MI MAS GRANDE ANHELO
POR: § Alexeigirl §
CAPITULO 4: VELADA
Yamato contemplaba detenidamente el reloj mientras esperaba la llegada de Sora en el bar del Hotel Konoha, uno de los mas exclusivos y elegantes de Tokio. Estaba nervioso, aunque tratara de disimularlo, pues ya eran las nueve de la noche y su acompañante llegaría en cualquier momento…
"…somos adultos y podremos manejarlo de una forma madura…"
Le había dicho con toda la tranquilidad del mundo, y ahora se reía de sus propias palabras…
- Disculpe caballero ¿puedo servirle algo?...- una de las camareras se acerco con insinuante coquetería, inclinándose ante la mesa lo suficiente para dejar su escote a la vista…
-Vodka por favor – respondió sin ponerle demasiada atención a los encantos de la chica, que regalándole una sonrisa, se marcho a la barra para cumplir con el encargo…
Volvió a mirar el reloj pensando que quizás había llegado demasiado temprano, pero no era así, ahora marcaba las 9:02 pm
-Tranquilo Yamato, todo estará bien…es Sora, somos amigos y sobre todo, adultos, no hay razón para ponerse nervioso…- se dijo mientras con aparente calma daba un vistazo al lugar…Noto que varias miradas femeninas estaban puestas en el, siendo las mas atrevidas las que le sonreían o saludaban con aire seductor…Bueno, al menos estaba seguro que su aspecto causaba buena impresión…
-Aquí esta su orden…si se le ofrece algo mas…lo que sea…llámeme, estoy para servirle…-
El tono de la moza había sido mas que sugerente, así qué no pudo evitar sonreír mientras daba un sorbo a la bebida y miraba de nuevo el reloj…cuando una esbelta figura cruzo la puerta provocando, si fuera completamente posible, que se le cayera la boca y sus ojos se abrieran de par en par…
Caminaba con elegancia y segura de si misma, su cabello rojizo como el fuego rozaba sutilmente sus hombros desnudos casi como una caricia de seda. Llevaba un vestido azul que se ajustaba perfectamente a su delgada figura haciendo resaltar sus delicadas y bien contorneadas formas y mostraba de forma seductora su espalda descubierta dejando ver su aterciopelada piel…
-…Perfecta…- pensó Yamato mientras sentía como sus manos comenzaban a sudar…
Estaba nerviosa, pero se sintió aliviada al ver que Yamato la esperaba en el Bar, pues había pensado, que posiblemente se echaría a correr en el ultimo segundo, pero el estaba ahí observándola fijamente con sus profundos ojos mar, eso la hizo estremecer, y el hecho de que tuviera que atravesar el lugar bajo la atenta mirada, no solo de el, si no de otros hombres que seguían atentos sus pasos, la hicieron ruborizarse, pero estaba satisfecha de esa reacción, sin duda las horas que había pasado frente al espejo habían valido la pena.
-Hola…- saludo sonriente al llegar a la mesa donde Yamato, absorto por su presencia, la esperaba ya de pie…
-…Ho…Hola…- mas que palabras, de su boca había salido un balbuceo apenas coherente aunado a un torpe silencio; finalmente sacudió la cabeza y sonrió diciendo
-Lo siento, me estoy comportando como un adolescente en su primera cita, pero es que me has dejado sin habla…Sora, estas bellísima – le ofreció entonces una rosa blanca que había comprado de camino al hotel, Sora la acepto y aspiro su aroma…
-Gracias, tu también luces estupendo…- Yamato sonrió galantemente, agradeciendo el cumplido. Y antes de que se formara otro silencio, le ofreció caballerosamente asiento…
¿Quieres tomar una copa antes de que vayamos a cenar?...
-Claro, un Whisky estaría bien…- Sora se sentía ansiosa y asustada al mismo tiempo, esa noche no era como cualquier otra, así que un poco de alcohol la ayudarían a calmar sus nervios.
Yamato busco con la mirada a algún mozo que los atendiera, y al percatarse, la chica que lo había estado atendiendo, corrió sonriente a su mesa, aunque a Sora le dedico una fulminante pero discreta mirada…
-un whisky doble por favor…
-y otro vodka si no es mucha molestia…
Después de dos rondas y hablar de asuntos sin importancia, Yamato decidió abordar la razón por la que estaban juntos esa noche:
-…y ¿Cómo te sientes?...- Sora exhalo profundamente, y con una sonrisa nerviosa dijo:
-Bien…nerviosa…pero bien, supongo que es normal…pero estoy bien…
-Te entiendo…es como si fuéramos dos jóvenes vírgenes en su primera vez ¿no?...
-Cierto…es un poco extraño ¿no crees?...
-Tienes razón…y a decir verdad, también estoy nervioso, es la primera vez que no se como comportarme…normalmente salgo con mujeres que no me importa si las veo o no después de acostarme con ellas…- Sora lo miro tan fijamente que Yamato tuvo miedo que estuviera mal interpretando sus palabras…
-Lo que quiero decir…es que quiero seguir a tu lado después de esta noche…y aunque todo esta planeado para que al final nos acostemos…de ninguna forma puedo mentirte Sora, y fingir que estoy absolutamente tranquilo y que no causas ningún efecto en mi y mañana todo será como si nada hubiera pasado…seré muy sincero…esta noche estas simplemente preciosa y, quiero estar contigo…y deseo que tu lo disfrutes tanto como se lo haré yo…-
Sora agradeció la suave iluminación del Bar, y esperaba que Yamato no se percatara que su rostro estaba completamente ruborizado, y no solo por que sus palabras habían tenido efecto en ella, si no también por sus ojos que brillaban intensamente mientras la miraban. Tomo un trago mas para tranquilizarse bajando la vista incapaz de mirarlo sin sentir una extraña sensación recorriéndola…
-te he molestado ¿verdad?...lo siento…yo…
-No estoy molesta…¿Cómo podría?... al contrario, me siento muy halagada, cualquier mujer se sentiría así si un hombre dijera esas palabras en la forma en que lo has hecho…y la verdad…no se si es por el alcohol…o por que te vez terriblemente atractivo esta noche…pero…�¡soy humana caray! también quiero estar contigo…
Yamato sonrió satisfecho por esas palabras, así que tomo gentilmente la fina mano de Sora y deposito un suave beso en ella, para después usar una de sus seductoras y traviesas sonrisas…
-así que…¿crees que estoy terriblemente atractivo hoy? – bromeo el, a lo que Sora no pudo evitar sonreír
-un poco…aunque también dije que podría ser por el alcohol ¿recuerdas?
-Vaya…así que no piensas que estoy muy Guapo, y mira que me esmere especialmente para ti ¡VAMOS SORA! Estamos en confianza, puedes decirme que te parezco el hombre mas atractivo del mundo…mira que a mi no me molesta…
¡Yamato eres un Narcisista!
-Eso si que no…se lo que tengo, que es muy diferente…
-Mejor vamos a cenar ¿de acuerdo?...
Aunque el menú del restaurante contenía los mejores platillos nacionales e internacionales, pidieron algo sencillo como primer plato y una botella de vino para comenzar con aquella cena.
Ambos se sentían mucho mas relajados, así que la conversación fluyo con naturalidad. Yamato, mientras charlaba, no dejaba de vigilar cada movimiento de su acompañante, le parecía increíble como aquella niña de aspecto poco femenino se había convertido en una hermosa mujer…sin duda, el tiempo hacia maravillas…pues en su vida había visto mujeres hermosas, algunas escandalosas, exóticas y atrevidas, pero ninguna con la serenidad, frescura, sencillez y elegancia de Sora.
Le gustaba contemplar esos ojos semejantes a dos rubíes que eran iluminados por la tenue luz de las velas…la forma en que sus labios tocaban el cristal de la copa de vino y como sonreía ante algún comentario gracioso…
Vamos Yamato…¿ Que pasa contigo? La conoces desde que eras un puberto in verbe ¿Por qué rayos te pones así?...- se reprendió así mismo al descubrirse en medio de su contemplación hacia la pelirroja…
A Sora le pasaba algo similar...a pesar de que esta cita estaba planeada de principio a fin, le agradaba la forma en que Yamato se desenvolvía ante ella, siempre seguro y atento a cualquier detalle para que ella pasara una velada agradable, además era sincero ,directo y muy claro, así que entre ellos no había temas temidos a abordar, por eso le inspiraba confianza y seguridad, esas eran algunas de las razones por las que lo había elegido como padre de su hijo.
-...¿Me permites este baile?...
Aprovechando la suave melodía que inundaba el lugar, Yamato invito a Sora a la pista de baile, conduciéndola por el brazo después de que ella aceptara…
Yamato la tomo por la cintura y Sora no pudo evitar sonrojarse al sentirse tan próxima, aunque ya antes había bailado con el, jamás se había sentido de esta forma, por alguna razón, aquel contacto era una experiencia completamente nueva y fascinante para ella.
Se deslizaban por la pista de baile, siguiendo suavemente el compás de la música. Quizás era por efecto del alcohol, pero se sentían flotar agradablemente en un enorme vació y no querían perder esa sensación, sobre todo Yamato, que se sentía ajeno a cualquier cosa que no fuera la profunda mirada rojiza de Sora…
-…¿Vas a mirarme así toda la noche?...- bromeo ella mientras se retiraba un mechón de cabello de la cara sin apartar su mirada.
- No puedo evitarlo- contesto el - Sora se ruborizo aun mas y se hecho a reír
¿siempre eres tan encantador?...si sigues así no podré dejar de sonrojarme y saldré corriendo en cualquier momento…
-pues te atrapare si lo haces, y no puedes culparme por eso Sora, te lo he dicho toda la noche ¡estas preciosa!
-Señor Ishida ¿esta tratando de seducirme?...-
-Vaya ¿lo estoy haciendo? – entonces ella no pudo evitar notar el hoyuelo que se formaba en su mejilla y el seductor brillo de sus ojos…
¡VAMOS! Te estas burlando de mi…
¡eso nunca- sonrió el mirándola fijamente mientras retiraba el mechón que de nuevo había caído sobre el rostro de su acompañante, Yamato la observo en silencio por algunos segundos para luego apartar la mirada con naturalidad…
Cuando se dieron cuenta que eran los únicos que seguían en la pista, regresaron a su mesa para tomar una ultima copa de vino que se alargo entre las risas y recuerdos de la infancia. El restaurante se fue vaciando lentamente, pero ninguno de los dos quería moverse para no interrumpir aquella agradable charla…Pero finalmente llego el tiempo, y mientras Yamato pagaba la cuenta, Sora se excuso para ir al tocador, donde al mirar su reflejo, se descubrió ruborizada y con los ojos brillantes…
-Vamos Sora¡tu puedes!...vas ha hacerlo y mañana estarás embarazada…
Compartieron en ascensor con un grupo de jóvenes turistas que hablaban emocionadas de los lugares que habían visitado y las compras que habían hecho durante el día. Atrás de ellas, Yamato acariciaba el brazo de ella comenzando por el hombro y bajando suavemente hasta la mano, lo que provoco que Sora se estremeciera por completo, sobre todo cuando comenzó a acariciar la desnuda piel de su espalda…
El ascensor se detuvo y las jóvenes salieron dejando que sus voces se perdieran por el pasillo. Al cerrarse la puerta Yamato tiro de ella y la apreso entre sus brazos, Sora no se resistió al percibir la suave colonia que el usaba y oír claramente el latido de su corazón.
Sora lo abrazo por la nuca, se sentía atrevida, fuerte y segura de si misma, y sobretodo, deseada bajo la atenta mirada de el.
Yamato acerco lentamente su rostro hasta que sus labios se acariciaron y el ligero contacto creció para convertirse en un profundo y apasionado beso, mientras el la estrechaba contra si, moldeando su propio cuerpo al suyo para después deslizar su boca por el cuello y regresar nuevamente a saborear aquellos labios…
La puerta des elevador se abrieron y ambos se separaron lentamente con la respiración agitada y el rubor cubriendo sus rostros, Yamato la condujo por el pasillo hasta llegar a la habitación que había reservado aun absorto por aquel beso.
Una vez en la habitación, Sora camino hacia el ventanal donde tenia la hermosa vista de la ciudad de Tokio iluminada por la plateada luna llena. Yamato se acerco a ella y la estrecho nuevamente entre sus brazos. Sora se sentía flotando ante tantas sensaciones que el la hacia sentir, y sin duda, su sensibilidad había ido en aumento por el alcohol que había ingerido durante la noche, pero se sentía tranquila, aun al sentir como el comenzaba a besar su cuello y su piel comenzaba a ser recorrida por una calida sensación. Yamato la giro para volverla a besar y reafirmo que los labios de Sora tenían un sabor embriagante del cual se había hecho adicto mientras ella se abandonaba por completo a el. Finalmente se separaron para quedar unidos en un abrazo, el percibiendo el aroma a jazmín de su cabello y ella recostada en su pecho. Le gustaba sentirla en sus brazos, sumisa a el…
Pero entonces se percato de algo curioso…Sora comenzaba a pesar mas en sus brazos…
¿Sora? – la llamo con ternura acariciando su cabello - … ¿estas bien?...- ella alzo su rostro sin dejar de parpadear…
-…Lo siento…me siento un poco mareada, eso es todo… - contesto con un semblante somnoliento
Yamato no pudo evitar sonreír enternecido y la cargo delicadamente para depositarla en la cama, era evidente que Sora estaba adormecida por el alcohol y sabia que su amiga no era muy dada a beber y ahora se presentaban los efectos de ello…
-Yamato…yo…- murmuro adormilada
Shhhh, no digas nada, será mejor que descanses…- contesto mientras colocaba suavemente su cabeza en la almohada para después sentarse a su lado, no paso mucho para que Sora cayera en un profundo sueño…
Fuera de molestarse, le cayo en gracia esta situación, se suponía que estaban ahí para hacer el amor y ahora, la que seria su amante por esa noche, yacía profundamente dormida a su lado.
Había pensado en quitarle el vestido para que durmiera mas cómoda, pero la idea de que despertara en el acto y pensara que era un pervertido le hizo saber que no era buena idea, así k solo le retiro las zapatillas y la cubrió con las sabanas.
Contemplo la pacifica expresión de Sora , la había visto ruborizada tantas veces esa noche y le había encantado verla así, se pregunto si ella había notado las veces en que le había pasado lo mismo…sonrió depositando un ligero beso en sus labios…
- ...Buenas noches, Cielo…- entonces apago las luces y se recostó a su lado…
Sora despertó sintiendo un ligero dolor de cabeza no muy convencida de salir de las sabanas. Aun adormilada miro a su alrededor, y al instante recordó que estaba en una habitación del hotel donde había cenado con …
¡YAMATO- miro al otro lado de la cama, pero no había rastro…¿Qué no había vuelto a la habitación con el?...¡CLARO QUE SI!...aun recordaba ese beso en el ascensor…y nuevamente se sonrojo al recordar las sensaciones que había sentido con ese contacto…
-Vamos Sora, tienes que dejar de hacer eso, ya no eres ninguna adolescente ¿sabes?...- pero entonces ¿Dónde estaba Yamato?...acaso ¿lo habían hecho…?
Iba a levantarse cuando escucho que la puerta del baño se abría, y de ella salía Yamato recién bañado y con el cabello aun húmedo…
-Buenos días - La saludo sonriente mientras se acercaba a ella…
-…bue…nos días – esta vez no se sonrojo, pero no pudo evitar sentirse perturbada al ver a aquel atractivo rubio semi – desnudo frente a ella, Yamato se sentó quedando cara a cara…
-…anoche…fue mágico ¿verdad? – dijo mientras se acercaba lentamente a su rostro; Sora en parte estaba de acuerdo, pero el problema es que ¡no recordaba el resto!
-…eh…bueno…
¡SORA¿no me digas que no recuerdas que paso después?...bueno, no importa, yo recuerdo cada segundo…- Yamato usaba un tono tan sensual que empezó a poner nerviosa a su compañera - …cada detalle de esa noche de sexo salvaje y desenfrenado que tuvimos…prácticamente…abusaste de mi ¿sabias?...-
¿QUEEEEEEEEEEEEEE!...no…no hablas en serio ¿verdad Yamato?...- y esta vez si se sintió sonrojar como nunca, mientras Yamato se limitaba a mirarla seductoramente…hasta que finalmente se hecho a reír…
-No ocurrió nada ¿verdad?...- Sora preguntaba desconcertada pero el seguía riendo…
- ...�¡YAMATO!
-No ocurrió nada, por que te quedaste dormida…- dijo con toda naturalidad mientras se tumbaba a un lado
¿Queee!...no puede ser – exclamo mientras ocultaba su rostro con las manos – Que vergüenza…Yamato,al principio estaba tan nerviosa que bebí demasiado y…¡lo siento! Soy una tonta…- el rubio Ishida la abrazo para consolarla…
-tranquila, no pasa nada, creo que ambos estábamos muy nerviosos, y como todo estaba demasiado planeado, era de esperarse que algo así pasara…no se si lo recuerdas…pero nos besamos en el ascensor, y al menos para mi fue maravilloso…- el rubor se apodero de ambos junto con una sonrisa al recordar el momento…
-y me parece…que eso significa que hay mucha Química entre nosotros…tal vez, deberíamos dejar que las cosas pasen por si solas, con naturalidad sin planes de por medio ¿no lo crees?...- Sora asintió
-tienes razón…apresure demasiado todo esto, y eso provoco que al final no pudiera manejarlo como pensé que lo haría…Yamato ¿ crees que podamos salir de vez en cuando sin decidir si lo vamos hacer o no?...
-…y que las cosas pasen cuando tengan que pasar ¡me parece una excelente idea!
-Bien…ahora…¿podrías ir a vestirte por favor¡VAS A PESCAR UN RESFRIADO SI SIGUES ASI!
Yamato Se hecho a reír y beso la mejilla de la pelirroja antes de regresar al baño haciendo como si se fuera a quitar la toalla frente a ella…
- pero después de que tomes una ducha, iremos a desayunar ¿de acuerdo?
Sora sonrió y le aventó una almohada para que se metiera al baño…
FIN DEL CAPITULO 4
Y así termina este capitulo cuatro ¿Qué les pareció?...Si si, ya se que han de estar decepcionados por que no paso algo mas, pero tranquilos, que las cosas Irán poco a poco(solo espero que no tarde demasiadoU)…aunque ahora me estoy debatiendo entre poner lime(muy ligth) o no, y es que este no es muy fuerte. También espero que no sientan que la historia esta avanzando muy lento, por que a veces a mi me da esa impresión…quizás debería apresurar todo ¿no creen?.
Lord Pata,Poly-chan,Atori-chan,Sakura-hop,Hillary,Sorita-DG1,Janadetroya,Sku-Ag,Aska-Ishida,Ruri-Sakuma,Freya y Ayumi Haru, nuevamente, muchas gracias por seguir esta historia, el leer sus comentarios, en verdad estimulan a uno para seguir escribiendo, tal vez uno sea el que escriba las historias, pero son ustedes los que hacen posible que estas sigan adelante, así que…
�¡ MUUUUUUUUUUUHAS GRACIAS!0