Aunque todavía era en invierno y hacía pocos días que la nieve se había derretido, ese día había una temperatura muy agradable. El cielo estaba despejado y el sol calentaba deliciosamente, no hacía falta ir abrigada como si se fuera a esquiar como había estado siendo necesario estas últimas semanas. Era el clima perfecto para hacer que el humor de Suu mejorara. Y lo hizo. Por lo visto había escogido un buen día para irse.
Suspirando con satisfacción, entró a prepararse para irse al sitio donde se encontraría con los demás. El día anterior ya les había comunicado a todos el lugar y la hora. Yusuke era el encargado de avisar a Botan y a Koenma, Kurama dijo que ya se encargaría él de Hiei y anoche había llamado a Genkai para hablar personalmente con ella, puesto que no podría venir.
Salió del apartamento y fue a entregar la llave a la vecina, que era la propietaria del apartamento que había alquilado.
"Que tengas buen viaje, bonita. Y ya sabes que cuando vuelvas este apartamento te estará esperando." – le dijo la mujer con una sonrisa.
Suu le había dicho que volvía a su país durante dos meses y que luego regresaría.
"Muchas gracias por todo, señora Yamagata." – y con una leve reverencia y una sonrisa de agradecimiento, se fue.
Todavía era temprano, faltaban casi dos horas para la hora acordada, pero hacía tan buen tiempo que no podía quedarse en casa. Le apetecía pasear un rato, y eso hizo.
- - -
Suu llegó al lugar desde donde tendría que volver a su mundo, un sakura que había en medio del bosque. Ese era el lugar que había escogido para llegar e irse de aquí.
Se acercó al tronco del árbol y lo acarició con la mano, pensativa. Mientras observaba a una hormiga subir por él.
"Llegas pronto." – le dijo una voz conocida a su espalda.
Suu se giró rápidamente, un poco sobresaltada.
"Tú también." – respondió fingiendo tranquilidad tan bien como pudo.
"No te pienses lo que no es, yo sólo pasaba por aquí. No he venido para despedirme ni nada."
"No, claro. ¿Entonces por qué me dijiste que te avisara cuando me marchara?"
"Para saber cuando te iba a perder de vista." – le respondió él.
"Ja, ja. Veo que hoy estás simpático. Pues nada, ya lo sabes, así que ya te puedes ir."
"Me iré si quiero y cuando quiera."
"Muy bien." – respondió ella, y fue a sentarse debajo del árbol.
Hiei se quedó de pie, con la mirada perdida en otra dirección y dejó pasar varios minutos antes de volver a hablar.
"¿Cuánto tiempo vas a estar fuera?"
"Dos meses."
"Mm."- y dicho esto, como quien no quiere la cosa, se sentó delante de ella; piernas y brazos cruzados y mirándola, serio.
"¿Qué?" – preguntó ella al ver la actitud del youkai.
"¿Por qué viniste?"
"¿Cómo?" – volvió a preguntar ella, al no entender la pregunta.
"En tu mundo tendrías tu vida, tu familia y todas esas cosas que os importan tanto a los ningens,. ¿no? No entiendo por qué arriesgas tu vida viniendo aquí."
"Porque no me gustaba la vida que tenía allí. Y si un sitio no te gusta,. ¿por qué quedarte cuando puedes ir a otro lugar mejor?" – por el tono con que lo dijo parecía que todo aquello no tuviese importancia, pero claro que la tenía.
"¿Por qué no te gusta?" – y Hiei sabía que estaba siendo demasiado curioso, pero por alguna razón no podía dejar de preguntar, aún a riesgo de que ella se molestase. Y mientras se preguntaba mentalmente por qué preguntaba tanto cuando él nunca había prestado tanta atención a la vida de nadie, Suu se sentó en la misma posición que él; las piernas y los brazos cruzados, y también le estaba mirando seria.
"¿A qué viene tanta pregunta?" – Hiei iba a decir algo, pero ella habló otra vez antes de que él pudiese decir nada. – "Si quieres te lo digo, pero no es nada del otro mundo. Básicamente es que... se puede decir que allí no tengo vida; iba del instituto a casa y de casa al instituto, las relaciones con la familia no son precisamente buenas y de amigos se podría decir que no tengo. Así que ya lo ves, no hay nada por lo que valga la pena seguir en mi mundo." – inmediatamente al acabar de hablar se arrepintió de haber dicho todo eso, había hablado demasiado. Y mientras buscaba algo más para decir que no sonase tan triste y serio, se fijó en Hiei, que la miraba fijamente y parecía sorprendido al haber escuchado todo eso. A Suu no le gustó. – "Pero no me hagas mucho caso, yo siempre tiendo a exagerar las cosas."
Hiei vio cómo al acabar de decir esto último Suu cerraba los ojos suavemente y tomaba aire lenta y profundamente. Fue en ese momento cuando sintió el impulso de hacer algo muy concreto, una cosa que ya había hecho un par de veces y que después no entendía por qué. Pero que últimamente ya no se preguntaba tanto, pues empezaba a creer que sabía la razón. No iba a decírselo a nadie, por supuesto, con saberlo él ya tenía más que suficiente.
Así que, una vez más y antes de que Suu abriera por completo los ojos, se inclinó hacia ella y la besó.
Suu abrió los ojos de golpe al sentir los labios del youkai sobre los suyos, pero no intentó apartarse, sino que milésimas de segundo más tarde ya estaba cerrando los ojos de nuevo y dejándose llevar.
Aunque Hiei ya la había besado, este beso era diferente a los anteriores, incluso al último, o al menos a ella se lo pareció.
¿Puede que hoy esté siendo completamente consciente de lo que está haciendo? Pero la última vez también parecía consciente...
Y acto seguido, otro pensamiento cruzó su mente. ¿Y yo?. ¿Qué narices estoy haciendo?. ¿Por qué me estoy dejando besar?. ¿Por qué me dejé besar las otras veces?. ¡Si ni siquiera siento nada por él!
Como si estuviera al acecho esperando estas preguntas, una voz interior surgió de lo más profundo de su mente para contestarlas, justo cuando el beso terminaba. Hiei, una vez más, no la miró cuando se levantó, no dijo nada, y tal vez fue lo mejor, porque Suu tenía algo parecido a una expresión de espanto en su cara y si él la hubiese visto, la habría malinterpretado con total seguridad. Suu no tenía esa cara por el hecho de que Hiei le había besado, sino debido a la respuesta a esas preguntas. Esa voz, que no era más que su propia consciencia, le había confirmado sus sospechas, sus temores. Cada vez estaba más convencida de que era un buen momento para tener que irse. No podía caer en ello, no podía cometer ese error, porque no traería nada bueno, y menos si la otra persona era Hiei. Necesitaba tiempo para aclarar ideas, para poder verlo todo en perspectiva. En la correcta perspectiva.
Levantó la mirada y buscó a Hiei. Estaba sentado en el árbol de al lado, mirando al horizonte e ignorando a Suu. Su rostro no revelaba ninguna emoción y Suu le envidió, ojalá ella pudiera mostrarse tan fría y tranquila, tan impasible, como si nada le afectara.
Se pasó varios minutos pensando en estas cosas, y si Hiei no se hubiera movido allí arriba en el árbol, no se habría dado cuenta de que Yusuke y los demás se estaban acercando, y eso que los gritos y quejas de la pandilla se oían a mucha distancia.
Se sacudió todos los pensamientos de encima y se dispuso a poner su mejor cara de 'ahora me voy, pero no estéis tristes que volveré' para despedirse de todos ellos. Antes de que el grupo saliera de los matorrales, miró una vez más en dirección a Hiei, deseando que el youkai todavía siguiera allí y que se quedara hasta que ella se fuera. Él, quizá porque notó que Suu le miraba, la miró también. Pero a diferencia de la mirada de Suu, donde claramente podía leerse 'no te vayas, quédate aquí', la de él era indescifrable. Como solía serlo. Y una vez más, le envidió. Suu era perfectamente consciente de que en ocasiones, sus ojos la delataban y cuando quería aparentar seguridad y fuerza, los demás veían la realidad, es decir, miedo. Y ahora mismo la mostraban vulnerable, si Hiei hubiera querido burlarse, lo habría tenido fácil.
"¡Suu!. ¡Hola!" – gritó Kuwabara saliendo a toda prisa de detrás de un matorral.
"Hola." – respondió ella, con la mejor de sus sonrisas. La alegría de Kuwabara siempre se le contagiaba.
"Ahora llegarán los otros, son unos lentos. ¿Ya lo tienes todo preparado?. ¿De verdad que te vas?"
"Sí, no me queda más remedio. Pero dos meses pasan volando, estaré de vuelta antes de que te des cuenta." – sonrió.
"Eso espero, porque necesito a alguien con quien pueda criticar a gusto a Yusuke." – dijo Keiko por detrás.
"¿Cómo que criticar?. ¿A eso os dedicáis vosotras dos?" – exclamó Yusuke, indignado.
"Entre otras cosas, por supuesto." – respondió Keiko sacándole la lengua.
"Venga, callaos ya." – les dijo Botan, y luego riendo se dirigió a Suu. – "Llevan todo el rato igual, qué pesados." – Suu también se rió. Les iba a echar mucho de menos, aunque sólo fuesen dos días. - "Al final el príncipe Koenma no puede venir, hay mucho trabajo por ahí arriba. Me ha dicho que me despida de ti por él."
"¡Ah!" – saltó Kuwabara de repente. – "Antes de que se me olvide. Mi hermana no ha podido venir, no sé qué me ha dicho que tenía que hacer, pero ha insistido en que te diga que cuando vuelvas espera que cumplas tu promesa de invitarnos a todos a cenar, que lo espera con impaciencia. Sí, le encanta que le inviten a cosas..."
Suu se rió. – "Dile que esté tranquila, que lo haré cuando vuelva. Lo prometo."
"Bonito sitio has escogido." – dijo Kurama mientras se acercaba.
"Gracias. La verdad es que lo encontré de casualidad."
"¡Anda, mirad quien está allí arriba!" – exclamó sorprendido Yusuke, señalando a Hiei que seguía sentado en la rama del árbol, observándoles a todos con cara de pocos amigos. – "Y yo que iba a comentar que no habías venido. ¡Baja, hombre, que estamos todos aquí!"
"Urameshi, no ves que prefiere estar en sitios altos, así no tiene que levantar la cabeza para mirarnos." – dijo Kuwabara, riéndose a gusto.
En menos de dos segundos Hiei ya estuvo a bajo, pasando antes de llegar al suelo, por la cabeza de Kuwabara, a quien le dejó la huella de sus zapatos en todo el pelo. Yusuke tuvo que frenar a su amigo, porque quería tirarse encima del youkai.
"¡Tú te lo has buscado!. ¿Por qué le provocas? Es que eres tonto." – le regañaba el detective.
Suu se rió disimuladamente. Siempre estaban igual esos dos. De reojo, vio que Kurama se había acercado a Hiei y que le estaba diciendo algo. Pero no pudo saber qué era, porque Keiko y Botan reclamaron su atención.
"Te echaremos mucho de menos¿verdad, Botan?"
"Sí, muchísimo. Y sobre todo tus platos,. ¡están tan buenos!"
"Podrías decir algo que no sonara tan interesado,. ¿no?" – le regañó Keiko. Botan sólo rió y sacó la lengua al mismo tiempo que pedía perdón.
"No pasa nada. Me alegra saber que me echaréis de menos, de verdad." – dijo Suu, con una mezcla de tristeza y de emoción. – "Y bueno, creo que ya va siendo hora de que me vaya..."
"¿Ya?" – preguntó Yusuke, que lo había oído.
"Sí, no tiene ningún sentido posponerlo más, y cuanto antes me vaya, antes volveré." – acabó diciendo con una débil sonrisa.
"Bueno... si no hay más remedio..." – suspiró Kuwabara. Kurama y Hiei se acercaron a los demás.
Keiko se abrazó a Suu y le dio un beso en la mejilla, cosa que cogió desprevenida a ésta. Y a los chicos también. – "Cuídate mucho."
"Lo haré." – sonrió, mientras le devolvía el abrazo tímidamente.
Botan también la abrazó y le dio un beso, por lo visto le había gustado la idea. – "Te echaré de menos, y mi estómago también." – Suu sonrió.
Yusuke se quedó mirando a Suu, no sabiendo muy bien qué hacer. ¿Sería correcto que él le diera un abrazo? El beso quedaba descartado si no es que quería enfrentarse al enfado de Keiko. Mientras dudaba, otros que lo tenían más claro se despedían. Kuwabara dio un paso al frente y abrazó a Suu. No fue como los abrazos de las chicas, mantuvo un poco más las distancias, y fue un poco más suave.
"Dos meses,. ¿eh? No tardes ni un día más en volver."
"No, seré puntual." – consiguió responder Suu, después de la sorpresa que le causó que el chico le abrazara. Todos esos abrazos la estaban dejando un poco descolocada.
"Emm... esto, sí... ten cuidado con esa máquina y vuelve pronto." – dijo Yusuke, sin moverse de su sitio. Le daba muchísima vergüenza ir hacia ella y abrazarla sin más. Él no hacía esas cosas, era cosas de chicas, y Kuwabara lo había hecho porque no se perdía ninguna ocasión para tocar a una chica, sólo por eso.
"Estaremos esperando tu regreso." – dijo Kurama, con una de sus dulces sonrisas, pero sin acercarse para abrazarla, tampoco.
"Muchas gracias." – agradeció Suu, casi a punto de emocionarse. Miró a Yusuke y a Kurama sonriendo. Se acercó a ellos y le dio un beso en la mejilla a cada uno. Se veía más capaz de dar un beso que de abrazar. Ambos se sonrojaron un poco, les había cogido completamente desprevenidos.
Entonces, miró a Hiei, quien se dio prisa en cambiar su expresión de sorpresa por todo lo que había pasado y poner la cara de siempre. Aunque Suu tuvo tiempo de verla, y sonrió.
"Ni se te ocurra." – gruñó el youkai. Refiriéndose, claro está, a la posibilidad de que le diera un beso.
"No era mi intención. Sólo iba a decirte 'hasta pronto'." – Hiei no pareció muy convencido. Giró la cara al ver que los demás le estaban mirando.
Kurama miró a Suu y con un gesto de la cabeza señaló al youkai, a la vez que le guiñaba el ojo y sonreía traviesamente. Suu captó el mensaje. Con un movimiento rápido le dio un beso en la mejilla a Hiei. Completamente sorprendido y enfadado se giró para gritarle a esa chica algunos insultos, pero ya se había ido de su lado y estaba debajo del sakura, riendo divertida. Por lo visto, había salido corriendo justo después de darle el beso.
"¡Hasta pronto!" – gritó desde allí, levantando el brazo.
Los demás se despidieron a lo lejos también. Vieron cómo movía los labios, pronunciando, seguramente, las palabras que la llevarían de vuelta a su mundo. Segundos después, ya no estaba.
Todos se quedaron en silencio observando el lugar de donde había desaparecido durante un par de minutos.
Kurama se giró para decirle algo a Hiei, pero éste ya no estaba. Una vez más, se había ido y no había podido hablar con él. Hacía ya tiempo que estaba muy esquivo. Más de lo normal en él.
Volvió a mirar el sakura. ¿De verdad la volverían a ver dentro de dos meses?
Sí, lo sé, y LO SIENTO, pero no podía descuidar los estudios U.U No puedo creer que haya publicado este capítulo... lloro de emoción sólo con pensarlo T.T
Inciso... Desisto, abandono... no hay forma de que los signos de exclamación e interrogación me salgan bien. ¿Alguien sabe algún truco, por favor?
Ah, y ya puedo decir que soy una verdadera escritora. Durante este tiempo he sufrido el famoso bloqueo del autor XDDD ¡La escena Hiei-Suu ha sido mi cruz! Al final la he recortado, supongo que más adelante quedará mejor lo que quería poner . Otra de las razones por las que he tardado tanto... ¿Queréis más? Pues mirad, se acabó el anime y entre lo liada que estaba y eso, los personajes no parecían ellos (si es que alguna vez lo han parecido...). Para escribir algo decente necesito impregnarme de su carácter n.n"
¿Reviews? Contesto como si no hubieran pasado meses...
HADA, ¡muchas gracias! Bueno, dudo que a nadie más se le haya ocurrido... está visto que no se puede ser muy original, porque seguro que a alguien se le ha ocurrido la misma idea ya. Aysh.
Zafiro, 1.- Palabras textuales de Hiei: "De nada servirá que me hagas la pelota, ningen. ¡Por supuesto que soy el mejor y de clase S!" 2.- Kurama es más amable: "¿Soltero? Sí, claro, pareja no tengo todavía n.n" 3.- Se lo he preguntado a ambos, pero se han hecho los sordos y se han ido... Yo creo que es demasiado pronto para saberlo,. ¿no? ;)
Zen, muchas gracias n.n ¿En serio?. ¿Te lo leíste de tirón? Hay que tener valor, yo no podría hacerlo...
Yukii, hemos hablado del tema largo y tendido por mail, así que es una tontería repetirlo por aquí,. ¿no? XD Sólo decirte que... ¡muchísimas gracias por todo! No sé qué sería de mí ahora sin ti... (Qué dramática¿no:P). Por cierto,. ¿lo encontraste en japonés?
Ishisu-Magy, me encanta sorprender a la gente, pero no quiero que te dé un infarto por mí culpa u.u Sí, cuando estás ocupada a veces se te quitan las ganas de escribir, y si no lo vas a hacer a gusto, mejor no escribir que luego salen cosas muy feas. Gracias, me cuido mucho n.n
Marie Shinomori, ejem... lo siento muchísimo, me sabe TAN mal tardar tanto... espero me puedas perdonar u.u Jeje, a mí también me gustaría tener una. En parte me decidí a publicar el fic porque estaba segura de que la idea haría gracia n.n
Yarumi, ¡gracias! Me alegro que te guste la pareja. ¿Misteriosa? Jeje n.n
Tsubame, tarde, pero sigo...
Papafrita-Girl, sí, recuerdo esa escena de FY. La verdad es que tiempo después de ver el anime caí en la cuenta de que se parecía un poco a mi argumento... y eso me hizo dudar si escribir el fic o no. ¡Gracias!
Shiko, espero que no te hayas muerto u.u Porque mira que he llegado a tardar... ¡Lo lamento!. ¿En Japan?. ¿Eres de Japón? O.O ¡Muchas gracias por decir todo eso de mi fic! La verdad es que no lo esperaba... Escribe cuando quieras n.n
Blimtz, ejem... ¡lo siento muchísimo! U.U
Muchas gracias a todos aquellos que siguen leyendo el fic, a pesar de mis actualizaciones de higos a brevas. Os lo agradezco enormemente, de veras.
Pero tened paciencia, si una cosa he aprendido durante este tiempo es que a los escritores no hay que meterles prisa, sino las cosas no salen bien o el escritor se estresa porque no se le ocurre nada y hay gente esperando. Sed comprensivos, por favor. (Sí, todavía más...)
Ah, y no hagáis caso de mis promesas ni de cuando os digo que tardaré poco, porque siempre pasa lo contrario. Muy a mi pesar...
¡Hasta el próximo capítulo! (Que tal vez sea más largo... no sé.)
