Chapter Four: Without You

"Hm..." Una silueta se mueve lentamente dentro de un espacio oscuro y algo reducido. De repente una especie de luz llena todo el espacio revelando de este modo la identidad de la silueta. Esta está amarrada a cadenas y su boca esta ligeramente vendada con cintas impidiéndole hablar. Lentamente alguien se acerca a esta persona con pasos algo largos y firmes.

"Kikyou…" La persona dibuja una sonrisa arrogante antes de continuar. "¿Dormiste bien?…jeje" El tono de arrogancia en la voz de la segunda persona hacen que la Miko ponga una expresión de disgusto. Trata de liberarse un poco pero al parecer le resulta imposible. Sus manos estaban totalmente estiradas por las cadenas que se conectaban con el techo. Kikyou trato de hablar pero le fue imposible debido a las vendas. Naraku se agacha y con sus dedos levanta levemente el rostro de Kikyou por la barbilla. "¿Sabes algo, mi querida Sacerdotisa?" Naraku hace una pausa mientras le va quitando poco a poco las vendas que le impiden hablar a la Miko. "Al enterarme de que seguías con vida, pensé que a lo mejor estarías con Inuyasha… ¿Pero quien podría pensarlo…Tu y Sesshoumaru, eh? Nunca me lo hubiera si quiera imaginado."

El Youkai termina de quitarle las vendas a la Miko. "Idiota…" dice la joven Sacerdotisa y despues le escupe al Youkai. Naraku en respuesta le agarra firmemente el rostro y acerca el suyo al de ella. "Hm…siempre tan valiente ¿No, Kikyou?...A pesar de que estes imposibilitada sigues desafiándome…" El Youkai pega sus labios con los de la Miko. Kikyou dilata sus ojos ante el beso de su enemigo, no se esperaba tal cosa.

"No te emociones, era solo un beso de despedida…" Naraku se pone en sus pies y transforma su mano en lo que parece ser una cuchilla. "Hm…Adiós, mi querida Kikyou".


Holis! Como estan? xP Seeeh aparecí al fin! Ya pude terminar este cuarto capitulo en esta última semana de Mayo. Lo que pasó es que la semana pasada andaba en examenes y la ante pasada en repaso y recobrando todo lo que había perdido del bimestre y pues si anduve muy ocupaditica realmente...Pero ya no importa! Porque al fin pude subir el chapter xP Este chapter si tiene varias cosas algo raras y que nunca se podran ver en la seria original o,O pero weno! Leanlo y espero les guste! x3

Disclaimer: Pss ya saben! Inu y Cia. no me pertenence...Pero Hikaru, Itachi Oda y la original Hikaru Oda si me pertenecen o.Ó ah si...Zerou tambien x3

Agradecimientos: Gracias a todos aquellos que me pusieron reviews! Los kiero arto! x3 Gracias a Kikyou Beautiful, Miko-Izayoi-Hime y a Botan-Peony! Grax a todas por escribir xP y me alegra mucho que les guste mi fic!


"Awm…que rico" Una joven Miko esta dentro de un pequeño arrollo refrescándose a si misma. "Kom hir, Hikaru-chan! Dis is delichos!" llama a su amiga la cual esta a la orilla de este mirándola con una extraña mueca en su cara. Hikaru vuelve a levantar su revista y sigue leyendo. "Es 'Come Here' y 'this is delicious', Kagome…" La joven Miko se ríe nerviosamente por su error, despues se sumerge en el arrollo nuevamente. "Vamos, Hikaru. ¡Te va a gustar!" Seguía diciendo Kagome tratando de convencer a su amiga americana la cual pretendía no escucharla.

"No pienso meterme. Mi piel es sensible…" hace una pausa mientras pone su revista a un lado y mira a su amiga. "¡Y mucho menos me meteré a ese arrollo sabiendo que hay pervertidos cerca!" dijo mientras señalaba a donde se suponía debían estar Miroku, Shippou e Inuyasha. "Atciu!" El monje libero un pequeño estornudo repentinamente. "¿Quién estar hablando mal de mi?" dijo con una sonrisa despreocupada en su rostro. La joven pelirroja se levanta de su lugar y pone sus manos en sus caderas mientras mira a su amiga con una ceja arqueada. Kagome le da una mirada para tratar de convencerla pero todo lo que recibe de Hikaru es una mueca de disgusto. La joven americana le da la espalda a la miko y se dirige a donde esta el resto del grupo.

"¡Hikaru-chan!" El pequeño kitsune se abalanza contra la joven haciendo que esta le sonría. "¡Feh¿Dónde esta Kagome!" Inuyasha se para frente a Hikaru con sus brazos cruzados y disgustado. Hikaru en respuesta a la actitud de su nuevo compañero le estira las mejillas y le da una gran sonrisa "Te preocupas demasiado, Inusito, déjala vivir ¿Si?" Hikaru se sienta en una roca mientras saca del bolso de Kagome unos chocolates. Los abre lentamente y mordisquea uno. "¿INUSITO!" grito enojado el Hanyou. Se sentía humillado por la humana, nadie lo iba a llamar a el en diminutivo y menos una chica como Hikaru. No lo iba a permitir mientras estuviera vivo. Miroku y Shippou se reían a carcajadas por la reacción del hanyou por lo tanto recibieron varios golpes del enojado mitad bestia. Kagome se acerca al grupo y mira confusa la escena, despues dirige la vista a donde esta su amiga la cual esta comiendo chocolates. "Hikaru-chan…" dice en voz baja al darse cuenta quien comenzó toda la riña. Era como un don natural el de la muchacha, un don el cual no poseía la vieja Sango; el don de comenzar las peleas y no terminar involucrada en ellas. Una pequeña gota tipo anime se dibuja en la cabeza de Kagome mientras esta trata de calmar a Inuyasha.

"Down…" Inuyasha es estampado contra el suelo. Todos quedan sorprendidos debido a lo que paso. El grupo dirige su vista a donde esta su nueva acompañante. Esta con sus ojos cerrados, una ceja arqueada y sus piernas cruzadas esta tranquilamente comiendo sus chocolates. "¿C-Como lo hi-hizo?" dijo tartamudeando el joven monje. Inuyasha tambien estaba confundido, esta vez la persona que le había hecho "sentarse" no era Kagome…sino Hikaru. La anciana Kaede llegó cabalgando a donde se encontraba el grupo, esta noto que todos estaban mirando a la nueva integrante. La joven americana levanto su mirada de los chocolates y le dio una calida sonrisa a la anciana, se notaba que Hikaru no le importaba que los demás la estuvieran observando como tarados.

"Asi que eso fue lo que sucedió…hm…es extraño" decía la anciana mientras observaba a lo lejos a la joven humana y al monje sentados frente a una fogata. "Kagome era la única que podía hacer que ese hechizo funcionara…" La joven miko se quedo observando a la anciana.

"Esa joven es extraña…su aura es maligna, mas sin embargo sus acciones son buenas…Me pregunto si es humana realmente…" continuaba diciendo la anciana mientras miraba al suelo pensativa. Inuyasha estaba cruzado de brazos y dándole la espalda a todos mientras escuchaba detenidamente las palabras de la anciana. Kagome se acerca un poco a la sacerdotisa y mira a su joven amiga que esta a lo lejos. "Quiere decir que… ¿Puede que Hikaru no sea humana?... ¿Pero como? Sango si era humana…" la anciana miro a la joven sacerdotisa mientras la misma pregunta retumbaba en su mente. Inuyasha se levanta con sus ojos cerrados y se voltea a ver a las dos.

"Las almas de las personas que pasan a otros seres en un futuro lejano, pueden estar propensas a cambios…" dijo el hanyou con aires de sabiduría. "Puede que eso haya pasado con el alma de Sango…" La anciana y la miko se quedan mirando al hanyou. Quizá él tenia razón, quizá la alma de Sango cambió mientras esta hacia su largo viaje hacia su nuevo huésped. Pero aun asi esto no explicaba que tipo de ser era Hikaru, si era humana o otra cosa. Muchas cosas dejaban en duda la supuesta identidad de la joven; como lo fue la liberación de su aura oscura y el conjuro hacia Inuyasha. Lo único que tenían claro los tres era que Hikaru era extraña.

El sol apenas esta saliendo en el antiguo Japón. Inuyasha y compañía se despiden de la anciana Kaede y emprenden su viaje en busca de Naraku. Hikaru miraba detalladamente todo lo que se encontraba a su paso, aun era extraño para ella todo este ambiente. Ella que estaba acostumbrada a un mundo usualmente lleno de personas, automóviles…y más personas. Una joven que había nacido y se había criado en una de las ciudades más grandes del país estadounidense como lo es Nueva York. Una joven que años despues se mudo a una de las ciudades más pobladas como lo es Tokio. Simplemente no estaba acostumbrada a este ambiente, quizá le iba a costar un poco acostumbrarse. Kagome mira sonriente a su amiga, era obvio que se sentía algo incomoda con todo esto. Ella lo entendía, era difícil acostumbrarse a un lugar diferente y lleno de criaturas que solo piensan en devorarte la cabeza.

Un individuo saca de pensamiento a la joven miko. "¡Oigan¿Ustedes son guerreros?" preguntó el joven mientras se tiraba ante los pies del grupo y colocaba su frente en el suelo. "¿Huh?" todo el grupo se quedo mirando al individuo con muecas de confusión. "Mi aldea…¡Mi aldea peligra¡Los necesito!...Por favor" decía el humano mientras subía y bajaba la cabeza. Inuyasha con los ojos clavados en el humano simplemente cruzo sus brazos y siguió caminando. No había tiempo para ocuparse de tonterías como esa, él tenia que encontrar a Naraku. Hikaru se agacho lentamente frente al individuo. Este levanto su rostro el cual estaba lleno de lágrimas para implorarle piedad una vez más al grupo. Hikaru, con una calida sonrisa, le ofrece la mano. "Hai…" Inuyasha se detiene al escuchar el 'si' de la nueva integrante.

"¿Quién demonios te crees!" gritó el hanyou enojado. Hikaru arqueo una ceja al ver la reacción de su compañero y despues lo ignoro. El individuo se levanta rápidamente y hace una reverencia ante la joven. "¡Pero si es usted, Tennyo-sama¡Al fin regreso para salvarnos!" El grupo pone una mueca extraña y Hikaru, al no saber el significado de –sama, arquea su ceja. "¿Tenn-que cosa? Disculpe pero no se mucho su idioma" responde con una sonrisa nerviosa y unas gotas de sudor en su rostro. Voltea a ver al resto del grupo para asi poder preguntarles que significaba lo que acaba de decir el humano, pero al ver la cara de sus compañeros lo único que se le ocurrió preguntar fue…"Er… ¿Qué pasa, muchachos?".

"¡Tennyo-sama?" dijo el grupo a unísono.

Una niñita esta dibujando figuras irracionales en la tierra con un pequeño palo de madera mientras espera a que su "padre" regrese a buscarlos a ella y a su sirviente. Jaken por otra parte esta parado mirando hacia el interior del denso bosque esperando de igual manera a su amo. "Rin se esta aburriendo…Extraño a Sesshoumaru-sama" dijo la pequeña mientras dejaba a un lado el pequeño madero y miraba con los ojos llorosos al youkai-verde. "Si no fuera por esa sacerdotisa de pacotilla mi amo bonito no estubi—" El youkai es interrumpido al ser aplastado con una roca gigante. La pequeña se emociona y corre hacia donde apareció la silueta del príncipe de las tierras del oeste. La pequeña abraza con todas sus fuerzas a su amo y despues opta por buscar detrás de el, pero sin encontrar lo que busca. "Sesshoumaru-sama… ¿Dónde esta Kikyou-sama?" pregunto en toda su inocencia la pequeña niña mientras miraba al rostro del Youkai. Sesshoumaru ignoro la pregunta y siguió adelante con una expresión fría.

"¡Sesshoumaru-sama!" gritaba Jaken mientras se quitaba de encima la roca. "¡Sesshoumaru-sama, ya regreso!" corre a donde esta su amo pero al llegar donde él es golpeado, mandado a volar y estrellado contra un árbol. Sigue caminando y se aleja un poco del arrollo seguido por la pequeña niña y dejando al youkai-verde atrás.

"¡Matte, Sesshoumaru-sama!" dice el youkai mientras se dispone a alcanzar a su amo. Pasaron las horas y el pequeño grupo seguía caminando. La pequeña Rin estaba sobre los dragones Ah y Un mientras cantaba una canción que le había enseñada Kikyou. Mientras tanto Jaken estaba preguntándose el porque de la actitud de su amo bonito, estaba acostumbrado a ser humillado y maltratado por su amo pero nunca había visto reaccionar de esa forma al Príncipe…algo pasaba. "Uhm…disculpe amo bonito… ¿Qué se supone que estamos buscando?" dijo en voz baja y algo temerosa el enano sin recibir respuesta alguna de su amo y al parecer no la iba a recibir. El Youkai no se detuvo en ningún momento, siguió caminando y caminando sin parar a pesar de que su sirviente estaba agotado y su "hija" durmiendo. Jaken seguía preocupado por su amo bonito, ya le había preguntado muchas veces a cerca del por qué de su frialdad. El sabia de ante mano que el Príncipe era frío, pero nunca lo había notado tan frío…Era una extraña combinación de Frialdad, Desesperación, y en cierta parte Odio.

"Este… ¿Sesshoumaru-sama? Si no es atrevido de mi parte preguntar… ¿Dónde esta la Humana?" Sesshoumaru al oír la pregunta de su sirviente se detiene y lo mira de reojo asustando al mismo. Su mirada era de desprecio, mirada que despues se torno triste al retirarla de su sirviente. Despues de caminar un poco más, el príncipe decidió detenerse a descansar. Acomodo suavemente a la pequeña humana sobre una tela que había puesto en el suelo, despues opto por alejarse de sus acompañantes. Jaken estaba muy preocupado por su amo, nunca lo había visto asi…algo le preocupaba al príncipe y el youkai-verde sabia que ese algo tenia que ver con aquella sacerdotisa. "Esa humana lo único que ha sabido hacer es traerle problemas a mi amo…Los humanos son problemáticos y despreciables…Y esa Mujer es la más despreciable de todos los humanos sobre la faz d—"Jaken no termino lo que iba a decir al ver la mirada amenazante de su amo. Asustado, el pobre youkai opto por esconderse tras una roca lo más rápido que pudo.

"Jaken…"

"Er… ¿s-si a-mito bonit-to?" dijo temblando el fiel sirviente del príncipe. Sesshoumaru se voltea para ver a su sirviente. Sus ojos colo ámbar llenos de odio se clavaron en la pequeña figura del sapo mientras que la expresión del Perro Youkai se hacia más temible. "Cuida a Rin…" El feo youkai se desmaya ante la presión. Al escuchar bien las palabras de su amo, reacciona y se pone a observar como su amo se retira poco a poco de aquel lugar. Sesshoumaru sentía que cada vez el rastro de Naraku era más presente en el aire. Tal olor le causaba repugnancia y a la vez aumentaba el deseo de destruirlo; ese individuo ya se había burlado de él…pero lo que hizo era imperdonable. El Príncipe no iba a dejar que ese ser tan asqueroso y cobarde se llevara asi por asi a su amada. El Príncipe se detiene un momento. ¿Qué era lo que le estaba pasando¿'Su Amada'? Eso era imposible…Al fin y al cabo ella era una humana y el odia a los humanos. Siempre le tuvo un poco de rencor a su padre por el hecho de que este se enamoró de una humana y ahora…a él le estaba pasando lo mismo. ¿Era posible esto? Si… Por eso quería encontrar a Naraku. Ya no era cuestión de orgullo ni de poder, ahora a él solo le importaba tenerla de vuelta. Tenerla cerca, verla sonreír, escucharla reír; todo eso le hacia falta al príncipe. Se había acostumbrado tanto a ella a tal punto que ya no podía estar tranquilo sin verla, no podía.

Comenzó a pensar lo peor mediante sin darse cuenta sus pasos se hacían más largos y rápidos a tal punto que ya no estaba caminando más, ahora estaba corriendo. Sentía como cada vez el rastro de su enemigo se hacia más fuerte y más notorio. Estaba cerca, pronto iba a tener a Kikyou de vuelta.

El pequeño grupo estaba caminando hacia una aldea. El aldeano los estaba guiando mientras que Inuyasha no paraba de quejarse ni de pelear con Hikaru. Siempre le molestaba ayudar a los demás ya que eso los atrasaba más en su búsqueda de los fragmentos y de Naraku. "Uhm…Señor, si no es mucha molestia… ¿nos podría explicar el porque llamo a Hikaru-san 'Tennyo'?" El aldeano miró al monje que estaba justo atrás de él y con su cabeza asintió. Los guió hacia el templo el cual estaba en el centro de la aldea y se sentó en una pequeña banca mientras les pedía que tomaran asiento. Hikaru tenia una ceja arqueada en confusión, desde el incidente del "-sama" todo se puso confuso para ella, en cierta parte la situación la frustraba e incomodaba.

El aldeano se aclaro un poco la garganta y miro al grupo de forasteros. "En esta aldea existe una leyenda que es de suma importancia para toda la región…" señaló una de las paredes del templo la cual tenia unas especies de jeroglíficos dibujados en su superficie, despues prosiguió con su historia. "Esta cuenta que hace más de 5,000 años existió, en esta misma región, un gran y hermoso castillo. Se dice que este estaba construido con sangre de aquellos que osaban atacar al propietario de dicho castillo. ¿Cómo? Pues este cristalizaba la sangre de aquellos y la transformaba en grandes muros los cuales eran casi indestructibles. Este temido hombre era conocido como un Lord de la Oscuridad, su nombre era Itachi Oda. Tubo una descendencia enorme, pero entre sus hijos tubo a una única niña a la cual sacrificó tiempo despues para hacerse más poderoso y ganarse el temor de toda la región. La pequeña era la luz de esta aldea. Era como un ángel que había venido a liberar a los aldeanos de su cruel emperador. Fue un golpe muy duro para la aldea la muerte de la pequeña, por lo que decidieron buscar a una sacerdotisa que la reviviera. Ya que todas se rechazaron a esto, no hubo más opción que buscar a una Sacerdotisa Mala."

El aldeano es interrumpido por un monje del templo el cual tambien estaba escuchando el relato. El monje decidió seguir el relato. "Esta la pudo resucitar, pero convertida en una Tennyo…La Tennyo del Caos. Ella fue capaz de liberar a la región del cruel imperio de su padre pero despues de un tiempo perdió su inmortalidad al enamorarse de un humano y falleció. Cada cien años una niña nace y padece el mismo destino que la pequeña Princesa. Mueren y reviven siendo Tennyos. Pero hace 500 años eso dejó de suceder, no sabemos porque. Ahora más que nada necesitamos a la Princesa para que nos salve de la guerra que se avecina sobre nosotros." El monje dirige su vista hacia Hikaru la cual se asusta un poco por la mirada del individuo. "No alegra tanto que haya regresado con nosotros, Hikaru-hime" Todos quedaron atónitos. Nadie se explicaba como era que el monje sabía el nombre de la joven americana.

"¡Feh! Me temo que usted se ha equivocado, monje inútil. Ella no es nada más que una molestia transformada en humana." El comentario hizo enojar a Hikaru y esta le comenzó a pegar al Hanyou el cual contestó a los golpes con gritos. "Se equivoca" dijo el monje. Todo el grupo dirigió su vista a donde estaba el monje nuevamente. "Ella no es un ser cualquiera. Estoy seguro de que se habrán dado cuenta de eso. Su aura despide cierta energía oscura, energía la cual nosotros conocemos como 'la presencia del caos'. Como dije, Hikaru Oda fue revivida por una Sacerdotisa Mala y gracias a esto pudo adquirir poderes malignos y fue capaz de dominar las artes de la oscuridad. Pero a pesar de todo esto su corazón era el más grande y misericordioso sobre la faz de la tierra." Hikaru estaba boquiabierta e ida. No había captado nada del mensaje que el monje quería proyectar. Todo era tan confuso para ella en estos momentos, y se le hacia aun mas difícil por el hecho de que no dominaba el idioma japonés.

El Terrateniente de la aldea decidió hospedar al grupo de forasteros y trato de darles la mayor cantidad de lujos que pudo: Comida en abundancia, placenteros baños con agua tibia, divertidos bailes, etc. Al caer la noche todos se retiraron a sus debidas habitaciones y se pusieron a descansar, todos a excepción de Hikaru. Ella quiso dar una pequeña vuelta por el pequeño poblado el cual a esas horas de la noche parecía desierto. Quería averiguar sobre su "vida pasada" y de todo ese asunto de la hime-no-se-que-cosa y la tenn-whatever, sentía una gran curiosidad del tema y realmente quería saber que significaban todos esos términos raros. Llegó a donde se encontraba el templo, despues de darle la vuelta diez veces al poblado (xDDD), y toco a la gran puerta de este.

Silencio.

Se sentó en las pequeñas escaleras de madera. "Boring…hmph" susurró la joven estadounidense mientras apoyaba su cabeza sobre la palma de su mano. "Why me? ...Why not Kagome? She's more used to this crap…I can't even talk this weird-complicate-japanese-language! It's so damn difficult!" la joven cubrió su rostro con sus manos mientras seguía lamentándose en su idioma. Todo esto era simplemente complicado para ella. Antes pensaba que lidiar con el amor platónico-imposible que Zerou sentía por ella era difícil. Y ahora esto…nada podía ser peor, o al menos eso pensaba ella.

Un youkai camina solitariamente mientras las frías gotas de lluvia caen sobre su cuerpo. Se detiene al ver un gran castillo el cual esta en frente de el. "Hm…" examina cada aspecto de la entrada y se dispone a adentrarse al castillo. Una gran ejercito de cadáveres lo atacan y este con un solo movimiento de su espada los pulveriza a todos sin excepción.

"Uh, Sesshoumaru…siempre tan aburrido" Una mujer sale de las sombras con unos abanicos en sus manos. Sus ojos rojos se clavan en el Perro Youkai el cual la esta mirando con desprecio. "No tengo tiempo para seres insignificantes" dijo seriamente el príncipe mientras se acercaba a donde estaba ella. Kagura hace una pequeña mueca de disgusto al escuchar las palabras de Sesshoumaru. Abre uno de sus abanicos y libera una gran ráfaga contra el intruso. "¡La Danza De Las Cuchillas!" grandes navajas se van acercando poco a poco al youkai el cual las repela fácilmente y deja inconciente a la manipuladora de los vientos. Sesshoumaru percibe una presencia y mira una de las entradas del palacio de reojo, su olfato no lo engañaba, era Naraku el que se estaba acercando a él. Sesshoumaru se volteo lentamente para confrontar cara a cara a su repugnante enemigo.

"¡KAZE NO KIZU!" Un rayo enorme proveniente del interior del bosque amenaza a ambos youkais. Un hanyou se acerca rápidamente a donde están ambos y amenaza con el filo de su espada a Naraku. "¡Feh¡Naraku!" Inuyasha levanta el filo de su espada preparado para atacar a su oponente cuando unos hilos de veneno lo atacan y lo estrellan contra una de los muros del castillo. "No te metas, Inuyasha. Este asunto es entre Naraku y yo" Sesshoumaru se pone entre su medio-hermano menor y su enemigo de toda la vida. El hanyou se levanta poco a poco gruñendo y mirando desafiantemente a su hermano.

"¡KUSO¡SESSHOUMARU QUITATE¡KAZE NO KIZU!" Inuyasha ataca a su hermano el cual se voltea rápidamente y evita el rayo de Tessaiga usando una de las técnicas de su espada. "¡Souryuuha!" unas ondas celestes son liberadas de la espada de Sesshoumaru las cuales crean una especie de campo alrededor de el. "¡Je¡Eso era lo que estaba esperando! ¡BAKURYUUHA!" Naraku estaba parado observando la batalla entre hermanos mientras se dirigía al interior de la enorme estructura. Para sorpresa del hanyou su Bakuryuuha es desviado y regresado a donde esta él, por lo tanto el recibió todo el daño. Sesshoumaru al ver a su hermano medio-muerto se dispone a seguir a Naraku el cual ya había desaparecido del lugar "misteriosamente". Inuyasha se levanta poco a poco en su mal estado y miro fijamente a su hermano mientras este trataba de encontrar el rastro de Naraku. "Se-Sesshoumaru…yo des-destruiré a Naraku…n-no tu…" El príncipe se detiene al escuchar las palabras del hanyou, lentamente voltea un poco su cabeza para ver de este modo a Inuyasha.

"Esto no te interesa…No dejare que Naraku le haga algo…Yo no soy tu, Inuyasha…No la dejare morir" al finalizar continuo buscando al youkai. Inuyasha estaba con sus ojos dilatados mientras recibía ayuda de sus compañeros. Kagome también había escuchando las palabras de Sesshoumaru. ¿No la dejara morir? Acaso se referirá a…Los pensamientos de la joven miko son interrumpidos por las palabras del hanyou "…Kikyou…Ella… ¿Esta en peligro?" El ánimo de Inuyasha fue rápidamente disminuyendo. ¿Cómo no pudo verlo? Sesshoumaru no estaba ahí por el querer matar a Naraku…Él estaba ahí para recuperar a Kikyou. Kagome miro tristemente la expresión que el hanyou tenia en el rostro. Era seguro que él estaba pensando en ella…a pesar de saber que el corazón de Kikyou no le pertenecía más, el seguía sintiendo algo muy fuerte por ella. De repente unas cuchillas se van acercando a donde están ambos, Inuyasha con la poca fuerza que aun tenia se echa a un lado llevando con el a Kagome y evitando de este modo las cuchillas. "¡…Kagura!" dijo casi sin fuerzas el hanyou. La manipuladora de los vientos esta sonriente mirando al hanyou herido. Sabía que esta era su oportunidad para matarlo, este era el momento.

Antes de que pudiera levantar nuevamente sus abanicos es ataca por un enemigo sorpresivo, el cual la ataca desde atrás. "Ku-kuso…" Kagura se voltea un poco para ver la cara de su agresor pero lo único que consigue ver antes de desmayarse son unos ojos totalmente negros y vacíos. Kagura cae inmóvil al suelo dejando caer sus abanicos a algunos centímetros lejos de ella. Varios youkais se avecinan contra el atacante de Kagura. El ser muerde uno de sus dedos y cristaliza la sangre que sale de la herida creando de este modo una gran espada rodeada por una gran energía maligna "¡Kaosu no yaiba!" Todos los monstruos son pulverizados por las ondas malignas despedidas por la espada. La joven miko miraba perpleja al ser que estaba atacando a los youkais. "¿Hi-Hikaru-chan!" La joven americana dirigió su mirada clavando de este modo sus ojos vacíos y oscuros en la miko. Repentinamente tales ojos cambiaron a ser los ojos azules originales de la joven y esta calló de rodillas con una mueca de confusión en su cara. El monje se acerco a ella y se arrodillo a su lado preocupado "¿Qué paso, Hikaru-chan?" la joven miro a su compañero apunto de contestarle pero no puede omitir palabra al sentir la mano del monje en su trasero.

Sesshoumaru ya estaba frente a frente con Naraku. Ambos ya se estaban enfrentando. "¿Dónde esta?" preguntó el príncipe mientras amenazaba a su oponente con su espada, Tokijin. Naraku dibujo en su rostro una sonrisa arrogante mientras miraba fijamente al Príncipe. "Jajaja, Lord Sesshoumaru…Si me esta preguntando por la Sacerdotisa…ella esta…muerta." El Youkai se ríe a carcajadas por sus palabras. Sesshoumaru quedo perplejo al escuchar las palabras del demonio, el no podía creerlo. En un ataque de ira el príncipe cambió a su apariencia de bestia ya atacó al demonio el cual con uno de sus movimientos audaces fue capaz de huir y desaparecer del lugar. Sesshoumaru regreso a la normalidad…Nuevamente el cielo se oscureció y pequeñas gotas de lluvias cayeron sobre la superficie de la tierra en la cual estaba el castillo. El Youkai con la cabeza mirando al suelo entró a donde se sentía más el olor de la Sacerdotisa y al llegar a donde estaban unas cadenas adheridas a la pared encontró parte del kimono de la misma. Sus ojos se dilataron un poco al detectar sangre esparcida por la mayor parte de la tela. Se levanto lentamente y le dio la espalda al muro disponiéndose a salir del cuarto. Paso al lado de su medio-hermano menor e ignoro todo lo que este le gritó, el estaba muy distante.

Ya lejos del castillo se detuvo en medio del bosque. Ya no estaba lloviendo en la región, las pequeñas gotas aun caían de las ramas de los árboles alrededor de él.

"…Kikyou" susurró lo más bajo que pudo. Pequeñas lágrimas cayeron por las mejillas del Youkai, el cual las limpió lo más rápido que pudo y siguió su camino. Mientras seguía caminando no pudo evitar caer de rodillas mientras pequeñas lágrimas botaban de sus ojos.


Wenu...snif...aca acaba este chapter...Sesshie-kun! No tes trsite! >D que mala soy ¿no? Wenuuu esperen el prox chapter bytes! Espero les haya gustado este chapter n,n! Matta ne!