Nada de lo que puedan reconocer me pertenece.

Dedicado a Carlos Meza por su ayuda en la corrección de la primera parte de esta historia y a Alicia mi beta.

°°°°

¿De qué están hechos lo sueños?

II

El material de los Sueños.

AVISO: El capitulo, ya me han dicho muchas personas, es sumamente triste así que prepárense para ello.

°°°

"Él y ella"

Segunda parte

Julio 23, 1976

Londres, Inglaterra

La lechuza golpeó el vidrio despertando a Sirius Black. El hombre se había quedado dormido sobre el escritorio de madera lleno de papeles. Su oficina había cambiado mucho, los Aurors Alfa ocupaban mucho de su tiempo y La Orden del Fénix se encargaba de que su poco tiempo libre no lo pasara ocioso.

El hombre se había hartado del ministerio pronto y había comprado un apartamento de varios cuartos, que era "su" oficina. A veces estaba a reventar de gente, lechuzas y trabajo, porque los Aurors Alfa la tomaban también como cuartel. Él se había quedado a cuidar su fortaleza, en ese día de julio que no parecía deparar nada emocionante. Hacía rato que estaba durmiendo. Tenía mucho sueño, quería dormir. Las cosas entre sus amigos, en el ministerio, con la orden… todo parecía haberse complicado con la llegada de Lily Evans.

La Orden se había vuelto loca. El círculo cercano seguía discutiendo acerca de la Reina del Caos, nadie estaba seguro si debían aceptarla, pero la posibilidad de que Voldemort la tuviera en sus manos les daba miedo a todos. Por otra parte el Ministerio se había enterado de su regreso y habían comenzado a buscarla. También Voldemort sabía que la Reina del Caos estaba de nuevo en Inglaterra. Los tres grupos la buscaban con ferocidad. Pero desde el día en que Sirius la había encontrado por equivocación, nadie la había visto. Ni siquiera Ale podía sentirla, lo cual asustó a todos. ¿Quería decir eso, que era cierto que la Reina del Caos era aún más poderosa que antes? Eso provocaba escalofríos en las personas que habían visto su poder en acción.

Por eso, cuando Sirius Black se despertó y giro su cabeza hacía la ventana, no pensó más que era una lechuza de Sara.

Se levantó con pereza maldiciendo su suerte y abrió la ventana. La lechuza ululó con felicidad y dejó caer una carta en el escritorio después de eso se fue por la ventana abierta. Sirius la cerró y volvió a su escritorio. Bostezó sin mesura y luego tomó la carta.

La carta no decía mucho, pero el hombre tuvo que releerla muchas veces, no podía creerlo.

Sirius:

Necesito saber la verdad. Nos vemos en Hyde Park hoy a las nueve.

Lily.

Eso fue demasiado para el hombre. ¡.¿Por qué él?.! . ¡Era estúpido! . ¡Era una locura! Miró la carta… no había forma de responder… ¿Se presentaría a la cita? Tenía la oportunidad de ver a una de la personas más buscada por todo el mundo mágico… ¿iría?

°°°

James no cambió mucho su vida después de ver a Lily, pero se convirtió en un hombre callado y taciturno que siempre estaba de mal humor. Dejó de presentarse a las reuniones de la Orden, estuvo por renunciar su trabajo de Auror pero Moody se lo prohibió.

"No me importa que tan lastimado esté tu corazón. Debes quedarte a luchar, el mundo está ya lo suficientemente mal. Así que te vas a quedar y vas a seguir defendiendo a los demás. Esa es tú misión. ¡No serás un desertor! . ¡No te dejaré ser un desertor!"

Pero aunque ese sermón evito que saliera de los Aurors, regresó a ser el ermitaño que había sido antes del ataque al centro comercial. Pasaba mucho tiempo cerca del río. Elinor comenzaba a asustarse y Ale le bromeaba diciéndole que James meditaba las mejores formas de ahogarse; para calmarse Elinor necesitaba una buena taza de té y ver que James estaba bien, los chistes nunca ayudaban.

James también pasaba mucho tiempo en El Bar Plateado. Jasmine seguía estando enamorada de él, por eso lo sentaba siempre en la barra dónde podían platicar. La muchacha había pasado mucho tiempo estudiando. Había hecho que El Bar Plateado fuera una de las más exitosas empresas, su padre estaba orgulloso de ella, pero había algo que él quería aún. La quería ver casada. Le parecía que si el héroe del mundo mágico la aceptaba, todo estaría bien. Aún así ya había comenzado a buscarle otra pareja a su hija.

Ese día James estaba en el bar platicando con los demás clientes y con Jasmine. El tema principal era la guerra que se había desatado. Nadie reía y nadie intentaba hacer algún chiste.

.-El ministerio no sirve de nada.- decretó un hombre barbudo.- La vida se les va, la vida de miles se va de nuestras manos y ellos no hacen nada.

.-.¿Saben lo que están haciendo últimamente?.- preguntó una mujer sonrosada y gorda.- ¡Buscan a una mujer por todo el mundo¡Una hija de muggles que parece haber desaparecido!

James sintió como su estómago desaparecía. Lily…

.-.¿Por qué lo hacen, James?.- preguntó Jasmine.- ¿Por qué buscan a esa mujer?

.-Es importante para Voldemort.- las personas se estremecieron.- Y es poderosa.

.-También es muy hermosa. Nunca había visto a alguien así.- comentó el barbudo.- Salió en el periódico.

El hombre tomó el periódico de la barra. En la primera plana, casi al final estaba la fotografía de la joven pelirroja. Esa foto era de Alicia, seguramente se la habían pedido en El Profeta. Se movía y James sintió que era la verdadera Lily quién lo miraba. Se veía triste. Mientras observaba la fotografía perdido en esa persona a blanco y negro, comenzó a sentirse cada vez más vacío.

.-Me parece familiar.- murmuró Jasmine.-. ¿La conoces, James?

.-Sí.- murmuró él distraído.- Creo que debo irme. Nos veremos pronto Jasmine.

El hombre llegó la cuenta y salió del bar.

.-.¿Y a ese qué le pasa?- preguntó el barbudo. Jasmine lo sabía pero no dijo nada. Era demasiado duro para ella… la mujer de la fotografía… ella había ido alguna vez con James a ese lugar.

James, mientras tanto, comenzó a caminar sin rumbo. Buscaba dentro de sí mismo la ira que le tenía a Lily Evans y mientras no la encontraba más furioso se ponía consigo mismo. ¡Ella lo había engañado! . ¡Ella se había ido! . ¡.¿Por qué iba a perdonarla?.!

Llegó hasta un embarcadero. Estaba furioso. Ella… ella lo ponía todo patas arriba… debía dejar de pensar en Lily… tenía qué. Se sentó sobre unas cajas mirando el agua oscura del río.

Un aire frío se sintió detrás de él. La corriente era familiar. No se giró.

.-.Pensé que estarías aquí.- la voz hizo que James volteara enseguida.- .¿Puedo sentarme?

Él no respondió, sólo se hizo a un lado. Los dos se quedaron sentados mirando el Támesis.

Ninguno de lo dos hablaba. Durante los días que había pasado desde el nueve se habían visto mucho, siempre a las orillas del río. Nunca hablaban. Ella no intentaba disculparse, no decía dónde estaba, no daba ninguna pista de su paradero. Sólo llegaba y se sentaba junto a él.

James tampoco hablaba, no hacía preguntas y no la odiaba. Era muy difícil odiarla en esos momentos de silencio. Aún así no la miraba. Pocas veces se miraban a los ojos.

Sólo se quedaban sentados a las orillas del río pensando cada uno en sus vidas. Eso era lo que hacía James cuando rondaba el río… nadie lo sabía.

°°°

Sirius llegó a su cita con la pelirroja a la hora convenida. Se sentó en un banco de Hyde Park a esperarla. Casi no había personas en el lugar. Uno que otro enamorado, aún era demasiado temprano. ¿Por qué lo había llamado a él? Suspiró y miró a su alrededor.

.-Gracias por venir.- sin previo aviso alguien dijo aquello detrás de él. Se giró. Atrás de él estaba muy oscuro. Cómo so alguien hubiera oscurecido aquel lugar.

.-.¿Lily?- preguntó al no reconocerla en las sombras.

.-.sí.- las sombras se disiparon y ella apareció frente a Sirius.- Me alegro tanto de que estés aquí.

.-.¿Por qué me llamaste a mí?

.-.Porque jamás fuimos muy cercanos, no como lo éramos de los demás, pensé que tú no me odiarías… tanto.

.-.Ninguno de ellos te odia realmente.

Ella le sonrió.

.-.Caminemos, Sirius. ¿Estarías dispuesto a contarme que sucedió?

Él asintió y se levantó. Comenzaron a caminar. Primero en silencio. Lily le contó sobre su entrenamiento en Las Islas. Como trataba de comunicarse con ellos, pero se arrepentía, le contó sobre las selvas, de todas las sacerdotisas del lugar y lo que le habían enseñado. Sirius supo por qué Ale no podía encontrarla. Lily no se había vuelto más poderosa, sólo había desarrollado más el poder que tenía.

.-.Me llevaron a una cueva y me hicieron quedarme en ella tres días. Me dediqué a pensar. Las sacerdotisas siempre hablaban en acertijos. Trataban de hacerme feliz y de enseñarme todo lo que sabían de la tierra. Me ayudaron a escuchar a mí alrededor y a usar el poder del Caos de muchas formas.

Sirius oía paciente. Nunca había hablado con Lily tanto. Ella había sido muchas cosas, pero jamás una verdadera amiga. Había sido el amor y la novia de James, la mejor amiga de Elinor, la Reina del Caos, pero ahora entendía a que se referían todos. Tenían razón al decir que había algo en ella que las demás personas no tenían. A veces parecía una niña asustada, otras una madre preocupada y las más raras, una guerrera sin miedo.

Llegaron a una plaza dónde se oía a músicos tocar canciones clásicas y modernas. Lily se apoyó en la baranda mirando el lugar.

.-.¿Qué fue lo que sucedió mientras tanto? . ¿Cómo murieron mis padres? . ¿Qué pasó con James?

.-.¿Lo que pasó?- Sirius cerró los ojos y escuchó la música.- Cuando regresamos aquí nos llevaron a San Mungo, estuvimos allí muchos días. Una noche antes de salir hicimos una promesa. No seríamos ya lo heraldos, no usaríamos nunca más el poder del caos. No queríamos que nos pidieran luchar por la guerra, que nos buscaran, nos alejamos. Alessandra regresó después y comenzó a viajar con Remus, nunca volverá a ser la misma, lo sabemos. No la has visto, pero ha cambiado mucho. Ella y James les avisaron a tus padres de tu muerte. Petunia se casó unos meses después. Tu madre ya estaba muriendo. Cuando tu hermana regresó de su luna de miel ya estaba al final de su existencia. Petunia la cuidó hasta el final.

Los médicos dijeron que se había dejado de morir. Tu padre no tardó en seguirla. Voldemort lo encontró un día y lo mató, pero de todas formas hubiera muerto tarde o temprano. James le llevó el cuerpo a Petunia y lloró con ella la muerte de tus padres. Los enterraron, yo estuve presente en ambos casos… había mucha gente que quería a tus padres.

.-.Sí, lo sé. Mi madre se dejó morir por mí ¿verdad?

.-.Sí, le parecía que había sido la peor madre de este mundo, decía que nunca debía haberte dejado ir, que era injusto que una madre enterrara a su hija…

.-.Los extrañaré tanto, me arrepiento de tantas cosas…- miró a los músicos- Pensar que jamás me despedí de ellos, esperaba verlos cuando regresara. Esperaba tanto ver a mi madre.- Lily ahogó un sollozo- Pero no quiero pensar que yo los maté… no quiero…- se quedó callada. Cuando formuló la siguiente pregunta su tono era muy distinto-. ¿Qué sucedió con James?

Sirius guardó silencio. Miró las luces de la plaza, las personas que caminaban por ella, se veían todos muy felices, despreocupados. En ese lugar parecía no haber guerra, no haber sufrimiento. ¿Lo había llevado la chica allí por esa razón?

Él estaba destrozado, pero poco a poco decidió que pelearía hasta que se terminaran todas sus fuerzas, así sería digno de verte en dónde estuvieras. No le creas, él aún te ama.

Lily le sonrió.

.-.Será mejor que me vaya, Sirius. Sara debe de estar esperándote.

.-.Nos vemos, entonces.- Sirius se giró pero pudo oír claramente lo que Lily dijo.

.-.Cuando me siento junto a James frente al río, no puedo creer que me odie, pero está muy lastimado.

Sirius se giró rápidamente, pero la mujer ya se había ido. Se quedó clavado a la piedra el suelo. ¿James y Lily se había visto desde aquel día en la cede de El Profeta? Imposible… tenía que hablar con James… ¿cómo le había ocultado eso?

°°°

Estaba muy oscuro. Al menos en aquel lugar no tenía que usar velas. Las luces estaba prendidas y él trabajaba como un loco en los archivos. Tenía que organizar los nombres de muertos, heridos y desaparecidos para la Orden. Era un trabajo que siempre lo fatigaba. La oficina en el edificio de Sirius servía mucho para ello. Había tomado la costumbre de estar allí durante las noches mientras Sirius pasaba sus días en el lugar. Los Aurors y la Orden llamaban al edificio "La Fortaleza" pues en ella se encontraban la mayor parte de los archivos de ambos grupos. Aún así el ministerio no había podido conectar a los Alfa con la misteriosa organización.

Las noches en La Fortaleza eran aburridas. Tenía una taza de café a lado (se había aficionado a esa bebida desde hacía ya un año) y trabajaba sin descansar.

Quitó la cabeza de sus papeles y miró las fotos que había sobre el escritorio. Había una de sus padres y otra de sus abuelos. Una más de los heraldos y a lado de ésta un marco caído.

James levantó el cuadro con cuidado. El marco estaba maltratado. Algunas veces, en los últimos días, lo había lanzado contra las paredes en ataques de ira. Pero todos esos ataques habían desaparecido.

La fotografía era muggle, Petunia se la había dado después del funeral de sus padres. Creía que él la apreciaría más que ella.

Dejó la fotografía en la mesa (esta vez de pie) y siguió con su trabajo. En ese momento el clic de la cerradura el apartamento se dejó oír. Pensó que sería Sirius y estaba en lo correcto. El hombre entró a la oficina y miró a su amigo. Pronto éste levantó la cabeza.

.-.¿Qué pasa, Sirius? Pensé que estarías en tu casa… con Sara.

.-.Hubo un cambió de planes. Salí al parque…

.-.¡Qué sorpresa!- exclamó con sarcasmo James.- ¿venías a decirme eso?

.-.No. Quería que supieras con quién estuve.

James seguía escribiendo.

.-.¿Con alguien en especial? Es difícil, tal vez con uno de…

.-.Te lo voy a decir, Potter. Estuve con Lily.

James levantó la cabeza. Su expresión demostraba total confusión. En parte era por el tono con que Sirius había escupido su apellido… en quinto año Lily solía llamarlo de la misma forma, con verdadero… ¿asco? Por otra parte el nombre de la mujer lo tomó por sorpresa.

.-.Me buscó. Quería que le hablara de ti, de los heraldos y de su familia.

.-.¿La viste? . ¿Dijo dónde estaba?

.-.No.- murmuró Sirius con frialdad.- Pero bien pudiste haberle preguntado tú… se le escapó el hecho de que se habían visto cerca del río. ¿Por qué no me dijiste? . ¿Creías que te censuraría? . ¡Yo también estoy enamorado! . ¡.¿Quién iba a entenderte mejor que yo?.!

.-.¡Cálmate Sirius!- James se levantó.- No hablamos nunca. Desde el año pasado tomé la costumbre de ir al río, me calmaba ese lugar. Desde que ella regresó cada vez que voy a los muelles ella aparece, se sienta junto a mí y eso es todo. No hablamos, no nos miramos, sólo nos sentamos allí.

.-.¿Por qué?- preguntó Black.- ¿Por qué no le hablas? . ¿Acaso realmente la odias? Yo no te voy a creer ese cuento… el amor que has sentido por ella desde… ¿qué ser�? . ¿Los trece años? Es igual, de cualquier manera. La amabas en Hogwarts, la amabas en la Casa Merodeadora, la amabas cuando nos separamos. ¡La seguiste amando cuando desapareció de nuestras vidas! . ¡Y la amaste aún más cuando la creíste muerta¡.¿Realmente esperas que me crea esa mentira?.! No la odias, no puedes odiarla. La has amado demasiado y demasiado tiempo como para que eso desaparezca… tú lo sabes.

James miró a Sirius de arriba a bajo. Se alejó del escritorio.

.-.No tienes por qué regañarme, Sirius. Tú menos que nadie… Sé lo que siento por Lily…

.-.¿Entonces? . ¿Por qué estás sufriendo? . ¿Por qué la alejas de ti? . ¿Por qué la haces sufrir? . ¿Acaso quieres que sufra?

.-.¡Eso es lo que menos he querido! . ¡Lo sabes!- James tomó aire para calmarse- Supongo que quieres una razón. Bueno Sirius, te diré la verdad. Lily se ha alejado demasiado, no puedo dejar de amarla, pero tampoco voy a permitirle estar conmigo, el saber que puede volver a irse, que nos dejará de nuevo en cualquier momento es demasiado doloroso… Ese saber es el que me impide hablarle cuando está a mi lado, por eso no la miró más de lo necesario.

Sirius río.

.-.Oh, James… ¿alejas a la verdadera Lily pero te quedas con su retrato en el escritorio? . ¡.¿Qué no te das cuenta que la necesitas?.!

.-.¡Ya lo sé! . ¡Lo sé desde siempre! . ¡Desde Hogwarts sé que la necesito más que al aire que hay a mí alrededor! . ¡Pero tanto la necesito que no puedo soportar perderla una tercera vez! . ¡.¿Por qué es tan escurridiza?.!

.-.Tal vez, porque hasta ahora no ha sido atada. James… ¿Por qué no la atas a ti?

.-.¿Que?- James parecía confundido de nuevo.

.-.Tal vez haya una manera de que no puedas perderla nunca más… los dos se aman, no veo porque tienen que sufrir.

.-.Lo mismo podría decirte, no deberías dar consejos, Sirius, cuando tu vida tampoco es de color de rosa.

.-.¿A qué te refieres?- Sirius pareció indignado.- Yo amo a Sara.

.-.No tienes por qué seguir fingiendo.

.-.¿Fingiendo? . ¡No estoy fingiendo! . ¿Quién está fingiendo?

.-.Tú.- pero quién dijo aquello no fue James. Sirius se giró y miró a Sara de arriba a bajo. Sus ojos grises estaban rojos, al parecer por causa de un llanto constante. Estaba más pálida de lo normal y llevaba puesto un gran abrigo.

.-.¿Sara?

La mujer no lo miró. Se dirigió a James.

.-.Yo te aconsejaré. Si la dejas ir, se irá… lo único que te quedará será un vació perpetuo. No dejes que te suceda eso. Búscala y átala a ti… si no lo haces, terminarás amando fotografías descoloridas y recuerdos cada vez más dolorosos. Confía en mí y déjanos solos por favor.

James miró a Sara. Su mirada se ensombreció. Con un movimiento de varita su escritorio quedó limpio. Tomó su abrigo y salió taciturno del lugar. Ya afuera miró lo único que se había llevado de la habitación. La fotografía de Lily… tal vez Sara tenía razón… tenía que buscar a la pelirroja.

Mientras tanto adentro Sirius y Sara se miraban fijamente. Ella se había quedado rígida. Después de un rato abrió su boca.

.-.¿Vas a quedarte callado? Mi tren me espera

.-.¿Tre-tren?- tartamudeó el hombre.- ¿a dónde vas?

.-.Tengo que irme, mamá se ha vuelto insoportable, pero… tenía que despedirme de ti y pedirte un favor.

.-.Sara, tú madre…

.-.Sé que está muerta.- dijo ella de forma fría.- Tengo que explicártelo todo… me voy porque Voldemort me busca. Ingrid y yo nos hemos visto algunas veces en los teatros, jamás imaginé que ella fuera una Mortífaga. Le habló de mí a su señor, de mis miedos, de mis emociones. Al principio solo hablaba con ella, me decía que no confiará en ti que estabas enamorado de Elinor y siempre lo estarías, no quise creerle.

.-.Sara, yo te amo a ti, no a Elinor.

La mujer, que había estado caminando por el lugar, se paró abruptamente. Sus ojos miraron a Sirius con ira.

.-.¡Deja de fingir! . ¡.¿Crees que no sé que la amas?.! . ¡.¿Tan idiota y ciega creías que era?.! Siempre he sabido que la amas, tu corazón le pertenece a Elinor Dashwood, de la misma forma que el mío te pertenece. Sirius.- se acercó a él unos pasos, pero luego retrocedió.- Te amo, te amo con toda mi alma. Acepté que no me correspondieras, sabía que nunca serías mío… aún así tú estabas junto a mí, no junto a ella… sabía que sentías mucho cariño por mí. Sabía que lo habías confundido con amor… por eso me quedé a tú lado aunque era doloroso, porque te amaba demasiado; tanto que no me importaba que tú no me amaras.

.-.Sara, te juro que…

.-.No jures. Di la verdad. Sé que la amas, que darías tu vida por ella si fuera necesario. Si en este momento murieras, tu último pensamiento estaría dirigido a ella ¿no es así? Tu último deseo sería verla antes de embarcarte hacía el siguiente viaje. Sé que la amas, lo leo en tu mirada… Por eso y porque te amo con todo mi ser, me voy.

.-.Sara aún no comprendo…

.-.Lo harás pronto. Ingrid dejó pronto de insistir… luego Voldemort apareció… se metió en mi cabeza. Era como si yo fuera de nuevo una niña y él me hablará como mamá… me decía que llovería, que te esperara hasta tarde, que no llorara. Muchas cosas… pronto comencé a hablarle yo también. Era como un hechizo, cuando podía librarme de él no estabas tú y no podía decirte la verdad. No pasaba mucho antes de que él volviera a hablar. Hoy quiso obligarme a unirme a sus filas. Pero no me uniré, conozco demasiado de tu bando como para irme a ese y traicionarte. Por eso me voy… tengo qué… probablemente moriré en el extranjero a manos mortífagas, pero quiero que sea lejos de ti.

Sirius se quedó en silencio con la mirada baja.

.-.no puedes irte.- masculló.- no puedes irte.- Alzó sus ojos.- ¡No quiero que te vayas!

Ella se acercó. Tomó la cara de Sirius y le obligó a mirarla.

.-.¿Qué ves al mirarme?

.-.Sara…

.-.Yo puedo decírtelo, ves dos ojos grises que te sonríen, que ríen. Bien, pues esos no son mis ojos, porque los míos no pueden reír, sólo pueden llorar… esos ojos son de Elinor… desde que me conociste la viste en mi ojos. Te he oído murmurar sobre un hada de ojos grises en sueños, sabes bien que no soy esa hada que siempre te ha quitado el sueño. Es Elinor.

.-.No puedo dejarte ir. ¡No así! . ¡No sabiendo que morirás cuando te alejes de mí! . ¡No puedo enviarte a tu muerte!

Sara sonrió. Acarició la mejilla de Sirius.

.-.Mi último aliento será tuyo. Mi último deseo será tuyo. La última imagen en mi cerebro será tuya. Mi último recuerdo será tu sonrisa. Mi último pensamiento mi más grande anhelo será todo tuyo. Mi corazón explotara de alegría al sentir que no hay nadie más que tú en mí, al saber que eres feliz… porque eso quiero pedirte Sirius, que seas feliz… sé que ella está comprometida, comprometida y no estará junto a ti, pero cuando sientas que caes piensa en mí… Se feliz querido mío, así al final mi última sonrisa será también tuya.

.-.No te vayas.- le rogó Sirius.- No te vayas a buscar la muerte. ¡No te vayas por favor!

.-.Remuérdame siempre Sirius… yo jamás dejaré de pensar en ti, ni cuando esté escondida, ni cuando esté frente a mi último amanecer. Serás lo primero que piense cada día y lo último que invoque cada noche antes de dormir, pero ni en sueños me libraré de ti.

.-.No quiero dejarte ir.- Sirius la abrazó.- No quiero, no puedo… te amo, es verdad…

Sara se deshizo del abrazo. Una lágrima surcó su mejilla. Respiró profundamente y cerró sus ojos…

.-.No me amas, lo sé… eres suyo… déjame partir…

.-.Sara.- imploró él.

.-.No.- abrió sus ojos. Pasó su mano por la mejilla del chico de nuevo.- Nunca pierdas tu sonrisa…

Luego con otra lágrima se alejó de Sirius y salió de la oficina. Él se quedó pegado contra el suelo. Temblaba de pies a cabeza. ¡No podía irse! . ¡No podía dejarlo! . ¡Él la amaba! . ¡Que Elinor…! El hilo de sus pensamientos se rompió. Estaba enamorado de Elinor, desde siempre lo estaba… jamás había dejado de estarlo, pero ella… ella estaba comprometida.

°°°

Julio 30, 1976

Londres, Inglaterra

Alessandra nunca había dormido peor. Nunca, menos en aquellos momentos que Remus estaba a su lado. No había dormido tan mal ni en Las Islas en aquellos catres, de paja y pasto seco, que eran incómodos y fríos. Ni siquiera en la fortaleza de su padre cuando pasaba horas pensando en el futuro, sintiendo que lo había perdido, llorando sin consuelo. Ahora no podía cerrar los ojos sin sentir dolor en su pecho, no podía dormir, no podía soñar, durante las horas que pasaba en vigilia sólo pensaba en una cosa: Lily.

No quería verla, sabía que se lanzaría sobre ella como una fiera, porque lo que necesitaba no era a su amiga, si no a los poderes de su madre. Las palabras de Voldemort corrían por su cabeza.

Isabel estaba en ella… ¿Por qué tenía ella que sufrir con la traición y la cara de su madre, cuando Lily tenía el alma y los poderes de Isabel?

Era una injusticia. Al final siempre lo había sido. ¡Ella debía quedarse atrás¡Debía soportar ser pisoteada por los más fuertes! Cuando había salido de Las Islas se había prometido ser la más fuerte y cuando ya lo había logrado llegó alguien que no pudo quitar de su camino: Lily…

Llevaba días llorando la frustración que sentía, la de no saber donde estaba, la no poder comprobar si podía aún vencerla. No quería verla para abrazarla, ni para llorar aquellas penas… un deseo psicópata crecía en Alessandra. ¡Ella había sacrificado su vida por Lily! . ¡Había llegado a pensar que la pelirroja también la había sacrificado por ellos! . ¡Mentira! . ¡Los había engañado!

Así el deseo crecía y crecía. No iba a permitir que Voldemort la tuviera, sabía que su padre tenía una inclinación morbosa por la Reina del Caos, ahora no iba a permitir que la tuviera, ni siquiera él tendría el privilegio de matarla… Alessandra deseaba matar a Lily… Quería recuperar el poder que sentía perdido, tener el legado que había desparecido.

Y al darse cuenta de las cosas que pensaba, volvía a llorar porque era incapaz de matar a Lily, porque su deseo de poder estaba frustrado, porque no podía lastimarla, porque quería vengarse de aquello que no podía hacer.

Esa noche no era distinta. No se movía, miraba el techo esperando una señal y la señal llegó. La sintió entrando a su mente.

¿Me buscas?

­-Sabes que sí- contestó Alessandra.

Ven por mí, entonces…

La sensación desapareció, pero Alessandra no perdió tiempo. Se levantó. Remus les despertó entonces.

.-.¿Alessandra¿A dónde vas?

.-.Voy a cumplir un deseo.- contestó con fuerza. Se había vestido y no esperó más para salir corriendo.

Las calles de Londres no le importaban, no iba siguiendo una dirección, sino un rastro, cada vez más fuerte, cada vez más cercano. Mientras corría el deseo se incrementaba. Llegó al río. El aire frío de la noche la rodeó, pero no era sólo es. En aire también la sintió. Miró al agua, a las cajas y finalmente la encontró. De espaldas mirando el río.

.-.Alessandra.- murmuró.- Haz venido a pelear, pero no habrá pelea...

Ale se acercó con la varita en alto lista para luchar.

.-.Habrá una batalla, dame lo que es mío por derecho.

Ante esas palabras la pelirroja que se dio la vuelta. La varita de Alessandra cayó al suelo. Los ojos de Lily la perforaron como tiempo atrás lo habían hecho.

.-.Sé que deberemos luchar, pero no.

.-.¿Qué?

.-.Antes del fin nos enfrentaremos, el alma de tu madre, sus poderes… son tanto tuyos como míos… ¿quieren luchar por ellos? Lucharemos, cuando llegue el momento.

Ale invocó su varita y la guardo. Había entendido.

.-.Ten cuidado, Lily, cuando llegue el momento no tendré piedad.

.-.Lucharemos una contra la otra por los poderes de una muerta, lucharemos antes del fin Alessandra, lo prometo.

Alessandra asintió. Las dos amigas se miraron un momento, luego se dieron la vuelta y se alejaron por caminos distintos.

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Agosto 4, 1976

Londres, Inglaterra

Sirius Black se despertó en su oficina. No había estado durmiendo bien lo últimos días. Sara no estaba, Sara había desaparecido y a él sólo le quedaba un sentimiento demasiado doloroso hacia Elinor. Se levantó. Pasó sus manos por su cara. Desde aquel día había ido sólo una vez al apartamento que él y Sara habían compartido. Había sacado todo lo que necesitaba y ahora estaba de tiempo completo en La Fortaleza.

Su vida parecía no tener mucho sentido. Durante la última semana no había visto a James. No estaba preocupado por él. Estaba más preocupado por si mismo. Miró la luna en el cielo sin sospechar donde estaría su amigo. Oyó entonces a Sara:

… si no lo haces, terminarás amando fotografías descoloridas y recuerdos cada vez más dolorosos.

Tenía que dejar de vivir en ese hoyo… iba a salir de ese maldito estado. Si Sara iba a morir por él, entonces él también haría algo útil. Iba a decirle a Elinor la verdad… ya había pasado demasiado tiempo.

En cuanto salió de la oficina el espejo que había en una repisa comenzó a brillar.

°°°

Agosto 4, 1976

Londres, Inglaterra

Era como un sueño. Los árboles, el viento, la noche sobre ella y las estrellas que brillaban, era como caminar dentro de un sueño. Lo había sentido. Había sentido como la llamaba. La llamaba a ese lugar. Demasiado poderosa había sido la llamada para no hacerle caso. Había salido hacia ese bosque al instante. No sabía dónde estaba, pero creía conocerlo.

Miró a su alrededor esperando encontrar alguna señal que le dijera cuando había estado allí. No lo recordaba, pero lo sentía en cada árbol, en la tierra que pisaba, en el viento. Aspiró el aroma de la noche, de la tierra húmeda bajo sus pies y después giró su mirada a su alrededor.

Lo vio. Salía de entre los árboles. La cabeza alta, mirando a su alrededor como si ese fuera su hogar desde siempre.

Lily Evans recordó las palabras de James mientras el ciervo salía del bosque.

Cuando veas un ciervo, no te asustes, es porque yo estoy pensando en ti.

.-.James- murmuró con tristeza.

El viento de la noche sopló con más fuerza. El ciervo alzó la cabeza y salió corriendo. Lily miró por dónde desaprecia y de esas sobras salió un hombre. James Potter estaba frente a ella.

.-.Me llamaste.- dijo Lily como si ella no creyera sus palabras.- Por fin me llamaste.

.-.Tenía que saber.- dijo él sin siquiera mirarla.- Tenía que saber si conociste a alguien más. Quiero saber si pensaste en mí tanto como yo en ti. Si me añoraste, como te añoré. Si también me viste en sueños, si en tu soledad no pensabas en otra cosa. Quiero saber si pudiste olvidarme por un sólo instante, si me sacaste de tu cabeza… Oh, Lily… yo no puedo, no puedo dejar de pensarte, no puedo, desde hace años no puedo y jamás podré querer a alguien como te quiero a ti.

Lily lo miró. Ninguno de los dos habló. El aire frío pasó entre ellos, entre los árboles. Lily cerró sus ojos y suspiró.

.-.¿Cómo podría?- abrió sus ojos y miró a James directamente.- ¿Cómo se puede olvidar algo como lo que siento por ti? Lo que he sentido siempre, lo que negado cada segundo de mi existencia. Sabía que me querías y no deseaba creerlo. ¡Lo supe en Hogwarts siempre! . ¡Jamás quise creerlo! Te amo, James. Más de lo que puedo llegar a amar a alguien más. En Las Islas no hubo segundo en que no pensara en ti, en que no añorara tu cara, tus caricias, tus palabras, tus ojos, tu amor. ¡Todo! No recuerdo un día en el que no haya pensado huir para encontrarte. En el que no haya pensado regresar sólo para verte. – Los ojos de Lily se llenaron de lágrimas.- ¡Yo también quise olvidarte! . ¡Quería que me olvidaras! . ¡Que no pensaras en mí, pero sentía que cada instante podía sentirte…! Estabas cerca de mí…

James dio un paso adelante. Sonreía. Sonreía y miraba a Lily sin poder ya sentir el viento de aquella noche, sin poder pensar en nada más que en ella. Dio más pasos hacia delante hasta que la tuvo frente, tan cerca de no necesitaba ni estirar la mano para tocarla.

.-.Todas esas veces que fui cerca del río mientras no estabas, siempre sentí que estabas a mi lado, Lily. Todos los momentos que miraba tu fotografía deseba dejarlo todo para ir a buscarte. Lily, no puedo soportar el tiempo si es lejos de ti; parece pasar más despacio… todo es doloroso sabiendo que estás en alguna parte donde no puedo ir a buscarte. Lily, te necesito. He llegado a la conclusión de que es demasiado difícil sólo intentar vivir sin ti. Puedo arriesgarme a que me dejes de nuevo, a que desaparezcas entre mis manos, a que seas la escurridiza Lily por siempre… me arriesgo a todo con tal de pasar otro segundo contigo, de volver a oír que tú también me amas, que tú me necesitas tanto como yo a ti… puedo arriesgarme a perderte, sabiendo que pude estar otra vez a tu lado.

Lily rompió por fin lo que los separaba. Abrazó a James lentamente. Hundió su cara en el hombro de James. Unos momentos después se separó y lo volvió a mirar.

.-.No volveré a dejarte. Sé que lo he dicho antes, sé que puedo mentir. Pero yo tampoco puedo vivir sin ti, jamás había dependido tanto de alguien, jamás había sentido algo tan fuerte. Te amo tanto que no entiendo como algo tan fuerte puede estar en mi corazón… como es que puedo sentir algo tan puro, tan hermoso… te amo James… te amo tanto…

James acarició la mejilla de la mujer.

.-.Prométeme.- comenzó el hombre.- Prométeme que no te irás de nuevo porque tú lo desees… te dejaré ir cuando no haya otra salida, pero…

Ella lo cayó poniendo su dedo en los labios de él.

.-.No volveré a dejarte. Irme de tu lado por motu propio sería como morir en vida. Y, si he de alejarme de ti, estoy segura de que nos encontraremos. Te juro que te buscare por cada abismo, estaremos juntos al final, por la eternidad… no importa que no podamos ser felices ahora, que estemos en guerra… James, al final estaremos juntos¿verdad?

.-.Sí.- murmuró él, mientras la abrazaba.- Te buscaré por todos los mundos hasta hallarte, te juro mi amor Lily, te juro todo lo que queda de mi vida… y todo lo que vendrá después.

Ella se paró de puntillas porque aún era más baja que él y tocó su frente con la de James.

.-.Yo te prometo mi amor, mis pensamientos, mi vida y mi eternidad… No cambiaría nada de lo que hemos pasado, James. Aunque regresáramos a Las Islas yo volvería a irme, porque tanto tiempo lejos de ti me hizo darme cuenta de lo mucho que te necesito, de que no hay manera de que yo sea feliz sin ti. No hay forma de que yo viva por siempre feliz si no es a tu lado.

.-.¡.¿En ese caso me darías tu vida Lily?.!

.-.Te doy lo que me pidas.- dijo ella sonriendo.

Él la miró. Escrutó su rostro como si fuera la primera vez que la veía. Memorizó de nuevo la cara de aquella mujer.

.-.Entonces cásate conmigo, Lily… haz que en esta vida estemos juntos, que nos una algo más que el amor más puro. Es un amor irracional. Ningún corazón humano debería poder soportarlo, pero nosotros lo soportamos y estamos unidos ¿verdad? . ¿Serías mi esposa, Lily? . ¿Te unirías en mí por fin en cada aspecto?

Ella río.

.-.Ya estoy unida a ti en todo aspecto. Soy tuya, James Potter. Nadie ni nada diera lo contrario. Soy tuya de aquí a la eternidad. Pero me casaré contigo, porque de esa forma también tú eres mío.

Él le dio una sonrisa cómplice.

.-.Siempre he sido tuyo, desde que decidiste ser distinta a las demás… desde que supe que eras mi Lily. Me has hecho sentir cosas que jamás creí que podría sentir. Estoy dispuesto a morir por ti, estoy dispuesto a hacer lo que sea por ti.

.-.Yo también lo estoy. Seré la señora Potter, seré tuya ante todos y en mi corazón. ¡Oh, James! . ¡Qué feliz soy! . ¡Creí que jamás me perdonarías!

.-.¡Cómo no iba a perdonarte! . ¡No puedo odiarte! . ¡No puedo hacer otra cosa más que quererte! . ¡Te amo tanto que es imposible sentir algo más hacia ti!

Él la tomó de la cintura y le dio vueltas como solía hacer en Hogwarts. Ella comenzó a llorar de alegría entre risas. Cuando sus pies volvieron al suelo pasó sus brazos por el cuello de James y comenzaban a dar vueltas bailando bajo la luna.

.-.Ojalá pudiéramos huir y dejar la guerra atrás.- murmuró Lily.- Me gustaría estar segura de que seré feliz y tendré mi "y vivieron felices para siempre"… pero en esta guerra… ¿cómo podemos llegar a ser felices, James?

.-.Tú sabes que podemos.- le respondió él.- Y, si no, nuestro amor es tan grande que ha pasado ya muchas pruebas… nada nos alejará… nunca Lily y si no somos felices ahora, lo seremos en la eternidad. Ya no estamos solos, Lils. Ahora nos tenemos uno al otro. Lucharemos juntos contra el destino, contra Voldemort y el caos. Lucharemos juntos contra todo lo que amenace nuestra felicidad. Ya no habrá noches de insomnio…

.-.No habrá horas muertas llenas de recuerdos dolorosos…

.-.Ni añoranza infinita… no habrá segundos que duren años mientras se espera el siguiente encuentro. Ya no habrá espera Lily. Ya no habrá un dolor incontenible… ya no… nos tenemos uno al otro, ahora.

Ella lo miró y sonrió.

.-.Sí… te extrañé tanto, James.- murmuró antes de apoyar su cabeza en el pecho de él.

.-.Yo también te extrañé.- le contestó mientras disfrutaba de dar vueltas con Lily sin música, acompañados solo por el viento y su felicidad.

Luego mientras daban vueltas él se inclinó y por fin la besó. El beso dijo todo lo que ya se habían dicho y mucho más.

Aquel baile, Lily no lo reconoció, pero lo había visto antes. Muchos años antes. En Hogwarts, cuando aquel juguete les había mostrado su pasado a cuatro chiquillas… y allí estaba, en el colmo de su felicidad.

Y mientras daban vueltas y se juraban en silencio amor eterno, ambos sabían que no les esperaban tiempos sencillos, pero no estaban solos… ya no. Él y ella estarían juntos, por siempre… por la eternidad…

°°°°

La sala estaba en silencio. La mujer estaba de pie junto a su señor y sonreía.

.-.¿Quiere que la dejen pasar?- preguntó con tono sumiso.

Su amo asintió. Así que la orden pronto fue cumplida. Entró una mujer. La capucha venia echada hacía atrás. Cosa poco común entre los Mortífagos.

.-.Mi señor.- murmuró después de arrodillarse frete a la figura.- He venido a ofrecerle algo, que creo será de gran ayuda para usted.

.-.¿Qué?- preguntó la intérprete de Voldemort. Ingrid parecía disfrutar de aquellos. Tan delicioso ser la mano derecha de ese hombre.

.-.Un sacrificio. Sé que los heraldos han sido un problema y la Reina de Caos está de regreso, pero yo sé como destruirlos, he pasado los últimos tres años investigando…

.-.Al amo le interesa. Sigue hablando.- dijo Ingrid al ver llegar una pausa.

.-.Por lo que averigüe hay nueve heraldos, cada uno es esencial para que existan los poderes de los demás. Es difícil crear un desbalance entre los poderes del caos, porque los heraldos siempre mueren de forma digna. Yo puedo darle un sacrificio que haga que un heraldo dispare el desequilibrio.

.-.¿Ofreces algo?- preguntó Ingrid.- Si es así, te aconsejo que digas todo sin rodeos.

.-.Para el sacrificio es necesario romper uno de los lazos más grande que se crea entre los humanos.- murmuró la mujer.- Yo me ofrezco para el sacrificio.

.-.¿A qué se refiere?- preguntó Ingrid.- No es un heraldo.

.-.Cierto, pero le ofrezco también a mi hija. Romperé el lazo que une a una madre con su hija, dos almas que deben permanecer unidas. Yo romperé ese lazo y mataré a Elinor Dashwood, sólo tienen que traerla aquí y en la luna llena los heraldos serán historia.

Voldemort río.

.-.Me gusta.- murmuró por primera vez, su voz causo un escalofrío en el cuerpo de la mujer.- No, me encanta. Vete mujer, déjame pensar, pero tendrás a tu hija frente a ti para el sacrificio, prepáralo todo.

La mujer se agachó con una sonrisa antes de salir del lugar.

.-.¿Cuándo debo traerla?- preguntó Ingrid.

.-.Ve por ella esta misma noche, no hay que tardar… La luna llena será en una semana y hay que alistarlo todo. Mi querida Ingrid, creo que por fin los destruiremos.

.-.Sí, mi amo.

Luego de eso Ingrid desapareció. Se acercaba otra batalla, su sangre lo sentía.

°°°

NA:

¿Qué les pareció? A mí, la verdad me encanta, la conversación de Sirius y Sara está para ahogar cocodrilos con sus propias lágrimas… La de James-Lily me parece tierna… y la última?

He de decirles que aquí termina la primera parte del fic… aún nos quedan dos partes, pero está es la más grande, ya terminamos el grueso…

ADELANTOS: El siguiente capi estará dentro de dos semanas si es que mi beta no ha estado llena de trabajo y puede entregar el capi. El capi se llama "El rapto de Elinor" y además del Rapto, está también la boda de Alicia y un ataque a Hogwarts así como una nueva profecía.

Como noticia debería decirles que ya estoy por terminar el ff, (no de subirlo, sino de escribirlo) y que me encanta como está quedando…

RRS:

Alicia: si recuerdo tus comentarios, ya aquí está la escena de Sara… para ahogar cocodrilos en sus propias lágrimas.

Lucía: Mira que de alguna manera tenía que traerla. Sí, es triste, pero yo sigo con que James tiene razón, aunque ya has visto aquí que todo se arregla. Sí, a Ale le hizo daño estar tanto tiempo y ya veremos lo que eso causará. Este seguramente es de los mejores capis del ff, a mi es de los que más me gusta. Que bueno que te siga gustando el ff!

Pilitonks: Ya te dije que me pareció bueno subirlo…además de que es tan buen chap. A mí él que me da más pena es James. Sí, pero Elinor también está muy dolida. Ya aquí viste que le pasa a Sara… aterrador no? Ojalá te haya ido bn en el bautizo, por aquí también está loco el tiempo, uno no sabe como debe salir a la calle!

Flor: A mi también me encanta el capitulo, es uno de mis favoritos. Que bueno que te guste tanto!

Niniel: A mi también me gusta mucho. Sí, sé que lo de Sirius Sara… bueno nadie está muy de acuerdo, pero o no que la escena de Sirius Sara aquí es hermosa? Yo creo que James tenía razón, Lily si fue algo tonta, pero ya ves como todo se arregla. A mi me da mas pena él. Pues ya has visto, un poco de imaginación lo logra todo.

Kittyen: Ya, sé que era broma… y no me lo tomo a pecho jajajja. Sí yo estoy de parte de James. Mira que yo tengo imaginación no? Al final terminan juntos y el final podría decirse que es feliz, pero también muy triste. Hice esperar mucho?

Ale: Semejantes rrs que me mandas! Me encanta recibirlos, pero contestarlos… ay niña… (no te lo tome a mal me encantan tus rrs!) No te la hubieras esperado?

Sí, lo de Sara es no sé… da miedo…

Pues se planea la boda entre Malfoy e Ingrid, lo que vaya a pasar, es cosa de la autora (en otras palabras yo) Sí, se supone…. Ahora que me lo recuerdas… quien sabe, metida en las batallas está así…. Aunque es parte de la orden.

Sí la escena de Eli es impresionante.

A Ale le pasa lo que ha todos, no pueden creer que Lily esté de regreso, entre otras cosas. Sí, todo lo que hace Voldemort lo hace por una razón, ya verás porque… pero no la mató por la misma razón que nunca mató a Isabel… no puede… Pues me voy a Guadalajara y ojala a ti también te vaya bn y descanses. No necesitas ir a psicólogo, aunque algunas de las cosas que dices no están del todo erradas.

Andry Black: Sí, tienen que superar esa prueba y una que otra, pero ya no pasaran muchas cosas malas hasta que estén casados… ya después… Bueno ya haz visto aquí que Lily y Ale van a luchar en un futuro… escalofriante no?

Trini: Mira que yo estoy de parte de James, Lily fue algo tonta. No pienso volver a discutir el tema Sirius-Elinor y menos después de la escena de este chap de Sirius- Sara. Bueno ya has visto que ahora que Alessandra y Lily lucharan por la reencarnación, así que si puede hacer algo!

Espero que les haya gustado mucho el capi… como dije ya en todos los rrs, yo lo adoro!

Syringen

ALCS