Emociones Incontenidas

Continuaba sumida en su abismo, sin encontrar paz... y las cosas empeoraban ya no sólo lo extrañaba a él y a sus amigos, ahora sentía indispensables las cosas que antes la molestaban... el ruido de los videojuegos, los días de diversión bajo el sol, las bromas de Chico Bestia, todo le parecía lejano hasta el punto de perderse en un sueño.

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Robin se quedó observando el pentáculo y las flamas mucho tiempo, intentando descubrir la manera de usarlo para comunicarse con Raven, su ausencia y el temor de que algo pudiera sucederle lo tenían muy mal, había descuidado todo inclusive a Slate. Salió de su habitación y reunió a los titanes alrededor de la estrella de cinco picos.

Ésta es la única forma que tenemos para encontrarla.

¿Y cómo podemos utilizarlo para traer de regreso a nuestra amiga Raven?

No lo sé... no estoy seguro, pero tengo una idea, siéntense todos alrededor y piensen en ella, intenten comunicarse con ella. –Cyborg y Chico Bestia lo miraron sin intenciones de hacer lo que les sonaba ridículo mientras Starfire obedecía sin vacilar. -¿Quieren encontrarla o no? –los escépticos se miraron y lo hicieron.

Todos estaban sentados en círculo y se concentraron en su amiga, en llamarla y sentir su presencia.

"Raven, Raven...¿Nos escuchas? Somos nosotros, tus amigos...¿Dónde estás? Contesta... Raven por favor, habla con nosotros... estamos... estoy muy preocupado por ti, por favor háblanos, dinos dónde estar y cuándo vas a volver... dinos si vas a volver, no nos puedes dejar así, todos te necesiten, te necesitamos... te necesito"

Pero nada sucedió, pasaron largo rato intentando llamarla sin ningún resultado, hasta que todos se empezaban a dar por vencidos, menos Robin, vieron cómo de la figura salía una sombra negra que se transformó en su amiga, callada y sin expresión como siempre, sólo que vestía de negro.

¡Raven! –exclamaron todos al mismo tiempo, ella no respondió.

Nos da gusto que estés aquí –dijo Cyborg al tiempo que Chico Bestia se transformaba en perro y lamía la mano de la chica, ella no reaccionó.

Es un gran placer que estés de vuelta con todos nosotros, ahora mismo iré a la cocina a preparar algo para la ocasión –Star se dirigió a cocinar con Chico Bestia y Cyborg detrás de ella, querían evitar un desastre.

¿Por qué te fuiste?

Tú deberías saberlo, Robin... además no debiste haberme llamado, no te lo pedí. –se giró con intenciones de irse, pero fue detenida.

No tengo idea de por qué te fuiste... y no debiste haberlo hecho sin avisar, estábamos preocupados por ti. –ella no respondió, sólo se soltó y recogió la bandeja con el pentáculo sin que Robin la viera.

Star no pudo cocinar, pero los otros dos lo hicieron, cuando todo estuvo listo fueron a buscar a Robin, quién se negó a salir diciendo que tenía cosas que hacer, la verdad es que estaba enojado. Después fueron con Raven, quién también se negó pero no dio ninguna razón. Tres decepcionados titanes comieron las hamburguesas, de tofu y normales, preguntándose por la extraña actitud de los dos faltantes.

Los siguientes días pasaron y la situación are muy tensa, Robin y Raven no se dirigían la palabra, en las batallas la chica terminaba con todo sin tomar en cuenta la seguridad de las personas inocentes y él la regañaba, las cosas no eran como antes, Raven parecía estar enojada todo el tiempo y el negro era su acompañante.

En cierto momento el líder de los titanes pensó que había sido muy desconsiderado con su amiga, algo le estaba pasando y él no era de mucha ayuda, fue a su habitación y entró luego de tocar y no recibir respuesta.

No te dije que entraras.

Vine a hablar contigo, a disculparme. Es obvio que algo te pasa y no quiero ser parte del problema.

¿Parte del problema? Tú eres el problema Robin.

¿Te hice algo malo?

Desde hace mucho que me hiciste algo malo, con tu actitud de héroe y tu personalidad, siempre preocupado por mi, siempre entendiendo mi soledad y cualquier actitud que los otros consideraban extraña.

¿Eso es un problema?

Claro que es un problema... es que no lo entiendes... tú y lo que siento por ti son mi problema.

Lo... que sientes por mi... –sintió cómo su corazón latía de prisa queriendo salir de su pecho.

Lo que siento por ti y la noche que te quedaste de guardia con Starfire. –Robin sintió un balde de agua fría al darse cuenta de que ella sabía del beso, no supo qué decir. –Ahora sabes cuál es mi problema y por qué no quería que me llamaras, por qué me fui y por qué te odio, Robin.

No... no es lo.. lo que piensas ... –las palabras no aparecían, quería expresarle algo y hacerle saber que ese beso fue un error pero no podía el puñal clavado en su corazón con las palabras "te odio" era demasiado fuerte.

¿Entonces qué era?

Raven... tú eres muy especial para mi, nunca quise dañarte, no quiero hacerte daño... y no quiero que me odies, porque... porque yo... porque tú me... –su frase fue interrumpida al ver el pentáculo en un rincón, con los cinco picos pero sólo cuatro llamas encendidas.- ¿Qué pasa? –intentó acercarse al objeto pero ella se lo impidió- Hay sólo cuatro llamas... tú no eres Raven... ¿Quién eres?.

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La chica meditaba en su soledad, decidida a revelarse la única emoción que fue capaz de contener durante todo el tiempo, el odio. Nunca se dio la oportunidad de enojarse con Robin, lo consideró innecesario pero ahora estaba decidida a dejarse sentir para liberarse por completo. Buscó en su interior por largo rato pero no encontró nada, ni un rastro de enojo o rencor, le pareció extraño, las emociones no desaparecen aunque las ignores.

Despertó de su trance pensando qué habría sucedido, de repente lo entendió. Apareció el espejo y miró debajo de su cama, el pentáculo no estaba, pero escuchó la voz de Robin preguntándole a alguien quién era, los miró y se asustó al ver parte de ella misma ahí, temió de sus propios poderes. Abrió un portal decidida a detenerse, aunque no sería tarea fácil, el enojo contenido es siempre un enemigo poderoso.

Un portal se abrió detrás de Robin, él volteó y vio a Raven, a la verdadera Raven pero ella no lo miró, se dirigió con su rencor y la enfrentó con sus poderes, pero ambas eran igual de poderosas. Trozos de pared volaron por toda la habitación atrayendo la atención del resto de los titanes, quienes permanecieron al margen por una orden de Robin. Raven perdía en encuentro, que se alejaba de la torre perdiéndose e la vista de los titanes, menos de uno, que las siguió a prisa. La joven titán se veía indefensa en contra de la otra, hasta que alguien decidió intervenir.

Raven no pelees más, esa no es la forma de vencerla, ella es parte de ti, derrótala con tu fuerza interior, nosotros estamos aquí para ayudarte, yo estoy aquí para ayudarte.

La chica detuvo el ataque y lo miró extrañamente, bajó al nivel del chico y se acercó caminando ante la mirada expectante de la otra, llegó hasta Robin bajándose la capucha, cerró los ojos y lo besó. Sus labios se tocaron con suavidad y hasta miedo, él se sorprendió al principio pero luego la rodeó por encima de la capa, ella lo abrazó por el cuello. Terminaron el beso y se miraron a los ojos, ambos sonriendo y ella sonrojada. Miraron al cielo y vieron a la otra Raven volverse una pequeña sombra negra y entrar en la verdadera.

Hay que tener todo tipo de emociones, sólo no dejar que se vuelvan independientes. –le dijo explicándole la situación. – Usaron el pentáculo para llamarme, pero no lo pusieron en la posición adecuada, si lo apuntas al sur se vuelve un instrumento de magia negra.

De cualquier forma dio resultado, volviste. Ya no te irás... ¿Verdad?

No creo que no –se sonrojó un poco más. - ¿Qué les diremos a los otros?

Pues... es que... los chicos...

Sí, lo entiendo tampoco quiero comentarios... ¿Amigos? –le extendió la mano en señal de un acuerdo mutuo de dejar las cosas como estaban, el beso había sido suficiente para ella, suficiente para demostrarle que la salida no era irse.

Ya el tiempo dirá –estrecharon las manos y volvieron caminando a casa, a lo que quedaba de ella. –Raven...

¿Por qué dejaste el pentáculo?

Temía olvidar cómo volver a casa. –ambos sonrieron y se tomaron de la mano.

FiN...


Ojalá que les haya gustado... no sabía cómo terminarlo sin darle un giro de 180 grados a la vida de todos jeje.. pero hacía falta el beso jeje... Muchísimas gracias a todos/as quienes dejan review, me hacen feliz y también gracias a quienes leen. Nos vemos la próxima jajaja.