Disclamer: Na' de Harry es mió, la historia si es mía®
Nota del autor: se que tarde en subir este capítulo, pero los capítulos de trancisión se me dificultan bastante, aún así no siento que este sea lo suficientemente bueno pero bueno.
Les agradezco mucho por las Reviews, y si en este capítulo explico por que Hermione decidió escapar de casa.
Capítulo 3.
Cuando decidí irme de casa, solo pude pensar en una persona para que me acompañara. Ron.
Tal vez las circunstancias que me llevaron a hacerlo empezaron cuando salí de mi quinto año en Hogwarts.
Las cosas iban bien hasta que les pedí permiso a mis padres de ir a la madriguera.
Discutieron, me dijeron que entre la escuela y mis idas a la madriguera pasaba muy poco tiempo con ellos. Pero sin embargo ese verano me dieron permiso de ir a la madriguera.
Pero al finalizar nuestro sexto año en Hogwarts, las cosas habían cambiado. Con el resurgimiento de Voldemort, mis padres habían decidido que el lugar más seguro para mi, era quedarme en casa. Sin embargo yo les pedí permiso para ir una vez más a la madriguera. Claro ellos me lo negaron y yo no dije nada para tratar de hacer que cambiaran de opinión.
Pero en casa había la suficiente cantidad de problemas como para querer escapar.
Papá había perdido a toda su familia. Bueno perder es un decir, lo único que hizo su familia fue irse a vivir a América, así que la única familia que le quedaba en Inglaterra éramos mamá y yo. Pero por como papá nos trataba parecía no darse cuenta de que era lo que tenía.
Mamá me hartaba, me decía que no le contestara a papá, se la vivía defendiéndolo. Pero es que era imposible no contestarle cuando empezaba a molestar.
¿Qué por qué tenía amigos como hombres y no mujeres como amigas? Y cuando yo le contestaba que Ginny la hermana de Ron era mi amiga, lo único que hacía era replicar. Que si pasaba demasiado tiempo con él, que si era más que mi amigo, que si había hecho esto con él, que si no había hecho eso otro con él. Y en ese momento era cuando le contestaba que todo lo que me sucedía no le importaba.
Lo que me molestaba era que cuando intentaba ir a donde mamá era ella quien me regañaba por haberle contestado.
No podía sobrevivir en ese ambiente, deseaba tanto poder salir de allí, ir a cualquier lugar en donde no me pudieran encontrar y obligarme volver a casa, fue en ese momento cuando pensé que la única solución, era irme de allí, y al finalizar el verano volver a Hogwarts para mi último año.
Durante toda una semana le estuve escribiendo a Ron, contándole lo que planeaba, él intento persuadirme de no hacerlo pero aun así no lo logro. Así que dijo que no me dejaría hacerlo sola, que iría conmigo como se lo había pedido.
Entonces el día de escapar llego, un día antes había vuelto a pelear con mis padres, en toda la noche no pude dormir. Desistí a las tres de la mañana. Así que decidí mandar a Pig de regreso con una nota.
Me había quedado de ver con él a las 5:00 am, pero cuando dieron las 5:25 am, el aún no llegaba, así que me di cuenta de que el no llegaría, saque mi varita de la bolsa de la chaqueta estire el brazo e instantáneamente el autobús noctámbulo se detuvo frente de mí.
Pero en lugar de bajar el boletero del autobús bajo un chico de 17 años de sonrisa bonachona y cabello rojo fuego.
"Ya no confías en las personas" me dijo al bajar.
"Creí que no vendrías." le dije sonriente.
"Yo nunca falto a mis citas aunque sean a las 5:30 de la mañana, además yo nunca rompo una promesa."
Sonreí y lo abrace.
Ron dio la vuelta y subió al autobús. Se veía tan bien vestido, jeans rotos en la zona de las rodillas. Tenis convers color arena. Parecía ser una camiseta blanca pero no se distinguía bien por su sudadera gris con gorra. Y esa chupa negra de piel que lo hacía ver tan sexy, era lo que más me gustaba.
Subí al autobús.
"Gracias por venir conmigo Ron" le dije.
"No hay problema, por algo soy tu mejor amigo." Dijo. Volteó a ver al boletero. "Stan"
Stan volteo.
"Toma" dijo lanzándole un galeón. Stan lo atrapo con facilidad. "Llévanos al callejón Diagon y quédate con el cambio."
"Como usted diga señor." Contesto Stan y el autobús siguió avanzando.
Para esa hora las camas se habían convertido en asientos de autobús normales. Fuimos a sentarnos a la mitad del autobús del lado derecho de este.
Yo me senté primero seguida de Ron. Los asientos eran lo suficientemente espaciosos así que subí los pies, los doble a mi derecha y me recargue en hombro de Ron. Él me abrazó. Y así me quede dormida.
Sentí que alguien me movía.
"Despierta."
Ya había amanecido. Me levante de donde estaba acostada y me encontré a ¿Ron? Dios creo que dormirme en ese momento hizo que me olvidara de todo, sonreí.
"Ya estoy despierta" contesté estirándome.
"Hey, pero ten cuidado conmigo." Dijo Ron al casi yo meterle una mano en su cara.
"Callejón Diagon" dijo Stan.
Ron y yo nos levantamos de nuestros asientos y bajamos del autobús.
Esa mañana estaba bastante despejada.
Entramos al Caldero Chorreante. Y nos sentamos en una de las mesas.
"Buenos días y bienvenidos al Caldero Chorreante, mi nombre es Alec y los atenderé el día de hoy. Tomen un par de cartas vuelvo en un momento para tomar su orden." Nos dijo el mesero antes de darse la vuelta y dirigirse a la cocina.
Sonreí y volteé a ver a Ron que estaba frente a mí. Estaba a punto de abrir la boca para decir algo pero fue interrumpido.
"Buenos días ni nombre es Max y los atenderé el día de hoy." Nos dijo una chica bastante guapa de pelo largo, lacio y color castaño la cual no tenía más de 20 años.
"Pero ya nos está atendiendo alguien." Le dijo Ron.
"Ah ¿si? ¿Quién?" pregunto la chica.
"Uno alto rubio de ojos verdes, creo que se llama Alec." Dije.
Max sonrió. "Bueno no importa, ahora vengo, veo ya tienen cartas, en un momento más vuelvo para tomarles la orden." Dijo y se alejo.
Pero a la mitad del camino se encontró con Alec. Y francamente Max lo regaño en un tono nada bajo.
"Alec que te sucede, quedamos en un acuerdo ¿no?"
"Max pero…"
"Pero ¿qué? Quedamos en un acuerdo, y si no lo cumples aún le puedo decir a Logan que te regrese a Manticore."
"Pero tu fuiste la que me saco de ahí, yo nunca te lo pedí."
"Bueno le diré a Joshua que no te deje volver a su casa para que puedas esconderte." Dijo Max sin encontrar que más decirle.
"Si no recuerdas ya tengo apartamento, por gracia de que tu amigo el gordo ya no esta vivo."
"Alec no lo llames así, por si no lo recuerdas nos salvo la vida."
"Sí, pero casi nos mata."
Tom el dueño del Caldero Chorreante llego y se puso entre ellos.
"Si no quieren perder el empleo ustedes dos les recomiendo que vuelvan a su trabajo."
"Esta bien." Dijeron los dos.
"Pero yo los atenderé." Dijo Max señalándonos a Ron y a mí.
"No me queda de otra o ¿sí?" contesto Alec.
"Mira que si vas a empezar, yo…"
"Ya, ya." Tom interrumpió a Max. "Vuelvan a sus trabajos." Dijo y Max y Alec tomaron cada quien su camino.
Max se acerco de nuevo a nosotros.
"Perdón por la tardanza, entonces qué van a ordenar." Nos dijo con una gran sonrisa.
"Yo voy a querer una taza de chocolate caliente y hotcakes." Dije.
"A mí tráeme una taza de café, un vaso de leche, huevos revueltos, pan francés y para acabar tráeme un filete de res." Dijo Ron.
"¿Y para acompañar toda su comida no va querer pan?"
"Ah sí, también tráeme un muffin de chocolate, no que sean dos y tráeme tres donas rellenas de mermelada de arándanos y algo se me olvida, bueno después me acordare." Dijo Ron poniendo su dedo índice sobre su labio inferior. "Por el momento es todo" dijo y entrego las cartas, se levanto de la mesa para dirigirse al baño.
Vimos como se alejaba y Max volteó a verme.
"Bueno, en un momento más traigo su orden, solo una pregunta más ¿Qué le traigo primero?"
"Tráele el filete, créeme te lo agradecerá." Conteste.
Ronald Weasley cuando será el día que dejes de comer tanto. El día que nos casemos no se que haré para poder hacer que se llenen tu y los niños.
Un segundo acabo de preguntarme como le iba a hacer para cuando me casara con él.
Por dios qué me pasa por la cabeza, yo ¿esposa de Ron? Si no somos más que amigos. Claro que soñar no cuesta nada. O ¿sí?
Cuando terminamos de desayunar entramos al callejón Diagon.
Eran apenas las 8 de la mañana entramos a Gringgots, y Ron cambio todo el dinero que traía por dinero Muggle.
Al final la cuenta total de dinero que teníamos era de ₤10, 300 entre lo que había conseguido Ron y mis ahorros.
Salimos del callejón Diagon y del Caldero Chorreante.
El aire era frío a pesar de ser verano.
Ron estiro un brazo y un taxi se paro frente a nosotros. Subimos al automóvil.
"¿A dónde?" pregunto el taxista.
Hey creen que eso es todo, pues no, el siguiente capitulo tendrá mucho de Ronnikins y Hermione así que no se lo pierdan, y por favor si les gusto, o no les gusto este capítulo manden Reviews.