Hola a todos…Gracias por los reviews, me encanta que les este gustando la historia pero tengo una noticia que darles…ESTE FIC ESTA POR ACABARSE y la verdad les digo es que estoy muy alegre por que lo que escribo les esta gustando, faltan dos capítulos para acabar el fic, así que no dejen de visitarme y dejarme sus reviews…

Disclaimer: Todos los personajes utilizados en este capítulo menos algunos extras son propiedad de Nickelodeon y mi intención con ellos no es de lucro, es la de entretener y/o conmover a los lectores…

Capitulo IX

La tarde estaba allí, radiante…Los chicos habían salido de la escuela con las caras sonrientes y no era para menos, era viernes y además la semana entrante era de exámenes y luego vendrían unas largas y merecidas vacaciones…y para algunos, la universidad.

Phoebe caminaba lentamente en dirección a su casa, pensaba en Gerald, como siempre, en todo lo que le había dado durante todo el tiempo que estuvieron juntos, le había transmitido su seguridad, su actitud decidida pues antes de estar con él, era una chica muy insegura…Pensaba en que su amor por él, la había hecho crecer, sus errores y todos sus buenos momentos, significaron mucho para ella…

-Gerald…-susurró para si misma

-¡Phoebe…Phoebe!-alguien la llamó, ella reconoció su voz, era él-¿podemos hablar?-le preguntó respirando agitadamente llegando a su lado

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Lila estaba frente al espejo, no sabía decidirse entre el rosado o el tono guayaba de lápiz labial, en la radio sonaba una canción de aquellas que tanto le gustaban, una simple balada de buenas letras que definitivamente se acercara a su historia…Finalmente se decidió por el rosado, se lo aplicó en los labios y sonrió satisfecha...

-creo que está muy bien…-dijo para si misma…De repente sonó el timbre, la empleada del servicio estaba en el supermercado así que ella se dirigió hacia la puerta, la abrió y…-Helga ¿Qué haces aquí?-preguntó sorprendida

-vine a hablar contigo-le respondió entrando a la casa sin esperar que la invitaran a pasar

-si, claro-le dijo Lila algo molesta por su actitud-pasa, estas en tu casa

-Lila ¿Por qué no nos dejamos de hacernos las ofendidas y todo eso y vamos al punto?

-pues tu dirás Helga-dijo tomando asiento frente a la rubia que ya estaba sentada

-¿recuerdas el primer día de clases después del campamento que hubo en la playa?-preguntó. Lila la observó extrañada pero parecía recordar aquel día-Arnold y tú se estaban besando en el parque

-¿y? ¿Qué quieres saber?

-lo que sucedió antes de ese momento-respondió-y quiero que me digas la verdad, de eso dependen muchas cosas

-bueno…ese día-comenzó a decir Lila, un momento se quedó en silencio pensaba en el gran amigo que había sido Arnold con ella, en que nunca la engañó con respecto a sus sentimientos por ella, en lo buen chico que era y en que de verdad, él merecía lo mejor. Recordó la frase que alguna vez escuchó "si la felicidad del ser querido está con otra persona, déjalo ser feliz con esa otra persona por que la felicidad del ser querido es la de uno mismo" y por primera vez en su vida, vio en ella la veracidad… y si otra cosa era verdad en su vida era que quería a Arnold bastante-no pasó nada, te vi llegar y lo besé, la verdad es que me parecía muy injusto quedarme sin él por que lo amaba, de verdad lo amaba…y ahora…me arrepiento por que sé que con mi actitud le hice daño

-entonces…-comenzó a decir Helga con una sonrisa

-cualquier cosa que haya pasado entre ustedes es cierta-dijo Lila completándole la frase-Arnold te ama y aunque me costó mucho trabajo entenderlo, es la verdad

-Lila-dijo ella poniéndose de pie y caminando hacia la puerta-gracias por decirme la verdad. No sabes el significado de lo que acabas de hacer-luego se marchó cerrando la puerta tras si

-si lo sé-dijo Lila para si misma-acabo de hacerle un gran bien a Arnold…mi amigo…

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-bien Gerald-le dijo Phoebe al moreno, ambos estaban sentados en una de las banquetas del parque-¿de que quieres hablarme?-le preguntó solo por preguntar, sabía de que quería hablarle

-de lo que pasó hoy en el receso con Chloe…-le respondió mirándola fijamente-…me sorprendió mucho tu actitud

-a mi también-dijo Phoebe sonriendo-hace un rato pensaba en eso y me llegó a la mente que actué así por que el estar contigo me enseñó a ser fuerte y decidida

-el estar contigo también me enseñó mucho Pheebs-le dijo-era muy egoísta hasta que llegaste tú y me enseñaste que hay cosas más allá de lo que puedo ver…como el amor que nunca sentí hasta que tu llegaste por que…quizás en mi vida hubieron muchas chicas pero tú únicamente fuiste la mujer, la mujer de mi vida…y lo sigues siendo

-tu también fuiste el único hombre de mi vida-dijo un poco sonrojada por las palabras del chico pero sonriendo-y lo sigues siendo por que eres el único al que he amado y amo…-en ese momento Gerald la miró sorprendido, era la primera vez en mucho tiempo que Phoebe le decía que lo amaba…-por eso no puedo permitir que alguien te aparte de mí

-Phoebe yo…

-me amas y te amo-lo interrumpió antes de que pudiera decir algo más, acercó un poco su cara a la de él, acariciaba su mejilla con una de sus manos-por eso decido olvidar todo y comenzar de nuevo

-gracias Pheebs, gracias por perdonarme-dijo Gerald sonriéndole, en ese momento ella lo besó y esta vez liberada por que no sentía mas dolor en su alma y se decidió a perdonar…sus labios se expresaban todo el amor que se tenían, no necesitaban nada más…lo único que siempre necesitaron era saber que su amor era verdadero, tan verdadero que vencería el tiempo y la distancia, que pasaría mil pruebas…

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Lorenzo esperaba a Lila desde hacía media hora, decidieron verse a las 5:00 PM y ella aún no llegaba, estaba algo preocupado, ella siempre era puntual, muchas veces pensó en ir a buscarla pero llegó a la conclusión de que eso era hacer demasiado por una persona por la cual supuestamente no sentía nada.

-¿Qué me está pasando?-se preguntó a si mismo mientras se dirigía al amplio ventanal, antes sus ojos se presentó un paisaje entre urbano y rural, podía ver las montañas a lo lejos y más cerca los edificios un poco altos de Hillwood-¿Qué me pasa?-volvió a preguntarse al notar que no dejaba de pensar en todo lo que había vivido en estos días con la pelirroja. En ese momento alguien entró a la habitación, lo supo por que escuchó el sonido de la puerta al cerrarse, se volvió y era ella, vestía unos pantalones jeans negros y un top strapless color rosa, como era usual su cabellera estaba suelta, cortada en varias capas que llegaba a la cintura, se veía muy bella, pensó él. Lo miraba diferente a como siempre lo había mirado, se acercaba a la mesa de estudios, tomó asiento, encendió una de las labtops, aquella en la que estaba acostumbrada a trabajar y se dispuso a revisar documentos y teclear palabras sin decir nada…-¿no piensas justificar tu tardanza? Si no lo sabes estoy esperándote desde hace media hora

-a ti no tengo que justificarte nada-le dijo con frialdad y la vista fija en la pantalla de la labtop-y déjame trabajar en paz y en silencio, no me molestes…Esto que haré es lo único que falta del trabajo, luego me iré, tú lo imprimirás y no nos veremos más hasta el lunes ¿te parece?

-no, no me parece-le contestó enojado, caminó hacia donde estaba, giró la silla de ella haciendo que quedaran frente a frente. Esta vez no necesitó pensar en lo que expresaba la mirada de esa chica, esta vez, era obvio, ella lo miraba con desprecio…-¿se puede saber que demonios te pasa?-le preguntó con voz fría. Ella no contestó nada, tan solo se quedó allí, mirándolo fijamente a los ojos-¿no vas a decirme nada?

-¿Qué quieres que te diga?-le preguntó ella con ese mismo tono de voz-¿quieres que te conteste esa pregunta que me hiciste ayer o qué?

-no, necesito que me contestes esa pregunta-le dijo Lorenzo acercando su cara a la de ella para besar sus labios-vi la respuesta en tu reacción que pudo decirme más que mil palabras-se acercaba más y más a ella, la besaría, estaba a solo unos centímetros, iba a hacerlo…pero ella volteó la cara hacía otro lado

-no estés tan seguro…-le respondió ella sintiendo la calidez de los labios de Lorenzo en su mejilla, luego volvió su cara lentamente, a la posición anterior con los ojos cerrados, frente a la cara de Lorenzo, e intencionalmente rozó los labios del chico con los suyos-si, estas acostumbrado…-susurró entre los labios de él sin besarlo aunque él si intentaba un beso-a conseguir todo lo que quieres…-siguió susurrando acariciando con uno de sus dedos el cuello de Lorenzo-…con solo tronar los dedos…-en ese momento abrió los ojos y él también, prácticamente se comían con los ojos-conmigo te equivocaste-dijo en su tono de voz normal y cambiando radicalmente su mirada, cosa que dejó muy sorprendido a Lorenzo pero lo disimuló-ahora déjame trabajar en paz, es lo único que te pido-lo ultimó dándole la espalda y volviendo al trabajo

-de verdad pelirroja-dijo Lorenzo en voz alta sentándose frente la otra labtop-cada día…me sorprendes más…

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-¿es en serio lo que me dices? ¿De verdad todo esta bien con Phoebe?-preguntó Arnold en el pórtico de su casa a su mejor amigo Gerald, quien le había contado todo lo sucedido con ella esta tarde, entre ellos no habían secretos y si había alguno, tendría que ver, a lo mejor, con peluches a los 7 años de edad

-si, Arnold es en serio-le respondió Gerald sonriente por tercera vez-Phoebe me perdonó y otra vez estamos juntos

-me alegro mucho por ti amigo-le dijo Arnold dándole un par de golpes en la espalda-sé bien que eso era lo que querías

-claro que eso era lo que quería, viejo

-espero que esta vez sepas valorar lo que tienes-le dijo Arnold seriamente-Phoebe es una gran chica, tú también eres un gran tipo, así que ambos se merecen el uno al otro

-Arnold, nunca más volveré a hacerle daño a Phoebe-le dijo seriamente también-nunca más

-eso espero-dijo llegando Helga en tono molesto pero la verdad era que en su interior le alegraba bastante que Gerald y Phoebe estuvieran juntos-Pheebs me contó que volvieron, si esperan un "felicidades" se los doy, pero debes demostrarle a ella, a ti, a mi y a todos que de verdad esa decisión fue la correcta, que Phoebe, mi amiga, no se equivocó

-no se equivocó-dijo Gerald acercándose a la Pataki, estando frente a ella, sonrió decididamente-eso te lo puedo asegurar-luego comenzó a caminar-nos veremos luego amigos, suerte Arnold-dijo antes de sonreír y marcharse

-y dime-le dijo Arnold a Helga mientras ella se acercaba a él-¿Qué haces aquí?

-si quieres que me vaya-dijo ella dándole un beso rápido pero apasionado-no hay problema

-claro que no-le dijo Arnold sonriendo y abrazándola por la cintura mientras se miraban fijamente-puedes venir aquí cuantas veces quieras, las puertas de mi casa siempre estarán abiertas para ti

-lo imaginé, solo quería comprobarlo-en ese momento se besaron como lo habían hecho tantas veces pero no suficientes, al parecer querían recuperar todos los besos perdidos…se besaban con entrega, con intensidad, pasión, expresándose todo el amor que se tenían…El beso había sido tan largo…se separaron un momento para tomar aire y…

-¿terminaron?-preguntó Lorenzo molesto…En ese momento Arnold y Helga se separaron sorprendidos. Helga se quedó observándolo y Arnold también-les pregunté que si terminaron ¿no van a responderme?

Notas de la autora: ya ven Lorenzo descubrió a Arnold y a Helga, Phoebe y Gerald regresaron en contra de la voluntad de algunos pero lo hicieron, a veces debemos perdonar y además esta es una parejita tan chula que no podía separarlos, Lorenzo y Lila con sus jueguitos peligrosos parte 2 ¿Cómo terminará todo esto? La respuesta en los siguientes dos capítulos finales, un tip, el capitulo 10 me conmovió bastante...

Chau

Cuidense

Los quiero