Amando al Enemigo

por :Tiff



Una hermosa chica de cabello castaño, y lindos y juguetones ojos esmeraldas, caminaba por la calle, después de terminar sus compras matutinas.

Esa noche le tocaba preparar la cena para su hermano y su padre. Los dos trabajaban en el día, y no se encontraban en casa en ningún momento, esperando la caída del sol para aparecerse, cansados y hambrientos, pero casi siempre de muy buen humor.

La chica de rostro inocente, caminaba distraída en sus propios pensamientos. Nunca notaba las miradas que arrastraba a su gracioso andar, guiadas por la curiosidad, o a veces por pensamientos nada agradables.

Sakura Kinomoto era una persona sin duda alguna, digna de admiración. Era una chica de belleza natural, con rostro de niña, pero formas muy bien definidas. Su inocencia e ingenuidad, eran de las características que muchas personas le apreciaban. Trabajaba a sus veinticuatro años como una educadora muy eficiente, cariñosa con sus alumnos, pero, comentado por todo el colegio...soltera.

No tenía relación con nadie que se conociera, y parecía que vivía feliz de aquella manera. Parte de ese problema lo había representado su hermano. Se dedicaba a espantar a cualquier pretendiente que llegara a descubrir con intenciones para con su hermana, no dígase malas, sino de cualquier tipo.

Eso no le evitaba a la chica ser sociable y con muchos amigos. Todo mundo que llegaba a conocerla, llegaba a prenderse de su personalidad, de no haber quedado encantados antes, con su belleza y caritativa sonrisa.



Estaba teniendo algunos problemas con todos los víveres que tenía que cargar. Su hermano se había olvidado de las compras de la semana, dejándole a ella todo el trabajo, después de prometer que la supliría dos veces, evitando así una reprimenda de parte de su padre.

Las bolsas de papel se balanceaban de un lado a otro, mientras ella intentaba guardar el equilibrio, alzando la vista sobre ellas, tratando de vislumbrar el camino frente a sus pies.

Casi lograba llegar a su casa, cuando de imprevisto, algo se estampo con fuerza contra ella, empujándola hacia atrás, haciendo que las dos bolsas cayeran al suelo, regando todo su contenido, por una de las calles casi desiertas.

-¿Estas bien?-

Sakura levanto sus ojos hacia la persona con la que se había impactado. Encontrando delante de ella, a un chico de reluciente cabello castaño, y larga gabardina negra.

Sus ojos denotaban un poco de nerviosismo, sus ojeras dejaban ver que no había pegado los párpados en toda la noche, y su cabello, despeinado y revuelto, que era presa de una gran preocupación.

Ella solo asintió, y tomando una bolsa, empezó a levantar todas las cosas que se habían caído.

El chico dudó un momento. Llevaba mucha prisa, tenía muchos asuntos que atender, y estaba buscando desesperadamente a alguien muy importante para su trabajo. No podía permanecer ahí, ayudando a una chica cualquiera con la que se había tropezado distraídamente en la calle.

Sin embargo...había sido su culpa. ¿Que le costaba ser cortés?

Se arrodillo a su lado, y tomando la otra bolsa, empezó a levantar lo que quedaba en el suelo, sin que sus pensamientos estuvieran ahí realmente.

Sin contar los huevos rotos, la leche tirada, y el salmón que se había salido de su empaque, todo había quedado en las bolsas de nuevo.

Shaoran Li se levantó, con la bolsa en mano, y ayudo a la mujer que estaba a su lado. Fue ahí cuando le puso el ojo encima.

Por un momento no se preocupó más por su líder Eriol Hiragizawa, que había estado perdido desde la noche pasada, después de una misión exitosa.

-Gracias-

Había visto a muchas mujeres en su vida, muchas le habían parecido hermosas, y aquella no era la excepción.

Con claras intenciones, sacó a relucir su sonrisa cautivadora, recordando a todas las mujeres que habían caído bajo su encanto, pocas horas después.

La chica le sonrió también, pero solo con esa sonrisa pura y llena de inocencia característica de un niño.

Li dejó de sonreír, y le entrego a la joven la bolsa que había levantado, sin quitar de su rostro, cierto gesto de incredulidad. O esa chica sabía resistirse muy bien a sus encantos, ó en verdad era una persona pura y sin malos pensamientos.

Sakura se hecho a andar de nuevo, agradecida con aquel extraño, por haberla ayudado (aunque él había tenido la culpa) alejándose cuesta abajo, hacia su casa.

Li la miró por un momento, tratando de recordar las finas líneas de su cara, al haber encorvado los labios de manera tan inocente. Nunca la volvería a ver, pero de una cosa estaba seguro...jamás olvidaría su rostro.

Hecho a correr en dirección opuesta a la casa de la chica, y se perdió unas cuantas cuadras más adelante, como una mancha negra, en un mar de colores.



~*~

Unos fríos ojos azules, se levantaron al cielo, después de haber permanecido sumidos en la penumbra por un tiempo indefinido.

El apuesto joven ingles, se veía pálido y demacrado. Recargado contra la fría pared de concreto, en un inmundo e intransitado callejón, no parecía más que un pobre desamparado.

Su gabardina negra, antes reluciente e inmaculada, estaba ahora rasgada, con manchas color marrón salpicadas por toda su superficie. Sus lentes estaban rotos de uno de sus cristales. Su cabello azulado, estaba sucio y enmarañado... y con mucha razón.

En esos momentos no parecía más que un vagabundo harapiento tirado en un callejón oscuro.

Nadie pensaría que esa era la persona que se mencionaba en todos los noticieros y los periódicos matutinos, anunciando en sus notas amarillistas, el "Peor asesinato del Siglo".

Ni que ese hombre sucio y a la intemperie, era nada menos que el conocido como el astuto y perseguido "Asesino Ingles".

Esa, había sido una de las peores noches de su vida. Lo que debería de haber terminado en una reconfortante cena en su restauran francés favorito, después de contar toda la paga en casa, había acabado de aquella manera miserable.

No podía imaginarse en una peor situación.

Y el dolor que ocasionaba su herida en el brazo no levantaba sus ánimos en lo más mínimo. Apenas había logrado contener la hemorragia con un pedazo de su camisa de marca.

Tampoco podía llegar a un hospital. ¿Que podría decirles? No tenía amigos en esa ciudad, sabía de algunos de la organización que radicaban ahí, pero jamás se había preocupado por conseguir su dirección.

A la única persona que conocía y que talvez llegaba confiaba , era Li Shaoran, y el no vivía más cerca que él, podría decirse que sus casas estaban casi en otra ciudad.

La única salida que le quedaba era llegar a la organización, ó pedirle ayuda a un extraño, y esa ultima opción no era de su agrado.

Trató de ponerse en pie trabajosamente, sosteniendo el peso de su cuerpo con la pared. Su brazo emitía un dolor agudo que casi le quitaba el aliento, la visión, no era mejor que la noche anterior, podía decir incluso que ésta había empeorado. Sus lentes ya no le servían de mucho en esa situación.

Su mente se puso en blanco de nuevo, y sintió que las piernas le temblaban. No pudo sostenerse más...

Sin embargo, no sintió lo frío del piso en su cara como había pensado. En lugar de ello, pudo distinguir un soporte en frente de él, sosteniéndolo.

-¿Estas bien?-

Si Eriol creyera en los ángeles, podría haber jurado, que se había encontrado con uno frente a él. Jamás había oído voz más deleitante.

Unas manos femeninas lo sostuvieron trabajosamente de los hombros, impidiendo que cayera completamente al suelo.

En un esfuerzo sublime, logró levantar los ojos, y vislumbrar a través de las sombras, una silueta de largo cabello negro.

-¿Quien eres?- preguntó, recordando de pronto su orgullo, irguiéndose con mucho trabajo, sin que su visión lograra ser la de antes.

-¿Necesitas ayuda?- la chica se oía preocupada, seguro había alcanzado a ver la herida sangrante en su brazo.

-No- contestó el asesino, en un tono frío y cortante.

-Pero tienes una herida muy grave ¿Quieres que te lleve a un hospital?-

-Ya te dije que no necesito ayuda. Puedo yo solo.- intentó alejarse de su mirada curiosa, pero apenas dio unos pasos cuando cayo de nuevo al suelo de rodillas.

-Puedo llevarte con un amigo mío. El podría curarte el brazo.-

-No voy a ir a un hospital-

-No es un hospital si es lo que te preocupa.-

El ojiazul se le quedó mirando extrañadamente. ¿Porque una persona se preocuparía por el bienestar de otra? ¿No querría esa mujer algo a cambio?

-¿Que es lo que quieres?- sus palabras se escucharon en un siseo, arrastradas y amenazantes.

-No te estoy pidiendo nada- contestó calmadamente -Es solo que no podría dejarte aquí a tu suerte, que por lo visto no a sido mucha.-

La chica pasó uno de los brazos de Eriol sobre sus hombros, dándole un soporte adicional a sus pasos. Él ya no protestó. Se sentía cada vez mas mal, y no quería discutir en esos momentos.

Los dos se echaron a andar, uno al lado del otro, hacia la salida de aquel callejón. La joven lo subió en el asiento copiloto de su auto, y corrió al lado del conductor, encendiendo el motor apresuradamente, contando cada minuto como vital.

Él estaba cayendo inconsciente de nuevo. No sabía a donde lo llevaban. Tenía que confiar en aquella extraña de cabello de ébano.

La falta de sangre seguro le estaba afectando el cerebro. Por primera vez en su vida, se había sentido agradecido con una mujer...



Continuara...

Hola!!! Vengo de nuevo con otro capitulo!! Primero que nada muchas gracias por su apoyo!!! Me siento honrada de recibir sus reviews, MUCHAS GRACIAS!!! Además quisiera responder cada uno de los reviews personalmente si me permiten vale?? aquí voy

MGA FGA: Gracias por tu apoyo, fuiste la primera en poner review!! ^_^ ¿Sabes? esta idea se me ocurrió hace mucho, y no sabia de que hacerlo. Al final descubrí que a Eriol y a Shaoran nunca los habían puesto de esta manera, así que me dije ¿Porque no? Espero que también te guste esta parte!!

Megumi: Si tu estas demente, yo estoy en tu club...me encantan este tipo de historias, en que ellos no son siempre niños buenos, sino que también se muestra su lado oscuro (claro, al final acaban como niños buenos ¬_¬) Espero no tardarme en el que sigue. Nos vemos!!

Angelmt: Gracias por dejar un review!! Ojala y esta historia no te decepcione!!

Aiyin: Espero que pienses que la historia va por buen camino hasta ahora, me interesa tu opinión!!

Naoko Himura: Hola!! Gracias!! En serio que no espere tener reviews, y eso me anima mucho a continuar, no olvides decirme tu opinión de este capitulo.

Zian Shiory: Ja ja ja me encanta la idea de Eriol como asesino, de solo imaginármelo °¬° ...bueno bueno, ya salí del trance. Gracias por pensar que mi historia es original, lo es en cierta parte. Hasta la Próxima!!

Kazy y Yuki: Hay créanme, cuando yo me los imagine casi me voy de espalda...no, no,no imaginarme tanta cosa linda no es bueno para mi salud, y creo que ustedes tampoco se libran ^_~ en este capitulo ya se encontraron con las chicas, un breve encuentro pero encuentro al fin no?? Gracias por su review!!

Por ultimo unas GRACIAS BIEN GORDAS A TODOS. Espero no tardarme con el capitulo que sigue, después de todo tengo varias historias por terminar...(n_n U si las acabo, lo siento) Espero que les vaya bien a todos, y deséenme suerte con la #%@* entrega de boletas...u_u

Hasta la Próxima!!!!! atte.: Tiff