces deducen personas de Japón lo que está a punto de suceder... ¿Entonces, como es posible que los de Japón supiesen lo que iba a pasar en Hong Kong y no ustedes?
-Alguien lo acusó...- dijo Shaoran.- Creí que eso había quedado claro...
-Pues no lo está- dijo Kero seriamente.- Si alguien aquí sabía lo que había de pasar, tendría que ser del mismo circulo de Hamagoro ¿no?
-¿Alguien revelaría los planes de su propio grupo?
-No...- dijo Kero.- Alguien lo acusó. Supongo que sería alguien con poderes mágicos...
-El asunto es que, a diferencia de Ahora, el Nexus se está abriendo.- dijo Eriol – ya de por si, es peligroso...
-¿creen que, quien lo previno aquella vez estará... – comenzó a preguntar Tomoyo.-Pues por algo, no lo sabían ustedes ahora...
-Peor aun.—dijo Eriol atrayendo su mirada añil. – Mas critico que eso, los documentos que registraban el juicio de Hamagoro y mas tarde, su exilio no estaban en las arcas ni en los registros del Consejo. Fueron hallados entre las pertenencias personales del padre de Biatsi...- señalando a la joven a un lado.- No creo que, tenían propósito de nunca aparecer...
Sakura y su mente comenzó a trabajar. Recordó la parte en su sueño que, Reiko hablaba con el sujeto que se parecía a Shaoran. Por un segundo Eriol y Shaoran notaron su distracción pero no le prestaron atención dadas preguntas que Tomoyo y Keroberos realizaban...
-¿qué le podría decir a mi esposa? ¿o a mi padre? Que la victima directa sería yo. ¿por tratar de abrir el nexus? No, Reiko. No le diré nada a ella o al resto de mi familia.- Mirándole con seriedad.- si es posible, borrar todo indicio del proyecto Nexus...
-Pero... Hamagoro contaba con el apoyo de la mayoría en el Consejo.
-Excepto el líder.- declaró el hombre mirándole seriamente.- Simplemente, ese proyecto es una locura: Intercambio de contaminantes para expulsarlos del planeta.- sonando incrédulo.- Creo que, eso no es cierto. Hamagoro es alguien muy ambicioso, Reiko: Peligroso, también.- bajando un poco mas su voz.-Hamagoro lo que quiere conseguir es, el máximo poder.
-Señor: ¿No cree que es cierto lo que dice? ¿qué lo podrá lograr en un futuro con o sin nosotros?
-Si no somos nosotros, alguien mas lo detendrá.- dudando esto.- Si es que, logra volver después del exilio...
-Tiene seguidores...
El hombre suspiró. En verdad conocía a Reiko: A Sakura, le daba la impresión que era alguien de suma confianza de él. Un verdadero amigo, sobre todas las cosas; incluso sobreponiéndole lo de ser parecía, su asistente.
-¡Valor Reiko!- declaró el hombre colocando sus manos sobre sus hombros.- Sabremos enfrentar cualquier adversidad cuando el momento llegue.
-Pero recuerde que, Hong Kong no es factible para abrir el nexus.- Aclaró su sirviente.- dejó de servir...
-Muy cierto.- declaró el hombre.- y lo hemos expulsado, también es verdad... pero por lo menos, no habrán mas fenómenos inexplicables en mucho tiempo.- sonrió.- Para el momento (y si acaso), que alguien se le ocurra abrir el nexus, será posible que, esta vez, el libro esté con nosotros.
-El libro de Clow- sorprendiendo aquella revelación a Sakura.- Pero... ¿No está acaso en Hong Kong?- viendo al hombre negar.
-No. Lo entregué mucho tiempo atrás...
-Pero señor ¡Su padre le dijo que nunca se separara de ese libro!
-Hemos librado una batalla esta noche. Y pudimos detenerle. ¡Que hubiera pasado si, no hubiéramos encontrado y enjuiciado al exilio a ese sujeto!-notando aun la cara de preocupación de Reiko, añadió.- Tranquilo: cuando mi hijo tenga la edad correcta y ocupando mi posición en el Consejo, mandaré a buscar el libro (o iré yo mismo)...- sonriendo.- Ya me gustaría ver a mi viejo amigo...
-no debió de pasar- dijo Sakura en un susurro. Con aquel gesto, atrajo la mirada de Eriol que estaba frente a ella, sentado del otro lado.
-¿Sakura?- preguntó Eriol atrayendo en ellos dos la atención de los presentes. Ahí notó como sus manos estaban apretando sus piernas.- ¿Sakura? ¿Estás bien?- levantándose preocupado ante la condición en "Trance" de su antigua amiga.
-¡¿Sakura?!- dijo Li acercándose por igual mientras Eriol se arrodillaba delante de ella y miraba sus ojos con consternación. Colocó sus manos sobre las de la Maestra de las cartas y se pudo notar la concentración mágica en su ser. -¿Qué te pasa?- notándose angustiado ante su condición.
-¿Se encuentra bien?- preguntó Naiko acercándose a la par con Biatsi. Tomoyo ya estaba a su lado, a la par que Eriol y Li.
-Biatsi: busca un poco de agua, por favor.- dijo Eriol amablemente a la joven de ojos miel quien hizo caso (para sorpresa de Li).- Parece que, esta muy sumida en su interior...- tocando sus cabellos y notándose su ansiedad. Viendo como la chica Reiko regresaba segundos después con un vaso con el liquido.
Pero en la mente de Sakura, se observaban los eventos perecederos a su sueño de siempre...
-Pero... temo por quien tenga la labor la próxima vez que se abra.- escuchaba Sakura la voz del sujeto. – Es peligroso y ...
-¿Qué pasará entonces... con todo?- preguntó Reiko.
-El mundo dejará de existir como lo conocemos... solo un gran poder, una gran energía podrá cerrar lo que se abra de ese lugar... que hayan personas del Nexus aquí, no facilita las cosas... tratarán de eliminar todos aquellos que, podamos impedirlo de nuevo...
-¿Le avisará a él?- preguntó Reiko.
-No... no le avisaré. – decidió.- El pobre tiene suficiente con ser de donde es. De haber traicionado a los suyos y sobre todo, de interrumpirle los planes al impedírselos de nuevo... dejémoslo tranquilo... además... tiene una familia al igual que nosotros en quienes pensar... Y sobre todo, - frunciendo su mirada- Me advirtió que podría salir de allí... no me gustó lo que me dijo. La humanidad no está lista para enfrentar tan horribles criaturas... sanguinarias, sedientas y mortales... aun no comprendo como pudo sobrevivir su gente allá...
-por eso es que quieren abrir el nexus... para absorber lo nuestro e intoxicar al mundo.... –analizó su asistente.- Muy bien señor...- dijo Reiko.
-Además, no tenemos porque preocuparnos. Hamagoro está exiliado y dudo mucho que los contacte de nuevo...
-Pero Hamagoro juró vengarse de nosotros... ¿No teme a eso?
-No tengo miedo a venganzas...- aseguró Hien. – Tranquilízate que nada pasara... te lo prometo...
Sakura parpadeó un par de veces ahí notando primeramente los ojos cafés muy cerca de su rostro. Ahí notó que no estaba sentada como antes. Sino, mas bien, acostada. La luz brillante que ingresaba por la ventana la hizo pestañear nuevamente. – Despertaste...- dijo la voz de Shaoran Li. Ahí notó lo cerca que estaba de ella, y que se le veía preocupado.
Sencillamente el sujeto era apuesto.
-¿Sakura?- escuchó de Kero quien apareció volando al lado de la figura de Li.- ¿Te encuentras bien?- viéndole asentir algo atontada aun. Ayudada por Li se incorporó sentándose.
-¡Miren: Despertó! dijo Spinel, Ahí Sakura vio que los presentes se alejaron un poco para dejarla respirar.
-¡Sakura!- gritó Tomoyo acercándose y notándose preocupadísima por su amiga.- ¡Nos diste tremendo susto!
-¿Estás bien?- preguntó Reiko notándose inquieta también. Sakura no asintió pero miró a Shaoran fijamente.
El le miraba con preocupación no oculta para los presentes y aun le aferraba en sus brazos.
Pero Sakura no articuló palabra. Solo se llevó de sus impulsos abrazando a Shaoran y aferrándose a su cuello, mientras ocultaba su rostro en el cuello de su camisa. Cuando Shaoran notó aquello se puso rojo en micro segundos. Pero la voz de ella, impidió que su timidez se apoderara ahora de la tensión que se respiraba en la habitación.
Shaoran escuchó (mientras miraba a Eriol buscando una explicación por su reacción), decirle.- Tu padre...- Shaoran se sorprendió al escuchar aquello..- Es tu padre quien veo en mis sueños...- hipando.- Y Reiko... ellos... ellos sabían que... probablemente, los matarían...
-Explícate Sakura...- pidió dulcemente el jefe del Consejo.
-Dijeron que solo un gran poder existente, podría cerrarlo una vez se abriera... cosas... cosas horribles saldrán de allí y matarán a las personas...- dijo ella- Por eso, creo que mataron a tu padre... para impedir que el los detuviera o ... tal vez, para proteger a tu familia...
-Sakura...-dijo Shaoran sorprendido. El nunca le había referido que su padre fue muerto. Siempre y cuando hablaba del tema, le había dicho que, solo murió cuando era muy pequeño. Biatsi le miraba asombrada.
Ella pocas veces, soñaba con sus padres. Esta chica quien nunca había conocido a Hien Li o a su padre, ahora decía que soñaba con eventos que ella misma siendo hija de una de las victimas, decía siempre no recordar, dada su poca edad en ese entonces.
-Ellos hablaban...- dijo ella continuando.- ... el sujeto que les dijo era del Nexus... sabía lo que pasaría... les avisó quien era el traidor y lo exiliaron... que se llamaba Hamagoro quien traicionó a tu padre... pero no creo que, haya sido lo ultimo que supieron de él...
-¿Qué mas viste?
Fue Eriol quien preguntó. Tomoyo estaba estática, con sus manos en su pecho al notar la inquietud y desesperación que se apoderaba de Sakura, parada junto a Naiko (Quien tenía los ojos dilatados ante lo que pasaba allí). Spinel estaba al lado de Kero en la mesa, escuchándolo todo.
-Hamagoro, juró vengarse...- dijo Sakura.
-Nunca hubo pruebas de cómo nuestros padres murieron, Shaoran...- dijo Biatsi.- Siempre supe que mi padre fue asesinado... con mi madre... pero... el tuyo...
-Mi madre me reveló la verdad después de volver de Japón... me dijo los riesgos que corría al juramentarme como líder del Consejo... –abrazando ahora a Sakura y dijo con suave voz.- No te preocupes... ya pasó todo...
Ella se calmaba bajo su tibio arrullo.
-ellos fueron, muy valientes- dijo Sakura tranquilizándose.- muy valientes... no prestaron mucha atención a la amenaza de venganza...
-Li: Tal vez sea coincidencia- dijo Eriol seriamente. Notaba la mirada de desafío de su mirada. Sabía que lo mas seguro, este se concentraría en averiguar sobre Hamagoro; si aun estaba vivo y si en verdad tuvo algo que ver con la muerte de Reiko y su padre. –Debemos de concentrarnos en lo importante: Detener el nexus y encontrar aquella fuente de energía y poder que habla tu padre...
-Y tratar de encontrar aquel hombre de quien habla el señor Li- dijo Tomoyo atrayendo sus miradas- Dijo que era de Japón... Es posible que, se conocieran aquí...
-Buena idea- dijo Eriol aceptando la idea de Tomoyo.- Tal vez, el señor Li en efecto lo conoció aquí...- atrayendo las miradas de Sakura (Quien aun estaba abrazada de Shaoran y este no se notaba muy preocupado por separarse de ella) y de Shaoran.- ¿Sabes acaso si tu padre habría pasado algún tiempo aquí en Japón?
-No creo que mi madre mencionara nada- dijo Li.- Pero no se pierde nada con preguntarle.
-Si tenemos suerte con eso y el tiempo que estuvo aquí en Japón, podremos saber sus contactos... o amistades que hizo aquí... tu madre tiene que saber- dijo Eriol mientras Shaoran asentía. – por lo próximo, comunicarse a Hong Kong y averiguar que tiempo estuvo tu padre aquí y haciendo que... así sabremos quien es el contacto de Japón... y sobre todo, si en efecto Hamagoro tuvo que ver con la muerte de sus padres- ahora mirando a Biatsi y esta notándose ciertamente ante los eventos, afligida.- Por lo pronto... Sakura debe descansar...
-Y yo debo de volver a casa- dijo Tomoyo atrayendo la mirada de Eriol.- Sakura. Si quieres, me quedo contigo en tu casa...
Sakura asintió.
-Es mejor.- dijo Shaoran.- Así ella no está sola...
-¡¡Ella no está sola!!- gritó Kero ahora interponiéndose entre ambos.- ¡¡Que tanto la abrazas!!- vociferó para poner a ambos rojos y haciendo sonreír a Eriol: habían estado tan ocupados con lo ocurrido que no se detuvo a pensar lo cómodo que Shaoran se veía con la pequeña Sakura en sus brazos.- Sakura estará bien cuidada por mi..
-Y Yue. – dijo Eriol y mirando a Tomoyo dijo.- Te llevaré a tu casa, para llevarte a donde Sakura....
-no te molestes...- se azoró la chica de ojos azules.
-No es molestia.- dijo con una sonrisa Eriol. Tomando la chica por un brazo dijo a Shaoran.- nos vemos aquí luego...- marchándose después de Tomoyo despedirse (Y aun dudar de dejar a Sakura a solas y asegurándole que, estarían pronto en su casa), ambos y dejando a los demás allí.
-¿No quieres algo de beber?- preguntó Naiko a Sakura al notarla tan pálida. – aquí hay agua...
-No. Estoy bien...- dijo Sakura notando hasta ese momento la presencia de Biatsi y ahí pensó que ella estaba en todo ese tiempo en brazos de Shaoran. Bajó la cabeza apenada con Biatsi. Pero la joven Reiko estaba pensando en otras cosas que la chica de ojos verdes en brazos de su "prometido".
-Será mejor que la lleve a casa- dijo Shaoran preocupado. Notando a Biatsi preguntó.- ¿Quieres que te lleve a casa?
Biatsi los observó a ambos y dijo.- No, gracias—notándose diferente a su actitud normal. Tomando su bolso dijo saliendo de allí.- Tengo cosas que hacer... –marchándose sin despedirse.
-Lo siento- dijo Sakura seriamente y atrayendo la mirada de Shaoran.- creo que es mi culpa...- Shaoran no comprendía aquello ¿Cómo podía ser culpa de Sakura? – que ella está así... lo siento... solo... llévame a casa, por favor...-tomando a Kero y saliendo rápidamente de la suite...
Shaoran suspiró profundamente y su confusión fue notada por Naiko. Ella se acercó de a poquito y colocándose a la par del sujeto le miró con una sonrisa traviesa en sus labios para decir.- Sería mas fácil si lo aclarara todo... –colocando sus manos en su propia espalda.
-¿De que hablas?
-de sus sentimientos...- sonrió ella aun mas.- La verdad, no es tan difícil darse cuenta que, ella le importa mucho...
-¡AH!- dijo Shaoran enrojeciéndose rápidamente.- ¿Acaso Hiragizawa se ha puesto a inventar cosas???
Riendo por lo bajito declaró.- No hay que ser detective para notarlo... – y agregó.- además, parece que la joven Reiko siente algo por usted- sorprendiéndole.- hay que verla con que cara se marchó... después de acaparar a la joven Kinomoto, no me sorprende... ahora, la pregunta es ¿Qué piensa hacer usted?
Shaoran no le respondió. Verdaderamente, notaba que la influencia de Eriol o su guardiana, causaban efectos contagiosos en una joven que la conoció meses atrás como alguien muy recatado y algo distraída.
Sin siquiera mirarle por segunda vez, se marchó de allí dejándole sola con Spinel quien se aproximaba de la habitación de al lado.- ¿se marcharon todos?- notando la sala vacía.
-Si.
La miró como se aproximó a la ventana y observaba hacía abajo: Pisos abajo la gente salía y se montaba en vehículos, taxis y demás mientras los transeúntes caminaban de allí para allá.
-Ni pienses salir de nuevo sola- dijo Spinel adivinando su pensar.- Si Eriol o Nakuru se enteran que saliste sola...
-No pensaba hacerlo sola...- dijo ella sonriendo sutilmente.- Hay alguien que quiero encontrar...
-¿De que hablas? ¿a quien?
-Tu me acompañarás.- tomándolo por sorpresa y introduciéndole en un bolsito de flores en satín que iban a juego perfecto con un suéter cuello chino que tenía en ella, cortesía de las tantas cosas compradas por Nakuru pero que después de tenerla, las arrojó a la pila de deshacer pues ya no le agradaba el color y Naiko tomó notando que le quedaba mejor a ella.- Vamos...- cerrando el bolso.
-¡Oye: Esto es secuestro!- gritaba desde el interior del bolso.
-Deja de quejarte- tomando las llaves de la suite.- Con toda suerte, de seguro lo vuelvo a ver...- marchándose del lugar.
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Desde la cúspide de la torre de Tokio una chica estaba sentada en uno de los hierros mientras el viento daba en contra de su cara y notaba el agitado vivir de la ciudad metrópoli. Su túnica era de color violeta y sus ojos denotaban cierta atención a todo lo que ocurría mas abajo.
-Amelie...- dijo una voz materializándose una mujer mas adulta que ella (o eso se notaba). Sus cabellos eran castaños y sus ojos negros intensos.- Ganossa pide por tu presencia...
-Y tu eres su lacaya que tiene que obedecerle en todo...- dijo con rabia Amelie.
-No te metas conmigo...- dijo ella desafiándole y en una de las vigas, se sentó mirando donde ella miraba.- ¿Qué observas con tanta atención?
-A los humanos...- dijo con voz relajada.- Son tan complejos y a la vez tan patéticas criaturas... sin un propósito... solo llevándose por sus sentimientos...
-¿Acaso no lo hacemos nosotros?
-Si. Pero cuando tenemos que matar no lo dudamos... ¿o si?
Ella le miró diciendo.- En mis 300 años de vida, solo he tenido una contrincante digna de su salvación... y claro, esto es porque tiene mas años que yo, viva...- suspirando.—de todas maneras, Ganossa quiere que hagamos un trabajo por el. Y de esa contrincante...- riendo.-ya veré como la derroto. Su gran defecto es su debilidad por los humanos...vive entre ellos... pero no lo es.- frunciendo su mirada- No se como lo hacen...
-Hinomoto lo hizo...- dijo Amelie.
-Aun piensas en él.- haciendo un sonidito con su lengua.- Olvídalo... mejor para ti. Además, después de que todo acabe... no sobrevivirá y deseará habernos seguido...
-Sus descendientes...- frunciendo su mirada- Pudieron ser los míos...- apretando sus puños.- no lo entiendo...- alzando aun mas su voz gritó.- ¡¡No lo comprendo!!
-Muchacha ingenua...- dijo Soguire decepcionada.- Lamentablemente eres tan débil como ellos...- señalando metros mas abajo.
-¡no soy como ellos! – desafió—Y Hinomoto pagará con aquello que mas ama...- mirándole con odio a ella.- Lo juro...
-Bien- sonrió Soguire no dándole importancia a todo aquella crisis de identidad de Amelie, agregando.- ¿Entonces, vienes conmigo o no a la asignación de Ganossa?
-que lo haga él mismo Soguire. No tengo deseos de hacer nada por él...
-Amelie... ¿Te atreverías a desafiar a Ganossa?- preguntó ella y no respondiéndole agregó.- Bueno, como sea... quiere que busquemos a Hamagoro... ya la hora se acerca...
-Ve tu si quieres- dijo Amelie poniéndose de pie sin mirarle.- no me interesa nada- desapareciéndose de allí.
Soguire miró por donde la joven se desmaterializó diciendo en un susurro.- Ten cuidado Amelie...- sonriendo.- O perderás el favor de Ganossa... –desapareciendo también.
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Reiko al salir del hotel, no buscaba un destino fijo; pensaba en Shaoran y Sakura juntos. Como este le abrazaba tratando de confortarla; pensó aquello y sintió un enorme vacío en si misma. Era notable que Shaoran quería a Sakura y que la única razón para no estar juntos, iba a ser el mismo Shaoran.
Pero caminó por mucho tiempo, pensando que tal vez, hasta que no completara su propósito, nunca se iría de Tokio. Miró su alrededor con indiferencia y cierto desprecio.
Y su propósito era Shaoran Li.
El momento se acercaba.
-¿Reiko Biatsi?- escuchó a un lado observando la guardiana de Eriol, con bolsas en sus manos. Parecía que, estaba de compras de nuevo.- ¡¡Hola!!- se acercó a ella.
-Hola ¿de donde vienes?
-Pues de comprar... – dijo ella sonriéndole- Aunque para serte sincera, no hay nada mejor que andar con muchas bolsas para atraer a hombres para que te ayuden...- enfatizando su sonrisa.- ¡¡Son unos caballeros innatos!!
-Parece que, te diviertes...
-¿Qué tal si salimos a pasear aun mas?- dijo colocándole dos bolsas en contra de su voluntad (sin preguntarle primeramente si la acompañaría).- Conozco una zona perfecta en el distrito de Tomoeda que, puedes comer y también comprar en ganga... ¿qué tal?
-Bueno... en realidad...
-¡¡nada de eso!!- dijo Nakuru sonriéndole.- Vas conmigo y punto....- jalándole por un lado. Biatsi se dio por vencida: De todas maneras, no la haría cambiar de parecer.
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Touya caminaba tranquilamente al lado de Yukito por el antiguo parque Pingüino. He ahí, pensaba Touya, una zona que no importaban los años, nunca cambiaba. Le gustaba aquello.
Tampoco los niños jugando en el lugar parecían muy interesados en los eventos que ocurrían en el mundo.
Parecían tomarse todo el tiempo del mundo para llegar a su hogar.
-Aun no has hecho preguntas- dijo Yukito con su acostumbrada paciencia y humor al primogénito Kinomoto.- tal pareciera que, nada de lo que se te ha dicho, te sorprenda.
-Yuki...- dijo Touya mirándole finalmente - ¿Sabes acaso por qué hemos permanecido amigos todos estos años?
-Supongo por las cosas que tenemos en común, entre nosotros...
-¿Cómo que?
-Bueno, primeramente está Sakura; tu eres su hermana y estoy encargado de protegerla y obedecerla ante todo. Es mi ama... estudiamos juntos y nos preocupamos el uno por el otro...
-Y porque con personas normales no encajamos nunca.- Dijo Touya atrayendo mas aun la atención de su antiguo amigo.-Nunca ingresamos a un equipo por gusto. Practicábamos deportes como requisito de la escuela... nunca nos involucramos a ningún club, o grupo...
-¿Lo dices por tu habilidad de ver espíritus?
Touya no negó. Tampoco admitió. Solo dijo.- Porque no encajo.- declaró.- ¿Sabes lo incomodo que me siento con personas que no sean tu, mi hermana... mi padre?
Yukito negó con su cabeza.
-Incluso para mi, es difícil establecerme en una relación simplemente porque me lo encuentro de lo mas absurdo lo mas simple. en lo mas posible, trato hasta de alejarme de personas comunes. No me atraen las personas comunes...
-Touya. Eres medico. Te importan las personas y haces una labor sorprendente para salvarlos...
-Era medico. Era...- repitió. -¿Sabes? Uno de los sujetos que atacaron a Tomoyo en Venecia... ¿Recuerdas que te conté que tenían magia en ellos?
Yukito asintió.
-Este sujeto sabía exactamente lo que siento...- mirando a su amigo y luego al suelo mientras caminaban.- Exactamente... me dijo que, me sentía incómodo entre las personas... ¿Cómo demonios él sabía eso? Su hablar me ponía nervioso...
-Me alegra que...- dijo una voz mas delante de ellos y sorprendiéndoles.- me recuerdes...
Yukito notó inmediatamente de quien se trataba. Touya se puso rígido y su rostro de frunció ante su presencia.
-¡TU! ¿Qué demonios quieres?- gritó Touya mirando a su alrededor. En aquella zona del parque, no habían inocentes.
El sujeto sonrió de lado y se acomodó su capa.- No se que me agrade mas de ti: si tu rudeza o tu voluntad...
-Déjeme en paz y lárguese...
-Estoy aquí para responder tus dudas- dijo con una sonrisa sutil en sus labios.- Es todo...
-¿Mis preguntas?
-Las que tienes... y no digas que no te interesa nada que pueda decirte. – acertando en ese punto.- Tienes preguntas...
-¿Cómo rayos sabes eso?
-¿por qué no vienes conmigo y lo averiguamos?- dijo el sujeto dando un paso adelante. –de todas maneras, pronto, nada quedará en este mundo que te ate a él...
Yukito en ese momento y notando el peligro que podían correr ambos, involuntariamente, se convirtió en Yue y este con su magia, le apuntó al sujeto en su pecho con su arco.- Si se acerca mas, juro que dispararé...
Tsen observó con interés aquello. Miró nuevamente el rostro de Kinomoto. Te ocultas tras las sombras de híbridos... – dijo Tsen a Touya y luego a Yue.- Apártate que esto no es tu asunto... –dando un paso; un paso que, Yue le disparó a sus pies con su poder.
-No fallaré otra vez- dijo Yue mirando con rencor al sujeto.
-Y yo no te dejaré vivo si vuelves a hacerlo- dijo perdiendo la sonrisa de sus labios.
En ese momento, la voz de -¡¡Oye!!- detrás de Touya y Yue. El primero miró detrás notando las figuras de Naruku Akizuki y otra persona que se acercaba.
-Yo que tu tuviera cuidado.- dijo Touya de mala gana.- Es otra Híbrido... y esa si que es peligrosa cuando se enoja...- recordando el día del Juicio de Sakura con Eriol años atrás.
-No le tengo miedo a los híbridos...- dijo Tsen mirándoles a ambas al colocarse al par de Touya. Biatsi observaba atónita la figura de Yue aun apuntándole al sujeto. La mirada de Tsen fue a ella diciendo.- O de basuras...- haciendo que Biatsi le mirara con aborrecimiento.
-Entonces si no nos quieres tener miedo.... lárgate...- dijo Nakuru notando que sus vestimentas no eran de personas comunes. Parecían túnicas o batas de color gris oscuro.
El sujeto Tsen sonrió lanzando un rayo a la figura de Biatsi quien no tenía poderes activos para evitar ese tipo de ataque. Pero Yue notó lo que planeaba colocando su escudo y él mismo para proteger la chica. Esta esperaba el ataque y cerró los ojos. Cuando los abrió, notó a Kinomoto a su lado igual de protegido por el escudo de Yue. Este mantenía unos centímetros fuera del suelo, con su poder alzado.
-Vaya, lo subestimé... pero, no estarán por siempre para protegerlos...- riendo.- Ya pronto, no quedará nada para proteger... una vez logremos contactar al pacto... nada quedará...- mirando a Touya dijo antes de irse- Mándale mis saludos a tu padre... – desvaneciéndose.
Biatsi se incorporó auxiliada por Nakuru y Yue notó como la mirada de Touya, se llenó de incertidumbre.
-¿Estás bien?- preguntó Nakuru a Biatsi y esta asintió. notando la presencia de Touya, dijo eufóricamente lanzándose a sus brazos.- ¡¡¡¡WOW Touya.!!! ¡¡¡¡Que guapo estás!!!! – no percatándose del estado del sujeto.
-¡Nakuru!! dijo Biatsi algo aturdida y notando que el sujeto trataba de quitársela de si.- ¡¡Baja de su cuello Nakuru!! ¿No ves que está lastimado?
-¡¡¡AY que guapo estás!!!- repetía la falsa identidad de la guardiana haciendole caso omiso a la solicitud de Reiko.
-¡Mujer: suéltame!! –dijo una sola vez, sacándose a la joven quien le observaba con obsesión y corazones en sus ojos.
Yue se transformó en Yukito y ese preguntó.- No capté mucho... pero... – guardando silencio un segundo aclaró.- Si, Yue lo dice ¿Acaso mencionó a tu padre?
Pero Touya no les respondió. Ahí fue que Nakuru notó la incertidumbre que aparecía en el ambiente. Biatsi solo observaba con intensidad el punto de donde el sujeto desapareció.
------------- Continuará...
¡Hola a todos! Feliz año Nuevo. Esta historia me ha salido mas complicada de lo que debería. ¡Fujitaka conoce a los hombres malos! ¿Son hombres? ¿qué son? Bueno no soy la única ni la última que se hace esa pregunta. Touya tb.
Nada es lo que parece en esta historia, como podrán entender en los siguientes capitulos. Por supuesto, no adelantaré nada para no arruinar la sorpresa pero, ¡Habrá problemas en casa Kinomoto! Problemas entre Fujitaka y sus hijos, si no habla pronto.
¿qué pasarán con los demás? Bueno, ¿por qué no se quedan alrededor y lo averiguan? O mejor aun. Mándenme mis reviews y me inspiraré para los siguientes capítulos, pues ¡Parece darme bloqueo de autor!
Comentarios, dudas, Tomatazos y demás, a y
Y a los que me han escrito por esta historia ¡muchas gracias! Agradezco cada uno de sus mensajes y espero que disfruten grandemente estos dos capítulos actualizados ¡Finalmente!
¡Hasta la próxima!