Inuyasha Fanfic
"LOVE WARS"
por
Ivan Emiliano Altamirano
Advertencia: Todos los personajes en
este fanfic son propiedad de las CLAMP, así que nada de
demandas.
Parte 2 de 3: Los chicos contratacan
Inuyasha volteo a ver a Kagome de reojo
mientras el taxi se dirigía con rapidez al centro de la
ciudad. Kagome parecio notarlo, pero su mirada furiosa se acentuo
más, haciendo un gesto y mirando hacia otro lado.
-Esta
furiosa - penso el joven tragando saliva. Pero que podía
hacer? Ella era la culpable...no se porque se ponía así,
simplemente por un detalle como el de subirse él primero al
taxi sin siquiera abrirle la puerta. Sin embargo, en el fondo, había
querido vengarse de ella de algún modo. Si algo detestaba es
que alguien quisiera mandarlo, inclusive dentro de su propia casa o
negocio. Kagome había ido muy lejos al casí obligarlo a
cerrar temprano, enfrente de tantos clientes, solo para ir a
cenar.
-Estupido día de san valentín - mascullo
mientras se cruzaba de brazos.
-Aja, así que el día
te parece estupido no?
Inuyasha dio un respingo. Había
cometido otro error.
-No, es que...
-Mira, yo no se ni porque
rayos vine por tí, sabes que...cuando lleguemos, cualquiera
puede irse por su lado.
-No, Kagome...no fue mi intención!
-Pues
que bonito, parece que sí - la chica se señalo -
mirame! Me arregle lo mejor que pude y ni siquiera me dirigiste un
cumplido
-Como hacerlo si estabas corriendo a todos mis
clientes!
-Aja, que culpa tengo de que ellos sean más
importantes que yo!
-Kagome, ya basta!
-Pues sí, ya
basta! - ella se cruzo de brazos - no quiero volverte a ver en toda
la vida!
-Que!
Entonces para sorpresa de Inuyasha, la chica
puso una cara de seriedad negando.
-Lo sabía, sabía
que esto no iba a funcionar.
Inuyasha sintio una infinita
tristeza, aunque puso una cara de molestia. Ultimamente había
escuchado mucho eso de Kagome, que las cosas iban funcionando pese a
que los dos eran tremendamente orgullosos. Pese a que Kagome tenía
un carácter de los mil demonios, no había encontrado
otra chica con la cual llevar una vida como la que tenía
ahora. En un tiempo su vida era solitaria, un tanto rutinaria. Sin
embargo, la chica había venido a poner un tanto de alegría
y de variedad a ella, aparte de que se divertía a su lado. Los
comentarios y desplantes de Kagome no tenían par, pese a que
tenía a Miroku y Sango.
Simplemente, ni Kykyo le había
hecho sentir así.
El silencio volvio al taxi. El taxista
parecio notarlo y acelero, tal vez terminar esto era lo mejor. Sin
embargo, no noto como un coche daba la vuelta de manera brusca,
haciendo que el taxista tuviera que frenar de golpe.
-Ah! - Kagome
reacciono asustada y casí se daba un frentazo contra el
asiento delantero cuando Inuyasha la sujeto con firmeza.
-Lo
siento - musito el taxista.
-No hay problema - Inuyasha sonrio
mientras sujetaba a la joven - estas bien?
Kagome asintio por
inercia y miro al joven. Este había reaccionado para evitar
que se diera un golpe a costa suya. Una calidez extraña inundo
su corazón mientras se separaba.
-Sí...estoy
bien...
Inuyasha asintio mientras se acomodaba en su lado del
asiento. Kagome le miro de reojo y no pudo evitar sonreír. Por
un momento sintio unos deseos terribles de pedirle perdón,
pero se contuvo. Su orgullo se lo impedía.
Inuyasha. Era un
caso pérdido según ella. No solo era tosco, orgulloso y
un solitario sin remedio, aparte sus modales dejaban mucho que
desear. ¿Que más podía pedir en alguien que
continuaba rechazaba a las demás personas? Eso le había
dado dolores de cabeza, desde con su madre hasta con sus amigos.
Sin
embargo, era bastante confiable, protector y aparte sus propias
lócuras hacían que ella se divirtiera y se sintiera
segura, lo cual un chico no le había provocado en mucho
tiempo. En otras palabras, Inuyasha era algo constante y eso en un
mundo que cambia a cada momento, era díficil de
hallar.
-Maldición - penso luchando entre lo que sentía
y su orgullo...
Miroku se tallo el puente de la nariz con
insistencia. Miro su reloj con hastio mientras se recargaba en una
banca en los jardínes del hospital.
-Y apenas son las 10 de
la noche - penso pesadumbrado. La guardia había resultado
bastante pesadita y aun quedaba toda la noche por delante. ¿Es
que acaso los accidentes no se terminaban por ser día de San
Valentín? Al contrario, estos parecía
aumentar...
Entonces noto como una pareja se besaba en los
confines del jardín. De seguro eran familiares que visitaban a
algún paciente y habían encontrado un sitio para
demostrarse su cariño. Por un momento sintio envidia de ellos
y de su vida normal. Él en cambio tenía que trabajar en
este día del mes y aparte se encontraba sin alguien que
pudiera acompañarlo o al menos hablarle.
-Abajo el amor -
penso sonriendo mientras movía el cuello de un lado a
otro.
Entre tanto, en las afueras del hospital, una joven miraba
al guardia con cierta molestia.
-Pero señorita...
-Mire,
no vengo a visitar a un paciente, solamente vengo a ver un amigo,
trabaja en el hospital
-Sí, pero...
Sango suspiro. Había
tardado varios minutos en convencer al guardia, sin embargo, este se
había negado en varias ocasiones. Sango suspiro. Había
quedado en cenar con sus amigas por el día, pero el evento se
había cancelado al final. Entonces fue cuando penso en visitar
a Miroku.
-Hmmm - fruncio el cejo. Entonces sonrio maliciosamente
- bueno, no podría vocearlo, dígale que es de parte de
su novia.
-De su novia? Pense era su amigo.
-Bueno, es que le
da la pena, ya sabe.
-Entiendo - el guardia sonrio - si es así,
con gusto lo hare, es san valentín no?
Sango asintio
mientras el guardia tomaba el teléfono para marcar el
voceo.
Miroku entro por las puertas de urgencias. Noto la
presencia de Hachi, uno de sus externos, que se acercaba.
-Amo
Miroku, amo Miroku...
-Hachi, que te he dicho que no me digas
así... - suspiro - que paso?
-Pues parece que la actividad
se calmo, ya termine de suturar al último golpeado.
-Bien,
al menos podremos descansar un poco.
Entonces se escucho el timbre
de voceo. Miroku por instinto, pelo oreja...
Interno Miroku,
interno Miroku, se le solicita en la entrada del hospital. Su novia
ha venido a verlo.
-Novia? - Miroku enarco una ceja. Hachi
parpadeo.
-Señor Miroku, tiene novia?
Miroku no supo
que contestar, mientras se dirigía hacia la entrada del
hospital...
Ayame solto un largo suspiro al tanto terminaba
de sorber su bebida. Un ligero hipo comenzo a llenar su
garganta.
-Maldita sea todos los hombres - dijo mientras levantaba
su vaso. Al instante, un camarero trajo una nueva "michelada"
en su mesa. Ayame asintio con una sonrisa y comenzo a beber
nuevamente.
-Todos los hombres son unos idiotas - volvio a decir
dejando el vaso a un lado. Era 14 de febrero y ella se encontraba
completamente sola. Bueno, no sola, estaba con unas amigas, pero se
supone era el día del amor ¿Donde estaban todos los
hombres guapos y lindos?
Había al menos tratado de hablar
con Inuyasha y Miroku, pero uno estaba con su "novia" y el
otro en el hospital.
-Kouga - murmuro. El susodicho no le había
hablado en una semana. Pensaba que su "relación" con
él había mejorado, desde que le había dado ese
regalo en noviembre pasado. Sin embargo, ahora ni sus luces.
Tampoco
podía culparlo. El daba clases de historia en una escuela
nocturna para pagarse la universidad y tenía que trabajar en
la noche y estudiar de día. Ella en cambio solo se dedicaba al
estudio.
Entonces sintio que algo vibraba en su cinto. Se quito el
celular y vio que había recibido un mensaje.
Feliz San
Valentín...estoy a medio examen. Ánimos...
Ayame
sintio que sus ojos se humedecían ante lo que había
leído. El mensaje era de Kouga.
-Tonto - murmuro abrazando
el celular. Con renovada energía, se tomo el vaso de un solo
golpe y lo alzo al aire.
-Otro más! - grito emocionada...
Inuyasha pago al taxista y lo despidio de un
gesto mientras arrancaba. Entonces noto como Kagome caminaba rumbo al
restaurante sin esperarlo. Desde lo que había pasado en el
coche, habían vuelto a quedar en silencio, pero el ambiente se
notaba menos pesado.
-Es mi oportunidad - penso el chico. Entonces
noto como un joven que vendía rosas aparecía a un lado
de ellos.
-Espera Kagome...
-Oye, es que... - la chica iba a
replicar, cuando noto que Inuyasha pagaba una rosa y luego se hincaba
frente a ella, tosiendo ligeramente - me perdonas?
-Inu... -
Kagome parpadeo sorprendida y volteo a todos lados - que haces?
Estamos a media calle...
Efectivamente, varias personas se habían
detenido a ver la escena. Kagome tartamudeo.
-Estas loco!
-Lo
sé, pero ya sabes porque - sonrio él enseñando
la rosa - perdoname, por ser como soy.
Ella suspiro y tomo la
rosa.
-Es la primera que me regalas.
-Bueno - él se
levanto - no había encontrado una situación apropiada
para ello - su gesto se puso orgulloso y se cruzo de brazos - mira,
sino la quieres, regresamela, esta bien?
Entonces para sorpresa de
él, la chica lo abrazo y lo estrecho. Inuyasha se sonrojo y
tosio pesadamente
-Supongo esto debo tomarlo como un "sí"?
- murmuro por lo bajo. Kagome asintio y le tomo de la mano.
-Ven
loco, van a cerrar - sonrio mientras se dirigían a paso rapido
al restaurante...
-Jajajaja - Sango reía a voz alta -
debiste ver tu cara
-Claro, claro - el suspiro mientras se
recargaba en la misma banca. Sin embargo, ahora se encontraba una
joven a su lado, lo cual no dejaba de extrañarle.
-Que
sucede?
-Te ves muy bien...muy guapa - él sonrio al
señalar su atuendo. Sango se miro, se levanto y dio una vuelta
rápida.
-Ah, esto? Es que iba con unas amigas, pero se
cancelo todo al final.
-Entiendo, entonces soy tu valvula de
seguridad?
-Algo por el estilo... - Sango sonrio y le pellizco la
mejilla - y no me digas guapa...me agrada más "bonita"
-Vale
bonita - él sonrio - gracias por la visita.
-No es nada.
Debe ser duro estar trabajando en este día.
-Uno se
acostumbra... - musito. Sango se quedo en silencio y luego se volvio
a sentar a lado del chico. Una ambulancia salía con las luces
a toda marcha.
-Como es que afrontas la muerte en estos
casos?
-Eh?
-Sí, debe ser algo fuera de lo normal.
Lidear con ello y la vida.
-Bueno, no es sencillo. Mi primer
paciente como externo fallecio.
-En serio? Que pena.
Miroku
nego con la cabeza.
-Fue muy duro. Un señor que estaba bien
y en un instante, tuvo un ataque cardíaco fulminante. Fue
triste ver como toda su familia lloraba su muerte.
-Al menos tenía
quien lo recordara.
-Sí, eso sí...pero uno termina
por ver que es un proceso natural. Todos vamos a morir, aunque muchas
veces no aceptamos cuando será nuestra hora.
Sango
asintio.
-Sabes, pareces muy distinto.
-Como
dices?
-Generalmente estas sonriendo o flirteando con las
mujeres, pero jamás te había visto serio - ella sonrio
- hasta meláncolico.
-Bueno, tengo mis momentos - el
termino por sonreír - en esta carrera hay que tomarse las
cosas en serio, o el paciente la paga...
Entonces, Sango se
inclino y beso la mejilla de Miroku. Este parpadeo
sorprendido.
-Eh..y esto?
-Tu regalo de san valentín -
ella sonrio mientras se levantaba - bueno, tengo que irme...
-Te
acompaño, seguro el guardia querra ver que realmente somos
novios.
Sango noto la mirada sucia del chico.
-Ni se te ocurra
besarme o abrazarme depravado!
-Claro que no haría eso. A
propósito, quiero preguntarte algo
-Sí, que
cosa?
-Te gustaría tener un hermoso hijo conmigo?
Lo
siguiente que Miroku recibio fue un pellizco en el hombro mientras la
chica se alejaba molesta. El chico sonrio enormemente...mientras se
frotaba el brazo con insistencia.
Kouga suspiro mientras sus estudiantes se
retiraban. No pudo evitar reprimir un bostezo. El examen había
sido muy largo pero confiaba en que la mayoría saldrían
aprobados.
-Es mejor dormir - penso mientras arreglaba su
portafolios - mañana hay clases temprano.
Entonces al tomar
su celular del cajón, noto que le habían llegado al
menos 3 mensajes y una llamada pérdida.
Tambien feliz
san valentín para tí...
Espero estes bien y suerte
en el examen. Espero todos aprueben.
...te extraño...
Kouga no pudo evitar sonreír. El mensaje
que le había mandado a Ayame había resultado bastante
beneficioso sin querer. Estaba a medio examen cuando se le ocurrio
enviarlo. Ya se había felicitado con Inuyasha y Miroku, pero
jamás había pensado en mandarle un mensaje a una chica
por ese día. Su relación con ella jamás había
tocado un San Valentín. El era tan solitario como el mismo
Inuyasha, aunque odiara a morir a la "bestia" como solía
decirle.
Sin embargo, al ver su celular, noto como el nombre de
Ayame figuraba primero de toda la lista. Sin reprimirse, le mando un
mensaje al momento.
¿Era tiempo de perdonarla?
¿O
al contrario, el necesitaba perdonarse?
Entonces marco el celular
para escuchar el correo de voz. Una voz dulce y conocida
emergio...aunque algo distorsionada.
Te quiero Kouga chan...
El mensaje era corto, pero dejo a Kouga impresionado. Ayame era muy orgullosa y verla expresar así lo que sentía era algo como ver nevar en julio. Se sintio aturdido y conmovido por unos momentos mientras miraba el celular. Una sensación de culpa y remordimiento le lleno mientras dejaba el aparato sobre la mesa.
Inuyasha miro con miedo a Kagome. El
restaurante se encontraba atiborrado mientras el jefe mesonero les
miraba con culpabilidad.
-Lo siento, llegaron tarde y tuve que
ocupar su reservación.
-Pero es que...
-Lo sentimos - se
inclino el jefe mientras se daba la vuelta. Kagome hizo una mueca de
molestia mientras salía del lugar. Inuyasha suspiro. Apenas
había logrado el perdón de ella y ahora otra vez estaba
furiosa. ¿Que acaso no podía salirle algo bien?
-No
te preocupes...
-Eh?
-Sí, no hay problema - sonrio
Kagome - al fin, no quería cenar allí
-Pero...
Entonces
la chica se detuvo y vio un puesto ambulante pasar a lado
suyo.
-Quiero un trolelote.
-Ehhh?
-Sí, quiero uno -
sonrio mientras miraba el puesto - vamos, compramelo si?
-Pero la
cena...?
-Ya encontraremos un lugar, vamos...
Inuyasha se
encogio de hombros mientras seguía a la joven.
Como comenzamos yo no lo se
La historia
que no tiene fin
Ni como llegaste a ser la mujer, que toda la vida
pedi.
Contigo hace falta pasión
Y un toque de poesía
Y
sabiduría, pues yo, trabajo con fantasías.
recuerdas
el día que te cante.
Fue un subito escalofrío
Por
si no lo sabes, te lo dire
Yo nunca deje de sentirlo
Contigo
hace falta pasión
No debe fallar jamás
También
maestría, pues yo...trabajo con el corazón
Cantar al
amor, ya no bastara
Es poco para mí
Si quiero decirte
que nunca habrá
Cosa más bella que tú
Cosa
más linda que tú
Única como eres.
Inmensa
cuando quieres...
Gracias por existir
Como comenzamos, yo no lo se
La historia
que toca a su fin
Que es ese misterio que no se fue
Lo llevo
aquí dentro de mí
Serán los recuerdos que
no
No dejan pasar la edad
Serán las palabras pues
yo...
Sabrás mi trabajo es la voz
Cantar con amor, ya no
bastara.
Es poco para mí
Si quiero decirte que nunca
habrá
Cosa más bella que tú
Cosa más
linda que tú
Única como eres
Inmensa cuando
quieres...
Gracias por existir...
Amen
Miroku abrio los ojos mientras dejaba de
taradear la canción. Eran la una de la mañana y el día
de San Valentín ya había pasado. No podía decir
que había sido el mejor que había tenido, pero si el
más extraño...
...Y hermoso.
Aun podía ver
la imagen de Sango, maquillada, con esa falda que llegaba a la mitad
de la pierna. Se había sentido atraído por ella desde
que la conocio, pero no se había sentido así antes.
Aparte, la sonrisa y los ojos traviesos de la chica eran bastante
cautivadores.
No entendía porque no tenía un novio
formal, alguien debía haber allí
Igual no le había
dicho por no herirlo, quien sabe.
Y es que en el fondo, pese a la
jactancia que mostraba, Miroku no se sentía seguro de sí
mismo. Era inteligente, pero no era alguien que pudiera irradiar ese
carisma que tenían muchos de sus compañeros, aparte de
que se sentía un tanto inseguro con las mujeres. ¿Como
podía serle atractivo a alguien como Sango? Que era bonita y
aparte carismatica?
Eso termino por abrumarlo y hundio la cabeza
entre los brazos.
-Vaya suerte de enamorarme de algo inalcanzable
para mí - penso. Sí. Se había enamorado de esa
chica...no podía negarlo.
Nuevamente el voceo volvio a
hacerse presente.
Personal de intendencia, favor de presentarse
a quirófano.
Miroku suspiro. Por un momento, penso que
ella había regresado, pero eso no era posible. Debía
estar ahora en casa o con algún chico pasando una buena
velada.
-Será mejor tomar algo de aire - se levanto
mientras salía de la unidad de urgencias...
Entre tanto,
extrañamente, Sango estaba en la parada del autobus afueras
del hospital. Hacía dos horas que el servicio ya había
sido suspendido, pero ella aun continuaba allí.
-Diablos! -
mascullo - porque una chica tan linda como yo esta sola en un día
como este!
Era cierto que San Valentín había
terminado, pero aun era la noche de tal. Se supone las chicas bonitas
tenían alguien que las acompañara, pero...
Sango no
pudo evitar enojarse con su forma de ser. Ella misma había
provocado eso. No le habían faltado invitaciones para ese día,
desde cenas en restaurantes hasta veladas románticas en casa
de algunos amigos. Sabía que muchos de ellos le pretendían
y muy en serio. Tenía inclusive algunos anillos que le habían
regalado.
Sin embargo, había terminado por rechazarlos.
¿Que rayos le pasaba por la cabeza?
-Seguro aun espero a
ese chico especial - murmuro. Entonces noto como una persona salía
del hospital, mientras saludaba a los guardias.
-Miroku?
-Sango?
- el chico parpadeo sorprendido - que haces aquí?
-Es
que... - la chica trago saliva - bueno...
-Sango - se acerco -
acaso estas loca? Es muy peligroso estar a estas horas y más
tu sola!
Sango se sonrojo.
-Se defenderme sola, no tienes que
preocuparte.
Pero Miroku parecio ignorarla y saco su bata
cubriendola
-Venga, que también hace frío...vamos
adentro.
-Pero...
-Tu no te preocupes - le guiño un ojo
- ya saben que eres mi novia.
Sango no pudo evitar sonreír
mientras asentía. La bata del chico tenía su
loción.
-Usas Carolina Herrera para hombres? - murmuro.
Miroku asintio.
-Sí, como lo sabes?
-Por nada - Sango se
acurruco dentro de la bata...
Kouga solto un largo bostezo mientras apagaba
las luces del baño. Entonces miro el celular en la comoda y
sonrio. Le había mandado un mensaje a Ayame, pero ella no
habia contestado. Seguro que estaba con alguien más y se había
olvidado de todo.
Sin embargo, en el momento que iba a meterse en
la cama, se escucho el celular canturrear: El mundo he de
cambiar.
-Bueno?
-Kouga-chan! - Ayame canturreo alegremente -
como estas?
-Ayame?
-La misma - se escucho un "hic".
Kouga enarco una ceja.
-Has estado tomando?
-No, para
nada...espera, mi cerveza se enfría...
-Ayame...
-Nada,
nada, no me regañes, si?
-Vale - el suspiro y se sento en
la cama - como estas?
-Contenta. Muy contenta. Se que me
quieres...y me tiene eso contenta.
-Eh sí - Kouga le salio
una gota de sudor - no sería mejor que te durmieras?
-No,
la noche es joven. Aparte, te extraño mi amor
-Yo también,
pero no sería mejor discutirlo cuando estes mejor?
-Estoy
bien. Aparte... - la voz de Ayame se torno seria - es mejor
así.
-Como?
Se escucho un suspiro y como alguien tomaba
un fuerte trago. Kouga hizo una mueca.
-Sabes que te quiero. Se
que me cuesta mucho decirlo a veces...más bien,
demasiado...
-Lo sé, se como eres.
-Sí, y no se
como me soportas. Odio a veces no ser sincera, como el resto de las
chicas.
-Vamos, eso es parte de tu manera de ser.
-Sí,
ya lo se. Pero no te molesta que no sea sincera?
-No, para nada -
sonrio - solo que si me lo dijerás más seguido, pues
tampoco haría mal.
Ayame solto una risita.
-Si
verdad?
-Es ironico que yo no sea el que este tomando.
-Je, ya
ves...cosas de la vida - Ayame rio - no vienes a mi casa? Estoy
sola...
Esto último hizo que Kouga se despegara del
celular.
-Eh...no lo creo.
-Oh vamos, no la pasarás tan
mal - ronroneo la chica.
-Creo que me la pasaría bastante
bien - el rio - pero es mejor si estas en tus 5 sentidos.
-Estoy
en mis 5 sentidos, solo que ahora...ya sabes...
-Ayame...
-Ya,
perdona. Pero es que tu también eres un depravado, no
recuerdas ese beso que nos dimos en mi casa hace unos meses?
Kouga
se sonrojo de recordarlo.
-Bueno, no llegamos a más...
-No,
porque te lo impedi. Eres un pervertido!
-Ya, ya, lo sé.
Pero como no serlo con alguien como tu... - comento Kouga. Ayame
rio
-Te extraño...
-Y yo también...quieres
perdonarme?
-No, yo soy la que debo pedir perdón.
-No lo
creo. No encajo en tu mundo.
-Cierto, no encajas en mi mundo -
ella parecio dar un nuevo trago - oh...se acabo. En fin, pero
nuestros sentimientos siguen uniendonos.
Se hizo un silencio en la
línea.
-Te quiero - dijeron los dos a la vez. Kouga se
sonrojo mientras se escuchaba una leve risa de parte de Ayame.
-Voy
a la cama...
-Eso me alegra.
-Sí, ya no tengo que
beber...
-Ayame... - murmuro el chico.
-Ya, ya, no me
regañes...cuidate mucho si? Y perdona llamarte tan tarde.
-No
hay problema. Ya sabes que por tí, todo se pasa.
-Lo sé
- ella se puso seria - gracias en serio Kouga-chan. Feliz San
Valentín.
-Feliz San Valentín...descansa Ayame.
-Me
estas corriendo? - ella contesto con tono defensivo.
-No, pero
dijiste que te ibas a dormir
-Sí, pero no me corras
-No
lo estoy haciendo - Kouga entorno los ojos. Ayame rio
-Buenas
noches corazón - colgo. Kouga solo miro el celular. Tal vez
era muy noche, pero seguro dormiría tranquilo y en paz.
Inuyasha abrazaba a Kagome por el hombro
mientras el taxi iba de regreso a casa de ella. La noche había
resultado extraña y díficil al principio, pero no pudo
haber terminado de mejor manera. Luego de comprar los trolelotes,
habían llegado a una cafetería cercana al restaurante.
Ordenaron de cenar algo sencillo y platicaron muchas cosas, mientras
Kagome tomaba un capuccino acompañado de un panque. Inuyasha
había pedido algo más fuerte, unos huevos revueltos,
que termino devorando con rapidez. En fin, entre la cena, habían
comentado sobre lo último en anime hasta cuestiones sobre
historia. Era sorprendente como una chica sabía tanto de la
primera guerra mundial, cuando le gustaba más las historias
románticas y el manga.
-En que piensas?
Inuyasha
parpadeo y miro a la joven.
-En nada...
-No te creo, te
quedaste pensativo.
-Bueno, pensaba en lo de esta noche...me la
pase muy bien.
-Yo también - ella sonrio y miro al frente.
Las luces de la ciudad golpeaban su cara. Entonces noto la mirada de
Inuyasha - que tanto me ves?
-No se - el miro para otro lado
molesto. Kagome sonrio.
-No lo hagas, vas a
gastarme.
-Graciosa...
Kagome solto una risita y entonces tomo
la mano de Inuyasha.
-Eh, que haces?
-Siempre te quejas de que
no te hago cariños, si quieres, dejo de hacerlo
-No, para
nada, solo me sorprendí
-Me alegra causar ese efecto en tí
- Kagome se inclino sobre su hombro. Inuyasha parpadeo un poco
sorprendido.
-Es extraño que pese a estar ya 3 meses
saliendo, aun te incomodes en mi presencia.
-Hay costumbres que
jamás se quitan - murmuro el joven apenado. Kagome solo nego
con la cabeza. Entonces el taxi se detuvo. Los dos bajaron
rapidamente. Inuyasha iba a pagar, cuando noto la mirada de la
joven.
-Vale, prometo hacerlo dentro del taxi la próxima
vez... - el sonrio. Kagome asintio con gesto autoritario.
-Es que
es peligroso, pueden asaltarte.
-Esta bien, ya sabes que te
protegería - Inuyasha hizo un gesto desdeñoso con la
mano.
-Eres un cabezota.
Inuyasha solo sonrio mientras se
detenían frente a la casa de Kagome. La luz de la cocina
estaba encendida y se pudo ver a la señora Higurashi en el
fondo, saludar al joven. Inuyasha le correspondio el gesto.
-Vaya,
al fin te comportas.
-Vamos, que aprendo lento, pero
aprendo...bueno, vas a dejar de criticarme o abrazarme?
-Insinuas
que mis criticas no son buenas? - Kagome elevo la voz
peligrosamente.
-No, son bastante instructivas, pero también
un abrazo no estaría nada mal
Kagome se cruzo de brazos
molesta, pero entonces se inclino sobre el chico y lo estrecho con
fuerza. En su mano aun conservaba la rosa.
-Gracias por la
velada.
-No fue nada... - susurro él. Entonces se separo y
noto como la chica había cerrado los ojos y alzaba la cabeza
hacia él. Inuyasha parpadeo sorprendido...sin más, se
inclino hacia ella.
Sin embargo, Kagome solo sintio como unos
labios se posaban...pero en su nariz. La chica parpadeo sorprendida y
solo vio como Inuyasha salía corriendo de allí.
-Inuyasha!
- grito Kagome - abajo!
Tal fue el grito que Inuyasha
sin querer piso una piedra y tropezo justo en los escalones. Solo se
pudo escuchar como traqueteaba en las escaleras entre "ays"
y "ouchs" hasta que se oyo un golpazo. Ksgome se dio la
vuelta molesta mientras azotaba la puerta de la cocina. Abajo,
Inuyasha estaba en el suelo, con una Xx en cada ojo.
-Eso dolio -
murmuro lastimado...
-Inuyasha?
El susodicho agito la cabeza y
se levanto del suelo adolorido. Fue cuando noto quien le
hablaba.
-Kykyo? Tu aquí?
-Gracias - sonrio Sango mientras Miroku le
tendía un café en la mano - no vas a tomar?
-No, no
me gusta el café.
-Entonces como te mantienes
despierto?
-Con voluntad y buenas dosis de comida - Miroku
desenvolvio un sandwich. Sango sonrio y sorbio del vaso.
-Esta
rico...pese a ser de una maquina...
Miroku asintio mientras veía
como una ambulancia salía por la entrada.
-Espero no estar
quitandote tiempo
-No, luego de que viniste, casí no ha
llegado gente - el sonrio - así que te agradezco por una noche
tranquila.
Sango le correspondio el gesto y miro hacia el
cielo.
-Mi madre debe estar pensando que estoy en una fiesta o
cena.
-Entiendo, porque no saliste con algun chico? Seguro debes
tener muchos pretendientes.
Miroku se callo. Sin querer, había
hecho esa pregunta que tanto le había obsesionado
Sango
suspiro y le miro.
-Porque ninguno me interesa...no sé...no
me llaman la atención, no para disfrutar un día como
este.
-Entiendo... - Miroku no pudo evitar sonreír - me
alegra que estes aquí.
-Sí, extraño lugar
para pasar el San Valentín.
Entonces lo que sucedio a
continuación fue extraño. Miroku miro a Sango. Ella le
sonrio e inclino la cabeza dejando el vaso a un lado. Miroku parecio
entender el gesto y se inclino sobre ella. Sango elevo la cabeza y
cerro los ojos mientras Niroku inclinaba los labios sobre los de ella
y le imprimia un suave beso. Sango sonrio y repentinamente lo abrazo.
El le correspondio el gesto estrechandola.
El beso duro varios
minutos, cuando finalmente se separaron. Sango estaba un poco
sonrojada mientras Miroku solto un largo suspiro.
-Es raro que me
sonroje - murmuro la chica.
-Vaya frase más
romántica...
-Era un cumplido - sentencio ella mientras
señalaba sus mejillas - yo...siento si el beso...
-Me
encanto...
Sango sonrio ampliamente. Sin embargo, noto como una
mano estaba en cierta zona de su cuerpo, acariciandola.
Lo
siguiente que vino fue un puñetazo que mando a Miroku por los
suelos. Sango le miro con molestia.
-Por si no lo sabes, yo no
suelo dar bofetadas. Golpeo con el puño cerrado - mascullo
furiosa. Miroku sonrio con la marca de los nudillos en el pomulo
derecho...
So you're leaving in the morning on the
early train
I could say everything's alright
And I could
pretend and say goodbye
Got your ticket
Got your suitcase
Got
your leaving smile
I could say that's the way it goes
And I
could pretend and you won't know
That I was lying
Cause I
can't stop loving you
No I can't stop loving you
No I won't
stop loving you
Why should I?
We took a taxi to the
station, not a word was said
And I saw you walk across the
road
For maybe the last time I don't know
Feeling humble
I
heard a rumble
On the railway track
And when I hear that
whistle blow
I'll walk away and you won't know
That I'll be
crying
Cause I can't stop loving you
No I can't stop loving
you
No I won't stop loving you
Why should I?
Even try
……I'll always be here by your side
Why, why, why ……I never
wanted to say goodbye
Why even try ….I'm always here if you
change, change your mind
So you 're leaving in the morning on
the early train
I could say everything's alright
And I could
pretend and say goodbye
But that would be lying
Cause I
can't stop loving you
No I can't stop loving you
No I won't
stop loving you
Why should I even try?
Kagome caminaba por las escalinatas del templo
con rapidez. Era cierto que aun seguía aun molesta con
Inuyasha, pero también quería ver sino se había
lastimado.
-Ese tonto solo me da problemas - penso molesta con un
botíquin en manos. Iba a doblar la esquina, cuando escucho
voces. Se detuvo en seco y se refugio en la guardilla. Abrio los ojos
sorprendida Eran Kikyo e Inuyasha.
-Veo que pasaste un buen San
Valentín - musito la chica fríamente. Inuyasha le miro
con tranquilidad.
-Sí - miro hacia el templo - acabo de
dejar a mi cita.
Kikyo asintio. Kagome fue cuando se dio cuenta de
lo hermosa que era. Su piel era blanca y sus ojos castaños
eran brillantes, con un cierto destello verdoso. Aparte su cabello
castaño terminaba en una enorme coleta.
-Yo también
salí. Musou fue muy amable en traerme.
-Supongo es tu nuevo
novio no?
Kikyo asintio y se acerco a Inuyasha.
-Sabes, aun no
puedo olvidar lo que tuvimos. Esos dos San Valentines fueron muy
buenos.
Kagome sintio una punzada de dolor en el pecho. No pudo
evitar suprimir un suspiro de molestia y tristeza.
-Sí,
pero todo cambia no?
Kikyo parecio desconcertada con la
respuesta.
-A que te refieres?
-Bueno, he aprendido que las
cosas vienen y van, lo importante es tu
presente.
-Entiendo...entonces me has olvidado?
-No Kikyo, el
pasado no puede obviarse - Inuyasha metio las manos en los bolsillos
de su pantalón - no podría olvidar lo que
hicimos...fueron momentos muy bonitos.
-Entonces...?
-Sin
embargo, ahora son solo eso - Inuyasha paso a lado de Kikyo y la miro
- recuerdos.
-Entiendo - la joven sonrio fríamente -
entonces ya no sientes nada por mi?
-Quizás nostalgia y un
cierto sentimiento parecido al cariño - le sonrio - sigues
siendo muy guapa como siempre.
-Gracias - entonces la sonrisa de
Kikyo se hizo calida. Kagome apreto los puños con furia. Ese
maldito coqueto!
-Pero - la sonrisa de Kikyo se esfumo - ha
cambiado la forma en que me miras...ya no tienes ese brillo para
mí.
-Como?
Kikyo señalo el templo.
-Cuando te
levantaste, miraste hacia arriba...con ese mismo brillo.
-Feh -
sonrio el chico - no se a que viene ese comentario tan cursí.
-Te
gusta esa chica no? Y mucho. Nosotros siempre pasabamos en la casa el
san valentín. Primera vez que veo que sales...
Kagome
parpadeo sorprendida. Eso no lo sabía.
-Creo que ella lo
vale no? - Inuyasha se puso serio y se dio la vuelta - un gusto en
verte nuevamente Kikyo.
-Digo lo mismo. Espero no me
olvides.
Inuyasha nego con la cabeza
-El presente es lo que
importa. Mientras el presente siga...el futuro también.
Kikyo
suspiro y levanto la mano para atraer un taxi mientras Inuyasha se
perdía calles abajo. Kagome se recargo sobre la guardilla.
Entonces no pudo evitar reprimir una sonrisa mientras apretaba el
botíquin.
-Yo sere tu presente - se dijo a sí
misma.
Entonces un ruido repentino hizo que casí se
desmayara. Noto que aun llevaba su celular y lo saco
rapidamente.
-Tonta - se escucho la voz de Inuyasha - eres mi
presente...cuidate.
Kagome solo escucho el click y miro el
celular. ¿El sabía que ella había estado
escuchando?
-Inuyasha - la chica apreto el celular - TE
OOOOOOOOODIOOOOOOO!
Entre tanto, el chico había guardado
el aparato, cuando estornudo fuertemente.
-Hmrrf...de seguro
alguien esta hablando mal de mí - sonrio mientras se dirigía
hacia su casa. Ayame parpadeo confusa mientras apagaba el
radio-despertador. Había programado la alarma para despertarse
a las 7 de la mañana, pero había pasado una media hora
sonando. Sin embargo, esa canción la desperto sin
querer...
-Ya entiendo - se enderezo en la cama - esa canción
me la dedico Kouga antes de terminar...
Sintio una ambivalencia de
alegría y amargura. Aparte de una terrible jaqueca.
-Me
estoy haciendo vieja - penso mientras sentía una cruda como
pocas. Abrio la puerta y vio como Kouga estaba enfrente suyo con una
pastilla en mano y un vaso de agua. En la otra mano, sostenía
un helado de fresa.
-Ah, gracias - sonrio la chica tomando la
pastilla y luego el trago de agua. Fue cuando reacciono - KOUGA! QUE
HACES AQUÍ?
-Pense en venir a visitarte.
-Pero es
que... - la chica se tapo el cuerpo con las manos.
-Tu famila
salio y me dejo a tu cuidado. Aparte de que te ocultas? No creo que
tengas algo que no halla visto - replico con malicia.
-Eres un
sucio - espeto la chica metiendose en la cama. Kouga rio y se sento a
su lado.
-Venga, no te enojes.
Ayame puso mala cara. Entonces
reparo en el helado
-Eso es para mí?
-Sí, supongo
te haría falta no?
Ayame asintio y tomo el pote. Con
rapidez comenzo a devorar el helado.
-Cuidado, te dolerá la
cabeza.
-No, ñam..para nada...esta buenísimo. Muchas
gracias...como sabías que...?
-Te conozco, no?
Ayame
sonrio y dejo el pote a un lado.
-Muchas gracias, en serio.
-Na,
deja eso. Ahora terminate tu helado...que bien que me costo.
-Tacaño
- espeto la chica mientras volvía a la carga. Entonces noto la
mirada del chico - que sucede?
-Bueno, tengo que algo que
pedirte...espero aceptes
Ayame fruncio el cejo extrañada...
Miroku emergio del hospital a las 3 pm con un
gesto de cansancio. Al menos la guardia había terminado y
podía dormir el resto de la tarde.
Aunque no podía
quejarse: la había logrado besar y pese que Sango parecio
tener amnesia luego de ello, no había pasado la cosa a
mayores.
-Te notas exhausto - se escucho una voz frente de él.
Miroku elevo la vista y vio a la chica esperarle en la parada del
bus, la misma en la noche anterior.
-Sango, que haces
aquí?
-Supongo que esperarte...me levante temprano - ella
sonrio.
-Eh, si vienes a enojarte conmigo por lo que paso
ayer...
Sango se acerco y nego con la cabeza.
-No, disculpame a
mí. Solo que todo fue tan rápido, que me espante y no
supe como reaccionar.
Miroku también sonrio.
-Esta
bien...si quieres, podemos irnos más lento.
Ella asintio y
entonces tomo su mano con cuidado.
-Sí y si me tocas como
lo hiciste ayer, te mato!
-Eh...sí...lo tendre en cuenta -
Miroku noto como llegaba el autobus - te acompaño a tu
casa?
Ella asintio mientras le tomaba el brazo sorpresivamente.
Miroku parpadeo pero Sango solo le sonrio mientras subían al
bus.
-A proposito Sango, tengo algo que pedirte,
aceptarias?
-Espero no sea nada pervertido.
-No, en lo absoluto
- sonrio el chico enormemente.
Fin del capítulo
Notas del autor.
Luego de un bloqueo de
varios meses, al fin pude terminar este capítulo. Se que
muchos me han reclamado porque no lo había continuado
(inclusive cierta personita U que amenazo con gritar "abajo".
No se fíen del review No se fíen del review ),
pero primero la falta de la pc (la cual ya esta compensada, gracias
Sam) y luego bastante trabajo.
Pero estoy satisfecho con lo que he
escrito. Ahora como ven, a diferencia del primer capítulo,
aquí se hace más un analisis de los sentimientos y
pensamientos de cada personaje, así sus relaciones
interpersonales con su respectiva pareja. No puedo negarlo, soy
partidario de las que estoy manejando ahora (en especial Kouga y
Ayame, ni se diga Sango y Miroku). En el próximo capítulo
igual incluire algo de Rind y Sesshomaru (por fin aparecera el
hermano de Inuyasha) así también de Kikyo. Para los
fans de la pareja Kikyo e Inuyasha, no odio a la sacerdotisa,
simplemente se me hace mejor pareja Kagome para Inuyasha (aparte de
que como el mismo Inuyasha dice, el carácter de la chica es
incomparable).
Use un par de canciones para inspirarme, una de
ellas es de Eros Ramazzotti, "la cosa más bella" y
otra del genio Phil Colllins, "I can´t stop loving you"
del album Testify.
Se supone el tercer capítulo ya también
debería estar listo, pero espero tener este listo para dentro
de un mes máximo.
Finalmente, agradezco a todos los me
enviaron reviews en el prometo contestar todos sus
comentarios en el próximo capítulo. Y claro, esta
historia va dedicada a mi Kagome particular.
), pero primero la falta de la pc (la cual
ya esta compensada, gracias Sam) y luego bastante trabajo.Pero estoy
satisfecho con lo que he escrito. Ahora como ven, a diferencia del
primer capítulo, aquí se hace más un analisis de
los sentimientos y pensamientos de cada personaje, así sus
relaciones interpersonales con su respectiva pareja. No puedo
negarlo, soy partidario de las que estoy manejando ahora (en especial
Kouga y Ayame, ni se diga Sango y Miroku). En el próximo
capítulo igual incluire algo de Rind y Sesshomaru (por fin
aparecera el hermano de Inuyasha) así también de Kikyo.
Para los fans de la pareja Kikyo e Inuyasha, no odio a la
sacerdotisa, simplemente se me hace mejor pareja Kagome para Inuyasha
(aparte de que como el mismo Inuyasha dice, el carácter de la
chica es incomparable).
Use un par de canciones para inspirarme,
una de ellas es de Eros Ramazzotti, "la cosa más bella"
y otra del genio Phil Colllins, "I can´t stop loving you"
del album Testify.
Se supone el tercer capítulo ya también
debería estar listo, pero espero tener este listo para dentro
de un mes máximo.
Finalmente, agradezco a todos los me
enviaron reviews en el prometo contestar todos sus
comentarios en el próximo capítulo. Y claro, esta
historia va dedicada a mi Kagome particular, que sino fuera por ella,
mi vida sería bastante aburrida jeje. Nos vemos en el
siguiente episodio.
