Sumario: "Mis rodillas chocaron contra el suelo, y me largué a llorar."

Descripción: No es la primer cosa que escribo de Gundam Wing, pero sí lo primero que posteo de GW en ; Tiene unas 500 palabras, así que no es muy largo.
Personajes/Parejas: Heero.
Rating: K+. Supongo que la violencia está ahí, pero es más depre que otra cosa.
Género: Angst, drama, depresión, locura, delirio, etc.
Disclaimer: No soy dueña de Gundam Wing, y tampoco de los G-Boys (;; qué pena) pero si soy dueña de ese drabble (lamentablemente).
Notas de la Autora: Quizás hay spoilers para cierta parte del pasado de Heero, pero no es nada. Los que leyeron/vieron EW van a entender mejor.

Rosas

Pronto, todo mi calor corporal se redujo a un escalofrío. Los pasos se me hacían cada vez menos pesados, el clima era cada vez más helado.

Sentí, por primera vez en mi historia como soldado perfecto, o máquina insensible, como le quieran llamar, mariposas en el estómago. El sólo pensar que todas estas habían sido víctimas... que cada casa, cada bóveda era hogar de muchas de ellas, quizás hasta familias enteras.

Visitar el cementerio de vez en cuando me hacía acordar de lo horrible que era la guerra.

Y admiré el paisaje. Lúgubre, sin vida. Al girar la cabeza, lo único que se veía eran millares de tumbas. Si la girabas para el otro lado, veías millares de bóvedas, quizás hasta vecindarios de ellas. Cada una con un nombre, cada una con un sentimiento inigualable. Pero no tenía tiempo para reflexionar sobre eso.

Recordaba la chocante noticia que había leído la semana pasada mientras degustaba el café con leche, ya helado. Me había compenetrado tanto en aquel artículo periodístico que me había olvidado de mi desayuno. Decía algo como esto:

Bomba estalla en la Base 48
45 Muertos y más de 200 heridos

Es el año 194 Después de la Colonia. Éste 8 de Octubre, se comprueba que la guerra entre las colonias y la Tierra continúa. Se sospecha que una bomba estalló en la base 48, llevándose consigo las residencias en sus cercanías. Puede haber sido un ataque terrorista, o quizás una reafirmación de los líderes de las colonias de su dominio sobre las mismas.

La base 48 era un edificio de la Alianza dedicado a la fabricación de Mobile Suits que protegerían a los habitantes de la colonia en dónde se realizó la explosión de cualquier amenaza.

"Aún estamos buscando al culpable" afirmó un oficial.

"Aquí estoy" musité para mis adentros al hacer memoria de la frase que finalizaba la nota.

Me dirigí a aquella tumba. Era extraño, lo admito. No conocía a ésta persona, pero sin embargo, de sólo pensar en ella se apoderaba de mí un sentimiento oscuro y triste.

Apreté con fuerza el ramo de rosas que sostenía en mi mano. Un poco de agua de las frescas flores se escapó del plástico que las envolvía, y calló al suelo. Esas hubieran sido mis lágrimas, alguna vez. Pero no ahora. Soy el soldado perfecto, no puedo llorar.

Tuve una reminiscencia de haberme sentido así antes. Quizás fue cuando me di cuenta que había matado a la pequeña y a su perro, que aquel día había conocido. No tenía sentimientos por ellos. Pero cuando vi al can muerto en el suelo, no pude hacer más que sentirme culpable. Quizás preguntarme, ¿por qué hago esto?

Llegué por fin a aquel lugar.

R.I.P.
Aquí yace la pequeña Victoria Meryland, que con apenas 10 años, se vio víctima de un desafortunado accidente. A su lado, se ha enterrado también a su perro, Mary.

Serás siempre amada y eternamente extrañada.

Ad Infinitum.

Dejé las flores cuidadosamente en la tumba.

Mis rodillas chocaron contra el suelo, y me largué a llorar.