Por Fin los Encuentro
-solo deja que te encuentre – susurro, mientras tomaba una botella de whisky que había en el pequeño bar del cuarto – te vas arrepentir de haber puesto los ojos en la mujer que me corresponde, por que podrás esconderte, ¡pero yo te buscare hasta debajo de la tierra maldito! – exclamo tirando el vaso de wisky a una pared.
-o-o
-¿Cómo pudiste permitir que se la llevara? – le grito Tonks apenas pusieron los pies en la casa de Potter
-no tengo porque darte ningún tipo de explicaciones... - empezó a contestar Snape, pero Potter lo interrumpió:
-¿Donde esta Ginny? - pregunto Potter entrando como un loco a la cocina, donde ellos habían aparecido, seguido por todo el clan Weasley. Snape miro a Potter con desprecio y salio de la cocina, iba a buscar a Dumblendore.
-o-o
Harry iba a lanzarle un hechizo a Snape, pero Sheryl le sujeto el brazo.
-No lo hagas – le dijo con voz calmada y suave – a Virginia se la llevo Draco Malfoy
-¿Qué estas diciendo? – Pregunto con los ojos desorbitados, Los Weasley (incluido Ron quien se separo de Hermione para escuchar) - ¿Cómo pudieron permitir eso? – casi le grito a la joven
-Snape nos impidió que nos enfrentáramos a el – dijo Hermione frunciendo el ceño.
-si, el muy tonto lo dejo que se la llevara – dijo Tonks indignada – yo todavía me pregunto como lo permitió – susurro casi meditando
-pero ella esta bien, si no fuera por eso, todavía estuviera con Voldemort – dijo Sheryl antes de que los Weasley empezaran a hablar todos juntos – Snape no pudo sacarla del cuarto y pensaba dejarla ahí. Nos los encontramos de casualidad cuando íbamos a tocar el traslador.
-Es como salir de algo muy malo para algo malo, esta en igual peligro– dijo Ron, sonaba bastante preocupado y muy nervioso, miro a Dumblendore que se asomo a la puerta de la cocina y le hizo una seña para que salieran.
-Malfoy no va a hacerle nada, el no seria capaz... - escucho que susurraba Sheryl, cuando el iba a salir
-¿Qué no seria capaz? – Le grito a la joven – ¡es capaz de hacerle incluso mas daño que Voldemort!
-¡tu no puedes decir eso! ¡No lo conoces! – le grito ella a el
-¿y tu si?
-mejor que tu al menos...
-si ya me imagino de que manera han de conocerse, ya se que las de Slytherin a el lo conocían muy a fondo... - Sheryl le pego una bofetada que le provoco ardor en la mejilla. Miro la cocino y se dio cuenta de que solo estaba el (Harry) y ella, los demás habían salido dejándolos atrás.
-No tienes ningún derecho a ofenderme, Potter, mantenga su distancia conmigo – le dijo en tono firme.
-Discúlpame si te ofendí, a algunas personas la verdad las ofende – ella le corto los ojos y salio de la cocina. Harry se quedo algo sorprendido por su propia actitud, no entendía porque le había molestado tanto imaginar la forma en que ella conocía a Malfoy, pero le había molestado y no pudo controlar su boca.
Salio a la sala a reunirse con los además, Dumblendore había tomado la decisión de trasladarlos a una casa que tenia el. Harry nunca imagino que Dumblendore tuviera una casa, siempre pensaba que la casa de Dumblendore era Hogwarts.
Se fueron al día siguiente, y llegaron a la enorme casa de dumblendore, esa eran unas de esas mansiones que las personas suelen confundir con castillos. Dumblendore les mostró el comedor, las terrazas y las habitaciones, no mostró la cocina ya que había elfos domésticos en ella que se encargarían de colocar la comida y en un pequeño bar podían pedir lo que quisieran si les daba hambre o sed antes de tiempo.
Ginny le mando una carta a Ron, que llego justo antes de que se fueran, donde explicaba que se encontraba bien y que no iba a volver por ahora, no hay que mencionar el show que hicieron los hombres Weasley, al recibirla.
Ese noche Harry salio a el enorme jardín que había frente a la casa y vio a Sheryl de pie mirando una enorme fuente que había. Su primer impulso fue devolverse, pero no lo hizo, se le acerco en silencio para que no se percatara de su presencia y pudo notar que estaba llorando.
Harry sintió deseos de abrazarla pero se contuvo, se quedo justo detrás de ella en silencio, tal vez lloraba por su madre, la habían asesinado en la pelea por el ministerio. Según el había escuchado que le decía a Dumblendore, cuando este dio la noticia de que las mujeres no pelearían.
Era muy linda y... se voltio. Quedaron bastante cerca, Sheryl subió la cabeza para mirarlo a los ojos y bajo rápidamente para que no le viera las lágrimas.
-permiso – susurro ella empujándolo un poco
-¿Por qué lloras? - pregunto
-No te importa – le dijo en tono frió e iba a empezar a caminar a la casa, pero Harry la sujeto por un brazo y la hizo volverse. Ella lo miro sorprendida a la cara y luego miro la mano con la que la sujetaba
-¿Por qué te preguntaría si no me importara?
-déjame en paz ¿quieres? – dijo lo mas firme que pudo, pero las lagrimas no la dejaban hablar claro. Harry le subió el rostro para que lo mirara a la cara, eso pareció acabar con sus resistencias y empezó a llorar muy fuerte, el la abrazo. No le gustaba verla llorando, la verdad es que no le gustaban las mujeres lloronas tampoco, pero por una parte entendía que sufriera por su madre, la habían matado en su cara y no había pasado mucho tiempo y el todavía no había logrado superar bien la muerte de Sirius que solo era su padrino...
-¡Sheryl Webber! – grito la voz de un hombre, ella se separo casi corriendo de el
-tío... yo no... - tartamudeaba temblando mientras se secaba las lagrimas
-¡Camina para dentro! – por poco ladro el tipo y la sujeto de un brazo llevándola casi a rastras
-¡suéltame! – grito ella intentando zafarse del agarre del tipo ese, Harry saco su varita y apunto al tipo.
-¡Expillermus! – grito y el rayo le dio en medio de la espalda mandándolo a un metro de distancias, Sheryl se callo y Harry se acerco para ayudarla a ponerse de pie
-no debiste hacer eso – le dijo sin aceptar la ayuda que le ofrecía se puso de pie y entro rápidamente a la casa, al parecer quería hacerlo antes de que el tipo aquel se pusiera de pie, estaba algo confundido...
-Mantente alejado de Sheryl, Potter – Harry dirigió la vista hacia el hombre que le hablaba, era un poco mas bajo que el y de contextura fuerte, lo apuntaba con su varita y la mano le temblaba un poco.
-deje que me lo diga ella – le contesto, no sabia por que pero ese hombre no le inspiraba confianza y no le importaba que fuera o no tío de ella.
-te lo estoy diciendo yo – le dijo en tono desafiante, Harry lanzo una carcajada
-y ya te respondí yo – le contesto el con el mismo tono.
-Ella es mi responsabilidad, soy su tío...
-¿y a mi eso que me importa? Eres su tío, no el mío, ve ordénale eso a ella a ver si te hace caso – le dijo y se fue sin esperar respuesta. La verdad es que no le caen bien los tíos, cada vez que recordaba a los de el le daban náuseas y ver come este la trato a ella no le gustaba para nada.
Se paso toda la noche pensando en ella, se sorprendió a si mismo, ya que en quien el siempre estaba pensando era en Ginny. Pero no podía sacarse a esa chica de la cabeza, sencillamente no podía.
-o-o-o
Voldemort estaba furioso, ya había pasado tres semanas y nada de encontrar a esos dos
-tu lo puedes entender Nagini – Le dijo a su serpiente en lengua cárcel – encontraron mas rápido a Dumblendore que a un estúpido mocoso.
-lo vas a encontrar – le contesto la serpiente.
-eso espero, eso espero
-Buscadlos en los bosques, tiene que estar bien escondido, ellos saben que lo estas buscando
-Los dementores están en eso
-Los dementores son tontos, pon a los humanos...
-son mas tontos que los dementores – dijo Voldemort sirviéndose una copa.
-Tal vez solo necesiten mas motivación ¿me entiendes verdad?
Voldemort sonrió y asintió, era cierto, nada es imposible si hay suficiente motivación. Salio de su habitación y le toco la cicatriz al primer mortifago que le paso por el medio y se dirigió al salón de reuniones a esperar a sus queridos mortifagos respondieran a su llamado.
En menos de 20 minutos ya estaban todos los mortifagos reunidos y Voldemort comenzó la reunión.
-Mis queridos mortifagos, como saben les indique hace tres semanas buscar a Draco Malfoy y decirme donde se encuentra. Y no he recibido, ni siquiera, una pequeña pista, por tanto decidí que tal vez solo necesiten más motivación.
Los murmullos de disculpas y las excusas empezaron a salir a dos por uno. Voldemort sonrió con malicia y después de torturar a unos cuantos, se sentó en un sillón porque lo que venia era bueno.
-Alexander – susurro haciendo que el nombrado levitara y se pusiera frente a el – tienes dos hijas preciosas, un hijo y una bella esposa – el nombrado se puso blanco -¿no quieres que se mueran, y que tu bella esposa se vuelva mi concubina verdad?
-¡no! – dijo espantado
-me alegra saberlo – dijo Voldemort en un susurro y entro en su mente, le creo una ilusión de una de las posibles muertes que podía tener su familia.
-no, no, no – gimoteaba Alexander, Voldemort sonrió y hizo lo mismo con cada uno de los presentes, a aquellos que no le importaba nadie lo suficiente, les mostró sus propias muertes, todos los Mortifagos estaban temblando del miedo.
-muy bien, como se que ninguno quiere que los que le acabo de enseñar se haga realidad, mas les vale que digan donde esta Draco Malfoy antes de dos días
Draco miro sorprendido la cantidad de Dementores que rodeaban los bosques que estaban cerca de su casa, era increíble y terriblemente peligroso. Aunque si no pasaban humanos no había problema ya que los dementores son algo estúpidos. Iba a tener que reforzar el hechizo de protección por si iban brujos.
Draco puso manos a la obra y hizo todos los hechizos de protección que conocía y repitió los que ya tenia la casa.
-Es increíble – susurro Ginny a su espalda.
-si, aunque no creo que los dementores se percaten del hechizo de regreso que puse.
-estoy asustada – Draco la abrazo y le acaricio un poco la espalda
-no pienso permitir que te pase nada, no te preocupes –susurro intentando darse valor también a el. No lo iban a encontrar, no podía permitirlo.
0-0-0
Lucios Malfoy estaba feliz, había descubierto varios lugares en los que habían casas escondidas y solo le faltaban 6 sitios por revisar (se había pasado 2 semanas buscando y una averiguando como cancelar los hechizos de protección, de tener ayuda todo hubiera sido mas rápido, pero quería hacerlo el solo), en una de ellos tenia que estar el bastardo de Draco, y cuando el encontrara se lo diría a Voldemort y este ya no estaría molesto con el.
Se paso un día entero tratando de ver como entraba a una casa, pero no pudo, hay había alguien muy poderoso. Decidió que lo mejor seria ir a las demás y mirar a ver, a eso de las 3 de la madrugada solo quedaban dos a las que no había podido entrar y casi podía jurar que en esos sitios estaban Dumblendore y Draco.
Se rió con fuerzas antes de dirigirse al castillo de Voldemort, no podía permitir que se le adelantaran.
Cuando entro al castillo se dirigió rápidamente al despacho de Voldemort y toco la puerta despacio, cuando esta se abrió dejo ver a Voldemort en su silla acariciando a su serpiente.
-espero que esta interrupción sea para algo bueno, Malfoy, porque sabes bien que el deseo de matarte todavía no se ha ido de mi
-creo... que... tengo los lugares donde están... - decía temblando
-¿crees?
-si, si, pero lo que pasa es que
-¿puedes ir al grano o necesitas que te ayude? – le dijo Voldemort levantando la varita, lucios tembló un poco mas
-encontré a Dumblendore y a Draco, pero no se cual es cual ya que mi magia no puede destruir sus campos de protección – dijo hablando lo mas rápido que pudo para que Voldemort no le lanzara un hechizo
-¿estas seguro? – pregunto Voldemort con un brillo extraño en los ojos y mostrando una pequeña sonrisa
-s... si señor
o-o-o
Voldemort lanzo una carcajada y se puso de pie
-¿Dónde están esos lugares? – le pregunto al asustado Lucios, que puso unos mapas sobre el escritorio, Voldemort los tomo y le hizo una seña a Lucios para que saliera del lugar.
Prepárate, Draco Malfoy – pensó mientras reía y se cambiaba como ameritaba la ocasión
Voldmert llamo a sus Mortifagos más fuertes para que lo acompañaran y a algunos dementores, estaba un poco cansado ya que solo había dormido 3 horas, pero no podía esperar
o-o-o-o
Snape miro mal a Tonsk y le dio la espalda
-¡sabes que es verdad! – Le grito ella con una risita de niña traviesa - ¡estas celoso por que te gusto mucho y te da vergüenza decírmelo!
Snape sintió como el calor subía a sus mejillas como si fuera un escuincle, camino hacia la casa de Dumblendore con una sola determinación en la cabeza, no volver a dirigirle la palabra en la vida a esa loca.
-¡Petreficus totalus! – Snape se voltio al instante e iba a lanzar un protego al pensar que la loca de Tonks lo estaba atacando a el, pero se llevo una desagradable sorpresa al ver a unos 50 mortifagos los estaban apuntando
-no es aquí, ¡vamonos! – grito la voz de Voldemort, cosa que dejo bastante sorprendido a Snape ¿Qué estaba pasando? Casi inmediatamente los mortifagos desaparecieron de la vista de Snape
-¿Qué paso? – pregunto Dumblendore, tocando a Snape en el hombro.
o-o-o
Draco se levanto espantado cuando el pito que desprendió su varita le indico que uno de los hechizos de protección que había puesto se había roto, en menos de un segundo todos los hechizos se deshicieron.
-¡Levántate! – le grito a Ginny halándola de un brazo y parándola de la cama antes de que se despertara bien.
-¿Qué pasa? – le pregunto ella con voz molesta - ¿no puedes ser mas delica...?
-¡desaparécete de aquí lo mas lejos que puedas! – le grito y aseguro el cuarto para que nada pudiera entrar - ¡ahora! – le volvió a gritar a Ginny que se quedo ahí como una idiota.
-¿Qué...?
-¡CON UN DEMONIO, LARGATE DE UNA BUENA VEZ! – grito desesperado y agrego en un tono mas bajo - Y toca una piedra azulada que hay en el rió que esta cerca de aquí.
-Me alegra mucho volver a verte, Malfoy – dijo un sonriente Voldemort haciendo que la sangre de Draco se helara, Ginny desapareció y Draco sintió alivio - ¡devolve desaparecio! – grito Voldemort y Ginny volvió a aparecer en el mismo lugar en el que había estado – mi querida Virginia, sin ti, no puedo completar el trabajo
-O-
Nota de la autora: Hola! Se que he durado mucho para actualizar pero es que no sabia como hacer que los encuentren :( y bueno, eso y mucha clase que hacer no es una buena combinación. Espero que no se les haya olvidado la historia y que me dejen rr. Bye
GRACIAS A TODAS AQUELLAS PERSONAS QUE ME DEJARON SU OPINON.